Falta muy poco para la fecha de cierre de las postulaciones de candidatos para las elecciones de Gobernadores y Alcaldes a celebrarse el día 21 de noviembre de 2021.
No obstante, nos llega el fuerte rumor de que –producto de las conversaciones en México- pudieran suspenderse, en aras de abonar el camino para más y mejores arreglos.
En caso de ser cierto, lo cual nos alegra, demuestra por una parte la voluntad de entenderse, y en consecuencia, la posibilidad de alcanzar en el bando de la oposición, condiciones para explorar formulas de acercamiento en busca de unidad y mejores candidatos, en vista de que el gobierno ya decidió los suyos.
Sin embargo, aun no se ha producido; sigue siendo un rumor por confirmar, y obviamente hay que seguir avanzando sin desmayo. La Alternativa Democrática, dentro de la cual hay unos cuantos partidos, ya lanzó sus candidatos y están impulsándolos decididamente. Esa actividad es positiva porque con ella le dan a la población la oportunidad de conocer esa plataforma y a sus líderes en cada región.
Por su parte, los partidos del G4 agrupados en el Frente Amplio Venezuela Libre (sustituta de la MUD), reunidos en México con el gobierno siguen impulsando la
suspensión de las elecciones, para reagruparse y buscar las mejores posibilidades, aunque no sabemos si también con la intención de conversar con otros sectores de la oposición.
Por nuestra parte, siempre hacemos votos por la necesidad de reagrupar a todos los factores de oposición, y darles un carácter unitario tras un propósito electoral y derrotar a los candidatos del gobierno. Sin unidad, es imposible y el gobierno lo sabe; por eso juega constantemente a la división poniendo trampas, que hasta el presente le han dado buenos resultados.
En caso de concretarse esta suspensión, evidencia que el gobierno afloja la mano para demostrar su ¨buena voluntad¨, frente a un sector de la oposición que no tiene nada que ofrecer, que llega sin aliento a la mesa, y solo representa la fuerza de sus aliados; especialmente del gobierno de los Estados Unidos. Lo hace el oficialismo, porque necesita que le levanten las sanciones internacionales para conseguir recursos en el exterior y ponerse a funcionar. Esa es su intención mayor.
En el bando de la oposición, hoy fragmentada y dividida; hay que hacer grandes esfuerzos de recomposición y reagrupamiento, para participar unidos y con ello conseguir buenos resultados que le permitan una existencia tangible, luego de la casi desaparición producto de las sucesivas abstenciones.
Volver al campo electoral, y de la política real, es una obligación impostergable para toda la oposición, y de una vez decidir si marchan juntos, o si por el contrario lo correcto es producir un deslinde definitivo entre quienes auspician la vía electoral, y quienes solo la asumen a medias, aderezada con alguna ocurrencia golpista, como las ya conocidas; terreno en el cual, el gobierno de Maduro les ha dado una paliza incontestable.
Así pues, si se deciden a trabajar en el ámbito real de la política participando electoralmente, en lugar de buscar atajos improductivos e irreales, hay que comenzar por encontrar los mecanismos que allanen el camino.
Para esos fines, proponemos desde ya que se respalde a los Gobernadores, y Alcaldes en ejercicio para la reelección, y que las candidaturas del resto de los Estados y Municipios, puedan decidirse mediante primarias si el tiempo alcanza, y si no, mediante la celebración de encuestas aceptadas por todos, cuando no sea posible lograr consenso.
Hay liderazgos muy claros en ciertas regiones donde el consenso puede alcanzarse. Dos de ellas, son: Lara con Henry Falcón, y Zulia con Manuel Rosales. Decidamos si queremos ganar, o seguir la rochela a favor del gobierno.
Roman Ibarra
romanibarra@gmail.com
@romanibarra
Venezuela
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