domingo, 19 de septiembre de 2021

ESPECIAL DEL DOMINGO: CARLOS RANGEL

Carlos Rangel nació el 17 de Septiembre de 1929, en Caracas, es uno de los intelectuales más trascendentales que ha dado Venezuela y el pensamiento hispanoamericano. Abanderado de ideas liberales, defensa de la libertad y de los valores democráticos, respeto al proyecto de vida de cada persona que revierte en la formación de sociedades responsables de si mismas. Sociedad civil plenamente conciente de su soberanía y su capacidad de acción política, dónde se valore el respeto al merito, el esfuerzo y la creatividad de sus ciudadanos.

Creía en una economía libre y coherente que permita hacer realidad, sin destruir nuestro planeta ni convertir a los ciudadanos en vasallos o esclavos, la dignidad que requiere que la vida se pueda llamar así, vida fue columnista en varios diarios Venezolanos e Internacionales. Dirigió la revista momento. Junto a su esposa Sofía Imber condujo el programa de opinión Buenos Días. En 1976 dio nacimiento a su libro Del buen salvaje al buen revolucionario, obra imprescindible en el pensamiento político universal.

Critico fervientemente al empresario acostumbrado al proteccionismo del Estado, nefasto, y que la responsabilidad pública sirva para enriquecerse y traicionar a la libertad.  

 Ésta es su vida, ésta su libertad

                                 


                                                        https://youtu.be/lNmeD7rJJHs 


          CARLOS RANGEL, ESE GRAN CLARIVIDENTE. A 92 AÑOS DE SU NATALICIO

 

“El hombre feliz es aquel que, siendo rey o campesino, encuentra paz en su hogar”. Johann Wolfgang von Goethe

Carlos Enrique Rangel Guevara nació en Caracas el 17 de septiembre de 1929. Periodista, escritor, intelectual, figura de la televisión y uno de los más notables difusores del liberalismo en América Latina. “el hombre al que no le hicieron caso los venezolanos”. Vaya nuestro sentido homenaje a su memoria.

Repasar las entrevistas que le hicieron a Rangel a propósito del libro “Del buen salvaje al buen revolucionario” es penoso, porque ahí está avisada la malaventura de Venezuela. En todas sus prolijidades, represión, dictadura, hecatombe económica, diáspora de millones de patriotas. Todo lo inimaginable. Alcanzabas a oírlo, a leerlo y quedabas atónito con la inteligencia sus advertencias premonitorias.

Carlos Rangel se cansó de explicarles a los venezolanos el inmenso peligro que corría el país si escuchaba los cantos de sirena de los comunistas.

Atacado de manera virulenta por la izquierda, el pensamiento de Carlos Rangel no llegó a ocupar en esa época el espacio que se merecía en los medios universitarios y en las revistas de opinión. Más tarde, y ahora, con motivo del hundimiento del mundo socialista, sus planteamientos han cobrado nueva vida, no para aceptarlos todos en su totalidad, pero sí para valorarlos como una desprejuiciada, honesta, valiente y razonable reflexión sobre nuestro destino.

Repito. Ver hoy, en Venezuela, las grabaciones de las entrevistas que le hicieron a Carlos Rangel a propósito del libro “Del buen salvaje al buen revolucionario” es escalofriante, porque ahí está anunciada la tragedia del país. Eso que hoy palpamos.

Aunque fue escrito en 1976 es una obra que sigue perfectamente vigente para la realidad de la región y viendo la forma en la que el autor hablaba de Venezuela, uno no deja de pensar en todo momento si no es lo que está ocurriendo ahorita…

Del buen Salvaje… es el manual definitivo de desmitificación histórica que necesitamos para quitarnos la venda de los ojos. Un punto de quiebre del repetido mensaje populista que nos hace sentir víctimas de sucesos a los cuales no tenemos control y negando la herencia occidental de la cual formamos parte. Este libro deberían regalarlo en las universidades, liceos, escuela, para que la gente abra los ojos del mundo en el que vivimos.

¡Todos los códigos! ¡Todas las advertencias, las señales, los ejemplos, los aprendizajes en cabeza ajena que hemos tenido enfrente todos estos años! Terminas de leer este libro y agregas un tono de resignada amargura ante la realidad que nos ha tocado -que me ha tocado- vivir en la Venezuela actual; nada se ha inventado, ni las ideas políticas han hecho algo para proponer salir del círculo vicioso de los complejos de inferioridad, de las reacciones sociales viscerales, de los autoengaños, de la vía cómoda del populismo, de las taras colectivas, de la comodidad del fracaso.

Recordamos, de uno en particular, de sus programas. Un comentario apropósito de unas declaraciones de Nikita Jruschov, que en un viaje a USA declaraba: ‘No podemos esperar que el pueblo estadounidense salte del capitalismo al comunismo, pero podemos ayudar a sus líderes electos a darles pequeñas dosis de socialismo, hasta que despierten un día y descubran que tienen el comunismo'». Carlos que era un dedicado anticomunista a tiempo completo, descargo toda su batería intelectual para rebatir y alertar de esa posibilidad. Con rigor conceptual y presencia de ánimo enfrentó los dogmas del marxismo en economía y política, denunció los desmanes del populismo, el colectivismo, el nacionalismo y el estatismo, y desenmascaró el autoritarismo intrínseco al marxismo. En la paradoja de la panorámica de lo que hoy acontece en el mundo y en especial en USA, diriamos que hasta en eso fue vidente.

Si bien, “Del buen salvaje al buen revolucionario” es su obra cumbre. Carlos Rangel tiene otro magnifico, menos conocido, pero igualmente visionario e importante de titulo: “El tercermundismo” (Monte Ávila, 1982). En el cual, aborda un tema desesperante. En efecto, la mayoría de los gobiernos que dominan hoy por hoy el planeta no tienen ningún interés en reducir las desigualdades entre naciones ricas y pobres, puesto que la explotación política e ideológica de esas desigualdades es más provechosa para ellos que su corrección. Más todavía, su corrección causaría la desaparición de las formas de poder que reinan sobre la mayor parte del Tercer Mundo, de las cuales los políticos que saben manipularlas derivan una combinación insólita de omnipotencia e irresponsabilidad.

“Ningún hombre es profeta en su propia tierra”. Este aforismo español es un resumen muy apropiado de la vida de este “gran intelectual liberal clásico venezolano” Como me gusta calificar a Carlos Rangel. Una figura bastante apreciada en el ámbito del liberalismo, pero poco reconocida en Venezuela. Rangel tenía ideas muy poderosas sobre la política latinoamericana y las razones del subdesarrollo de la región. Como brevemente lo esbozamos antes; la pregunta es: porque no retomar su pensamiento y vigencia como estandarte a nuestro ideario republicano y liberal.

Sentimos como propio a este gran hombre venezolano. Sus reflexiones y enseñanzas son faro de luz y guía de nuestros principios libertarios.

Fuentes:

https://movimientorepublicanoliberal.blogspot.com/

http://opinavenezuela.com/

No hay comentarios:

Publicar un comentario