viernes, 12 de junio de 2020

ACTUALIZACIÓN, EL REPUBLICANO LIBERAL II, VIERNES 12/06/2020
















RAQUEL GAMUS, APÁTRIDAS

Unknown en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 8 minutos
No hay evidencia más dramática de la crisis que vive una nación que la migración masiva de sus ciudadanos, dejar el terruño es una decisión dolorosa y difícil que implica también dejar los afectos, las costumbres, los sabores y los olores que forman parte de lo propio, para incorporarse a una sociedad que nos es ajena, donde siempre serás un extranjero independientemente de lo acogedor que pueda ser el país donde fijarás tu nueva residencia. Todo el que haya tenido cercanía con migrantes como es mi caso, hija de inmigrantes, esposa de exiliado, sabe lo que duele no poder encontrar... más »

FROILÁN BARRIOS ¿ES HORA DE MIRARSE EN EL ESPEJO?

Unknown en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 17 minutos
La tragedia sin fin que sufre el pueblo venezolano solo es comparable con las naciones más depauperadas del mundo, al ser considerado como escoria y discriminado como jamás en nuestro propio continente latinoamericano, aun cuando fuimos una tierra que cobijó desde el pasado siglo XX a millones de personas que se hallaban en condiciones precarias provenientes de todo el planeta. Hoy sobrevivimos en ciudades de casas muertas y de seres con la mirada perdida sin esperanza y sin futuro, pues continuamos en un país dominado por un régimen incapaz de satisfacer ninguna necesidad humana e... más »

LUIS MANUEL AGUANA, ¿QUO VADIS VENEZUELA?

Unknown en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 23 minutos
Un gran venezolano, Antonio Sánchez García, publicó en septiembre del año pasado un artículo preguntándose, “¿Dónde están los Gonzalo Barrios, los Pérez Díaz, los Moisés Moleiro, los Pompeyo Márquez del Gran Encuentro Nacional que los venezolanos reclaman a gritos?” (Antonio Sánchez García, La defunción de lo político, tl.gd/n_1sr0qdq). Le contesté que ese era un buen grito de angustia para buscar lo que hace tanta falta en Venezuela, que no es otra cosa que un liderazgo a la altura de la circunstancia. Y precisamente en este momento crucial donde hacen falta los mejores conductor... más »

ABIGAIL R. HALL, MICHAEL COON, LOS FEDERALES DEBERÍAN CENTRARSE MENOS EN CORREGIR A LOS INMIGRANTES Y MÁS EN LA LEY, DESDE ESTADOS UNIDOS

Unknown en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 26 minutos
“No estoy en contra de los inmigrantes, sino de los ilegales” A medida que continúa el debate sobre la inmigración, esta es una expresión que suele oírse a menudo. Aquellos que apoyan la deportación masiva de inmigrantes ilegales lo hacen por lo general en nombre de preservar el Estado de Derecho. Los inmigrantes ilegales, sostienen, deberían ser deportados porque están eludiendo el proceso inmigratorio. Otros se encuentran esperando, así que los inmigrantes ilegales tan solo deberían “ponerse en la fila”. La mayoría de los inmigrantes preferiría ingresar legalmente. Los inmigrant... más »

EDUARDO RAFAEL MARTINEZ, CNE 2020 – ESTAMOS FRENTE AL SÍNDROME DE LAS SOLTERONAS

Unknown en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 37 minutos
Esa petición exagerada, de que hacer elecciones “a como de lugar”, no nos va a resolver los problemas. Más bien nos recuerda una vieja expresión de las mujeres de cierta edad, que quedándose solteronas y sin un buen partido, decían: “me voy a casar con el primero que pase para quitarme los problemas de encima”. Si alguna mujer hizo caso a este dicho, es seguro que no tardó en arrepentirse. En esa óptica, y como si no tuviéramos suficientes problemas, la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) volvió a intervenir en las competencias de la Asamblea Nacional, el vi... más »

