jueves, 22 de noviembre de 2018

ACTUALIZACIÓN HOY VIERNES 23-11-2018, EL REPUBLICANO LIBERAL

  ********ACTUALIZACIÓN HOY VIERNES 23-11-2018 ********             
EL REPUBLICANO LIBERAL 
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MIBELIS ACEVEDO DONÍS, EL DESEO EN EL LABERINTO

EL REPUBLICANO LIBERAL en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 9 minutos
Sostiene el budismo que la extinción del sufrimiento depende de suprimir el deseo, de desbrozar el alma de apegos. Vivir sin desear, sin embargo, luce como una aspiración prácticamente incompatible con la naturaleza humana. Al respecto, Freud acude para darnos luces: en suerte de ineludible arreglo con la pulsión de muerte, la pulsión de vida –identificada tempranamente con la libido, la energía psíquica, el “yo deseo”– invita a la autoconservación, da piso a la existencia, entendida primero como vida biológica; aunque no sólo vida biológica, como también vislumbraría Jung. Ambas p... más »

MARIO VARGAS LLOSA, LAS “PUTAS TRISTES” DE FIDEL

EL REPUBLICANO LIBERAL en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 21 minutos
Entre los defectos de Fidel Castro no figura la disimulación. En los 45 años que lleva en el poder -la dictadura más larga en la historia de América Latina- nunca ha pretendido engañar a nadie sobre la naturaleza de su régimen ni sobre los principios en que se funda su manera de gobernar. Cuba vive bajo un sistema “comunista” (son sus palabras), que, según él, es más justo, más igualitario y más libre que las putrefactas democracias capitalistas, a las que en todos sus cacofónicos discursos el “comandante” manifiesta siempre el soberano desprecio que le merecen, y a las que les pro... más »

CARLOS BLANCO, VENEZUELA FUE UNA NACIÓN

EL REPUBLICANO LIBERAL en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 32 minutos
Venezuela es nación en desintegración. Pasado un umbral (¿lo pasamos ya?), lo que quedarán serán jirones cuyo remiendo no será pronto, ni fácil… No es una realidad amable; pero, así se perfila. Es asunto esencial para los venezolanos y, ahora también, para los que están demasiado cerca de la candela, sea por razones geográficas (Colombia, Brasil, Guyana, por ejemplo); sea por razones institucionales (EEUU, España, Reino Unido, por ejemplo). Dimensiones de la desintegración de la nación: El Estado entró en fase de disolución. El Estado, como sistema articulado de instituciones, est... más »

JUAN DE DIOS RIVAS VELÁSQUEZ, LA PERVERSIÓN DEL SOCIALISMO SXXI

EL REPUBLICANO LIBERAL en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 43 minutos
Todos los regímenes “Dictaduras rojas-rojitas” comunistas, se han caracterizado por su perversión en tratar a los pueblos, lo cual se manifiesta en hambre, malos servicios públicos, presos políticos, asesinatos de opositores, violación de derechos constitucionales, políticos y humanos. En estos pervertidos malos gobiernos los sueldos no sirven para adquirir la canasta alimentaria y menos la básica, la gente se muere por no tener atención médica y medicina, la pobreza y la miseria daña al 85% de los habitantes y la corrupción reina en toda la administración pública y los enchufados ... más »

JOSÉ ANTONIO GIL YEPES, MÁS SOBRE NEGOCIACIÓN

EL REPUBLICANO LIBERAL en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 1 hora
Maduro fue electo por mayoría de votos porque la mayor parte de los opositores se abstuvieron y porque la oposición ni tiene el poder para presionar ni tiene un solo candidato qué ofrecer Sobre el artículo de la semana pasada, “Condiciones para Negociar”, recibí comentarios o preguntas sobre algunos puntos que vale la pena profundizar. ¿Por qué en la planificación de la negociación dejé a Maduro en el cargo? Para algunos, desde un punto de vista estrictamente legal, el 10 de enero de 2019 se produce la ausencia absoluta del Presidente porque el mismo no fue electo el 20 de mayo pa... más »

