domingo, 21 de marzo de 2021

ACTUALIZACIÓN DE EL REPUBLICANO LIBERAL DIARIO DE OPINIÓN, http://elrepublicanoliberalii.blogspot.com/ DOMINGO 21/03/2021

 


MARÍA GABRIELA MATA CARNEVALI, A CIEN AÑOS DE CÓRDOBA: LA ACADEMIA BAJO ATAQUE

La libertad académica en el mundo está amenazada. Los centros de educación superior son objeto de diferentes tipos de agresiones. En la agenda internacional, sorprendentemente, este no es un problema prioritario. En Venezuela, el movimiento estudiantil, las asociaciones de profesores, los rectores y los activistas por los derechos humanos se ocupan de ponerlo en la palestra.

Según la organización no gubernamental de reconocida trayectoria Scholars at Risk, en su informe de 2018, la lista de arbitrariedades contra el normal desenvolvimiento de la educación superior a escala mundial es larga. Incluye desde ataques suicidas de extremistas hasta la restricción de permisos de viaje, el encarcelamiento de académicos y amenazas a la autonomía institucional, ejemplos todos de cuánto se teme al pensamiento crítico. Sin embargo, el tema se discute raras veces en los organismos internacionales y no aparece en las declaraciones y los documentos de trabajo de organizaciones como la Unesco o el Banco Mundial. 

A propósito del centenario del Movimiento de Córdoba y los acontecimientos recientes en Venezuela, es necesario llamar la atención sobre el cerco que se quiere imponer a la libertad de pensamiento en las universidades. Los atropellos de los que han sido víctimas los universitarios constituyen un retroceso histórico. Violan la Ley de Universidades —creada en 1958 y reformada parcialmente en 1970— y con ella los ideales promovidos por el Movimiento de Reforma Universitaria originado en Córdoba, Argentina, en 1918; considerado el más importante movimiento de protesta de la universidad latinoamericana, enmarcada por esa época en estructuras coloniales elitistas a pesar de los procesos independentistas del siglo XIX.

La Ley de Universidades de 1958, que dio origen a la universidad autónoma, popular y democrática en Venezuela, fue producto de un largo proceso de desarrollo, cambio y transformación para garantizar la independencia y la capacidad crítica de la comunidad universitaria frente a la injerencia de los gobiernos o cualquier otra forma de dominación. Fue elaborada en el marco de la transición democrática, luego de la caída de Pérez Jiménez, por profesores de la Universidad Central de Venezuela que formaron una comisión presidida por Francisco de Venanzi. 

Esa ley no solo fue el primer instrumento que dio verdadero estatuto autonómico a las universidades venezolanas, sino que también ayudó a definir la estructura y el funcionamiento del Consejo Nacional de Universidades, los distintos órganos democráticos de cogobierno y las autoridades en sus diversos niveles de dirección y organización académica. Señalaba aspectos importantes sobre composición, funciones, estabilidad y seguridad social del personal docente y de investigación, sin olvidar el bienestar de los estudiantes. Además, sentó las bases para la creación del Consejo de Fomento, el Consejo de Desarrollo Científico y Humanístico, y las direcciones y comisiones de Cultura y Deporte. 

Hoy esta concepción global e integral de la universidad en todos sus componentes, esa autonomía, cónsona con el espíritu del Movimiento de Córdoba que costó tanto alcanzar, está en entredicho no obstante su incorporación con rango constitucional en el artículo 109 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela de 1999. Los universitarios elevan su voz de protesta en un discurso enmarcado en la construcción de la paz, vía la defensa y la promoción de la democracia y los derechos humanos. 

La I Conferencia de las Américas sobre Libertad Académica, Autonomía Universitaria y Derechos Humanos en el Ámbito Universitario se celebró en Caracas los días 12 y 13 noviembre de 2018, bajo la convocatoria de la organización no gubernamental venezolana Aula Abierta y reunió a autoridades rectorales, profesores, estudiantes y representantes gremiales de las universidades de Venezuela y de otros países de las Américas, además de activistas por los derechos humanos. 

