martes, 22 de marzo de 2016

NOEL ÁLVAREZ, HERMANDAD PROCRASTINADA

Muchas noches me he desvelado reflexionando sobre cuándo perdimos el rumbo de hermandad que era el distintivo de todos los venezolanos.  Un mal día se posicionó en Venezuela una conducta que nos era ajena: el odio social, político y económico. Despertamos aborreciéndonos unos a otros, por la forma de pensar o de vestir y abandonamos el proyecto de amistad y respeto que veníamos construyendo desde hace muchos años.

Considero que debemos desandar nuestros pasos y recomenzar a construir una línea de pensamiento incluyente, donde todos seamos importantes. Un proyecto que no discrimine por la forma de pensar, el color de la piel, el género, ni por la condición social. Se trata de una especie de “Ubuntu Venezolano,” pensamiento incluyente que ayudó a la reunificación de Sudáfrica y contribuyó a superar el odio racial entre compatriotas, un proyecto que se afinque en los aspectos que nos unen como nación y que minimice aquellos que nos separan como individuos. Algunos pensarán que será una misión imposible, debido a los enfrentamientos acaecidos en los últimos años. Permítanme recordarles dos cosas, aquí no tenemos  fanatismos religiosos ni tampoco discriminación racial,  por lo tanto, la mitad de la tarea ya está hecha.

Debemos partir de un consenso fundamental,  todos somos venezolanos y por tanto, tenemos iguales deberes y gozamos de los mismos derechos. En razón de eso, nadie podrá exigirle a otro que si no está de acuerdo con su propuesta, debe abandonar el país. Hace tiempo a mí me lo hicieron y reconozco que,  aunque me dolió mucho, superé la tentación de caer en el error de cobrar ojo por ojo, porque el país demanda otro tipo de actuaciones. Tampoco se trata de que una mayoría circunstancial le imponga sus criterios a una minoría, también circunstancial, porque esos vientos fueron los que  trajeron estas tempestades. No me refiero a pactos que permitan  impunidad, se trata  del respeto a los derechos humanos y el restablecimiento del Estado de derecho.

Narro dos casos que van en vía contraria a la tolerancia entre compatriotas; una persona muy querida por mi me dijo que se sentía defraudada porque vio a los diputados de la oposición conversando con los oficialistas. Le respondí que en un país democrático, esa debería ser la regla y no la excepción. Hace algunos días coincidí en una radio con un militante chavista, nos tomamos una foto y la publicamos. Ardió Troya, algunos opositores me querían despellejar vivo. Para avanzar por el camino de la reconciliación, debemos aceptar que no todos los chavistas son malos y en este lado, todos no son blancas palomas.

Noel Alvarez
noelalvarez14@gmail.com
“Gente” Generación Independiente
@alvareznv
@beanavas
Caracas - Venezuela 

BEATRIZ DE MAJO, NEGOCIOS QUE ARRANCAN CON MAL PIE, CHINA HOY

Desde antes de las elecciones argentinas, el Presidente Mauricio Macri había prometido a sus connacionales que al ganarlas haría revisar todos los acuerdos que había sido firmados entre la Argentina de Kirchner, la China de Xi y la Rusia de Putin. Sus inicios como Jefe del Estado han sido exigentes y su base de apoyo institucional frágil, así que ello puede ser la explicación de que su promesa de revisión de tales compromisos financieros no se cumpliera en las primeras semanas o que incluso no se cumplan en los primeros meses de su gestión.

Sin embargo, tendrá que llegar el momento en que tocará al gobierno entrante revisar todos y cada uno de los acuerdos que amarraron a la Argentina con terceros durante los últimos meses de la Administración Kirchner y será esa la hora en que se haga la luz sobre el género de pactos que atan al país del sur con la China de Xi Jin Ping y con Rusia por igual.

El contrato que firmó el Gobierno con China, entre gallos y medianoche, faltando días apenas para las elecciones que determinaron un cambio muy trascendente en la Argentina, contempla la construcción de dos centrales nucleares por un costo de US$ 15.000 millones financiadas por el país asiático y a ser pagadas en 18 años. Hablamos de operaciones financieras monumentales que tendrán un peso muy significativo en las finanzas de la nación austral por un número importante de años y una dependencia tecnológica sustantiva de los proveedores.

No es necesario resaltar la inconveniencia del lado chino de embarcarse en una macro-.operación de esta naturaleza y tamaño, que afecta todo el Plan Nuclear del país de las Pampas, ni lo arriesgado de contratar con un gobierno a punto de fenecer -el de Cristina Kirchner- un proyecto en el que están involucradas tecnologías que podrían ser seriamente cuestionadas por quien les toque ejecutar el proyecto más adelante. No es ésta una actitud ética de parte de ninguno de los dos lados contratantes.   

Pero ya es conocido el interés que el gigante de Asia en dejar una huella profunda en cada sector de actividad de los países más importantes del subcontinente americano.   Y la Argentina de los Kirchner encontró como ligar tales intereses estratégicos de la gran potencia con las conveniencias de su gobierno.

A estos acuerdos se les suman otros como la estación espacial en Neuquén que está construyendo China para avistaje lunar. Este otro proyecto tiene una exención impositiva por 50 años, la contraparte china es militar y tiene unos cuantos anexos secretos.

Del texto de estos convenios es poco lo que sabe por la naturaleza de los temas que involucra, pero por estas mismas razones es imperativo que más temprano que tarde, el nuevo gobierno pueda examinarlos con todo detenimiento.

En todo caso es un juego peligroso –por no decir sospechoso- el de concretar y rubricar a troche y moche compromisos que pudieran tener visos de inconstitucionalidad, lo que en cualquier momento puede salir a la luz y generar una fricción de mayor porte o pérdidas importantes para alguno o para los dos lados de la ecuación. Todo ello sin hablar del eventual favorecimiento que pudiera existir hacia las empresas argentinas que son las contrapartes nacionales de estos proyectos nucleares.

Beatriz De Majo
bdemajo@gmail.com
@beatrizdemajo
Miranda - Venezuela 

ASDRÚBAL ROMERO M., LA RENUNCIA ES UN ASUNTO SERIO

Me refiero, como casi seguramente debieron suponerlo, a la renuncia del Presidente. En cualquier país del mundo, ese asunto sería tratado con extrema seriedad. Las razones y argumentos que sus proponentes, como justificación del atrevimiento a plantearles a los pobladores de ese país un forzoso acortamiento del período presidencial, tendrían que estar enraizadas en circunstancias de extrema gravedad para cuya solución el presidente, en cuestión, representaría un obstáculo.