TRINO MÁRQUEZ, CARABOBO EN LA CAVA DE DRÁCULA

EL REPUBLICANO LIBERAL en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 1 hora
El miércoles 14 de noviembre se perpetró el mayor atropello cometido por una gobernador electo con el voto popular contra una universidad autónoma. Se trató del asalto dirigido por Rafael Lacava contra la Universidad de Carabobo, cuando los estudiantes realizaban sus elecciones de gobierno y cogobierno universitario, luego de once años sin que se convocaran comicios porque el TSJ lo impedía. Las bandas armadas financiadas por el gobernador del estado Carabobo amenazaron y agredieron a los estudiantes opositores de las facultades 

MIBELIS ACEVEDO DONÍS, EL DESEO EN EL LABERINTO


Sostiene el budismo que la extinción del sufrimiento depende de suprimir el deseo, de desbrozar el alma de apegos. Vivir sin desear, sin embargo, luce como una aspiración prácticamente incompatible con la naturaleza humana. Al respecto, Freud acude para darnos luces: en suerte de ineludible arreglo con la pulsión de muerte, la pulsión de vida –identificada tempranamente con la libido, la energía psíquica, el “yo deseo”– invita a la autoconservación, da piso a la existencia, entendida primero como vida biológica; aunque no sólo vida biológica, como también vislumbraría Jung. Ambas pulsiones, las que alientan Eros y Tánatos, son fuentes generadoras de deseos que se interpelan y nos retan, que azuzan la voluntad o la refrenan, en una intensa dialéctica de la que no podemos sustraernos.

Somos seres deseantes, sí: hombre y deseo integran una dupla que difícilmente pueda desanudarse. Y es el deseo, la tenaz búsqueda de su satisfacción lo que, para bien y para mal, planta su decidida tiranía en nuestras vidas. Pero veamos, incluso, más allá de lo individual: eso lleva a ubicarnos en espacios de interacción donde la procura del placer se enfoca en trajinar con lo inmediato, por ejemplo, a contramano de aquellos que exigen negociar un amplio, constante y racional acomodo de nuestro deseo en relación con el de otros.

En el ámbito privado, el reino de la necesidad, ese pulso entre el básico apetito y la consecución del objeto que lo alivie quizás sea trámite menos intrincado. La dinámica de la esfera doméstica, en tanto marcada por el imperativo de garantizar el sustento para la vida, plantea una meta esencial: sobrevivir. No en balde Hannah Arendt confina a esa esfera el “Yo” biológico y psicológico; allí donde el impulso, la pasión, el sentimiento y la emoción encuentran refugio idóneo. Allí, donde el “yo deseo” nos delata, donde se le gestiona y contiene de forma indiferenciada. No ocurre otro tanto, claro, con la esfera pública, lugar donde respira la política.

Sobre la base de la pluralidad de esos hombres libres que concurren a la polis, podría decirse que la esfera pública obliga a organizar el deseo privado y lo transforma en expectativa redimensionada por lo colectivo. Ello no significa mutilar la pasión implícita en él, por supuesto, no supone exterminarla, pero sí darle un nuevo y más vasto sentido. Así, cuando la realidad del otro delimita conscientemente el propio impulso, la finitud de nuestros apetitos se vuelve una nítida certeza; es una ganancia entonces comprender que sólo hablando y actuando concertadamente, esas divergencias propias de la lucha agonal, los bríos de los muchos “yo deseantes” pueden ser aprovechados.

Pero, ¿qué pasa cuando un deseo sin traílla asalta el ámbito público? ¿Qué ocurre cuando el principio de realidad que compensa el principio de placer deja de señalar cauces y procurar equilibrios; cuando la irracional tentación por salir del curso preestablecido -el de-lirare- colapsa el entendimiento?

No hace falta mucha imaginación para adivinarlo. La de Venezuela es fotografía de esa intrusión de la lógica de lo privado en el espacio de lo público. En desmedro de la oportunidad para contactar con esa realidad “que proviene de ser visto y oído por los demás” (Arendt), la arena política es acaparada por el oscuro conflicto de las almas. Una distorsión que, gracias al pathos autoritario de Chávez, se impuso desde el poder y se esparció como un virus en el resto de la sociedad.

Inermes ante el deseo que no se cura ni se sacia si no hay forma de advertir el coto de lo real, parece que la desesperación lleva a creer que es preferible abrazar la fe ciega, sumergirnos en la elipsis y así evitar la desazón que supone hacer política. Pero es Tánatos quien acecha: no nos engañemos. En vez de organizarnos desde lo modesto y para lo posible, algunos optan por entrever milagros en otro dead-line, uno que providencialmente ahorrará sangre, esfuerzo, sudor y lágrimas y conjurará la excepcional bête noire que nos acogota. Como a uróboros adictos al espejismo, ahora el 10-E brinda nueva excusa para mordernos la cola, para desactivarnos electoralmente, para sortear la responsabilidad.