ALFREDO M. CEPERO, ¿ESTAMOS EN EL UMBRAL DE OTRA GUERRA CIVIL? CASO ESTADOS UNIDOS

Unknown en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 7 horas
En conclusión y para dejar bien claro mis principios y sentimientos cito a José Martí: "Yo sé de un pesar profundo/entre las penas sin nombres/¡la esclavitud de los hombres/es la gran pena del mundo!" En los cuatro años que transcurrieron entre 1861 y 1865 la entonces incipiente nación americana estuvo enfrascada en la más sangrienta guerra de toda su historia. Una guerra civil en la cual entre 620,000 y 750,000 americanos dieron su vida por erradicar del territorio de esta nación la odiosa institución de la esclavitud de los hombres y mujeres de raza negra. Por desgracia, ese bau... más »

ANA MARÍA MATUTE, UN PAÍS Y UN DESEO

Unknown en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 7 horas
I La semana pasada mi hija cumplió 24 años. Ella misma me preguntó quién era presidente cuando nació, porque no conoce otra cosa que no sea el chavismo. Mi hija estudió en un colegio que la enseñó a pensar y a razonar, así que a temprana edad ya entendía lo que estaba pasando. Días antes de su cumpleaños me preocupé un poco, porque le ha tocado vivir cosas muy duras. Es una mujer muy sensible, desde niña ha sido muy empática con el sufrimiento de los otros y este régimen no hace más que ponerle el sufrimiento de la gente en la cara. Podemos darle gracias a Dios porque ha tenido op... más »

RICHARD CASANOVA, LA RUTA ELECTORAL, ARGUMENTOS Y CRITERIOS CONTRAPUESTOS

Unknown en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 7 horas
Ante una eventual convocatoria a elecciones, hay quienes dicen que hay buenas razones tanto para participar como para abstenerse, tienen razón. Y no es una decisión personal a partir de las preferencias y simpatías de cada quien. Es una decisión estratégica, pragmática y unitaria, sustentada en una valoración objetiva de criterios políticos, deslastrada de dogmas o prejuicios. Debe tenerse clara toda la ruta: ¿Qué pasa si la decisión es ésta o aquella? Para despejar el camino hay que evaluar argumentos, desmontar falsos dilemas y poner los pies sobre la tierra. Veamos e intentemos ... más »

ANTONIO JOSÉ MONAGAS, LOS RUIDOS DE LA DECADENCIA

Unknown en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 7 horas
El ser humano es por naturaleza, sensible a cuanta eventualidad puede rozar su discurrir. Quizás, ayudado por el miedo que lo envuelve. O por los prejuicios que vive a consecuencia de la incertidumbre que lo acecha a cada paso. Es así como el hombre deja abatirse por la decadencia que sucumbe no sólo su pensamiento. También, su tiempo. Y hasta su vida. La biología explica la decadencia como la razón que solapa, progresivamente, el desarrollo natural de todo ser vivo. Asimismo, sucede con la teoría de la empresa, cuando explica el proceso natural que determina el recorrido de toda o... más »

RAQUEL GAMUS, APÁTRIDAS

No hay evidencia más dramática de la crisis que vive una nación que la migración masiva de sus ciudadanos, dejar el terruño es una decisión dolorosa y difícil que implica también dejar los  afectos, las costumbres, los sabores y los olores que forman parte de lo propio, para incorporarse a una sociedad que nos es ajena, donde siempre serás un extranjero independientemente de lo acogedor que pueda ser el país donde fijarás tu nueva residencia. Todo el que haya tenido cercanía con migrantes como es mi caso, hija de inmigrantes, esposa de exiliado, sabe lo que duele no poder encontrar en tu cotidianidad ningún nexo con tu historia y tus afectos.

Lo saben también la mayoría de los venezolanos como receptores de varias olas migratorias de ciudadanos de diferentes países tanto del Medio Oriente como de Europa, para quienes hacer la América significaba buscar las oportunidades de superar la pobreza que  en su lugar de origen no alcanzarían.

Vinieron luego oleadas migratorias del continente, colombianos en su gran mayoría, dominicanos, peruanos, ecuatorianos y también de ciudadanos del Cono Sur en buena parte como exiliados políticos.

Con la llegada de Chávez a la Presidencia se le dio la vuelta a la tortilla. Venezuela dejó de ser una tierra promisoria para convertirse en amenazante. Venezolanos, inicialmente en especial de clases medias y profesionales, la mayoría jóvenes, decidieron marcharse, algunos  engrosaron el talento humano  de otros países, otros se desempeñaron en  oficios descalificados. Muchos de quienes habían convertido a este país en su hogar también con gran congoja comenzaron a regresar a sus países de origen.

