domingo, 14 de noviembre de 2021

ACTUALIZACIÓN DE EL REPUBLICANO LIBERAL II: DIARIO DE OPINIÓN, http://elrepublicanoliberalii.blogspot.com DOMINGO 14/11/2021


AQUÍ TITULARES DE HOY DOMINGO 14/11/2021, PULSAR SOBRE EL TÍTULO PARA LEER

           

TITULARES DE HOY - INTERNACIONALES - 14/11/2021



ELLIOTT ABRAMS: LECCIONES DEL FRACASO DE LA PROMOCIÓN DE LA DEMOCRACIA EN VENEZUELA


CARLOS BLANCO: ¡OH, ELLIOTT! ¡OH, ABRAMS!


GABRIEL BORAGINA; EL COLECTIVISMO (DE PLATÓN A HEGEL) Y EL SOLIDARISMO


ESPECIAL DEL DOMINGO: LA ORQUESTA MAS GRANDE DEL MUNDO UNA REALIZACION DE LOS VENEZOLANOS PARA EL MUNDO


ESPECIAL DEL DOMINGO: LA ORQUESTA MAS GRANDE DEL MUNDO UNA REALIZACION DE LOS VENEZOLANOS PARA EL MUNDO

La orquesta más grande del mundo Récord Guinness para sus realizadores
El Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela cumplió y realizó el concierto como «La orquesta más grande del mundo», solo resta esperar en los próximos días la certificación oficial de Guinness World Records, para saber cuántos fueron los músicos que lograron la hazaña.

EL ENSAYO

LA EJECUCIÓN

El montaje debe tener un récord en cantidad de pantallas: hubo más de 30 compañías privadas de producción trabajando en esto»

PARA EL RÉCORD:

Debe ser ejecutada por músicos que superen el número (anterior 8.097). Que sean especialistas. Que cada uno sepa tocar el instrumento, que no compartan los instrumentos entre sí, y todos deben tocar durante la ejecución del tiempo que se va a tocar, al mismo tiempo que los demás. De lo contrario pueden ser descalificados.

Por cada 50 músicos habrá un supervisor garantizando que durante los 12 minutos de la Marcha eslava los ejecutantes estén tocando. Esa verificación generará un reporte que será enviado a Guinness World Records.

Otro protocolo será que cada músico tendrá un brazalete biométrico destinado a confirmar la presencia de la cantidad de personas necesarias para registrar el récord.

Luego se enviarán documentos probatorios y en tres o cuatro días se dará a conocer el veredicto oficial.

El director ejecutivo de El Sistema, Eduardo Méndez, recordó que la idea tiene como precedente un enorme concierto que se realizó hace tres años en Caracas: 10.071 músicos se reunieron en el Poliedro para despedir al maestro José Antonio Abreu, fundador de la institución hace 46 años.

La inquietud los llevó a contactar a Guinness World Records para certificar el logro, pero no había tiempo para tramitar toda la documentación necesaria, aunque el proyecto se mantuvo en pie. Hasta que, luego de retrasos por la pandemia, se retomó el proceso.

El intento consistió en ejecutar una obra sinfónica universal que tenga una duración superior a cinco minutos. El Sistema lo hizo con la Marcha eslava de Piotr Ilich Tchaikovsky. Al repertorio se añadieron el «Alma llanera», «El merengue del primer dedo», «Venezuela», «Chamambo» y el Himno Nacional.

«El repertorio seleccionado no fue solo por las reglas que debimos seguir, sino porque son obras que se suelen tocar en nuestros núcleos. Es parte de la metodología de El Sistema desde hace 46 años, y que se ha ido desarrollando para aumentar el nivel de los niños»

La logística, no tuvo precedentes en el país. Más de 2.600 habitaciones de hotel para estadía y 430 autobuses para traslado. Los niños tienen aproximadamente dos meses ensayando, en sus estados, en sus núcleos, preparándose para este momento. Hacen talleres, reciben formación de sus maestros en los núcleos. Decidimos que fuera una fiesta nacional, que vinieran niños y jóvenes de todo el país, es algo que está ocurrió el día de hoy.

La productora encargada fue Oz Producciones, representada por Jorge Redondo, quien explicó que el espacio para el concierto fue de 160 por 140 metros, por lo que fue necesario instalar un sistema cerrado de televisión con pantallas gigantes. «De esa manera los músicos pudieron monitorear al director para que no hubiese delay. El montaje debe tener un récord en cantidad de pantallas: hubo más de 30 compañías privadas de producción trabajando en esto» 

Todas las carreteras y los aeropuertos del país están le llenaron de música, de niños y jóvenes que vinieron a Caracas a participar de este gran evento.


El Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela (Fundación Musical Simón Bolívar), es un programa de educación musical en Venezuela, originalmente llamado Acción Social para la Música, cuya misión es sistematizar la instrucción y la práctica colectiva e individual de la música, a través de orquestas sinfónicas y coros, como instrumentos de organización social y desarrollo humanístico.

El proyecto se dio a conocer internacionalmente en 1995, con la actuación de la Orquesta Sinfónica Nacional Juvenil en el Kennedy Center de Washington (EE.UU.). Su destacada calidad artística ha llevado a las Orquestas del Sistema por todo el mundo, llegando a actuar en la sede de las Naciones Unidas, en Nueva York, y ante el Papa San Juan Pablo II.