La visión de un famélico Tántalo, hundido hasta el cuello en el agua que se le vuelve esquiva, sometido al pinchazo de la fruta que se aleja de su boca, nos recuerda no obstante lo que es estar expuesto a la eterna tentación sin goce ni resolución. Pasar de ser sujetos deseantes, plenos de potencia y voluntad, a tornadizas víctimas de las ganas que nos desangran sin ton ni son, podría acabar dilapidando esas candelas tan necesarias para gestar lo nuevo. 

Nada hay tan peligroso como la crónica desconexión en tiempos de cólera, nada tan políticamente inútil. Ante ese paisaje, lo que cabe es enfrentar el dolor, ajustar la expectativa; aferrarse al hilo cierto que lanza la política, gestora de deseos, dice Remo Bodei. Los laberintos están a la orden del día, y los más intrincados son los que armamos a punta de frustraciones.

Mibelis Acevedo D.
@Mibelis

MARIO VARGAS LLOSA, LAS “PUTAS TRISTES” DE FIDEL


Entre los defectos de Fidel Castro no figura la disimulación. En los 45 años que lleva en el poder -la dictadura más larga en la historia de América Latina- nunca ha pretendido engañar a nadie sobre la naturaleza de su régimen ni sobre los principios en que se funda su manera de gobernar.

Cuba vive bajo un sistema “comunista” (son sus palabras), que, según él, es más justo, más igualitario y más libre que las putrefactas democracias capitalistas, a las que en todos sus cacofónicos discursos el “comandante” manifiesta siempre el soberano desprecio que le merecen, y a las que les pronostica que más pronto que tarde se desmoronarán bajo el peso de su corrupción y sus contradicciones internas. Es posible que Castro sea la única persona en Cuba que todavía crea esas sandeces, pero, sin duda, se las cree, y como en la isla reina un totalitarismo vertical donde el Jefe Máximo tiene poderes omnímodos y es la única fuente de la verdad, el sistema funciona en razón de semejantes convicciones, machacadas por la propaganda unidimensional ante los cubanos como si fueran axiomas revelados. (Es por esta razón que Reporteros Sin Fronteras acaba de situar a Cuba en el lugar 166, entre 167 países examinados, en lo que concierne a la libertad de prensa, es decir, en el penúltimo lugar: el último le corresponde a Corea del Norte).

El “comandante” lo ha hecho saber hasta la saciedad: como el régimen comunista cubano es superior a las democracias occidentales no va a cometer la debilidad de incurrir en aquello que le piden sus enemigos con el solo propósito de destruirlo; es decir, admitir elecciones libres, libertad de expresión, de movimiento, tribunales y jueces independientes, alternancia en el poder, etcétera. Esas instituciones y prácticas son cortinas de humo para la explotación y la discriminación que proliferan en las democracias “social-pendejas”, exquisita vulgaridad inventada por Castro para denigrar a los socialistas y socialdemócratas que lo critican y que son blancos constantes de sus diatribas.

¿Para qué convocaría a elecciones libres un Gobierno que cuenta con el 99,9% de la población? ¿Para sembrar la división y el caos en esa hermosa unidad sin cesuras que garantiza el régimen de partido único? Quienes piden aquellas consultas electorales, libertad de partidos políticos, prensa independiente y cosas por el estilo, quieren, en verdad, abrir las puertas de Cuba a los imperialistas empeñados en acabar con las grandes “conquistas sociales” de la revolución -¿debe incluirse entre ellas el haber enviado a los homosexuales junto a delincuentes comunes a campos de concentración en los tiempos de las UMAP?- y convertir a Cuba en una democracia neocolonial, seudoliberal y social-pendeja, donde once millones de cubanos serían explotados sin misericordia por un puñado de capitalistas yanquis.