El país perdió generaciones que por edad y formación le son fundamentales e insustituibles que se encuentra desperdigada por el mundo, con lo que los jóvenes perdieron su país. Los que nos quedamos, sufrimos la lejanía de nuestros hijos, sobrinos, nietos y también la creciente despedida de amigos y vecinos.

Con la debacle económica de Maduro la migración se masificó y se extendió hacia los sectores desposeídos que por distintas vías, incluyendo la caminata, recorrieron miles de kilómetros para buscar sustento para ellos y sus familiares. Creció hasta los 5 millones, convirtiéndose en el mayor problema del continente y la segunda o la mayor migración del planeta. El gobierno de Maduro siempre fue indiferente a esta tragedia, solo tuvo ojos para ella para presentar como un gran logro propagandístico el regreso de 100 o 200  compatriotas de los 5 millones que se fueron.

Todo apuntaba a que el número de migrantes venezolanos seguiría creciendo, pero cambió con la llegada de la covid-19, el desempleo generado por la crisis hizo imposible a algunos venezolanos sobrevivir en tierras extranjeras y se produjo la necesidad de una minoría por regresar, pero lejos de los brazos abiertos  encontraron rechazo por parte de los gobernantes en ejercicio, burlas, reclamos, malos tratos, y por último restricción en las fronteras.

En el reporte diario de la situación de la covid-19 se diferencian minuciosamente los casos importados de los comunitarios, más allá de la importancia cierta que esto tenga para efecto de los contagios, se contamina con la permanente intención de buscar un culpable foráneo, que en este caso se concentra más en el presidente de Colombia, donde hay más de 1 millón de esos “apátridas”.

En la relación utilitaria que  mantiene el régimen con sus  ciudadanos, el regreso de estos migrantes no le resulta conveniente, muy por el contrario, le complica todavía más un cuadro social y sanitario para el que no tiene respuesta. El gobierno de Maduro quiere que su desastre anterior a la pandemia quede más o menos igualito.

Raquel Gamus
@gamusraquel
@ElNacionalWeb 

FROILÁN BARRIOS ¿ES HORA DE MIRARSE EN EL ESPEJO?

La tragedia sin fin que sufre el pueblo venezolano solo es comparable con las naciones más depauperadas del mundo, al ser considerado como escoria y discriminado como jamás en nuestro propio continente latinoamericano, aun cuando fuimos una tierra que cobijó desde el pasado siglo XX a millones de personas que se hallaban en condiciones precarias provenientes de todo el planeta. Hoy sobrevivimos en ciudades de casas muertas y de seres con la mirada perdida sin esperanza y sin futuro, pues continuamos en un país dominado por un régimen incapaz de satisfacer ninguna necesidad humana elemental.

Esta terrible incertidumbre merece una reflexión definitiva de la clase política venezolana, llámese gobierno u oposición, aun cuando sabemos que esta profesión genera equivocadamente una arrogancia de ser superior sobre el resto de los humanos. Si estás en el gobierno la soberbia del poder autojustifica las fechorías para mantenerlo, y si estás en oposición te autoeriges en la única alternativa para derrotar al corrupto gobernante, se pretende monopolizar la representación política y se excluye a quien no pertenezca a la cofradía. Ecuación y péndulo perverso que deja a un pueblo desmovilizado ante las aventuras y desventuras de los politiqueros de turno.

Al aterrizar en nuestra atribulada Venezuela del siglo XXI, si el gobierno chavista se atreviera a mirarse en el espejo, la figura que reflejaría sería similar a la del retrato de Dorian Grey, quien luego de una vida desordenada de traiciones y crímenes terminó apuñalando su retrato de la eterna juventud trastocado en decrepito anciano prematuro, la víctima en nuestro caso ha sido la Constitución y la población que ha sufrido la estafa más brutal que se haya conocido en la historia latinoamericana. De aquel proyecto resumido por Heinz Dieterich en el Socialismo del siglo XXI (1996), proyectado en una revolución redentora, no queda absolutamente nada, solo la imagen de una anciana desdentada y obesa que regenta un burdel de mala muerte, por tanto, sin posibilidad alguna de redención.