EL EVENTO

BEATRIZ DE MAJO: EL ENEMIGO COMÚN HEZBOLÁ. COLOMBIA EN CÁPSULAS

El hecho de que Diego Molano, Ministro de la Defensa de Colombia, haya tomado la decisión de informar abiertamente al mundo que acaba de tener lugar una operación de cooperación entre su despacho y el de su homólogo israelí no es un hecho que debe ser tomado con ligereza. Sobre todo porque la amenaza que ambos países están queriendo neutralizar con esta acción conjunta es la de la actuación del movimiento terrorista Hezbolá en los predios latinoamericanos, en conjunción con el régimen de Venezuela. Algunas fuentes bien informadas aseguran que la tarea conjunta sobre la que Molano se pronunció durante su visita reciente a TelaViv, lo que reviste es un esfuerzo conjunto para intercambiar información y elementos de inteligencia entre las dos fuerzas armadas en torno a este espinoso tema.

Esta declaración unida a las que ha protagonizado el mandatario del país vecino en la ocasión de su reciente visita a Israel nos subrayan el hecho de que un cambio notorio de política y de diplomacia en relación con Venezuela se está configurando por el lado colombiano y que los decibeles que se alcanzan a escuchar son de mucha mayor estridencia. En efecto, tanto Iván Duque como Molano han asegurado que existen células de este grupo terrorista que hacen presencia en Venezuela "apoyados por el régimen venezolano", lo que supone un riesgo evidente para Colombia. No tuvo empacho alguno Duque en afirmar que "nosotros permanentemente hacemos monitoreo y seguimiento a esto, en especial en las zonas de frontera”.

No faltará quien asegure que el Presidente desautorizó a su Ministro abiertamente, negando que Colombia tuviera “enemigos” al referirse a Irán, lo que en efecto ocurrió. Molano había asegurado que tanto el país persa como el grupo terrorista chií libanés Hizbolá eran enemigos de Colombia y de Israel y lo hizo al salir de una reunión formal con su homólogo Benjamín Gantz. Iván Duque se apresuró a aclarar que Colombia no tenía “enemigos” pero lo hizo con tibieza para que nadie pueda inculparlo de hacer gala de una actitud belicista. El ministro no se dio por aludido. Lo cierto es que el daño ya estaba hecho y, pensando mal, no sería extraño que tanto la declaración de Molano como la reacción de Ivan Duque hubiera estado minuciosamente planificada para hacer saber que, con mayor o menor asertividad, que los colombianos le están ladrando en la cueva a Irán y a Hezbolá y que en ello van de la mano con sus nuevos socios israelíes.

Algo también es diáfano como el agua que las autoridades colombianas han pasado de las declaraciones a la acción en este terreno y que su intención de retroceder es inexistente. No es poca cosa que desde suelo israelí, Bogotá y Jerusalén hayan calificado de “amenaza común” a la complicidad existente entre el régimen de Nicolás Maduro y el grupo terrorista Hezbolá de Irán.

Si seguimos hilando fino sería necesario interrogarse cual, a todas estas, es la posición de los Estados Unidos en todo este nuevo y agresivo escenario colombiano. No huelga hacer un ejercicio de memoria sobre el hecho de que fue Washington quien detectó no hace tanto el desplazamiento por aguas del Atlántico de buques de la Armada iraní hacia costas venezolanas y que fue gracias a la presión americana que las embarcaciones debieron cambiar su rumbo.

Todo pareciera indicar que desde Washington y pasando por Bogotá, ya existe una voluntad decidida a hacerle frente a las veleidades terroristas que vienen

produciéndose desde suelo venezolano, usando como herramienta la fragilidad de la frontera como Colombia y utilizando a la vez el contubernio del Régimen revolucionario con los nuevos terroristas colombianos que se esconden detrás de las disidencias de las FARC y los viejos guerrilleros del ELN. Si no están decididos ya los americanos a acciones más frontales, de lo que si están convencidos es de la necesidad de desvestir ante el mundo estas iniciativas criminales y alertar sobre sus consecuencias.

Este juego perverso está siendo puesto a la vista de la comunidad internacional y ya se están armando alianzas para venir al encuentro de sus oscuros propósitos. Es preciso seguir con atención al eje Washington, Bogotá, Jerusalén y calibrar sus actuaciones en el terreno del terrorismo.

Beatriz De Majo
bdemajo@gmail.com
@BeatrizdeMajo1
Venezuela – España

CARLOS ALBERTO MONTANER: CAMBIO DE RÉGIMEN EN CUBA

Bruno Rodríguez Parrillla, el Canciller cubano, fue utilizado por Raúl Castro para intentar “asustar” a los jóvenes creadores de “Archipiélago” y del Movimiento San Isidro. Bruno convocó a los diplomáticos radicados en Cuba y dijo que no se tolerarían los desmanes anunciados para el día 15 de noviembre. ¿Por qué? Muy sencillo y muy siniestro: porque Estados Unidos está detrás de esos esfuerzos para “cambiar el régimen de la Isla”. Está detrás con su dinero sucio y con la malvada CIA que no pierde una oportunidad de hacerle daño al país.

Cuando Raúl pensó a quién asignar la presidencia de Cuba dudó en utilizar al ingeniero Miguel Díaz-Canel. En cierto momento creyó que la presidencia la defendería mejor Bruno Rodríguez, pero optó por confiar en el criterio de José Ramón Machado Ventura, su “cazatalentos” oficial. Ambos están arrepentidos por la selección, pero creyeron les bastaría con situarle al presidente Díaz-Canel un Primer Ministro en su entorno, como si fuera una nana mágica. Para esos fines utilizaron al arquitecto Manuel Marrero Cruz, aunque tuvieran que revivir el cargo, liquidado desde 1976. (En su momento, Marrero ofendió a los médicos en medio de la pandemia, lo que le pareció injustificable a Raúl Castro, pero prefirió reprenderlo en privado, algo que Díaz-Canel se encargó de divulgar).