Quienes piden semejantes cambios son, pues, pura y simplemente, enemigos de la revolución, agentes del imperialismo y deben ser tratados como delincuentes, criminales y traidores a su patria. No son meras palabras de un paranoico megalómano sino una convicción respaldada por 45 años de conducta rectilínea, en los que Castro no ha dado un solo paso atrás en semejante profesión de fe. Ésta se ha visto materializada una y otra vez en encarcelamientos masivos, una represión sistemática, brutal y desproporcionada ante la más mínima manifestación de disidencia, con escarmientos periódicos en los que reales o supuestos desafectos al sistema son juzgados y condenados, en juicios tan grotescos como los que se llevaban a cabo en la URSS estalinista, a penas feroces, entre las que, de cuando en cuando, figura la pena de muerte por fusilamiento. Que, a pesar de esta política de terror sistemático y desprecio supino a los más elementales derechos humanos, haya todavía cubanos, como el poeta Raúl Rivero y sus 75 compañeros encarcelados en la última oleada represiva, que, desde las cárceles donde se pudren en vida, mantengan vivo el espíritu de resistencia, no sólo asombra y llena de admiración: además, demuestra, como lo ha subrayado Vaclav Havel en el homenaje que acaba de rendirles, que aun dentro de las sociedades devastadas por el oscurantismo más prolongado y el horror más abyecto, la libertad encuentra siempre la manera de sobrevivir.

Que este régimen tenga todavía partidarios en el extranjero no tiene por qué sorprender. El odio que la sociedad abierta inspira a muchos, los lleva a preferir una dictadura “social” a la democracia, y por eso deploran la caída del muro de Berlín, la desintegración de la Unión Soviética y la conversión de China Popular a un capitalismo desenfrenado y “salvaje” (aquí sí es admisible la expresión). Desde luego, yo creo que quienes piensan así están equivocados y que muchos de ellos no podrían soportar 24 horas en una sociedad como la que defienden, pero, si creen eso, es lógico que se muestren solidarios de una satrapía que encarna sus propios ideales y aspiraciones políticas. Hay que reconocerles cuando menos una indiscutible coherencia en su proceder.

No la hay, en cambio, sino incongruencia y confusión, en que intelectuales, políticos o Gobiernos que se dicen democráticos, sirvan los intereses de un régimen que es el enemigo número uno de la cultura democrática en el hemisferio occidental y, en vez de mostrarse solidarios con quienes en Cuba van a prisión, viven como apestados, sometidos a toda clase de privaciones y tropelías o dan sus vidas por la libertad, apoyen a sus verdugos y acepten jugar el lastimoso papel de celestinas, cómplices o “putas tristes” -para emplear un término de actualidad- de la dictadura caribeña.

Es un insulto a la inteligencia pretender hacer creer a cualquiera que haya seguido someramente el casi medio siglo del régimen cubano, que la manera más efectiva de conseguir “concesiones” de Castro es el apaciguamiento, el diálogo y las demostraciones de amistad con su tiranía. Y lo es porque el propio Fidel Castro se ha encargado de manera contundente de disipar cualquier malentendido al respecto: él tiene cómplices, cortesanos, sirvientes, que colaboran con su política, sus designios, su Gobierno y su modelo político-social, de los que ninguno de sus numerosos “amigos” lo ha hecho apartarse jamás un milímetro. Es verdad que, a veces, algunos de esos politicastros convenencieros o intelectuales en pos de credenciales progresistas que van a retratarse con él y a echarle una mano publicitaria reciben como regalo un preso político, que luego exhiben como coartada de su duplicidad. Pero esa asquerosa trata de presos en vez de mostrar un ablandamiento del régimen -que reemplaza casi en el acto los que regala por otros nuevos- es más bien una señal flagrante de su vileza e inhumanidad.¿A qué viene todo esto? A que el Gobierno español de Rodríguez Zapatero acaba de hacer pública su intención de apandillar un movimiento para que la Unión Europea, que, luego de los fusilamientos y condenas a los 75 disidentes había optado por una política de firmeza ante la dictadura cubana mientras no hubiera progresos reales en la isla en materia de derechos humanos, rectifique y opte más bien por el acercamiento y el diálogo amistoso con Castro, es decir, por cortar toda vinculación y apoyo a sus opositores. El pretexto es que la “firmeza” no ha dado resultados. ¿Qué resultados han dado la cobardía y la complicidad con el régimen cubano de todas esas “democracias” latinoamericanas que votan a favor de Fidel Castro en las Naciones Unidas y multiplican los gestos de simpatía hacia él con el argumento de que es preciso ser solidarios con “el hermano continental”? Por lo menos la política adoptada por la Unión Europea ha enviado un mensaje claro a los millones de cubanos que no pueden protestar, que no pueden votar, que no pueden escapar, de que no están solos, que no han sido abandonados y que las democracias occidentales están moral y cívicamente de su lado en ese combate en el que, como ayer los checos, los polacos, los rumanos, los rusos y tantos otros, tarde o temprano vencerán.