Si cruzamos a la acera de enfrente, observamos a la representación opositora incapaz de reconocer que alguna vez se ha equivocado, desde 2002 con diferentes nombres, primero como Coordinadora Democrática, luego en 2010 Mesa de la Unidad (MUD), luego en 2017 Frente Amplio. Han transcurrido dos décadas sin reconocer sus fracasos y su incapacidad de superar este impasse histórico.

En todo este periplo como romería se han cometido todo género de disparates, unos pugnan por un electoralismo a ultranza, otros apuestan a caudillos militares, otros sueñan con los portaaviones del Comando Sur, entre tanto la población devastada y agobiada luce indefensa ante tanta indolencia.

¿Podremos decir que de este lado habrá voluntad de mirarse en el espejo? El pueblo venezolano, el de la diáspora y el residente de esta tierra en desgracia, espera respuesta, algún mea culpa para poder creer de nuevo en un equipo político serio, sin demagogia ni maniobras, de doblarse para no partirse o ya tenemos todas las opciones por encima o debajo de la mesa.

Eso pasa por reconocer la cruda realidad señalada por las encuestas que enrostran a la oposición venezolana, llámese MUD, Frente Amplio, Fracción 16 de Julio y otros, porcentajes globales alrededor de 9%, pues los agrupados en la mesita de noche de Miraflores no figuran en ningún marcador.

Nuestra población que se ha sacrificado durante estos 21 años, ha puesto los muertos en 2002, 2014, 2017, 2018; ha visto partir a sus hijos, luce inerme ante la pandemia y la inflación, requiere la conformación de un Consejo Nacional de la Oposición, no un G-4, ni un frente angosto. Una verdadera Unidad Nacional que agrupe sin primacías de ningún género, a todos los factores políticos y sociales dispuesto a reconstruir la nación, ya que pretender un solo factor autoproclamarse como el salvador de la patria no será suficiente para derrotar al régimen usurpador.

Froilan Alejandro Barrios Nieves
fbarriosnieves@gmail.com
@froilanbarrios

LUIS MANUEL AGUANA, ¿QUO VADIS VENEZUELA?

Un gran venezolano, Antonio Sánchez García, publicó en septiembre del año pasado un artículo preguntándose, “¿Dónde están los Gonzalo Barrios, los Pérez Díaz, los Moisés Moleiro, los Pompeyo Márquez del Gran Encuentro Nacional que los venezolanos reclaman a gritos?” (Antonio Sánchez García, La defunción de lo político, tl.gd/n_1sr0qdq). Le contesté que ese era un  buen grito de angustia para buscar lo que hace tanta falta en Venezuela, que no es otra cosa que un liderazgo a la altura de la circunstancia. Y precisamente en este momento crucial donde hacen falta los mejores conductores, pareciera que no se encuentran en ningún lado, dejando a Venezuela perdida en el camino.

Para poder responder la pregunta que titula esta nota se requiere preguntárselo a quien sepa dónde conducir a este país lleno de dificultades. Decía Seneca «Si no sabes hacia donde se dirige tu barco, ningún viento te será favorable».

La expresión latina que titula esta nota proviene de una historia cristiana que deberíamos recordar siempre todos los que de alguna manera intervenimos en política: “Quo vadis es una frase latina que significa «¿A dónde vas?». La frase está vinculada a una tradición cristiana que gira en torno a San Pedro. De acuerdo con los Hechos de Pedro, el Emperador Nerón en el año 64 comenzó una persecución contra los cristianos. Temeroso de que algo malo le pudiera suceder, Pedro escapa de Roma por la Vía Apia, pero en el camino se encuentra con Jesucristo que iba cargando una cruz. Pedro, al verlo, le pregunta: «Quo vadis Domine» (¿A dónde vas, Señor?) a lo que Cristo contesta: «Romam vado iterum crucifigi» («Voy hacia Roma para ser crucificado de nuevo»). Pedro, avergonzado de su actitud, vuelve a Roma a continuar su ministerio, siendo posteriormente martirizado y crucificado cabeza abajo.” (ver Quo vadis? https://es.wikipedia.org/wiki/Quo_vadis%3F).