Tal vez es imposible tener un presidente y un primer ministro ajenos al origen de la revolución. Para eso se instauraron las repúblicas, organizadas en torno a leyes e instituciones absolutamente neutrales que cambian de destino con cada generación que va llegando al poder. En Estados Unidos se asegura que el Partido Demócrata fue creado por Thomas Jefferson, pero este “padre fundador” tenía en la cabeza una sociedad esclavista de pequeños propietarios de plantaciones, como era lógico pensar en aquellos años (fue presidente de 1801 a 1809).

El error está en creerse el cuento del marxismo-leninismo y en suponer que, una vez hecha la revolución, se dio con el diseño del Estado perfecto y los objetivos permanentes. Eso, sencillamente, no es verdad. Como dice la canción del cantautor cubano Carlos Varela: “Guillermo Tell/ tu hijo creció/ y quiere tirar la flecha”. Los cubanos jóvenes no se ven a sí mismos como los continuadores de ninguna revolución. Quieren tirar sus propias flechas. El líder del Movimiento San Isidro, el artista plástico Luis Manuel Otero Alcántara o el dramaturgo Yunior García Aguilera, el dirigente de Archipiélago, nacidos en los años ochenta, no sienten la menor adhesión a la obra de Fidel, Raúl o el Che.

Si la revolución es cambio súbito, el país más revolucionario del mundo es Estados Unidos, al menos desde el siglo XX. Ahí surgen los hallazgos tecnológicos y científicos más importantes del planeta, pero también las experiencias literarias más trascendentes, los cantautores, desde el ragtime al rap, pasando por los blues, el rock, el country, el góspel y hasta la salsa “niuyorquina” que incorpora guarachas cubanas, música puertorriqueña y bachatas y merengues dominicanos.

No hay ninguna posibilidad de comunicarles a los jóvenes las emociones “antiyanquis” de algunas generaciones que hicieron la revolución. Para ellos el bloqueo es un pretexto para oprimirlos. Saben que Paquito D´Rivera, Chucho Valdés y Arturo Sandoval tuvieron que irse con su música a otra parte, como antes habían hecho Celia Cruz, Olga Guillot y Fernando Albuerne, por sólo mencionar unos pocos artistas entre los miles que se han exiliado, porque en Cuba la idiotez y la dictadura se concretaban en una expresión extraordinaria que tuvo que oír alguna vez Paquito D´Rivera: “el saxofón es un instrumento contrarrevolucionario”.

En efecto, los cubanos desean cambiar el régimen que impera en la Isla. No son los Estados Unidos. A los Estados Unidos les importa bien poco el destino de sus vecinos. Los cubanos no quieren echarse al monte ni liarse a tiros para cambiar de régimen. Desean hacerlo pacíficamente, mediante consultas periódicas abiertas y de buena fe. No conozco el ánimo de los gobernantes cubanos. Pero si estuviera en los zapatos de ellos me lo pensaría.

Carlos Alberto Montaner
montaner.ca@gmail.com
@CarlosAMontaner
Cuba- Estados Unidos-España

ORLANDO VIERA BLANCO: SALIR DE NUESTRAS MADRIGUERAS...

Nos arrebataron de raíz nuestra cultura que es la música que nos cautiva y nos hace construir amigos. El reto es salir de nuestras madrigueras... aunque persistan los pasos de nuestros cazadores.

¿Qué representan para ud. los baobabs del libro de El Principito [nuestros miedos más frondosos]de Saint-Exupéry? Quiero sumergirme en la nostalgia de mi niñez de donde brota la más prístina conciencia de nuestra adultez. Releyendo el capítulo XXI de El Principito revivo la maravilla de ese trepidante vocablo en francés, Apprivoiser [domesticar] a nuestro juicio mal traducido. Cuando el principito se acercó a el zorro, éste le respondió “mi vida resultará iluminada… si me domesticas [Apprivoiser]. Creo que lo correcto sería decir “si me cautivas”. Un universo de valores y sentimientos que derrotan todos los miedos que uno siente al ver esos inmensos árboles africanos con forma de botella: los boabads.

Saint Exupéry siendo aviador veía el mundo más elevado, más cercano. Lanza un mensaje: ¿Cuántos amigos conservamos al final de cada viaje, de cada vida? Muy pocos. Nietzsche nos alerta en su obra Aurora: “El saber supone apartarnos del camino para observar lentamente”. Vamos por la vida con una angustiosa rapidez donde “el tiempo es dinero” y a cuenta de ello sólo apreciamos lo que nos resulta útil-sic-. La amistad, el valor real de las relaciones humanas, que es saber, toma tiempo si queremos consolidarlas. Los grandes amigos son con quienes construimos intimidad, lazos familiares. Y esos lazos de domesticación, de cautivación, son el afecto, la fraternidad, el gesto desinteresado, el desprendimiento “inútil” [que no tiene valor material]. Domesticar, cautivar… es asegurar, es convalidar, es reafirmar un vínculo a través de la voluntad de compartir felicidad.

UN ZORRO CAUTIVADOR

Cuando el principito con recelo y temor se acercó al zorro, éste le dijo: ”- Mi vida es monótona. Yo cazo gallinas, los hombres me cazan. Todas las gallinas se parecen, y todos los hombres se parecen. Me aburro un poco. Pero, si me domesticas, mi vida resultará iluminada…Conoceré un ruido de pasos que será diferente de todos los demás. Los otros pasos me hacen volver bajo tierra. Los tuyos me llamarán fuera de la madriguera, como una música. Y, además, ¡mira! ¿Ves, allá lejos, los campos de trigo? Yo no como pan. El trigo para mí es inútil. Los campos de trigo no me recuerdan nada. ¡Y eso es triste! Pero tú tienes cabellos color de oro. ¡Entonces será maravilloso cuando me hayas domesticado! El trigo, que es dorado, me hará recordarte. Y me agradará el ruido del viento en el trigo...”