Si algo quedó claro es que la libertad académica va de la mano con la democracia. Los cambios necesarios en la educación superior en Venezuela deben ser liderados por su estructura representativa e institucional, con pleno respeto a la autonomía en el marco del Estado social de derecho, no impuestos por el gobierno de manera autoritaria. El ejercicio de la autonomía implica el ejercicio de la ética de la responsabilidad. No es solo un derecho, es un deber. Al ir contra la autonomía de las universidades se limita su poder legítimo, reconocido como tal en la Constitución. El Estado debe proteger y fomentar el derecho a la educación como servicio público, sin menoscabo de la autonomía universitaria.

María Gabriela Mata Carnevali
matacarnevali@gmail.com
@mariagab2016
Venezuela

VICENTE BRITO, ¿ESTADO COMUNAL Y SOCIALISMO SIGLO XXI VAN DE LA MANO?

Los anuncios efectuados acerca de la importancia del estado comunal como el medio necesario, para lograr el desarrollo de políticas públicas que van a dar los necesarios resultados efectivos, para alcanzar mejoras en las condiciones de vida de los Venezolanos y a la vez lograr un mejor crecimiento en el desarrollo del país. Solo generan mayor escepticismo en la población, los cuales han venido sintiendo de manera continua una sostenida desmejora en sus condiciones de vida con la aplicación del modelo de gobierno conocido como socialismo del siglo XXI. 

Este modelo de gobierno aplicado por parte del estado ha sido inconveniente al interés nacional en todos los espacios de la vida del país, así como los bajos resultados obtenidos en la producción nacional por parte de las empresas públicas. Todos los cuales según los análisis realizados por instituciones nacionales e internacionales, son las causas de las desmejoras observadas en la preocupante disminución de la actividad productiva del país, con sus efectos en la pérdida de empleos y la drástica reducción del poder adquisitivo causada por la hiperinflación, al Banco Central tener que financiar el déficit público y las pérdidas millonarias causadas por el sostenimiento de las empresas públicas al estar la casi totalidad de ellas produciendo a pérdidas. Superando en estos momentos sus elevados montos con cifras superiores a las que se les otorgan por parte del poder central a los estados y municipios. 

Lo que luce evidente es que el proyecto político del estado comunal, luce como una versión repotenciada del socialismo siglo XXI, en donde el estado asume mayores controles sobre todas las actividades de la nación, limitando más aún nuestros derechos ciudadanos establecidos en la actual Constitución vigente. Así lo podemos observar en todas las decisiones públicas llevadas adelante en los últimos años, las cuales demuestran cómo se impone el ejercicio del poder del estado como máximo rector de la vida nacional. No siendo escuchada y menos considerada ninguna de las observaciones realizadas por las distintas instituciones, que alertan sobre la inconveniencia de estas decisiones que vienen limitando aún más nuestros derechos ciudadanos establecidos en el texto constitucional y en la carta de derechos humanos fundamentales establecidas por las Naciones Unidas. 

Lo cual nos indica que el estado comunal y el socialismo siglo XXI van de la mano, en la estrategia política del control total por parte de los poderes del estado de la Nación Venezolana.

Vicente Brito
vicent.brito@gmail.com
@vicentejbrito
Presidente
Red por la defensa al Trabajo, la Propiedad y la Constitución Vicente Brito
Venezuela

JESÚS PEÑALVER, EL BARRANQUILLERO,

Si la corrupción administrativa no es otra cosa que el manejo doloso de los dineros públicos, o el uso indebido de los bienes o servicios de naturaleza pública; si socava la legitimidad de las instituciones públicas, y así lo señala  expresamente el primer considerando de la Convención Interamericana contra la Corrupción; si esta práctica malévola causa tanto daño a los patrimonios de nuestras naciones y atenta contra la sociedad misma; si muchos funcionarios ayer y hoy han ocupado cargos, siendo que sus vidas no han estado precisamente libres de procesos criminales y de estafas al Fisco, entonces debe asumirse con firmeza y suficiente voluntad política la tarea de afrontar las averiguaciones orientadas a esclarecer los hechos denunciados, procesar a los presuntos responsables y decidir en consecuencia.
 