Jesucristo sabía a lo que vino al mundo y lo que debía hacer. De allí su firmeza al contestarle al discípulo que había perdido no solo el camino sino la fe, haciéndole avergonzar, colocándolo de nuevo en la ruta correcta. Y esa ruta, si se tiene clara, no debería ni siquiera causar temor porque se tiene la convicción de lo correcto, a pesar de los riegos involucrados. Eso lo tuvo clarísimo Alberto Carnevalli cuando escribe el documento “A la Rebelión Civil llama Acción Democrática”, fechado el 24 de Diciembre de 1952 después del fraude de Pérez Jiménez (ver http://pararescatarelporvenir.blogspot.com/2013/11/a-la-rebelion-civil-llama-accion.html) siendo Secretario General de AD en la clandestinidad.

Escribía en una nota en el 2013 (Rebelión Civil, https://ticsddhh.blogspot.com/2013/11/rebelion-civil.html) que Carnevali tenía moral suficiente para hacer ese llamado. Decía que no solo estaba arriesgando su vida, sino que había trazado una raya entre lo que era y no era aceptable para un país. Después de más de 6 años reitero que no me imagino a Alberto Carnevali llamando a participar en otro juego electoral de la dictadura luego de ese fraude en descampado de un régimen perfectamente caracterizado. Por eso es que hay que aprender de la historia y de la moral política de los verdaderos liderazgos. Razón tiene Sánchez García de preguntarse donde están esos conductores de país.

La búsqueda del liderazgo adecuado es un tema que me ha preocupado (por no decir apasionado) durante todos estos años. Las razones del porque nace y cuales condiciones se deben dar en el país para que se manifieste. No creo que no existan hombres y mujeres dispuestos a asumir esa tarea, pero ¿qué les hace no dar ese paso fundamental?

En una nota del 2012 escribía que esos liderazgos estaban allí (La búsqueda del liderazgo perdido, en http://ticsddhh.blogspot.com/2012/11/la-busqueda-del-liderazgo-perdido.html) pero que se manifestarían en su momento en la medida que la crisis arreciara, como en efecto está pasando. ¡Pero a estas alturas de la destrucción todavía no salen! ¿Por qué? Si existieran bancas de inversión de riesgo en el campo político, estuvieran interesadas en algunos proyectos (sin ruborizarme diría que el nuestro en ANCO es uno de ellos, particularmente en el interior). Pero estos proyectos no saldrán nunca en el actual estado de postración económica y política, pero sobre todo moral en que se encuentra el país. Hacer política en Venezuela se ha convertido en un negocio.

En la Venezuela actual nadie apuesta sino al caballo ganador que puede tener el poder mañana. Los financistas apuestan a Leopoldo, María Corina, Henry Ramos (aunque este último parece que se financia solo). Nadie invierte en proyectos con nuevas caras y nuevas propuestas porque se perdió la razón misma por la cual se hace política que es el bienestar de todos. En el pasado era más sencillo, los partidos salían de los ideales –y bolsillos- de sus militantes. Ahora salen de los bolsillos de los inversionistas. Eso debería resultar intolerable para cualquiera que pretenda hacer política con “P” grande en Venezuela.

No pierdo la esperanza de que eso cambie. Me consta la existencia, porque los he conocido, de personajes como esos que menciona Sánchez García en su artículo, en el interior de Venezuela y fuera de ella, a pesar de las dificultades. Uno de ellos, Hinderburgo Becerra, del hijo querido del Guárico se nos murió esperando ese cambio. Gente honorable y con vocación política y que no tienen la visibilidad que le da el dinero a la muestra inservible que se ve todos los días en la superficie a través de las redes sociales. Pero los partidos se cansan de venderle a la gente que eso es lo que hay. Y lo lamentable es que esas personas no resolverán la crisis de Venezuela y terminaran por la fuerza de los hechos en el basurero de la historia de este país.