Acercamiento, diálogo, diplomacia privada, son eufemismos mentirosos para lo que, hablando claro, es una abdicación vergonzosa de un Gobierno que, en clara contradicción con sus orígenes y su naturaleza democrática, decide contribuir a la supervivencia de una dictadura tan ignominiosa e innoble como la de Franco, y una puñalada trapera a los innumerables cubanos que, como los millones de españoles bajo el franquismo, sueñan con vivir en un país sin censuras, ni torturas, ni fusilamientos, y sin la asfixiante monotonía del partido único, la mentira, la vigilancia y el caudillo omnipresente.

Lo más criticable en este caso es que, los gobernantes españoles, a menos de haber caído víctimas de una súbita plaga de angelismo pueril, saben perfectamente que el cambio que proponen a sus aliados europeos respecto a Cuba, si prosperara, no conseguiría la más mínima apertura del régimen, y, por el contrario, echaría a sus desfallecientes pulmones una bocanada de oxígeno (Fidel Castro ya dijo públicamente que la decisión del Gobierno español era “la correcta”). ¿Por qué lo hacen, entonces? Para consumo interno. Para probar que también en este ámbito hay una ruptura radical con el Gobierno anterior. O para dar un poco de aliento a esos remanentes tercermundistas y estalinianos que, aunque felizmente muy minoritarios, existen todavía dentro del socialismo español, muy rezagado en este respecto de sus congéneres británicos, franceses, alemanes y nórdicos, donde los socialistas no tienen el menor complejo de inferioridad frente al Gulag tropical cubano.

Mi esperanza es que esos magníficos “social-pendejos” europeos impidan que esta iniciativa lamentable se materialice. Ella debe ser denunciada y combatida como lo que es: un acto demagógico e irresponsable que sólo servirá para apuntalar a la más longeva dictadura latinoamericana. No debemos permitir que la España democrática, moderna y europea que en tantos sentidos es un ejemplo para América Latina se convierta en la “puta triste” de Fidel.

CARLOS BLANCO, VENEZUELA FUE UNA NACIÓN


Venezuela es nación en desintegración. Pasado un umbral (¿lo pasamos ya?), lo que quedarán serán jirones cuyo remiendo no será pronto, ni fácil… No es una realidad amable; pero, así se perfila.

Es asunto esencial para los venezolanos y, ahora también, para los que están demasiado cerca de la candela, sea por razones geográficas (Colombia, Brasil, Guyana, por ejemplo); sea por razones institucionales (EEUU, España, Reino Unido, por ejemplo).

Dimensiones de la desintegración de la nación:

El Estado entró en fase de disolución. El Estado, como sistema articulado de instituciones, está en bancarrota. La demolición de Pdvsa, la implosión del Banco Central y la evaporación de la Fuerza Armada, son evidencias. En el caso de la FAN hay una cabeza que aparece como Alto Mando pero que ni es alto, por la degradación; ni es mando, porque el cuerpo del cual es azotea se deshizo. Hay militares; pero no hay institución militar. El TSJ ilegítimo es un bufete nauseabundo; el Gabinete Ejecutivo es una ficción de administración; la Asamblea Constituyente es un adefesio, que ni siquiera consulta a sus miembros; el CNE dejó de existir hace años.

No hay control sobre el territorio. Lo que dicen los libros de geografía es ficción. Los grupos irregulares Farc, ELN, Fuerzas Bolivarianas de Liberación, bandas criminales que controlan la minería, narcotráfico, “pranes” que dirigen redes de bandoleros desde las cárceles, colectivos paramilitares, actividades ilegales de los cuerpos de “inteligencia” política y militar, han pasado a apropiarse de franjas crecientes del territorio. Venezuela a veces limita con Colombia, Brasil y Guyana, y las más de las veces con el bandidaje expandido por la superficie de lo que una vez fue Venezuela.