Domesticar es hacer que lo indiferente se convierta en oro. Es hacer de lo inútil “brisa en el trigo”. Para un país es vital conservar ese sentido familiar que es ver al horizonte y sentir el aroma, textura, sazón y luz de nuestra tierra. Destruir esos lazos es liquidar el sentido de pertenencia por nuestro gentilicio. El totalitarismo aburre porque sus pazos nos encarcelan en nuestras madrigueras... Sólo se conoce lo que uno domestica dijo el zorro. “Los hombres ya no tienen más tiempo de conocer nada. Compran cosas ya hechas a los comerciantes. Pero como no existen mercaderes de amigos, los hombres no tienen más amigos. ¡Si quieres un amigo, domestícame! [cautívame]”. ¿Alguien nos ha cautivado en Venezuela?

LA CULTURA, EL LIBRO Y EL GÉNERO HUMANO

La cultura es el instrumento dorado para construir lazos identitarios. Montesquieu le da un toque universal. “Si algo afecta a mi familia lo expulso de mi mente; si algo afecta a mi patria lo olvido, y si afecta a Europa, lo consideraré criminal”. Es la diversidad cultural la que enciende el interés de conocernos más los unos a los otros. La maravilla del género humano es su inteligencia, su saber compartido, lo cual se ha perfeccionado por siglos lentamente. Por eso no nos casamos como gallinas sino construimos relaciones domésticas.

“-Hubiese sido mejor regresar a la misma hora–dijo el zorro–Si vienes, por ejemplo, a las cuatro de la tarde, ya desde las tres comenzaré a estar feliz. Cuanto más avance la hora, más feliz me sentiré. Al llegar las cuatro, me agitaré y me inquietaré; ¡descubriré el precio de la felicidad! Pero si vienes en cualquier momento, nunca sabré a qué hora preparar mi corazón” Que ilusión produce esperar a un amigo… Por eso es bueno que haya ritos, asentó el zorro. ¿Qué es un rito? –dijo el principito. “Es algo también demasiado olvidado. Es lo que hace que un día sea diferente de los otros días, una hora de las otras horas. Mis cazadores, por ejemplo, tienen un rito. El jueves bailan con las jóvenes del pueblo. ¡Entonces el jueves es un día maravilloso! Me voy a pasear hasta la viña. Si los cazadores bailaran en cualquier momento, todos los días se parecerían y yo no tendría vacaciones”.

García Lorca en el discurso pronunciado en la inauguración de la Biblioteca de su pueblo natal Fuente Vaqueros [1931]. “No sólo de pan vive el hombre. Yo, si tuviera hambre y estuviera desvalido en la calle no pediría un pan; sino que pediría medio pan y un libro. Y yo ataco desde aquí violentamente a los que solamente hablan de reivindicaciones económicas sin nombrar jamás las reivindicaciones culturales que es lo que los pueblos piden a gritos…” Esto lo había dicho antes Víctor Hugo cuando dijo que el verdadero pan del género humano es la educación, la cultura, el saber, centro de inspiración del universo que es la libertad. Y es la amistad la que hace el saber…

PERDIMOS EL HORIZONTE, PERO…

Nos arrebataron de raíz nuestra cultura que es la música que nos cautiva y nos hace construir amigos. El reto es salir de nuestras madrigueras… aunque persistan los pasos de nuestros cazadores. El recuerdo del país vivido-entre amigos-es el motivo que importa.

Orlando Viera-Blanco
ovierablanco@vierablanco.com
@ovierablanco
Venezuela - Canadá 


ELLIOTT ABRAMS: LECCIONES DEL FRACASO DE LA PROMOCIÓN DE LA DEMOCRACIA EN VENEZUELA

¿Por qué fracasó el esfuerzo de Estados Unidos para promover la democracia en Venezuela? Las lecciones aprendidas allí deberían informar los esfuerzos de promoción de la democracia en todo el mundo.

Desde enero de 2019 hasta el final de la administración Trump, Estados Unidos impuso sanciones generalizadas a la economía venezolana y llevó a cabo una vasta campaña diplomática contra el régimen de Maduro allí. La administración Biden ha mantenido muchos elementos de esa política. Sin embargo, la política no logró desalojar a Maduro ni mejorar la situación de los derechos humanos en Venezuela, y mucho menos devolver a ese país a la democracia.

¿Por qué falló? Las respuestas podrían arrojar luz no solo sobre Venezuela, sino también sobre las condiciones y políticas en otros lugares. Aquí hay diez breves respuestas que ayudan a explicar el fracaso de las políticas y que los legisladores y los defensores de los derechos humanos deben tener en cuenta al dirigirse a otros países y regímenes.

El apoyo externo puede permitir que sobreviva incluso un régimen débil o impopular. Estados Unidos logró un éxito considerable en el fortalecimiento de los esfuerzos para poner fin al gobierno militar en América Latina en la década de 1980, pero esos regímenes tenían muy poco apoyo externo. El régimen de Maduro ha recibido asistencia de inteligencia de Cuba, Rusia, China e Irán, apoyo diplomático de otras autocracias, así como de algunas democracias del hemisferio occidental, y ha obtenido préstamos masivos de Rusia y China. De modo que el régimen no se siente aislado y se debilita el impacto tanto de las críticas internacionales como de las sanciones económicas.