Mi última nota del año 2018 la dedique al liderazgo de esos muchachos que ahora manejan el poder y la titulé “Por un liderazgo efectivo en el 2019” (http://ticsddhh.blogspot.com/2018/12/por-un-liderazgo-efectivo-en-el-2019.html). Allí me atreví a dar algunos consejos basados en un extraordinario trabajo de la revista Forbes. Mas de año y medio ha pasado y no se han cumplido en el accionar ninguna de esas recomendaciones, por lo que dudo que resulte exitoso nada de lo que salga de allí. El cuerpo de valores indispensables para llevar a Venezuela a algún lugar es absolutamente necesario en aquellos que se encuentren al frente de esta lucha. Si no los impulsamos o buscamos maneras que quienes los tengan salgan al ruedo, esta crisis será un mal sueño comparada con la que nos vendrá encima en un futuro previsible. Los que creemos estar conscientes de este problema debemos seguir insistiendo para poder tener una respuesta tan clara como la que le dio Jesucristo a Pedro en la Vía Apia, así sea que todos salgamos martirizados y crucificados como él, con la cabeza para abajo…


Luis Manuel Aguana 
luismanuel.aguana@gmail.com
@laguana

ABIGAIL R. HALL, MICHAEL COON, LOS FEDERALES DEBERÍAN CENTRARSE MENOS EN CORREGIR A LOS INMIGRANTES Y MÁS EN LA LEY, DESDE ESTADOS UNIDOS

“No estoy en contra de los inmigrantes, sino de los ilegales”

A medida que continúa el debate sobre la inmigración, esta es una expresión que suele oírse a menudo. Aquellos que apoyan la deportación masiva de inmigrantes ilegales lo hacen por lo general en nombre de preservar el Estado de Derecho. Los inmigrantes ilegales, sostienen, deberían ser deportados porque están eludiendo el proceso inmigratorio. Otros se encuentran esperando, así que los inmigrantes ilegales tan solo deberían “ponerse en la fila”.

La mayoría de los inmigrantes preferiría ingresar legalmente. Los inmigrantes legales tienen la posibilidad de viajar más fácilmente y encontrar mejores puestos de trabajo, y no precisan estar constantemente en guardia ante la aparición de los agentes de inmigración. ¿Entonces por qué unos 11 millones de trabajadores indocumentados han escogido venir a los Estados Unidos? Algunos dirían que simplemente no respetan las leyes estadounidenses. Sin embargo, la realidad es que el sistema de inmigración de los Estados Unidos está quebrado. La fila de la espera tiene una longitud de años, y a veces décadas. En otros escenarios, no hay fila alguna.

Considérese el caso de México, la mayor fuente de inmigrantes indocumentados hacia los Estados Unidos. El gobierno estadounidense puede emitir en el mejor de los casos unas 25.000 visas a mexicanos. Los solicitantes aprobados por encima de ese límite van a una lista de espera. Cerca de 1,3 millones de personas en México con solicitudes aprobadas se encuentran en la actualidad esperando visas. Al ritmo actual, insumirá más de 50 años despejar la fila actual—suponiendo que nuevas solicitudes no sean presentadas. En julio de 2017 el Departamento de Estado emitió tarjetas de residencia basadas en los lazos familiares a algunos inmigrantes mexicanos—cuya solicitud había sido aprobada en 1995. Así es: después de cumplir con todos los trámites pertinentes para venir aquí legalmente y obtener la aprobación, todavía tuvieron que esperar más de 20 años.

Esos tiempos de espera no son exclusivos de los mexicanos. En todo el mundo, más 4 millones de personas están esperando en la fila. Para un trabajador no calificado que carece de familiares aquí, no existe forma de mudarse a los Estados Unidos legalmente.

Con esto en mente, no debería sorprender que muchas personas decidan inmigrar ilegalmente. Si le dan a elegir entre inmigrar ilegalmente hoy o esperar 20 años para ver a su familia, usted probablemente consideraría seriamente lo primero.

Quienes se oponen a la inmigración ilegal deberían concentrarse en enmendar un sistema de inmigración que se encuentra roto — no en deportar a millones de personas.

Un primer paso es reformar los límites de visados por país. No sirven a ningún propósito que no sea el de crear una lista de espera absurdamente larga. Esto ayudaría a reducir significativamente las filas, eliminando así algunos de los incentivos para emigrar ilegalmente. Por desgracia, la Casa Blanca sólo aprobó un proyecto de ley que haría exactamente lo contrario.