Población en estampida. Entre los que han migrado a otros países y los que desean hacerlo, el país se encoge en su valor más importante: su gente. Los venezolanos vivimos en trance de despedida: los que se van, los que se fueron, los que se quieren ir. Es un país con el pañuelo en banderola, en el puerto, en la despedida o en la espera, con los ojos aguados, con familias que cuajan en el espacio virtual, por WhatsApp o por Skype.

Tejido social, económico, social, político y cultural desintegrado. Las redes de distribución de bienes y servicios, interrumpidas. Los lazos sociales lastimados. El mundo de la política de allá y de acá, intoxicado. La cultura en manos de perseguidos, héroes y sobrevivientes de la hecatombe.

Venezuela no aguanta. Puede que el Mal triunfe para siempre, pero la Nación ya no existirá.

Carlos Blanco G.
@carlosblancog

JUAN DE DIOS RIVAS VELÁSQUEZ, LA PERVERSIÓN DEL SOCIALISMO SXXI


Todos los regímenes “Dictaduras rojas-rojitas” comunistas, se han caracterizado por su perversión en tratar a los pueblos, lo cual se manifiesta en hambre, malos servicios públicos, presos políticos, asesinatos de opositores, violación de derechos constitucionales, políticos y humanos. En estos pervertidos malos gobiernos los sueldos no sirven para adquirir la canasta alimentaria y menos la básica, la gente se muere por no tener atención médica y medicina, la pobreza y la miseria daña al 85% de los habitantes y la corrupción reina en toda la administración pública y los enchufados se la ingenian y se les permite el robo, tráfico de influencia, matraca y abusos de todo tipo; para colmo y desgracia surgen mafias de testaferros “malos y vivitos empresarios” que se apoderan de fortunas en dólares y monedas de uso común, las cuales “en grandes cantidades” van a parar a cuentas de jerarcas y familias socialistas en paraísos fiscales y EEUU.

Para desarrollar el concepto de estructura perversa, se utiliza la mentira y el engaño por cadenas de comunicación (TV y radio, etc.), los presidentes se aferran a inventos “repetitivos” donde atacan a adversarios “nacionales e internacionales” y se regodean atribuyéndose logros, éxitos y aciertos falsos con el fin de robustecer su ego y posición de líder. Esta pervertida conducta da malos ejemplos a los jóvenes, estudiantes y pobres sin educación y son esenciales para someter al pueblo, militares e ingenuos. Sirven para consolidar el concepto de estructura perversa del comunismo típico, a saber, con la renegación y el desafío.

La indagación bibliográfica abre el espectro de conceptos, cuya especificidad también permite comprender mejor la perversión. Junto a la renegación se considerará el mecanismo de escisión del yo y junto a la noción de desafío, el concepto de transgresión. La Renegación y la Escisión del Yo de acuerdo al Diccionario de Psicoanálisis de Laplanche y Pontalis (1993), la renegación aparece definida de la siguiente manera: Término utilizado por Freud en un sentido específico: modo de defensa consistente en que el sujeto rehúsa reconocer la realidad de una percepción traumatizante, principalmente la ausencia de pene en la mujer. Este mecanismo fue especialmente invocado por Freud para explicar el fetichismo y la psicosis. Este mecanismo sólo toma su sentido del hecho de surgir en el mismo momento en que debería efectuarse para el sujeto la transformación estructural que se designa como “asunción de la castración”. Para comprender mejor lo que implica asumir la castración y, consecuentemente, cómo opera la renegación en la lógica perversa, resulta ilustrativo abordar la complejidad de este proceso a la luz de los aportes lacanianos acerca del complejo de Edipo y los veinte años del Chavismo/Madurismo.  

El complejo de Edipo o de mediocridad se posesiona en los comunistas en un primer momento, cuando el niño, el militante o pueblo sale de la fase identificadora del estadio del espejo de engaños, aún “sigue manteniendo una relación de indiferenciación cercana a la fusión con su madre “la Patria Libre en que vivió”  lo que significa que el niño y pueblo tratan de “identificarse con lo que él supone que es el objeto de su deseo para vivir bien”  Esta identificación que es natural en el ser humano, a través de la cual el deseo del niño se hace deseo del deseo de la madre, se ve facilitada, e incluso inducida, por la relación de inmediatez entre la madre y el hijo aunque sea por los cuidados y satisfacción de necesidades.