Las sanciones económicas amplias que no afecten directamente a las élites gobernantes no cambiarán su conducta. Estados Unidos impuso amplias sanciones a las exportaciones venezolanas, pero los gobernantes venezolanos aún podían moverse libremente por América Latina y Europa, y también mover su dinero libremente. En muchos casos, sus familias vivían en el extranjero con esplendor gracias a las ganancias mal habidas. Las sanciones deben afectar directamente a los funcionarios civiles y militares que dirigen el régimen para tener el máximo impacto.

La población en general debe ver claramente cómo se beneficiará del cambio político. La oposición venezolana nunca pudo demostrar a los ciudadanos que la eliminación del régimen conduciría a una mayor prosperidad para el país. Las encuestas mostraron que los votantes culparon al régimen mucho más que a las sanciones de Estados Unidos por el colapso económico del país, pero eso no significa que creyeran que la oposición podría traer mejores días. Aquí fracasaron Estados Unidos y otras democracias solidarias. Los Departamentos de Estado y del Tesoro de los Estados Unidos tenían planes económicos detallados que habrían dado dinero en efectivo a todas las familias venezolanas y habrían puesto en marcha la economía. Los planes nunca se publicitaron, una oportunidad perdida para reforzar la culpabilidad del régimen por la pobreza extrema del país.

Los líderes del régimen deben ver una salida en la que puedan sobrevivir o rechazarán el cambio. Los líderes del régimen deben sentir dolor ahora, a través de sanciones económicas y prohibiciones de viaje, pero deben ver alguna forma de sobrevivir después del cambio de régimen. Si sienten que el cambio significa largas penas de prisión y penuria, lucharán hasta la muerte para resistir. En Venezuela, ni Estados Unidos ni la oposición hablaron de manera suficientemente convincente sobre las amnistías o formas de justicia transicional que permitirían a los funcionarios del régimen visualizar un futuro para ellos mismos en la Venezuela posterior a Maduro.

Los líderes militares deben ver un futuro tanto para ellos como para su institución. A pesar de algunos esfuerzos tanto de Estados Unidos como de la oposición venezolana, los militares nunca fueron persuadidos de que en un período posterior a Maduro tendrían un papel importante, protegido y honrado. Debido a que tienen las armas, los líderes militares pueden prolongar o acortar el período de un régimen en el poder y pueden presionar por líneas duras o compromisos en cualquier negociación. En Venezuela, como en muchos otros casos, la nación necesita un ejército capaz cuando regrese a la democracia, y los planes para mantener el papel nacional de la institución deben quedar muy claros.

Las naciones democráticas deben estar unidas en su enfoque, o el régimen utilizará las divisiones para debilitar a la oposición. Si bien hubo una cooperación considerable entre las democracias que respaldaban a la oposición venezolana, en momentos clave la falta de cohesión ayudó al régimen. El Alto Representante de la UE trabajó en ocasiones en contra de los Estados Unidos, siguiendo un camino diferente y trabajando con líderes de la oposición que no formaban parte del principal grupo de oposición. Cada una de esas diferencias es una bendición para el régimen, ya que le permite dividir aún más a la oposición y crear confusión.

Estados Unidos y otras democracias no pudieron proteger a los líderes democráticos en Venezuela. Los líderes de la oposición enfrentaron palizas, exilio y prisión. Las naciones que apoyaron el retorno a la democracia no hicieron lo suficiente para protegerlas a ellas y a sus familias. En algunos casos, las familias de los presos políticos necesitaban apoyo financiero mientras estaban encarcelados, y los presos necesitaban una presión internacional mucho más concentrada para asegurar su liberación. En otros casos, los activistas de la oposición necesitaron visas para poder escapar de la prisión y escapar de Venezuela. Estos hombres y mujeres estaban en la línea del frente y ningún movimiento democrático puede tener éxito si no pueden mantener la lucha. Se debe hacer mucho más, en decenas de países autoritarios, para ayudarlos.

Estados Unidos y otras democracias deberían apoyar las negociaciones con el régimen si la oposición democrática las quiere. En Venezuela en 2019, las diferencias internas en la administración Trump significaron que nos mantuvimos al margen (y criticamos intermitentemente) las negociaciones lideradas por Noruega. Esto debilitó la oportunidad de la oposición de utilizar las conversaciones para sus propios objetivos, incluidos acuerdos parciales que podrían haber liberado a presos políticos o permitido el regreso de algunos exiliados. Cuando levantar las sanciones económicas de Estados Unidos es un objetivo del régimen, el hecho de que Estados Unidos no participe en las negociaciones o no las apoye de alguna manera socava a la oposición, porque reduce el incentivo del régimen para negociar compromisos reales.

El apoyo serio a la oposición debería incluir apoyo financiero, pero la oposición se debilita si se convierte en una burocracia y depende menos del apoyo público. En un caso como el de Venezuela, el régimen domina la economía y la esfera pública, y privar de dinero a los partidos de oposición, las ONG y los grupos de la sociedad civil es un objetivo clave del régimen. 

Estados Unidos y otras democracias deberían ayudarlos a sobrevivir, a través de programas de apoyo a la democracia que muchos países mantienen ahora. Pero existe el peligro de que se vuelvan dependientes del apoyo externo en lugar de construir un mayor respaldo interno, y el peligro de que las organizaciones de oposición se burocraticen cuando deberían ser fuerzas políticas ágiles dedicadas a ganarse el respaldo del público. Los partidarios externos de la democracia deben trabajar duro para mantener un equilibrio adecuado.