Así las cosas, que se recuerde no ha habido antes un caso que alcance las cotas de poder, las mil millonarias cantidades de dólares robados, birlados al erario, ni tejido la urdimbre de corrupción como el que vincula al barranquillero Alex Nain Saab Morán, abogado colombiano de ascendencia libanesa​ con nacionalidad venezolana​​​​ y antiguana, ​ mencionado en los Panamá Papers, en las excelentes investigaciones del portal web armando.info y solicitado por las autoridades estadounidenses por la presunta comisión de delitos de diversa naturaleza, todos relacionados con mafias de corrupción, lavado de dinero o blanqueo de capitales, y narcotráfico. Él como cabecilla, jefe o sujeto activo del delito, y la República de Venezuela como sujeto pasivo de aquellos hechos delictivos. O sea, nuestro país como víctima del daño.
 
El patrimonio venezolano, el erario, nuestro presupuesto gravemente afectado por las supuestas fechorías del malhechor nacido en Barranquilla, ciudad de la vecina Colombia.
 
Conviene advertir que con una buena parte del dinero supuestamente birlado a la República (personificación jurídica del Estado), bien se hubiera podido cubrir o atender tantos problemas y calamidades que hoy padece el país nacional. Sobre todo, en tiempo de pandemia, en este paisaje de desgracias en que se nos ha convertido la cotidianidad.
 
No sé si al momento de pergeñar esta nota, el barranquillero, suerte de diplomático venezolano a juro, ya está en tierras gringas vestido de procesado anaranjado y dispuesto a atender el llamado de la justicia.
 
Lo que sí queda claro es que, a todo evento, dinero también ha habido para su defensa nada barata, donde el mago Baltasar Garzón, exjuez español y quien ejerce de su abogado, ha intentado hacer toda clase de magia para sacarlo de ese atolladero.
 
La verdad es que los conejos no han salido de la chistera, tampoco las cartas han respondido a las destrezas del Garzón ni los trucos ni malabares han funcionado, a pesar de los esfuerzos del mago por cumplir con su función en estrados caboverdianos.
 
El orden moral y la justicia, el desarrollo de los pueblos, y la democracia misma que debe sustentar la estabilidad política y la gobernabilidad del país, exigen la participación de todos en la cruzada para combatir toda forma de corrupción en el ejercicio de las funciones públicas. Eso no lo debe ignorar el abogado español, ni su homólogo barranquillero, quien al propio tiempo es su defendido.
 
De un lado, los órganos de gobierno y las instituciones del Estado ejerciendo las funciones y competencias que tienen asignadas por el ordenamiento jurídico que rige en la República, y los ciudadanos todos cumpliendo con su  responsabilidad en el control social de la función pública, pues no olvidemos que el funcionario es responsable de sus actos, y el ejercicio de la función para la cual aquel fue elegido o designado está sujeto no solo a la obligación de rendir cuentas, sino también al escrutinio público.
 
Llama la atención cómo los voceros de la defensa del barranquillero y también sus férreos protectores en Venezuela no tocan, ni de soslayo, ni se refieren al fondo del asunto. Es decir, no lo defienden de las numerosas acusaciones que obran en contra del colombiano, sino de su supuesta condición de “diplomático venezolano”.
 