Creo, sin ningún género de duda, que precisamente este es el escenario al cual ha arribado nuestra querida Venezuela. Una situación de gravedad acumulada y sistémica sin parangón, en la que todos los males parecieran estar conectándose entre sí para reforzarse viciosamente, y Maduro, un presidente que no puede, ni quiere, ni sabe cómo iniciar el proceso tendiente a sacarnos de tan dantesco atolladero. La petición de su renuncia está perfectamente justificada. Pero no creo que ella se le esté proponiendo al país con la seriedad debida.
Ya en varias oportunidades, encontrándome fuera del país, diversos interlocutores me han transmitido lo muy llamativo que les resulta que los venezolanos, pasando por todas las penurias que este régimen nos ha hecho pasar, salgamos a protestar en su contra participando en manifestaciones que, siempre, incorporan elementos festivos en ellas. Más que manifestaciones de protesta parecen verbenas pachangosas, lo cual se ha convertido en un rasgo muy sui géneris de nuestra forma de manifestarnos en contra de un régimen que nunca ha ocultado sus ambiciones totalitarias.
Planteado ya en la palestra mediática el tema de LA RENUNCIA, el primer evento político de masas donde se verbaliza reiteradamente tan delicada petición es un concierto musical. Por muy atrayentes que pudieran ser para el público venezolano las estrellas del concierto -una de ellas: con un carisma político exaltado por una valiente intervención en la Asamblea Nacional como joven artista con éxito internacional-, debemos preguntarnos si no se corre el riesgo de banalizar una propuesta política que debería ser tratada con toda la seriedad y solemnidad que corresponde.
No se trata de subestimar el poder comunicacional de un evento como el que referimos, de cara a su potencialidad de masificar un mensaje que se desea sea internalizado como una necesidad por todos los estratos poblacionales, el punto que pretendo resaltar: es que ese evento debería haber sido parte de una campaña comunicacional continuada que tuviese su iniciación en otro evento originario de mayor significancia política. Es decir: le queda a uno la sensación que ese concierto era el “después” de un “antes” que nunca se produjo.
La misma sensación la tuve al escuchar el discurso de Henry Ramos Allup en el marco de la convocatoria relativamente poco exitosa de la MUD del sábado 12M. “Maduro, chico, renuncia, ya tú no debes estar allí”. Demasiado coloquial para la majestad de su cargo y para la trascendencia del pedimento que se desea transmitir. El contenido del mensaje y la forma como se están trasmitiendo no se corresponden. Queriendo hacer más popular el mensaje, se está corriendo el riesgo de que el formato de transmisión genere un ruido en la comunicación tal, que impida el procesamiento del mensaje por parte de los receptores con la importancia que amerita.
¿Por qué? Porque la renuncia de un presidente es un asunto muy serio, requiere de una contundente explicación que no se ha dado.  ¿Acaso en las circunstancias de esta profunda crisis en la que vivimos se requieren mayores explicaciones de por qué la renuncia de Maduro es el primer paso necesario para activar el proceso de cambio? Por la atmósfera comunicacional cruzan diariamente cientos de mensajes que evidencian esa necesidad, pero aun así, se requiere el “evento síntesis”: en el que se le presente al país un documento bien elaborado sobre lo que ocurrirá en el país si no se produce un inmediato cambio de rumbo y cómo Maduro se ha convertido en un obstáculo para que ese viraje se produzca. Este es el evento originario al que me refería anteriormente.
 Imagino que del trabajo que han realizado los diputados de la bancada opositora, se deben haber recabado los datos e insumos necesarios para la elaboración de ese documento. Es lo que se desprende de escuchar los discursos que se producen en las sesiones de la Asamblea Nacional, se ha avanzado mucho en la tarea, pero se requiere el impulso de sintetizar todo ese esfuerzo y convertir su presentación al país en el pistoletazo de arranque de una estrategia política acometida con convicción.
¿Quién comunica la necesidad de LA RENUNCIA en el evento originario? Pregunta interesante. Si tuviésemos un líder unificador, él sería la personificación de la respuesta. Capriles lo fue en su momento, pero se fue a la Gobernación. Luego, Leopoldo, como líder que tuvo la visión de toda la dinámica destructora que se ensañaría sobre el país como consecuencia del inminente fracaso del modelo y que, con LA SALIDA, quiso librarnos de toda esta tragedia innecesaria. Pero ahora está preso y muy triste es reconocer que el Régimen ha tenido éxito en su progresivo constreñimiento a un rol pasivo –aunque cada día el latido de su mensaje incremente su sonoridad-. De allí que yo haya insistido en la “foto”, como metáfora de un evento de visualización de un liderazgo colectivo hablándole a la nación e inspirando credibilidad en la mayor parte de sus pobladores.
Sobre la primera “foto” que propuse en un artículo anterior publicado en este blog, “La Renuncia en una Foto” (ver http://quepasaenlauc.blogspot.com/2016/02/no-hay-tiempo-para-mas-espera-la.html), debo reconocer que fue un tanto vapuleada en comentarios que se me hicieron personalmente, pero un interlocutor me sugirió otra  foto: Todos los diputados integrantes de la bancada democrática, con el Presidente de la Asamblea Nacional a la cabeza, hablándole al país. Su sugerencia la fundamentó con la siguiente interrogante: ¿Quiénes mejor que ellos, que vienen todos de un reciente trabajo político en sus respectivos circuitos que les dio el triunfo, para representar al país en toda su geografía?
¡Esta es la foto! Que no es importante por sí misma, sino como la oportunidad de dirigirse a todos los venezolanos para explicarles porque es necesaria la renuncia del Presidente, con la solemnidad que impone la trascendencia de una decisión que le ahorrará al país más tragedia y dolor. Es la oportunidad para una convocatoria del poder soberano residente en el pueblo. ¡Hecha con convicción! No como se está haciendo ahora, con la displicencia de quienes dan la sensación de que acceden a esta seria petición, simplemente, para satisfacer a una fracción de las fuerzas democráticas, pero que, realmente, no creen que esa sea la alternativa para alcanzar el tan ansiado cambio de gobierno. Maduro no va a renunciar, piensan, aunque no todos lo digan, y desestiman el poder del pueblo en la calle.
Es inevitable que sea reiterativo, y me disculpan,  en el tema del tiempo del que disponemos. Si incorporamos a esa variable en el análisis; si nos ubicamos en el curso de este proceso de descomposición que penetra y carcome todas las áreas del quehacer nacional, posamos nuestra mirada hacia el pasado para apreciar su velocidad de propagación y, luego, hacia el futuro para internalizar la inminencia de una tragedia,  nos llenaremos de la convicción que LA RENUNCIA es la única alternativa sensata de que disponemos. Hace falta esta convicción  y la obligada fundamentación que sustente el pedimento, presentada con la debida consideración de estilo, y ¿el pueblo responderá? Pregunta también obligada, porque no está respondiendo y esto debería constituir señal roja de alarma para quienes promovemos el cambio de gobierno. Ya no me atrevo a responderla, pero es nuestro deber intentarlo: procesar políticamente LA RENUNCIA con toda la seriedad que amerita.