En segundo lugar, es necesaria una senda migratoria para más trabajadores poco cualificados. Es difícil ponerse a esperar en una fila que no existe.

Finalmente, en vez de gastar decenas de miles de millones de dólares (billones en inglés) acorralando y deportando a aquellos que ya se encuentran aquí, dichos fondos podrían permanecer en los bolsillos de los contribuyentes. Esto no sólo reduciría los efectos devastadores de desgarrar a las familias, también permitiría a millones de personas salir de las sombras.

Deportar a los inmigrantes ilegales es librar la pelea equivocada. Los inmigrantes ilegales de hoy están aquí en busca de una vida mejor. Desean estar con sus familias. El problema con la inmigración actualmente no es que hordas de malvados extranjeros están ingresando a nuestro país porque carecen de todo respeto por la ley. El problema es que, por el contrario, nuestra ley hace casi imposible que la buena gente haga lo correcto.

No necesitamos corregir a las personas. Precisamos enmendar la ley.

Publicado por Gabriel Gasave  
https://independent.typepad.com/elindependent/2020/05/el-memor%C3%A1ndum.html
Gabriel Gasave
@ElIndependent http://www.elindependent.org/articulos/article.asp?id=9157

EDUARDO RAFAEL MARTINEZ, CNE 2020 – ESTAMOS FRENTE AL SÍNDROME DE LAS SOLTERONAS

Esa petición exagerada, de que hacer elecciones “a como de lugar”, no nos va a resolver los problemas. Más bien nos recuerda una vieja expresión de las mujeres de cierta edad, que quedándose solteronas y sin un buen partido, decían: “me voy a casar con el primero que pase para quitarme los problemas de encima”.

Si alguna mujer hizo caso a este dicho, es seguro que no tardó en arrepentirse.

En esa óptica, y como si no tuviéramos suficientes problemas, la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) volvió a intervenir en las competencias de la Asamblea Nacional, el viernes pasado.

En esta ocasión –porque no es la primera vez- esta intervención está revestida de una magna gravedad.

Tiene que ver con la composición de la directiva del Consejo Nacional Electoral (CNE). Un ente que debe ser imparcial, para poder garantizar la transparencia de los procesos electorales.

En los países democráticos, si es que vivimos en uno que lo sea, las crisis de gobernabilidad se resuelven civilizadamente.

Esto implica que funcione la política, y que las instituciones democráticas operen.

Si eso no ocurre de esa manera, se corre el riesgo de que la civilidad sea reemplazada por la violencia.

Ese aterrizar en la violencia, para resolver los problemas que la política no logra resolver, no la debería de querer nadie.

Por eso no es extraño que se pidan elecciones para resolver de una vez por todas la crisis que signa la vida de los venezolanos. No es extraño, y es el deber ser.

Como en la letra chiquita de los contratos de adhesión bancarios, debemos subrayar que “ciertas limitaciones aplican”.

Los venezolanos, a estas alturas de la crisis, no son pendejos. Mucho menos recogidos a lazos un domingo para llevarlos “a ciegas” a votar. Con tapaojos, para no ver, y tapabocas, para no protestar.

Creer simplemente, que con una votación sin garantías se van a resolver los problemas del país, es también una cretinada de magnas proporciones. Similar a las solteronas, que piensan casarse para resolverse.

Elecciones sin garantías –decimos- lo único que lograría sería un “lavarse la cara” del responsable de la crisis.

Por eso es extraño, que un grupo de dirigentes políticos de amplia experiencia, se hayan subido al autobús electoral del régimen para demandar ante el TSJ –controlado por el régimen- un presunto vacío de la Asamblea Nacional por no haber designado los rectores del CNE.

La verdad que no hemos visto hasta ahora, de ese plantel de esclarecidos amigos políticos, haber demandado ante el TSJ el vacío del gobierno para proporcionar salud, educación, deporte, recreación, trabajo, seguridad, etc. etc.

Presumiendo las buenas intenciones, serían posiciones de ingenuidad. Sospechando malas intenciones, daría para pensar cualquier cosa.

Elecciones sin garantías, no es la solución.

Eduardo Rafael Martinez
eduardopmartinez@eastwebside.com
ermartinezd@gmail.com
@ermartinezd
Italia