No es fácil, pues la corrupción tiene muchos rostros, y muchas veces alcanza el nivel de metástasis, y para combatirla es responsabilidad del Estado la erradicación de la impunidad. Por otra parte, la cooperación entre las naciones, y entre estas y sus respectivas sociedades civiles organizadas será siempre necesaria para que su acción en esta cruzada sea efectiva. Nunca serán suficientes los esfuerzos para prevenir, detectar, sancionar y erradicar la corrupción en el ejercicio de la función pública y en los actos dolosos que la afectan.
 
En el caso de marras, donde el barranquillero y su banda no dejaron sector, área ni hueso sanos; robaron en todos lados prevalidos de poder y sin duda, con el apoyo de quienes permitieron tantas tropelías en contra del erario venezolano, es y será difícil en este estado de cosas contar con una investigación responsable, seria y profesional que se encargue de aclarar esas aguas turbias.
 
Ni Pdvsa se salvó. La teta importante que surtía de alimento presupuestario a la nación, que proporcionaba los ingentes recursos económicos que generaba la renta petrolera y servían al desarrollo del país, también sufrió los embates de aquella cuerda de bandidos.
 
Por mi parte seguiré buscando la esperanza en todas mis cajas, revolveré, inventaré, desocuparé los refugios. Toca unir los vidrios rotos, procuraré no asquearme. Escribiré en la certeza de que las palabras no se atreverán a crucificarme. No llevan la valentía para amedrentarme ni la cobardía tampoco de correr.
 
Confío en que llegará el día del juicio, todos entrarán a la sala donde la justicia terrena juzgará sus crímenes, se oirán gritos y consignas, mientras otros callarán sus penas y sus culpas. La justicia hará su trabajo, quizá reos lloren o se burlen al escuchar la sentencia. Comenzará la reconstrucción.
 
Y si notas alguna indignación, no hagas caso, no es contigo. Es contra el silencio, la vergonzosa mudez, la tranquilidad de la indiferencia.

Jesús Peñalver
penalver15@gmail.com 
@jpenalver
@ElNacionalWeb
Venezuela

ROMÁN IBARRA, SAN JOSÉ, PAPA FRANCISCO Y CRISIS

Escribo estas líneas hoy día de San José, padre de nuestro señor Jesucristo, y esposo de María su madre. Así pues, yo también aprovecho para homenajear a todos mis amigos que llevan por nombre José, y Josefina, y especialmente a mi hermano menor, José Rafael quien vive en la madre patria, con mis mejores deseos porque siempre le vaya bien, y sea feliz junto a su gallega.
 
Maravillosa también la ocasión, porque coincide con el octavo aniversario del pontificado del Papa Francisco, como nos lo recuerda en su artículo mi querido amigo, Eduardo Fernández. Dice él en su artículo: ¨Francisco el primer Papa latinoamericano, el primer Papa jesuita, el primer Papa que asume el nombre de Francisco en homenaje a aquel humilde santo de Asís¨.
 
¨Francisco es, además, un Papa que llega al pontificado en condiciones excepcionales: la renuncia de su predecesor, Benedicto XVI, un Pontífice muy sabio y muy santo. Tengo la convicción de que en la elección del Papa Francisco está presente, de una manera evidente, la inspiración del Espíritu Santo. Es el Papa para los tiempos tormentosos que está viviendo la humanidad. Es el Papa para liderizar a la Iglesia en un momento de oscuridad y conducirla a cumplir su misión de iluminar a los corazones y a los pueblos¨.
 
Esa exhortación para liderar a la Iglesia a cumplir la misión de iluminar a los corazones y a los pueblos tiene que ser urgente, y en el caso venezolano específicamente, es muy interesante que pueda hacerlo a través de su jerarquía, en vista de que es la institución más respetada y prestigiosa en todas las mediciones de opinión.
 
Por eso, en nuestra opinión y humilde contribución, invitamos al entendimiento de los factores que pueden contribuir en la búsqueda de soluciones a los problemas que atraviesa hoy la sociedad.
 