Las amenazas de acción militar pueden inquietar a los partidarios del régimen, pero también pueden debilitar a la oposición. Estados Unidos dijo en repetidas ocasiones que “todas las opciones están sobre la mesa” con respecto a la acción militar contra el régimen de Maduro, y en principio lo estaban. La repetición de la amenaza tenía la intención de inquietar a los partidarios del régimen y hacerlos pensar dos veces antes de que el régimen sobreviviera. Las referencias a las intervenciones de Estados Unidos en Panamá y Granada estaban destinadas a mostrar que la democracia prevalecería y el régimen, al final, sería derrocado de una forma u otra. Pero tales declaraciones también pueden dar falsas esperanzas a los ciudadanos de que no necesitan luchar contra el régimen porque un final deus ex machina resolverá los problemas del país. Si no hay ninguna intención de usar la fuerza militar, nunca se deben hacer las amenazas.

Incluso si Estados Unidos lo hubiera hecho mejor en todas estas formas, el régimen de Maduro podría haberse aferrado con éxito al poder. En esencia, el régimen no es una dictadura militar, sino una empresa criminal, cuyas élites están estrechamente vinculadas al narcotráfico y otras actividades ilícitas. Esos líderes del régimen temen que cualquier cambio político signifique que tendrán que pagar por sus crímenes y resistirán. Pero las posibilidades de éxito en la restauración de la democracia serán ciertamente mayores en cualquier lugar si se tienen en cuenta estas lecciones.

Esta publicación es parte del Proyecto Diamonstein-Spielvogel sobre el futuro de la democracia.

Elliott Abrams
@DropAbrams
Estados Unidos

CARLOS BLANCO: ¡OH, ELLIOTT! ¡OH, ABRAMS!

1.- Elliott Abrams tiene una amplia carrera diplomática desde el gobierno de Ronald Reagan hasta el reciente de Donald Trump. Funcionó como el representante especial para Venezuela de 2019 a 2021. Sobre la base de esta última experiencia ha escrito un revelador artículo sobre las lecciones que derivan del fracaso en promover la democracia en Venezuela. Se pregunta por qué los esfuerzos de Estados Unidos fallaron.[1]


2.- La lectura del artículo es indispensable. Es una feroz autocrítica aunque no se asume explícitamente como tal. Uno de los estrategas fundamentales en la política hacia Venezuela confiesa sin ambages el fracaso –su fracaso–; pero, lo más importante, es que de su lectura se derivan lecciones para quien quiera replantearse el tema de la libertad en el país. Traduzco libremente los diez acápites.


3.- “El soporte externo puede permitir que un régimen débil e impopular pueda sobrevivir”. Aquí se refiere al apoyo de Cuba, Rusia, China, Irán y otras autocracias. Lo que quiere decir que pensar que a esa coalición internacional se le podía derrotar sin una fuerza superior fue un terrible y costoso error.


4.- “Las sanciones económicas amplias que no afecten directamente a las élites gobernantes no cambiarán su conducta”. Abrams dice que se pusieron sanciones a las exportaciones pero los jefes del régimen pueden moverse libremente en América Latina y Europa, así como su dinero; sus familias viven en el esplendor con los dineros mal habidos. Es verdad, pero hay que recordar que ha habido sanciones individuales amplias por parte de Estados Unidos no acompañadas en la misma medida por la mayoría de los países, lo cual quiere decir que no se ha construido una estrategia común.


5.- “La población en general debe ver claramente cómo se beneficiará del cambio político”. Cuando Abrams explica las causas que según él determinan esa falta de claridad, establece por primera vez la responsabilidad de la oposición en no haber mostrado a la sociedad la conveniencia de cambiar de régimen para obtener prosperidad. Tampoco se dio publicidad a los planes del Departamento de Estado y del Tesoro para proporcionar dinero en efectivo a la familia venezolana. Aquí carga contra la oposición que debía haber hecho esto, aquella que se relacionaba con el propio Abrams, y también critica a los organismos de su gobierno. Obsérvese que se refiere “al cambio de régimen”, no a la convivencia con este. Pero, ¿era esa la política que promovía el enviado especial?, ¿la del “cambio de régimen”?


6.- “Los líderes del régimen deben ver una salida en la que puedan sobrevivir o rechazarán el cambio”. Esta es la tesis según la cual al “enemigo que huye, puente de plata”. Lo cual es razonable, salvo que Abrams se equivoca y ha sido una de las catástrofes conceptuales de su estrategia, que es suponer que los jefes del régimen no se han ido o no se van porque no se les ha ofrecido suficiente plata o placenteros lugares donde estar. Esto es cierto para cargamaletines, torturadores, testaferros y perros de presa, pero no para quienes asumen su papel en clave de Fidel Castro: ideológicos, cerreros y suicidas. Patria o muerte en su visión escarlata no es siempre un eslogan para la galería.


7.- “Los líderes militares deben ver un futuro tanto para ellos como para su institución”. Esta idea es la madre de la mamarrachada del 30 de abril, cuando se esperaba que Padrino López iba a encabezar el cambio. No se entiende que el futuro de los jefes militares es su presente y su pasado. Además, cómo se les dice a los rangos inferiores –coroneles, comandantes, mayores, capitanes, tenientes– que sus jefes, los que a la vista de ellos cometieron tropelías, crímenes de lesa humanidad, robos al por mayor, van a “ver un futuro” y van a seguir siendo los jefes de quienes los han resistido. Tal vez el error mayor es suponer que existe una institución militar y no los escombros de lo que fue, destruida a ciencia y paciencia para imponer el dominio de la mafia.