Asdrubal Romero
asdromero@gmail.com
@asdromero

Madrid – España

HUMBERTO SEIJAS PITTALUGA, WINSTON IS BACK!

Mientras más lo leo, más me convenzo de que, por el dominio del lenguaje, la precisión de sus comentarios y la elegancia que derrochaba en sus palabras, Winston Churchill está a la altura de los más señeros hombres de letras de Inglaterra: Shakespeare, Gibbon, Eliot, Scott.  Su narrativa es poderosa; su prosa, impecable, refinada y airosa.   Ya pasados tantos años de su muerte no debiera haber quien crea —como muchos lo supusieron en su tiempo— que el Nobel de literatura que le concedieron en 1953 fue algo regalado a alguien que estaba de moda, aunque ya sin poder político.  Otros, pensaban que se lo habían otorgado por los discursos que pronunció entre 1939 y 1945, que sirvieron para mantener unido y luchando al pueblo y las fuerzas armadas del Reino Unido.  En verdad son piezas impecables, pero desde “My Early Life: A Roving Commission” —donde narra sus aventuras en el Sudán, como oficial de la fuerza británica que puso fin a la rebelión de los derviches y en Suráfrica como corresponsal y prisionero de guerra en el conflicto con los Boers—, pasando por “The River War” y hasta los seis volúmenes de “The Second World War”, lo hicieron más que merecedor del premio.

Empleo como título, el texto enviado con regocijo por el Alto Mando Naval británico a todas la flota cuando Churchill fue nombrado nuevamente Primer Lord del Almirantazgo al comienzo de la Segunda Guerra Mundial (ya había ejercido ese cargo durante la Primera Guerra).  Y lo empleo porque ya algunas veces he escrito sobre él. En uno de mis artículos glosé lo que él relató de su desempeño como teniente de lanceros en la batalla de Omdurman, una de las acciones llevadas a cabo por el ejército británico en contra de una facción de fundamentalistas islámicos en el norte del Sudán.  Al recordar el peligro que corrió, escribió:  "En un respecto, una carga de caballería se parece mucho a la vida ordinaria.  Mientras uno está firmemente sentado en la silla, con dominio de la cabalgadura (...) bien armado y dispuesto, los adversarios se apartan.  Pero tan pronto como uno ha perdido un estribo, o le han cortado una rienda (...) de todas partes, los enemigos le saltan encima a uno".  Una gran verdad que podemos certificar la mayoría…

Todo este introito es para decirles que estoy releyendo por tercera o cuarta vez la “History of the English-Speaking Peoples” y me he encontrado con algunas frases que se adaptan muy bien a la circunstancia actual venezolana.  En una, Sir Winston cita a Santo Tomás Moro cuando este define “gobierno” —pero que también le cabe a “régimen”, que es lo que tenemos por aquí—: “la conspiración de unos hombres acaudalados que buscan su propio bienestar amparándose bajo el nombre y el título de pueblo”.  Claro que los mangantes criollos llegaron al poder sin recursos económicos; esos se los han procurado en estos diecisiete años de latrocinio descarado. ¿De dónde?, a ellos no les importa; les da lo mismo que sea de las bóvedas del Banco Central, de los negocios con bolichicos, de sus contactos con la narcoguerrilla y hasta —lo sospechábamos, pero solo ahora nos queda patente— desvalijando y matando buscadores de oro en Guayana.

Cuando narra la invasión escocesa a territorio inglés en tiempos de Charles I detalla que los invasores le cobraban al gobierno “…31 mil libras al mes más el costo de su equipamiento.  Un brillante prospecto se abría para las ambiciones de los escoceses.  Obtenían lo mejor de dos mundos: habían sido invitados a invadir a un país rico a las propias expensas de este”.  Si cambiamos “escoceses” por “cubanos” y le agregamos bastantes ceros a la derecha de la suma anterior, nos encontraremos con la realidad nuestra: por invitación de Boves II, un país menos rico, con menos población y con menos extensión territorial nos invadió y le pagamos (y le seguimos pagando) por convertirnos en colonia suya.  Desde las triangulaciones con la isla de todo lo que importa Venezuela, pasando por la entrega a los cubiches de cosas tan trascendentales como la identificación de personas y el registro de propiedades, hasta la bajada de pantalones de los altos mandos ante las órdenes impartidas por la gerontocracia, todo indica que los dos, en mala hora, últimos presidentes —el pitecántropo sabanetense y el bobo de nacionalidad ignota— regalaron la soberanía nacional.  “Soberanía”, una palabra con la que se llenan la bocota pero que con cada día que pasa la han hecho disminuir.  El adagio, con razón, predica: “dime de qué te jactas y yo te diré de qué careces.