Toda Venezuela está repudiando la perversión, los dogmas totalitarios y las doctrinas exóticas… y pidiendo que llegue la paz, el trabajo y bienestar con un gobierno democrático de UNIDAD NACIONAL
.
 La proximidad de estos cambios evolutivos es posible si todos asumimos una conducta democrática, unitaria y honesta… sin agendas ocultas, intereses de cogollos, partidos maniobreros y politiqueros, compromisos ocultos con los empresarios corruptos y bandidos “Bolichicos, etc.” y grupos trasnacionales con agallas y malos procederes.  Por lo tanto, aquí lo que importa es el niño, adulto mayor, el empresario creativo y honesto, se debe acabar con la pobreza e impulsar la creatividad social con “un COGOBIERNO Y DESARROLLO SOCIAL” que posibilite un nuevo paradigma de desarrollo sostenido, capacitado y sustentable para todos los habitantes de la Venezuela petrolera, rica en minerales y tierras cultivables y turísticas. 

Ya no debemos aceptar caudillos en gobernaciones, alcaldías, cargos públicos y militares. 

Esto es un reto humano, social y político para beneficio de todos los venezolanos.  

Debemos buscar y construir UNA UNIDAD NACIONAL ALTERNATIVA.

Juan de Dios Rivas Velásquez
rvjuandedios@gmail.com

JOSÉ ANTONIO GIL YEPES, MÁS SOBRE NEGOCIACIÓN


Maduro fue electo por mayoría de votos porque la mayor parte de los opositores se abstuvieron y porque la oposición ni tiene el poder para presionar ni tiene un solo candidato qué ofrecer 

Sobre el artículo de la semana pasada, “Condiciones para Negociar”, recibí comentarios o preguntas sobre algunos puntos que vale la pena profundizar.

¿Por qué en la planificación de la negociación dejé a Maduro en el cargo? Para algunos, desde un punto de vista estrictamente legal, el 10 de enero de 2019 se produce la ausencia absoluta del Presidente porque el mismo no fue electo el 20 de mayo pasado debido a que esa elección fue convocada inconstitucionalmente por la Asamblea Constituyente y no por el CNE, el órgano constitucionalmente designado para tal convocatoria. Si bien el punto es válido, legalmente, políticamente la realidad es otra. Maduro tiene el apoyo militar, fue electo por mayoría de votos porque la mayor parte de los opositores se abstuvieron y porque la desarticulación de la oposición no permite que se cumpla aquello de que las diferencias internas deben ser resueltas internamente porque dicha oposición ni tiene el poder para presionar ni tiene un solo candidato qué ofrecer.

¿Por qué propuse la disolución de la Asamblea Constituyente si el chavismo no lo va a aceptar? Dada la máxima concentración de poder en el oficialismo y la máxima dispersión de la oposición, la negociación no está planteada para ganarla, lo cual es casi imposible, sino para exponer la índole no democrática del gobierno en puntos de máxima relevancia política y para que sienta las amenazas de más aislamiento y sanciones. Sin embargo, reconozco que en este punto se puede ceder. Otra vez, más político sería exigir que la Asamblea Constituyente se concentre en formular una nueva Constitución y que la misma se someta a referendo popular, en los términos constitucionales vigentes.

¿Y si el gobierno llegara a ceder en la agenda propuesta (nombramiento de 13 magistrados, 2 rectores, fiscal, contralor y defensor y juramentación del Presidente, todo esto por la AN, saldría Maduro? No, lo que sí dejaría de existir es su régimen de Autoritarismo Hegemónico porque resurgirían el pluralismo y la separación de poderes, lo cual ayudaría enormemente al propio gobierno a dejar de ser su principal enemigo.

José Antonio Gil Yepes
@joseagilyepes

TRINO MÁRQUEZ, CARABOBO EN LA CAVA DE DRÁCULA


El miércoles 14 de noviembre se perpetró el mayor atropello cometido por una gobernador electo con el voto popular contra una universidad autónoma. Se trató del asalto dirigido por Rafael Lacava contra la Universidad de Carabobo, cuando los estudiantes realizaban sus elecciones de gobierno y cogobierno universitario, luego de once años sin que se convocaran comicios porque el TSJ lo impedía.