Es urgente que se pongan de acuerdo gobierno y oposición para, mediante el ejercicio y puesta en práctica de políticas públicas de emergencia, la población toda tenga acceso a la vacunación contra la pandemia del covid 19; acceso a los servicios básicos como la salud en hospitales dignos, y medicinas; agua; electricidad; transporte superficial y subterráneo, así como gasolina y gasoil; telefonía e internet; alimentación, y muy especialmente seguridad de las personas y los bienes, en armonía con el respeto a los derechos humanos.
 
Es inaceptable para todos (gobierno-oposición-sociedad), que se sigan repitiendo escenas escalofriantes como la de hoy en plena autopista a la altura de la Cota 905, en la que unos delincuentes armados hasta los dientes, despojaron a un médico de su moto, y escucharlo suplicar por su vida. Y en medio del tiroteo irresponsable, aparentemente resultó muerta una dama del sector.
 
Pero sorprende además, según recogen las redes sociales, que hechos similares fueran protagonizados por los líderes de las bandas que controlan barrios como José Félix Rivas en Petare, el Coqui y su gente en la Cota 905, El Valle, y El Guarataro. De qué se trata? Acuerdo de las bandas para aterrorizar a la población? Marcando el territorio? Un mensaje para quienes les cedieron territorio y armas (gobierno)? Qué hay detrás de todo este horror?
 
Es allí donde se impone una salida política negociada urgente para frenar estas calamidades, que de no corregirse, nos convierten en un país del ¨sálvese quien pueda¨, sin autoridad gubernamental respetable; sin instituciones policiales; en fin, sin gobierno, ni oposición.
 
La ciudadanía no aguanta más humillaciones, está desesperada y queriendo dejar todo atrás como una horrible pesadilla.
 
En el nombre de Dios, pónganse de acuerdo ya para resolver los problemas reales de la gente. No más odio, ni venganzas. Actuemos hoy, mañana será muy tarde. Amén.

Roman Ibarra
romanibarra@gmail.com
@romanibarra
Venezuela

JESÚS RAFAEL GONZÁLEZ BRICEÑO, LOS TRES COLOSOS ACTUALES

Rusia, República Popular China Y Estados Unidos están afectados por severos conflictos en su lucha por la supremacía mundial 

Los recientes acontecimientos del inicio de la tercera década del presente siglo nos muestran una geopolítica muy compleja y cambiante en que compiten las tres grandes potencias mundiales al enfrentar los desafíos de la supremacía en que una de ellas pretende implantar un nuevo orden internacional, dentro de una crisis estructural política, social, económica y tecnológica marcada definitivamente por la pandemia del COVID-19, iniciada y desparramada desde Wuhan, China, a fines de 2019 y hasta el presente, aún no remitida, que podría inclinar las balanza hacia el coloso asiático del dragón, al intentar imponer su hegemonía ante la Federación Rusa y Estados Unidos de América que, además de confrontar los conflictos geopolíticos mundiales, se enfrenta a graves debilidades internas del terrorismo, violación de los derechos humanos, decadencia de la gobernanza y debilitamiento de sus tradicional status quo bipartidista. 

Uno de los tres grandes del mundo trata de imponerse tras la flaqueza interna y externa estadunidenses puesta de manifiesto , con mayor énfasis , en el último mandato de Donald Trump, enero del 2017-2021, al romper los moldes institucionales de los mandatarios precedentes, las desavenencias con sus amigos y socios tradicionales del bloque occidental, creándose una crisis de inestabilidad que todavía no es fácil de predecir por su complejidad y brevedad del nuevo mandato de su sucesor demócrata Joe Biden que ha asumido la responsabilidad de resolver algunos de sus problemas más urgentes, los siguientes problemas para enfrentar: 

-El desbordamiento de la pandemia de covid-19, la más grave a nivel mundial con secuelas letales y sanitarias, disociación familiar y un elevado saldo de casi treinta millones de contagiados, y más de medio millón de fallecidos, 

-Los resabios históricos y crecientes de un racismo afroamericano y el fortalecimiento de la supremacía tradicional blanca, que han originado constantes disturbios y desórdenes internos y el asalto lamentable al CAPITOLIO, El 6 de enero pasado; y el fortalecimiento del movimiento Black Lives Matter en su lucha contra el racismo pero infiltrado por otros intereses distintos y foráneos que pueden representar un peligro para la estabilidad interna nacional. 