Y cuando habla de Cromwell es cuando hace el retrato más parecido a lo que nos toca sufrir hoy: “Para el grueso de la población, su gobierno se exteriorizaba en la forma de innumerables y miserables pequeñas tiranías, y así llegó a ser aborrecido como ningún otro gobierno ha sido aborrecido en Inglaterra, antes o después (…) Una y otra vez se vio forzado a amenazar y a emplear el poder de la espada; por lo cual el gobierno, que buscaba ser una alternativa constitucional, (…) se convirtió, en la práctica, en una autocracia militar”.  Paro aquí, porque nada hay que añadir.  En estas últimas líneas se resume la tragedia venezolana…


Humberto Seijas Pittaluga
hacheseijaspe@gmail.com
@seijaspitt
Carabobo - Venezuela

REINALDO POLEO, SALDO ROJO

Me debes…
Otros confiaron en tí, yo no, y sin embargo te abrí una cuenta.
Me debes tu renuncia cuando los niños de la calle nunca salieron de ella.
Me debes el resentimiento de esos niños que hoy nos están matando.
Me debes la democracia que me quitaste votando.
Me debes las sonrisas que nos sigues borrando.
Me debes la constitución que nos fuiste quitando, ni siquiera la moribunda, sino la que el poder constituyente nos presentó alabando y que después de refrendarla la siguieron mutando.
Me debes un NO que te gané votando y del cual poco a poco te fuiste burlando, cambiando las reglas terminaste ganando.
Me debes los muertos de abril, los de un febrero, un marzo. Me los debes todos hasta los de contrabando, los que trataron de ocultar, los que siguen ocultando. Los que me achacaste, los que murieron robados, lo secuestrados, los motorizados, porque son solo el efecto y consecuencia de este narco estado.
Me debes los cientos de miles de venezolanos que se llevaron estos 16 años, incluyendo los que murieron de mengua… simplemente aguardando.
Me debes a mi cuñada, que se murió esperando, por una máquina de radio que estaban reparando. Que, por si falta de repuestos, que si por técnicos, que si por algo. Y se me murió Natalia… pero se murió luchando, hasta el último momento estuvo trabajando, se nos murió una madre, una hija, una hermana, una amiga, una enfermera, unos sueños … ¿hasta cuándo?
Me debes “Al muchacho”, el que nos dejó llorando, el de Antímano, el camionetero, uno más de tantos. Solo quedaron sus padres, su hermana, sus novias y un barrio se quedó amargado. Quemado fue su cuerpo, sus sueños, su carro.
Me debes al papá de Marina, muerto en un atraco, atrás quedo su mundo, sin padre y sin trabajo.
Me debes la misma historia en miles de venezolanos.
Me debes a Brito, que murió esperando a que le devolvieras la tierra que estaba trabajando.
Me debes a la juventud que murió protestando, por lo que creía justo y la mataste marchando.
Me debes hasta las balas, las bombas, los equipos que has ido amontonado, comprados con nuestros impuestos, nuestros recursos y que al hampa terminaste entregando.
Me debes los aplausos que te ganaste expropiando, en la plaza Bolívar, en zonas industriales y hasta en los propios llanos y que terminaste arrendando, vendiendo o regalando a quien te estaba alabando o comprando.
Me debes esos empleos, los productos, el ganado.
Me debes la producción, el progreso; te robaste el desarrollo y aún le debes a los dueños y hasta a los empleados.
Me debes los cientos de guerras que NO has ganado, la guerra contra el imperio, la económica, las OLP, la mediática, la oligarca, contra Dólar Today, la cual ninguna has superado.
Me debes las cenas que ya no hago, les reuniones nocturnas, los paseos, los teatros, me debes la nocturnidad que el hampa ha ganado.
Me debes los dólares que me corresponden por ser venezolano, por la venta de los recursos que Dios en Venezuela ha colocado. Esos mismos dólares los cuales con descaro has lavado y robado.
Me debes lo que a tus amigos has regalado, los hospitales, carros y barriles que has donado.
Me debes la comida que se pudrió esperando a que la distribuyeras mientras tú la estabas guardando.
Me debes la soberanía, la que defendiste gritando, y se la distes a otros porque estaban cobrando.
Me debes mi industria petrolera, la que acabaste pitando, expropiando, desalojando y la terminaste quebrando.
Me debes las medicinas que ya no consigo ni pagando, las horas de cola y los tuits rogando.
Me debes las horas en la cola parado, para buscar champú, jabón en panela o papel sanitario. Me debes el peregrinar por harina o carne para un caldo. O, para patitas de pollo, para curar el catarro.
O para curar el dengue, la chikungunya, la zika o el mal del sambo.
O la malaria, diabetes, cáncer, la tensión, convulsión, depresión o el cansancio.
Me debes el agua que se nos ha terminado.
Me debes la luz que se ha apagado.
Me debes los medios que has callado, como RCTV en la TV y muchos más en la radio y hoy me debes El Carabobeño, entre otros tantos diarios. También me debes las voces que se fueron apagando, las que lucharon bravíamente y que fuiste alejando, unas para siempre y otras esperando para volver algún día, para seguir trabajando.
Me debes los viajes que me ganaba sudando, no cumpliste con tu parte, te hiciste el loco no pagando y termine aquí encerrado, mientras tú sigues paseando.
Me debes los médicos que se han marchado, mis primos mis tíos que a otras tierras han migrado. Huyendo del hambre, del miedo, buscando los sueños, con el alma en suspenso porque tú se la has pisoteado.
Me debes mi niña, la que se fue volando, para vivir la vida que tú le estabas robando.
Me debes lo hecho en Venezuela y ahora lo importado, me debes carros, celulares, computadoras, casa y hasta la casa de la playa o del campo que me compré luchando. Mientras tú tienes casas, camionetas, en Venezuela, en todos los estados y hasta en el imperio, al lado del enemigo malo, y la obtuviste robando.
Al final solo yo soy el socialista y tú eres “Coligara”, ahora yo soy pueblo y condenado.
Me debes la libertad de los que te han enfrentado, la de los libres de conciencia, la de los valientes muchachos. Me debes la tortura que les has aplicado, porque son presos políticos, presos del estado. Porque presa está la conciencia, la justicia y la libertad.
Presa está la familia que se mantiene peleando, con valientes como rehenes, pero ni así permanecen callados. Porque para la libertad del alma no existen candados.
Me debes la Asamblea que con justicia hemos ganado y que con tus artimañas tratas de callarlo, me debes la justicia de un tribunal comprado.
Me debes los poderes en manos de un frustrado. Me debes una presidencia que me robaste callado y más de una conciencia que te ha apoyado, blindando tu trampa, tu ventaja, tu descaro.
Roja es tu insignia, rojas las calles has manchado.
Roja está tu conciencia, rojo es el color de un narco estado.
Rojo es el saldo que en Venezuela has dejado.
Roja está mi paciencia, roja tu revolución.
Me debes hasta el alma que has tratado de manchar con tu traición.
PERO ANTE DIOS Y MI PATRIA YO TE JURO QUE ESTA DEUDA LA TENDRAS QUE PAGAR.
¡FUERZA Y FE VENEZUELA!
¡ESTÁ CERCANO EL DÍA EN QUE HABREMOS DE COBRAR!
Reinaldo Poleo
rpoleo@gmail.com
@rpoleo
Caracas - Venezuela

LAUREANO MÁRQUEZ, PARTIDA DE NACIMIENTO, EDITORIAL TAL CUAL

El suscrito, prefecto ad hoc de la itinerancia natal, de la circuncisión judicial adjunta de los Municipios sucesivos, certifica la exactitud de la presente copia Número 6.996, capicúa y hace constar, como consta, que en día impreciso del año en curso (En curso del momento de la presentación del susodicho, que no siendo dicho, se infiere, según la lógica del sentido común interpretativo de la gente, que no es bolsa). Me fue presentado un muchacho varón. Inmediatamente se procedió a multar a los padres por haber esperado dos años para presentar al niño, pero la madre alegó que apenas tenía tres días de nacido, pero que aparentaba dos años por lo grandote. 