8.- Las naciones democráticas deben estar unidas en su enfoque, o el régimen utilizará las divisiones para debilitar a la oposición”. Aquí es un poema lo que dice el autor: “El alto representante de la UE trabajó en ocasiones en contra de Estados Unidos, siguiendo un camino diferente y trabajando con líderes de la oposición que no formaban parte del principal grupo de oposición. Cada una de esas diferencias es una bendición para el régimen, ya que le permite dividir aún más a la oposición y crear confusión”. Una cosa es la terrible participación del alto representante y otra cosa es lo que define Mr. Abrams como el “principal grupo de la oposición”, concepto que los llevó a casarse con el G4, cuya hecatombe ya se perfilaba, se le dijo y no tomaron en cuenta la diversidad opositora; diversidad que no es producto del artero propósito de Borrell sino de las diferentes visiones que existen dentro de las fuerzas democráticas y que él –Abrams– no quiso reconocer.


9.- “Estados Unidos y otras democracias no pudieron proteger a los líderes democráticos en Venezuela”. Enteramente cierto. La pregunta es por qué ocurrió este desastre. Por qué los militares que salieron el 23 de febrero de 2019 andan abandonados, por qué les niegan visas a Estados Unidos a muchos de los luchadores que las necesitan, por qué no hay un fondo de verdad para atender a familias de héroes sumergidos en cárceles o en el exilio. You tell me, Mr. Abrams.
“Estados Unidos y otras democracias deberían apoyar las negociaciones con el régimen si la oposición democrática las quiere”. Sin duda. Pero, vemos las cosas de diferente modo. Es obvio que Estados Unidos ha tenido una influencia decisiva en Guaidó y el G4, hay razones para preguntarse por qué no ha adoptado una posición firme cuando ha advertido que Borrell y otros, que considera trabajan “en contra de Estados Unidos”, son los que promueven esas negociaciones. Más aún, aquí hay un evidente y nada inocente desconocimiento de que hay otros sectores de la oposición a quienes Abrams ha despreciado públicamente. ¿No habría sido útil escucharlos?


10.- “Un apoyo serio a la oposición debería incluir apoyo financiero, pero la oposición se debilita si se convierte en una burocracia y posee menos apoyo de la sociedad”. Usted ha dado en el clavo Mr. Abrams: se requiere apoyo; pero, no se debe permitir la construcción de una burocracia inútil. Tal cual. La clave es una sola: accountability, rendición de cuentas, transparencia, control. Usted sabe lo que ha pasado: mucho monómeros y pocas nueces.


11.- “Las amenazas de acción militar pueden inquietar a los partidarios del régimen, pero también pueden debilitar a la oposición”. Cito al autor en extenso: “Estados Unidos dijo en repetidas ocasiones que ‘todas las opciones están sobre la mesa’ con respecto a la acción militar contra el régimen de Maduro, y en principio lo estaban. La repetición de la amenaza tenía la intención de inquietar a los partidarios del régimen y hacerlos pensar dos veces antes de que el régimen sobreviviera. Las referencias a las intervenciones de Estados Unidos en Panamá y Granada estaban destinadas a mostrar que la democracia prevalecería y el régimen, al final, sería derrocado de una forma u otra. Pero tales declaraciones también pueden dar falsas esperanzas a los ciudadanos de que no necesitan luchar contra el régimen porque un final deus ex machina resolverá los problemas del país. Si no hay ninguna intención de usar la fuerza militar, nunca se deben hacer las amenazas”.


12.- En el anterior párrafo se expresa una contradicción que se volvió una política bifronte: si en principio la acción militar existía y luego se deja ver que tal vez no había esa intención, se abandona en la penumbra cuál era la política verdadera. Dicho lo cual, Abrams –veterano de varias guerras– sabe que la acción militar no es necesariamente una invasión sino la construcción de una fuerza capaz de disuadir y obligar al enemigo. Fue la ambigüedad de su política la que abrió las incertidumbres.


13.- Me parece un avance importante la visión crítica de Elliott Abrams porque abre el camino para que se reformule la política de Estados Unidos hacia Venezuela, cosa que hasta ahora no ha ocurrido. Tal vez sería un gesto de humildad que reconociera que estaba equivocado cuando hizo sarcasmos sobre “el realismo mágico de María Corina Machado” cuando reclamaba la construcción de una amenaza creíble. Es posible que haber despreciado, como hizo, ese y otros puntos de vista, lo condujera a articular una política que ahora reconoce como fallida.
De todas maneras, Elliott, el mundo es ancho y ajeno. Let’s talk. It would be nice.




Carlos Blanco
carlos.blanco@comcast.net
@carlosblancog
Venezuela – Estados Unidos

GABRIEL BORAGINA; EL COLECTIVISMO (DE PLATÓN A HEGEL) Y EL SOLIDARISMO

La idea platónica (o como la llama Popper platonizante) de que el colectivismo es sinónimo del altruismo es algo que hoy -en pleno siglo XXI- las personas en su mayoría dan por sentado. Recordemos que Popper había dado estas cuatro posibilidades::

(a) Individualismo es lo contrario de (a') Colectivismo
(b) Egoísmo es lo contrario de (b') Altruismo

Admitiendo de este modo las siguientes combinaciones como posibles: La de un individualismo egoísta o altruista, a la par de un colectivismo también egoísta o altruista. Luego dice:

Admitiendo de este modo las siguientes combinaciones como posibles: La de un individualismo egoísta o altruista, a la par de un colectivismo también egoísta o altruista. Luego dice:

‘’Según Platón, la única alternativa fuera del colectivismo es el egoísmo, pues simplemente identifica todo tipo de altruismo con el colectivismo y cualquier tipo de individualismo con el egoísmo. No se trata aquí de una mera cuestión terminológica, sino de algo más profundo, puesto que en lugar de nuestras cuatro posibilidades, Platón únicamente reconoce dos. Eso ha acarreado y sigue acarreando todavía considerables confusiones en los planteamientos formulados en el campo de la ética. ’’[1]

En realidad, esas ‘’confusiones’’ aluden a la (según Popper) extrema simplificación platónica que establece tajante antagonismo entre dos conceptos que representan mucho más de lo que sus rótulos simbolizan. Por ello dice que ‘’No se trata aquí de una mera cuestión terminológica’’. Es que Popper ve en ese punto el germen y los orígenes del marxismo (quizás la expresión más conocida del colectivismo) y es por eso que le atribuye tanta importancia al tema.