-La avalancha inmigratoria sin precedentes en su trayectoria histórica multiétnica que, además de sus consabidas causas socioeconómicas y políticas continentales, contienen, a su vez, factores estratratégicos externos de perturbación de su orden interno y sus relaciones internacionales. 

- Desatención de su liderazgo mundial en defensa de la democracia occidental y recomposición de las alianzas del bloque democrático anticomunista para la restauración de sus alianzas diplomáticas, económicas, comerciales, militares y estratégicas para atender a conjuntamente los desafíos de sus enemigos tradicionales fortalecidos a finales del siglo y del presente por la penetración incesante de Rusia, la República China e Irán que con su apoyo logístico, financiero 

y comercial, preferentemente los del Grupo de Puebla, representan una amenaza continental para la democracia y la estabilidad regional- 

-El desproporcionado déficit financiero y comercial de EUA, de aproximadamente 20,5 billones de dólares( BM), igual o superior a su PIB, ,y en especial con la China comunista, $1,130 billones, representa un pesado hándicap difícil de manejar, con una franca tendencia a incrementarse durante la pandemia de la Covid-19, al tener que erogar muchos billones de dólares para atender la crisis sanitaria, la ayuda a pequeñas y medianas empresas y a los gobiernos federales y locales, y a más de 2, 5 millones de personas apuntados al paro, etc., lo que significa en la actualidad una pesada carga que impedirá al gobierno de Biden negociar en igualdad de condiciones con sus adversarios y sus acreedores, además de los peligros de aumento inflacionario, descenso de sus ingresos internos y el recalentamiento de la economía estadunidense que , seguramente, se profundizarán durante la presente legislatura demócrata. 

De las tres grandes colosos mundiales pareciera que China está en mejores condiciones de imponerse por haber salido de la crisis pandémica mucho mejor que los demás jugadores de la geopolítica mundial tanto en su crisis social con un número irrisorio de fallecidos como de las consecuencias económico- financieras aunque se estima que haya frenado su expansionismo comercial y financiero, como se deduce en su nuevo Plan Quinquenal recientemente aprobado, marzo 2021. 

La Federación Rusa no parece haberse resentido demasiado de la tragedia viral mundial pero, al igual que su socio asiático, no han podido superar su pasado nefasto del comunismo, con debilidades estructurales de los derechos humanos, minorías étnicas, culto a la personalidad y violación de los principios fundamentales de los derechos políticos. No obstante disponen de argumentos sólidos para aspirar a liderar o compartir una parte relevante de la geopolítica mundial vinculada estrechamente de cómo la nación norteamericana supere esta severa coyuntura política, institucional, social y financiera. 

La solución del actual desequilibrio mundial que será arduamente disputado entre los tres gigantes por lograr su hegemonía a nivel planetario y/o regional, dependerá de la sagacidad de sus liderazgos nacionales, de sus capacidades de aprovechamiento de sus potencialidades totales y de su actitud para negociar la paz y la convivencia entre ellas, o permanecer en una nueva GUERRA CIBERNÉTICA POSPANDEMICA, en vez de una conflagración  mundial de consecuencias catastróficas para la humanidad. 

Para las próximas entregas nos hemos fijado los objetivos de analizar las posibilidades de la Rusia de Putin, ¿un asesino, según Biden?, de la China de Xi Jinping, con su intencionalidad de implantar una hegemonía comercial-financiera y de la Europa Unida (con la salida del Reino Unido), de ser parte relevante del juego estratégico mundial, capaces de compartir el nuevo orden internacional en concordancia con sus debilidades y argumentos, o se involucrarán en un conflicto cibernético.