Aclarado el punto con testimonio oral de la comadrona (que no era la partera, sino una comadre bastante buena gente y solidaria y por tanto llamada así), se procedió a la inscripción del niño neonato. El niño me fue presentado por su papá y su mamá quienes en alta, clara e inteligible voz le dijeron al suscrito: “aquí venimos a presentarle a este niño”, a lo que yo respondí, según la fórmula establecida: “mucho gusto, niño”. A lo que el niño se acarició los bigotes, como pensando lo que iba a decir, pero no dijo nada, como es de esperarse en un niño de tan tierna edad.

El padre del recién nacido declaró lo siguiente: que la criatura era producto de su unión conyugal legítima y que el niño nació bastante temprano, porque es madrugador, como el resto de la familia. Preguntados los progenitores por mi persona en alta clara e ininteligible voz: “¿y ustedes de dónde son?”, respondió el aludido: “no soy de aquí, ni soy de alla, no tengo edad ni porvenir y ser feliz es mi color de identidad”.

Como autoridad competente tome nota precisa de tan detallada declaración de datos para que quedaran asentados en esta partida y de paso también los invité a asentarse a ellos mismos porque ese niño tenía que pesar por lo menos 10 kilogramos y la progenitora lo cargaba en brazos al no caber en el cochecito. Según testimonios de los progenitores los datos de filiación del infante son los siguientes: si bien es cierto que el niño fue concebido en territorio nacional, parte del embarazo transcurrió en el vecino país. Alimentada su madre con productos de allá, quién le quita a ese niño, lo que tiene en su sustancia de la alimentación de las zonas circunvecinas. Si digamos que el puente hubiese estado cerrado a efectos de transito, esa inocente criatura, que los avatares del destino obligaban a nacer allá, (o sea aquí) habría nacido aquí (es decir allá) por fuerza.

Pero sí que es cierto que nació aquí (es decir, allá, dependiendo de donde usted esté leyendo la presente partida). Es que se nota apenas uno lo ve, esa inclinación patriota que traslucen los ojos del neonato. Según consta en registro el niño nació muy específicamente en la localidad de Los Chaguaramos, Valle Abajo, Parroquia El Valle, en una Policlínica ubicada en La Candelaria, Santa Rosalía, en la zona limítrofe del río Orinoco del poblado conocido como El Palotal. Los testigos de este acto son Frnlstin Kasrtirn, Rimsenr Olibrts y la señora Quientl Rapurdt, quien como se dijo anteriormente es la comadrona. Dichos testigos presentaron su cédula de identidad y se ve clarito que son ellos. La presente certificación es copia supremamente fiel y exacta del original, lo que sí que el original, la verdad, no se ve muy bien, pero ya se sabe que esos libros envejecen también. Pero yo creo que sí. Y se expide en la ciudad capital (la que fue fundada por los españoles) a los 18 días del mes de marzo de 2016.

Jairo Restrepo

Perfecto.​

Laureano Márquez
@laureanomar
http://www.laureanomarquez.com
Caracas Vnezuela

FERNANDO FACCHIN B., LA ASAMBLEA NACIONAL

No es momento para desaprovechar la inmejorable opción y gran oportunidad que abrió la crisis del oficialismo y nos permitió el triunfo del 6D. Tenemos una AN apta para proporcionar el cambio que el país reclama.

Se hace necesario que los partidos políticos asuman sus responsabilidades, así como los gremios, las instituciones privadas y la sociedad en pleno, sin desespero y sin inculcar incertidumbre, se unan en una masa crítica, con discurso claro y coordinado que promueva el cambio anhelado y asegure el posicionamiento necesario, como grupos de presión unificados, en apoyo a la AN, el inmovilismo social es un fenómeno que no ayuda a la fuerza para el cambio de modelo político/destructivo del oficialismo.    

Se requiere una organización social unida, sin egoísmo, para ello existen los incentivos necesarios para no convertirse en minorías facciosas y fragmentarias que persigan fines inmediatistas y personales,  disfrazando sus intereses personalistas y discriminatorios, traducidos en flagrantes trapacerías sociopolíticas. La actuación de cada quien muestra su interés o desprecio al fortalecimiento de la unidad.

La unidad de los venezolanos actúa de manera responsable y con visión de largo plazo frente a la actuación de la AN y no frente a los intereses fragmentarios del oficialismo, cuyo fin, es la obtención de ventajas en tiempo para concluir su depredación contra el país en manos de aquellos deshonestos convertidos en grupos de perversa acción, entre ellos los parlamentarios, jueces, gobernadores y alcaldes “rojitos” que dependen de los “extraordinarios favores del erario nacional”, convertidos en grupos de presión para reforzar la “cancerosa” dinámica política, económica y social que ha minado al país de manera casi irreversible con destrucción del tejido social, en momentos donde el sistema institucional ha sido suplantado por un sistema de “Carteles” con el consabido concepto de lo que ello significa, donde la garantía a la neutralidad judicial, la objetividad, la honestidad y la igualdad de todos ha sido destruida para en su lugar colocar el “Gran Cartel del Régimen”, estableciendo un gigantesco aparato oficialista destinado a albergar militantes, simpatizantes y amigotes del régimen para defender el abuso de poder a costa de toda la ciudadanía.

Por otra parte, la legislación de facto, tal como la arbitrariedad, el “Decreto de Emergencia” y las decisiones de las togas, entre otras, demuestra el ocaso del estado de derecho y del espíritu de la ley, ante la aberrante actuación de los carteles, propia de bandas y mafias políticas típicas de comatosos estados fallidos, no es otra cosa que el desastre político de crear problemas para lograr soluciones equivocadas.