            Las bandas armadas financiadas por el gobernador del estado Carabobo amenazaron y agredieron a los estudiantes opositores de las facultades de Ciencias Biomédicas, de Ciencias Jurídicas y de Ciencias Económicas. Los provocadores se llevaron algunas urnas con las papeletas de votación. Más tarde Lacava, apoyado en los resultados proporcionados por una “comisión electoral” sacada de su  bolsillo, anunció unos datos en los que daba ganadora a Jéssica Bello, candidata del oficialismo a la presidencia de la  Federación de Centros Universitarios. Lacava ni siquiera tuvo la delicadeza de valerse del  secretario juvenil del Psuv en el estado, o de algún otro estudiante del partido, para proclamar el fraude. Con su habitual desparpajo y sin que le correspondiera intervenir en ese escenario, anunció unas cifras falsas y trató de imponerse a lo Jalisco: arrebatando.

La desmesura no le funcionó. Los estudiantes democráticos lograron derrotar la violencia y culminar el proceso con una amplia participación. La Comisión Electoral legítima, la electa previamente por los propios estudiantes, declaró  vencedor con una cómoda mayoría a Marlon Díaz, el candidato de la unidad opositora. Lacava recibió una felpa en el territorio donde se cree caudillo.

El asalto a la Universidad de Carabobo representa un eslabón más en el arrinconamiento al que han sido sometidas las organizaciones independientes de la sociedad civil y en la larga cadena de agresiones contra las universidades autónomas. La UCV, la LUZ, la UDO y la ULA llevan casi dos décadas sufriendo el cerco político y financiero impuesto por el régimen. Como los maduristas no han podido someter a nuestras casas de estudio, la estrategia ha consistido en atacarlas con colectivos armados o grupos paramilitares. La UCV ha sido objeto del  ensañamiento del gobierno. El 28 de marzo de 2001 un comando de asalto  tomó la sede del Consejo Universitario y se mantuvo allí, con el apoyo de Miraflores, por espacio de dos meses, hasta que la comunidad universitaria, hastiada del allanamiento, decidió sacar a los facinerosos a empellones. En represalia, ese mismo grupo constituido en el movimiento 28M, tomó varias veces la sede del rectorado, quemando los archivos y material de oficina, y poniendo en peligro la vida de los empleados de las dependencias centrales. Para cometer sus tropelías impunemente, nunca han contado con la solidaridad universitaria, pero sí con el respaldo de la cúpula del régimen.
La violencia física se ha combinado con la asfixia financiera. 

Las universidades sobreviven en el nivel de subsistencia. Los profesores y los estudiantes parecen náufragos. Los chavistas optaron por auxiliar a Cuba, Nicaragua y Bolivia, condenando a la miseria a las universidades autónomas, y, también, a las bolivarianas. Todas vegetan en medio de la ruina.

Lo ocurrido en Carabobo llama más la atención porque míster Lacava, a pesar de utilizar como símbolo a Drácula, el personaje de Bram Stoker, pretende  proyectar una imagen de frescura y renovación alejada de la ortodoxia de esa izquierda que se desayuna con escorpiones y cena con víboras. El excéntrico gobernador busca separarse de la ortodoxia espartana de los viejos izquierdistas. Su estilo resulta de un desenfado inusual entre los madurista, que parecen llevar la vida como  su líder: en do de pecho.

Lacava se ha proyectado como un posible puente entre el oficialismo y la oposición. Una bisagra que permita buscar una salida concertada a la fenomenal crisis global que sufre el país. El mandatario regional aparece asociado con el grupo Boston, al que  perteneció Maduro. Este grupo logró que estuviese recientemente en Venezuela  el senador Bob Corker, experto en negociaciones, y que se hablara de restablecer el diálogo entre la oposición y el gobierno, con el fin de buscar una fórmula que posibilite acercar los dos extremos.  

Lacava, sin adoptar poses de negociador engreído, ha estado coqueteando con la posibilidad de actuar como enlace. Sus más entusiastas seguidores han dicho que hasta podría ser el candidato para presidir una eventual transición, que facilite salir de Maduro sin que el oficialismo sufra los traumas de una ruptura abrupta y explosiva.

Con su comportamiento, podría decirse hamponil, Lacava dinamitó esa ruta. Perdió todos los créditos que le hubiesen avalado para ser una ficha confiable para la oposición en un hipotético diálogo con el gobierno. El gobernador mostró su perfil más agresivo o, como él diría, exhibió sus colmillos más afilados: los de Drácula. Lamentable, porque las negociaciones siempre requieren de personajes respetados y creíbles para todos los bandos.

Trino Márquez
@trinomarquezc