Las grandes movilizaciones que se realizan en Cuba
desde el 11 de Julio, están demostrando nítidamente, que el pueblo isleño, no
era el rebaño que la camarilla comunista cubana manejaba a su antojo, como lo
creían los mamertos latinoamericanos, porque en 62 años de dictadura
sanguinaria por primera vez la ciudadanía se lanza a las calles en diferentes
ciudades(algo inédito), exteriorizando su frustración de tanto tiempo, para
exigir sus derechos que la nomenclatura marxista les ha robado con el cuento de
la “dignidad”, siendo ese sofisma en la practica el envilecimiento absoluto de
las masas, para que los miembros del régimen parasiten a perpetuidad con los
recursos del Estado. Desgraciadamente está demostrado que los comunistas en el
poder recurren al genocidio como método de represión para no ceder, y de ahí
que la comunidad internacional debe estar alerta.
El hambre, la falta de libertad y la precariedad en la
salud especialmente por el Covid-19 o peste china, han sido el detonante que ha
llevado a Cuba al estallido social en contra de la dictadura, en donde los
artistas de la isla han desarrollado un papel preponderante, rechazando esa
consigna paranoica castrista de “patria o muerte “ por la de “patria y vida”,
puesto que el comunismo es el máximo representante de la muerte en toda la
historia de la humanidad y en Cuba los crímenes y la tortura de la tiranía en contra
de la población han sido un común denominador; por lo tanto se necesita la
solidaridad de los pueblos libres del mundo para que cese definitivamente el
martirio que han tenido que sufrir los cubanos a manos del comunismo.
A lo anterior hay que agregar que en Colombia existen
varios partidos de lo que llaman izquierda, que están afiliados a la
internacional comunista del Foro de Sao Paulo y que consideran a La Habana como
su fuente de inspiración, y que lo único que hacen es barnizarse para que no los
identifiquen como comunistas, pues sus dogmas
marxistas permanecen intactos, así digan que hay que dejar atrás el siglo XX y
entrar definitivamente al siglo XXl.
Y lo hemos observado también con el dictador
venezolano Nicolás Maduro en sus peroratas trasnochadas ante su pandilla, que
usando el principio marxista de la mentira, prácticamente “consagra” a
Venezuela como el “·paraíso terrenal” en donde no hay hambre, ni represión, ni
torturas, ni existen cerca de 5 millones y medio de refugiados en los países
vecinos en los cuales muchos están pidiendo limosna; lo que demuestra que si
hay un eje del mal que es enemigo de la humanidad compuesto en Latinoamérica
por los déspotas embusteros de Cuba, Venezuela y Nicaragua, que buscan someter
a las otras naciones de la región a sus instintos perversos con la violencia y
la mentira, contando con la ayuda de los comunistas en diferentes países que se
camuflan con variados nombres.
La bestialidad marxista se fundamenta en la
irracionalidad y el delirio, pues desde que apareció el manifiesto comunista en
1848, se exaltó a la violencia como la partera de la historia, la cual según
esa deformidad hay que practicar porque otros la han utilizada en el pasado,
invitando a los seguidores de esa corriente cruel a asumir el salvajismo, igual
a como lo hace Miguel Diaz-Canel en la isla con sus esbirros para reprimir la
protesta, en donde la razón desaparece. Toda esa perversión es para defender
los privilegios de la nomenclatura cubana.
Personajes siniestros del marxismo como Lenin y el
“Che” Guevara, han hecho sublimación del terrorismo para esclavizar a los demás
seres humanos, aunque el primero rechazaba el terrorismo individual, lo
justifica cuando lo ejecuta el partido llamándolo “ guerra revolucionaria”; y
el asqueroso criminal cubano-argentino defendía el terrorismo diciendo: “
tenemos que crear la pedagogía de los paredones de fusilamiento, y no
necesitamos pruebas para matar a un hombre”, también
esa bestia invitaba a poner bombas en cualquier lugar donde se encuentren los
enemigos sin importar quien muriera. A los anteriores individuos terroristas
del marxismo se deben de añadir los nombres de Pol Pot, Stalin, Mao Zedong, Kim
Il Sung, Fidel Castro y en Colombia a las Farc y el Eln.
Antonio Gramsci comunista italiano le hacía alabanzas
a la irracionalidad, despreciando la lógica y la moral como lo hace la
dictadura cubana, para afirmar que no se necesita de la razón, sino que lo
importante es ganarse mediante el engaño a los sectores mas ignorantes y
atrasados de la sociedad para conquistar el poder y perpetuarse en el, de la
misma manera hace algún tiempo el cura brasileño Frei Betto quien representa a
la Teología de la Liberación, confirmaba las afirmaciones de Gramsci diciendo
que no se necesitaba de la razón. Quedando patentado que tanto en el comunismo
totalitario tradicional como en el marxismo cultural la razón no tiene cabida,
y desde luego el régimen cubano practica la irracionalidad a rajatabla.
El eje del mal internacional no es ninguna ficción,
sino una realidad encabezado por el marxismo, que ha agraviado a varios pueblos
del mundo con su proceder y que en Colombia por no haberlo enfrentado
ideológicamente desde hace varias décadas, se da el lujo de engañar a la
juventud y a sectores populares, por lo que la democracia liberal que según las
fabulas comunistas es “burguesa”, debe desarrollar tareas de concientización
especialmente en la academia, para desenmascarar al comunismo que es una
maldición para la tierra como lo ha demostrado en Cuba y por eso el levantamiento
popular en esa nación, que busca su segunda independencia, librándose de la
camarilla comunista.
Ariel Peña
arielpena49@yahoo.com
@arielpenaG
Colombia
arielpena49@yahoo.com
@arielpenaG
Colombia
No hay comentarios:
Publicar un comentario