Definitivamente, si no apoyamos a la AN y su agenda para poder establecer una institucionalidad que cumpla a cabalidad con su cometido constitucional, que nos garantice un verdadero estado de derecho, de libertad, de igualdad y seguridad para todos, perderemos, irremisiblemente, nuestros derechos ciudadanos consagrados en la CRBV. Paciencia y un voto de confianza a la Asamblea Nacional. Feliz y absurdamente desocupada semana santa.

NOTA: Este artículo estaba destinado a publicarse en la edición de hoy viernes 18.03.16 del Diario “El Carabobeño” lo cual no pudo ser posible gracias al verdugo de Carabobo vecino de la Plaza Sucre.

Fernando Facchin Barreto
ffacchinb@gmail.com
@fernandofacchin
Carabobo - Venezuela                                    

MILOS ALCALAY, SALVANDO AL SOLDADO LULA

Las acciones judiciales por corrupción que ya habían sacudido a la opinión pública brasileña por escándalos conocidos como “lavajato” y  “mensalao” llegaron a un clímax con las acusaciones del Juez Moro al Ex Presidente Lula da Silva, contra quien pesan serios indicios de culpabilidad por desvíos millonarios del erario nacional.
Tratando de ayudarlo,  Dilma designó a su guía y predecesor en el cargo de Ministro de la Presidencia para evitar que se formalice el juicio, recibiendo el respaldo automático de Maduro, Castro, Evo, Ortega, Correa y demás soldados del Foro de Sao Paulo que nos recuerdan la película épica de Steven Spielberg “Salvando al Soldado Ryan”, en que siete militares reciben la orden de rescatar con vida al sobreviviente de los miembros de una familia en la que tres hermanos perecieron en el desembarco a Normandia durante la II Guerra Mundial.
Pero en el caso del Ex Presidente, no se trata de una solidaridad épica –como en la película-  sino de una grosera complicidad  destinada a obstruir la Justicia y esconder las profundas implicaciones de fondos irregulares no solo para enriquecer a la nueva clase de enchufados internacionales, sino para mantenerlos en el poder financiando costosas campañas de publicidad reeleccionista no solo en sus ambiciones  sino también a los dirigentes de países aliados,  que son denominados en el editorial un conocido periódico opositor nacional ” La Internacional de los Caraduras”
 Salvar a Lula y pretender al mismo tiempo que vuelva al Poder dentro de algunos años, resulta una misión imposible al igual que resultó imposible mantener en la Presidencia a los hermanos  Lugo, Zelaya, Kirschner, a quienes en una u otra forma se les aplicaron preceptos Constitucionales para terminar con sus desastrosas Presidencias, y  que a pesar de sus errores, con el mayor desparpajo los aliados del ALBA acusaban que se trataba de “golpes de Estado” como repiten nuevamente de manera injustificada en el caso del sindicalista Paulista y de casos similares.
Estas acciones de solidaridad automática, lejos de ayudar al Gobierno del PT, lo que hacen es irradiar aun más el incendio, tal como se constata con la explosión de millones de brasileños que han tomado las calles de las principales ciudades para manifestar su indignación, además de que con esta actitud se le suman otros argumentos  para alcanzar el  “impeachment” del mandato de la Presidenta Rousseff.
Salvar a Lula se ha convertido también en una torpeza que pone fin al “Imperio Socialista del Siglo XXI” en la que se multiplican los electores disgustados que lograron evitar la reelección de Evo, o de Rafael Correa, y destapar los escándalos de corrupción,  a lo que se suma en Venezuela un terremoto político que se acentúa con el desacato del Ejecutivo a la clara mayoría oposicionista parlamentaria con el triunfo del 6 de Diciembre, mientras se constata el distanciamiento de una Cuba, cada vez mas cómoda con sus nuevos socios de los Estados Unidos y de la Unión Europea.   
Milos Alcalay
milosalcalay@yahoo.com
@MilosAlcalaym
Internacionalista