Jesús Rafael González Briceño
jesusrafael768@gmail.com
@jesusgonzalezbr
Venezuela

LUIS FUENMAYOR TORO, EL ACUERDO MADURO-GUAIDÓ

Varias conclusiones se pueden extraer del acuerdo logrado recientemente entre el gobierno de Maduro y el “gobierno” de Guaidó. Y utilizo el término gobierno para definir a quienes mantienen el control de una parte de las decisiones de poder que corresponden al Estado venezolano. No estoy hablando de legalidad, ni de constitucionalidad, ni de legitimidad. Estoy refiriéndome a un hecho objetivo, que sólo pueden negar los fanáticos empeñados en que sus deseos, afectos y desafectos, son los que determinan la realidad y no al contrario, como realmente ocurre.
 
Maduro controla el territorio venezolano o por lo menos formalmente lo hace. En forma similar, controla las decisiones económicas, judiciales, legales, sociales y políticas al interior del país. Tiene por lo tanto una parte del “poder” que corresponde al Estado. Guaidó, por su parte, controla, o por lo menos formalmente lo hace, las relaciones internacionales con los países más importantes y numerosos del mundo occidental y los recursos financieros venezolanos represados en el exterior. Tiene, sin lugar a dudas, parte del “poder” que corresponde al Estado.
 
Quienes luego de largas conversaciones y discusiones llegaron al acuerdo, para usar una parte ínfima del dinero venezolano represado en la banca internacional en el pago de las vacunas del sistema “COVAX” de la OMS, se reconocieron como adversarios con poder. Ambos querían que se utilizaran las vacunas del sistema antes mencionado, pero Maduro no podía disponer de esos recursos, pues no es reconocido por quienes manejan a su antojo las finanzas mundiales. Guaidó no podía instrumentar el proceso de vacunación, pues carece totalmente de control al respecto. Negociaron, ambos ganaron y ganó el pueblo.
 
Puede no gustarles a muchos esta conclusión, pero es evidente que así fue. Ningún gobierno, el de Maduro menos, conversa y llega a acuerdos con quien no tiene nada que darle. Y Guaidó tenía la posibilidad de darlo. Ninguna oposición negocia con un gobierno que no está dispuesto a otorgar algo a cambio y Maduro estuvo dispuesto a dar su autorización, lo cual de hecho significó un punto a favor de Guaidó, al poder presentar a los venezolanos su primer logro luego de más de dos años de actuaciones erráticas.
 
Una segunda gran conclusión que se extrae de lo ocurrido es que las negociaciones y los acuerdos entre adversarios extremos son perfectamente posibles y necesarias. Se acabó, por una parte, ese cuento de que con dictadura no se negocia, que negociar es venderse y traicionar, que quienes negocian son unos alacranes, que se le está dando oxígeno a la tiranía asesina y estupideces por el estilo. Se acabó también el cuento contrario, que sólo exige prisión para los traidores a la patria, que habla de socialismo o muerte, más de muerte quizás; que califica de fascista a todos los que se le oponen e imbecilidades propias de fanáticos. El diálogo y la negociación son entonces perfectamente posibles.
 
No me voy a sumar al coro alborozado que felicita a los protagonistas de la tragedia que vive Venezuela, pues ésta continúa. Simplemente manifestaré mi acuerdo con lo actuado, pues ha triunfado por primera vez en mucho tiempo la sensatez y de la misma se beneficiarán, por lo menos eso espero, quienes viven en Venezuela en condiciones de pobreza, incertidumbre, desesperanza y tristeza, que nunca imaginé podríamos vivir. Se prendió un fósforo en la obscuridad del túnel.

Luis Fuenmayor Toro
lft3003@gmail.com
@LFuenmayorToro
Venezuela