Posiblemente quiera demostrarnos que el enorme prestigio ganado por el marxismo -que dominara la vida política y económica del planeta la mayor parte del siglo XX- radica en aquella identificación filosófica formulada por Platón (deliberadamente, sostiene Popper) entre el egoísmo (en su sentido más peyorativo posible) y el individualismo, al tiempo de la más alta exaltación del altruismo identificándolo con el colectivismo.

Seguidamente involucra a Hegel como el continuador más importe de Platón en la construcción de la idea colectivista de esta manera:

‘’Con el fin de proporcionar al lector una visión inmediata de la platonizante adoración hegeliana del Estado, citaremos algunos pasajes antes de iniciar el análisis de su filosofía historicista. Estos pasajes demuestran que el colectivismo radical de Hegel depende tanto de Platón como de Federico Guillermo III, rey de Prusia durante el período crítico que comprendió y sucedió a la Revolución Francesa. La teoría en ellos sustentada es la de que el Estado es todo y el individuo nada, ya que todo se lo debe al Estado: su existencia física y su existencia espiritual. Tal, pues, el mensaje de Platón, del prusianismo de Federico Guillermo y de Hegel «Lo Universal ha de hallarse en el Estado», manifiesta Hegel. ’’[2]

Es casi, con pocas variantes, la idea popular de hoy en día. De allí nuestra sentencia que lejos estamos de una sociedad individualista como tantas veces escuchamos y leemos en nuestro entorno.

Precisamente, la critica que se hace del individualismo es con miras a apuntar al ideal del estatismo, porque el colectivismo que exalta la deidad del ‘’estado’’ es lo que modernamente se conoce con la palabra estatismo.

Al individualista se lo critica por no ser solidario (ya hemos visto que lo es) que -en definitiva y resumidas cuentas- es un reproche por no ser estatista. Por no dejar en manos del ‘’estado’’ decidir qué es ser ‘’solidario’’, es decir, definir qué y cuáles actos son solidarios o no. Nos recuerda a la clasificación que hace F. A. v. Hayek entre estados morales e inmorales que hubiéramos comentado antes.

Pero también Mises se ocupó de esa doctrina que se llamó solidarismo y a la que ya nos hemos referido en otras ocasiones. Luego de un examen profundo y minucioso del solidarismo lo resume de manera brillante. Citemos nuevamente uno de sus párrafos:

‘’El ala de mayor inclinación estatista dentro del solidarismo pretende llevar a cabo una acción “solidaria” a través de acciones del estado: a través de leyes que impongan obligaciones a los propietarios en favor de los desposeídos y en favor de la beneficencia pública. El ala de mayor inclinación eclesiástica del solidarismo desea alcanzar el mismo fin mediante llamados a la conciencia: el amor cristiano hará que el individuo cumpla con sus deberes sociales."[3]

Nosotros hemos expuesto antes nuestra tesis que niega que el individualismo sea insolidario o anti solidario. Solo los individuos pueden ser solidarios, y no entes hipotéticos como los estados-nación o los gobiernos.

La solidaridad implica un acto voluntario, y exclusivamente los individuos están dotados de voluntad, no entes míticos tales como ‘’el estado, la nación, la sociedad, la comunidad, el grupo, el colectivo’’ y expresiones análogas que designan ideas ficticias.

La diferencia entre el ala estatista y eclesiástica del solidarismo es clara: la primera necesariamente ha de ser coactiva, en tanto la segunda solo puede ser voluntaria. Lo que revela que -en suma- la diferencia se reduce a coerción vs libertad.

En el primer caso, otra persona o grupo de personas decide qué es la solidaridad, y cómo, cuándo y dónde los demás deben ejercerla, contando aquellos con la potestad que les da el aparato de coerción y compulsión que es el estado/gobierno para obligar a todas las demás personas a ser ‘’solidarias’’, y a aplicar los castigos correspondientes a quienes no quieren, no pueden o no desean ser ‘’solidarios’’ en el sentido definido por los burócratas.

En el segundo caso (eclesiástico) no hay ningún aparato de coerción ni de compulsión que obligue a la gente a ser ‘’solidaria’’. Será la influencia que sobre la conciencia ejerzan las doctrinas respectivas lo que convencerá a cada uno y a cada cual de ser solidario o no con el prójimo.

Independientemente de la religión que se profese, no hace falta reflexionar mucho para decidir que la libre conciencia es preferible a la conciencia forzada.

[1] K. R. Popper. La sociedad abierta y sus enemigos. Paidós. Surcos 20. pág. 115-116
[2] K. R. Popper, ibídem
[3] Ludwig von Mises. "SOCIALISMOS Y PSEUDOSOCIALISMOS" (Extractado de Von Mises, Socialism: An Economic and Sociological Analysis, capítulos 14 y 15. La traducción ha tenido como base la versión inglesa publicada por Liberty Classics, Indianapolis, 1981. Traducido y publicado con la debida autorización. Estudios Públicos, 15) Pág. 25 a 28


Gabriel Boragina
gabriel.boragina@gmail.com
@GBoragina
Argentina