Miranda - Venezuela

ARMANDO RIBAS, GASTO, INFLACIÓN E IMPUESTOS, DESDE ARGENTINA

Voy a insistir en un elemento que considero fundamental en la actualidad. Cuando el gasto público alcanza o supera el 50% del PBI, la teoría monetaria se cae por su base. En primer lugar no es la emisión monetaria la determinante de la inflación sino el nivel y la eficiencia del gasto público. Por lo tanto no es el déficit del presupuesto el causante de la inflación. Como bien dijera George Gilder en su “Riqueza y Pobreza”: “No es precisamente el déficit federal la causa de la inflación. Si el déficit fuese cerrado por impuestos más altos y la oferta monetria permaneciese constante el nivel de precios subiría en la forma ortodoxa de la ley de costos. Habrá menos inversión y menos producción de productos.
    Creo que nos encontramos ante la situación que enfrenta la Argentina, con un gasto público que conforme a mi última estimación en el 2014 alcanzaba al 53% del PBI. Lamentablemente el análisis de la situación argentina al respecto es difícil, daada la ausencia de datos pertinentes. Desde el 2011 no hay datos referentes al gasto provincial. Igualmente la información respecto al gasto público nacional a precios corrientes es discutible, pues no reconoce el verdadero incremento de los precios.
     Pero en fin no cabe la menor duda de que el gasto público consolidado (Nación y Provincias) entre el 2003 y el 2015 se habría más que duplicado respecto al PBI. Por tanto todo intento de bajar la inflación y restaurar el crecimiento económico, tiene como condición sine qua non la reducción del gasto público. La pregunta pendiente entonces es como hacerlo para que no cause de inmediato una caida en la demanda y consecuentemente en la producción. En la actualidad existe una propuesta que contradice la política del gobierno de reducir la inflación gradualmente. Ese proyecto implicaría una reducción del gasto público durante el año de un 25% del PBI, lo que considero un proyecto imposible.
    Como antes dije la eliminación de la reducción de la inflación  pasa ineludiblemente por la reducción del gasto público. Como bien dijera Milton Friedman: El total del peso de los impuestos es lo que el gobierno gasta no esos recibos llamados impuestos…Sin cortar los gastos, por tanto la reducción de los impuestos solamente oculta más bien que reduce el peso”. Entonces el problema pendiente es definir el proceso a través del cual se reduciría el gasto público. Y por supuesto no es un proyecto que se pueda lograr de la noche a la mañana, sino que requiere un proceso de ajuste al tiempo que se logre el restablecimiento de la actividad económica.
    Es indudable que el actual gasto público comprende gastos totalemte ineficientes que son necesario eliminar, tales como el Fútbol para Todos, las pérdidas de Aerolíneas Argentinas, y así como múltiples inversiones que son a pura pérdida. Igualmente el exceso de empleados públicos que ya el gobierno ha comenzado a reducir. Dado que se espera que en el año la inflación alcance a un 25% el proceso de ajuste debiera comenzar por aumentar el gasto tan solo en un 15% en el año, lo que lo reduciría en términos reales. Evitar por supuesto repetir el caso del 2015 cuando el gasto nacional superó en 37% el correspondiente al 2014.
    Por supuesto un proceso de esa naturaleza implicaría una reducción en los sueldos de los funcionarios y empleados públicos en términos reales. Por tanto el impuesto inflacionario sería pagado en parte por el sector público. Por supuesto se requiere igualmente reducir los impuestos y en particular el impuesto a las ganancias. Como antes ya he dicho, dado que no se permite la revaluación de los activos, el impuesto a las ganancias de acuerdo al nivel de la inflación puede superar el 35% y alcanzar a más del 50%. Ello de por si implica una violación del derecho de propiedad que garantiza el artículo 17 de la Constitución Nacional.
    La reducción de los impuestos tendría un efecto positivo en la inversión, y por consiguiente en el nivel de empleo, que compensaría la caída en el empleo público. Y más importante aun es que ese incremento en el empleo privado tendría necesariamente un nivel de productividad de la que carecían los empleados públicos. En ese sentido igualmente la eliminación de las retenciones a las exportaciones y el cepo cambiario, estarían teniendo un efecto positivo en la producción agrícola.
   Otro aspecto positivo de la política oficial que tendrá un efecto favorable en la economía es el acuerdo con los holdouts. Ese acuerdo saca a la Argentina del default y puede entrar de nuevo en el mercado de capitales internacional. No solamente para que el gobierno pueda acceder a nuevos créditos sino por la posibilidad de lograr inversiones extranjeras. La deuda externa argentina es relativa mene baja de acuerdo a la última información correspondiente al mes de septiembre del 2015.  De acuerdo a mis estimaciones esa deuda a fines del 2015 de conformidad con la liberación del tipo de cambio habría alcanzado al 41% del PBI. Y el total de la deuda pública a un 55% del PBI.
    Es indudable el éxito obtenido por el levantamiento del Cepo y la liberalización del tipo de cambio, que fuera el resultado contrario a las expectativas creadas al respecto. La misma habrá de tener igualmente un efecto positivo en la política oficial para no volver a caer en el error de intentar controlar la inflación, control de cambio mediante. Ya debiéramos saber que no es la devaluación la que determina la inflación sino la consecuencia inevitable de la misma. Por tanto es de esperarse que dadas las expectativas inflacionarias para el año de acuerdo al gobierno es de esperarse que el tipo de cambio seguirá esa pauta.
    Por último el otro error que hay que evitar es aceptar la teoría de que el control monetario es el factor determinante del control de la inflación. Como bien dijera George Glder: “Bajo estas circunstancias es auto destructivo para los conservadores  el pretender que el impacto inflacionario sobre los impuestos y los costos es fundamentalmente un problema de la oferta monetaria”. La inflación no es la causa del problema, sino la consecuencia del gasto. Por ello es de esperas que el gobierno no intente reducir la inflación controlando la expansión monetaria. Una política de esa naturaleza produciría un aumento en la tasa real de interés real que superaría la tasa de retorno del capital, lo que determina tal como ya ha ocurrido en Argentina y en el mundo la quiebra del sistema financiero. Para terminar pemítanme citar de nuevo a George Gilder: “Más tarde o más temprano los liberales americanos y los laboristas británicos, van a descubrir que las restricciones monetarias son una maravillosa forma de destruir al sector privado, dejando al sector público intacto y ofreciendo pretextos para la nacionalización de la industria” A los hechos me remito.
Armando Ribas
aribas@fibertel.com.ar
@aribas3
Argentina                                                                                   

ALEJANDRO MENDIBLE, BRASIL EN VILO POR LA SUERTE DE LULA,

La crisis  política brasileña, que se venía gestando desde 2013, en un giro inusitado se precipita cuando la presidenta Dilma Rousseff interfiere con la justicia  nombrando a Lula para ocupar el ministerio de la Casa Civil que articula la política del gobierno con las fuerzas vivas del país. En su segundo mandato, la pupila de Lula confronta una crisis profunda de popularidad que socaba todo el andamiaje político alcanzado por el Lulismo desde el 2003  cuando Lula llega a la  presidencia y utiliza el cargo para acelerar el cambio social, postulando la pretensión de la refundación de la República, con lo cual  acorrala a sus adversarios políticos.

Éste comportamiento encuentra aliados que persiguen el mismo fin político en los países  del Mercosur, el cual se convierte así en un proyecto geopolítico alterno al sistema capitalista en Sudamérica.  Lula en sus dos períodos presidenciales logra sacar a 30 millones de brasileños por encima de la línea de la pobreza con un crecimiento importante de la economía, activando una diplomacia presidencial directa mediante viajes y acuerdos internacionales que reactivaran el comercio internacional del país.
Todo ello le permitió al mandatario  identificarse con el Brasil en auge y presentarse como el promotor de la séptima economía mundial, una  potencia emergente indetenible. Este cuadro que lo colocaba como uno de los presidentes  más populares de la historia de ese país cambia de manara drástica y en la actualidad  la figura de Lula vine siendo cercada por la justicia brasileña, a partir del destape  del caso de corrupción en Petrobras que deja al desnudo la manera mafiosa del Partido de la Trabajadores de detentar el poder, y a Lula como uno de sus principales capos de la red.
De esta manera la figura política de Lula pasa -de ser el icono de las virtudes del Lulismo redentor- a derrumbarse  poniendo en riesgo la sobrevivencia de su proyecto político y  se descalifica como negociador para recomponer el polo entre los diferentes partidos bajo la égida del  Partido de los Trabajadores. Lo más  grave es que  su caída parece arrastrar de manera irremisible  la estabilidad del gobierno de la  presidenta y más allá aún,  establece el ocaso de una tendencia dominante en Mercosur en la primera década del nuevo siglo que pretendía adueñarse de América del Sur y  convertirla en  una región desafiante frente a los  centros metropolitanos del capitalismo occidental -y en especial de los Estados Unidos- actuando con procedimientos  neo-fidelistas: un modelo basado en el personalismo, con un anillo partidista hegemónico, un control  de subsistencia de la población y limitados derechos políticos. 
La caída de este sistema espurio pone en evidencia que Cuba no es el modelo, ya que entre los valores recuperados en la región  en su lucha de democratización contra el autoritarismo militar que asolo la región a mediados del siglo pasado  se encuentra la rescate histórico de los derechos humanos. Ahora al evidenciarse la burda y corrupta  técnica de poder del Lulismo incita al ciudadano de a pie en Brasil a recuperar los lemas de la Republica de orden y progreso y de manera terminante el rescate de la ética en la política.
Alejandro Mendible
alejandromendibleucv1@gmail.com
mendiblealejandro@gmail.com
Caracas – Venezuela

Enviado a nuestros correos por
Jesús Enrique Matheus Linares
jmateusli@gmail.com
@UranioMomoy
Caracas - Venezuela 

NEURO J. VILLALOBOS RINCÓN, CON LA DEMOCRACIA A CUESTAS

“Los tiranos buscan idiotizar a los pueblos, sumergirlos en la ignorancia; hacerlos sumisos a una propaganda dogmática y al culto a los semidioses analfabetos, pero audaces.” 

El régimen que nos oprime desde hace diecisiete largos años, siempre se ha sentido incómodo después de haber cambiado su estrategia para llegar al poder. Al fracasar con el golpe de estado que les permitiría tomarlo a la fuerza, optaron por utilizar los mecanismos que les proporcionó la conciencia democrática amasada en la sociedad venezolana durante cuarenta años, y por esa vía han tratado de imponer su concepción desfasada en el tiempo sobre el rol del Estado, el hombre, y la sociedad. Desde entonces han violentado los principios democráticos y los preceptos constitucionales.

Simultáneamente, los demócratas por convicción, aturdidos y divididos, por mucho tiempo no lograron hacer una lectura correcta de las intenciones totalitarias del régimen, ni asumir una postura unitaria frente al peligro cierto de perder la libertad. Se ha sido persistente en el uso de los instrumentos y posibilidades que proporciona la democracia para enfrentar valerosamente una dictadura militar-cívica, hasta llegar a conformar, con todas sus imperfecciones, la Mesa de la Unidad Democrática. Ha sido un camino largo y angustiante porque la democracia exige convivencia política, respeto, tolerancia, actitudes decentes, civilizadas, con porciones de nobleza, que es imposible conseguir en quienes han considerado la democracia como un estorbo histórico.

Como resultado de un proyecto comunista, en contravía de la historia de la humanidad, que ha avanzado por ensayo y error, tenemos un país en ruinas desde el punto de vista económico y moral y postrado por un ejercicio degradante de la política a todos los niveles. Un país donde el hambre hace estragos en la población y un Estado opulento, ciego y sordo, señalando culpables de la fétida corrupción en otros lados, tratando de encubrir su propia condición. Un gobierno con muchos recursos y pocos escrúpulos; con demasiada soberbia y nula humildad; con sobradas mentiras y pocas realizaciones. Una nación de luto por tantas muertes inocentes y afligida por tantos presos sin causa. Una patria ultrajada por su entrega vergonzosa a chulos internacionales con falaces ideologías.

Dentro del marco constitucional hemos escogido la ruta democrática en él establecido: el revocatorio presidencial, la enmienda constitucional, y en última instancia, una asamblea constituyente, para avanzar en la lucha, a pesar de que el régimen opresor ha escogido los instrumentos de la violencia, la arbitrariedad y el engaño. Debemos estar convencidos que en la  lucha entre el fusil y el espíritu siempre ha vencido éste. Por eso vamos a lograr una salida a esta intolerable situación, porque somos un baluarte de la esperanza de los venezolanos, porque somos la gran mayoría que clama por respirar aires de libertad.

Neuro Villalobos
nevillarin@gmail.com
@nevillarin

Zulia - Venezuela

CNEL. ANTONIO SEMPRUN, LIBERTAD Y MIEDO

Desde hace diecisiete años Venezuela ha sido convertida en una carnicería en lo político, en lo social y en lo económico porque quienes se disfrazaron de mesías para llegar al poder están convencidos que lo que éticamente bueno para darle calidad de vida a un pueblo está reñido con lo convenientemente personal y partidista, para la camarilla de hampones que usurpan el poder el poder en el país lo conveniente es mantenerse en él a cualquier costo.

La lucha para conservarlo y por alcanzarlo tiene al país en medio de una batalla de negociaciones bajo la mesa mientras los venezolanos son víctimas de lo que de ellas resulten porque para quienes tienen llenos los estómagos y los medicamentos le son accesibles el tiempo no es una variable importante.

De nada sirven las leyes si no hay instituciones que las apliquen, de poco sirven  funcionarios electos,  en quienes se deposita la confianza y la angustia de un pueblo, si estos no sienten en carne propia la realidad que viven en las calles que patean a diario quienes están esperando que actúen teniendo como prioridad sus angustias, sus necesidades y no sus aspiraciones personales.

Los dictadores tienen claros sus proyectos y en ellos no está el bienestar social,  cuando los ven en peligro sacrifican al estado, por esa razón los venezolanos debemos entender que un país en crisis no necesita héroes que lo rescaten, necesita hombres y mujeres que luchen sin miedo para alcanzar el proyecto del que está siendo despojada  la sociedad venezolana, la libertad.

Además de la lucha que se libra entre poderes, en Venezuela se libra una entre la libertad y el miedo, la libertad se está perdiendo ante el miedo que paraliza y que en oportunidades es interpretado como apatía, indolencia o desinterés, el miedo es una sensación de angustia ante la presencia de un peligro y la forma de reaccionar es huir, paralizarse o enfrentarlo  eso dependerá de los recursos que tenga a quien se le presente la situación.

Los venezolanos debemos elegir enfrentarlo porque la situación que se nos presenta es la perdida de la libertad y para evitarlo tenemos como recurso que somos una mayoría humillada por una camarilla de rateros  y para hacerles frente no necesitamos un profeta.

Coronel Antonio Semprun
coronelantoniosemprun@gmail.com
@AntonioSemprun
Caracas - Venezuela