martes, 25 de enero de 2022

JOISE MORILLO: ¿UN RIESGO INMINENTE?. DESDE ESTADOS UNIDOS

En las fantasía o, en otras palabras, ficciones -literarias- de algunos autores, sumado a hipótesis impresionantes de pensadores y teóricos, se ha especulado sobre la posibilidad de que la especie humana derivado de una suprema inconsciencia colectiva genere enorme daño sobre la superficie terráquea, contra su ecología y además, que la ciencia y el sesgo megalómano de una clase social sumamente vanidosa y egocéntrica apoyada por inmensos volúmenes de riquezas; hagan de la tierra y a otras comunidades humanas, su hacienda, su ingenio o pasto de su peculio.

Esta supuesta pesadilla se basa en que este tipo de gente con inmensos recursos, decide, desde mucho tiempo atrás, crear un mundo satélite donde irían o irán a vivir en el futuro, dejando la tierra como su fundó, su hacienda o ingenio como se dijo anteriormente, de lo cual, derivado del desastre ecológico ocasionado, las especies que representaban el alimento y que proporcionan nutrientes proteicos habrán sido exterminadas un 80 %. Como consecuencia, los especímenes que subsistieron quedarían como exquisiteces, delicatessen, de buenos gourmets. De modo que, el canibalismo, sería el mecanismo alimentario. Como cosa, curiosa o sorprendente este canibalismo ¡no sería necesariamente violento! Si no, con una anuencia eutanásica como la suerte del film: “Cuando el destino nos alcance” 1973, inspirado en la novela de ficción “hagan sitio” 1966 de Harry Harrison, donde se narra que, por motivo del ocio, del aburrimiento del individuo adulto maduro o anciano, aparte de toda la gama de violencia que el desabastecimiento de alimentos (originarios) que han sido sustituidos por una galleta denominada “Soylent Green” como paliativo, se les invita a morir. Tal invitación conlleva disfrutar de una etapa espiritual después de la muerte que la élite de poder y sus adláteres se encargan de promocionar mediante la propaganda. Para esto, se les da una especie de aliento en “El Hogar”, que es un sitio en donde los invitados iban a que les terminaran su vida y por 20 minutos antes de morir, disfrutaban de música y escenas hermosas, en las cuales se ve el mundo como era antes del desastre ecológico.

El asunto es que ese Soylent Green, se suponía era procesado con plancton de los océanos, pero no, el plancton también había sido extinguido, y resulta que la galletita era elaborada con materia humana y la fuente eran los muertos que provenían -insinúan los autores- de esas situaciones violentas y de las eutanasias de ingenuos ancianos y gente que ya no deseaba vivir e ignorantes de todo conocimiento de lo que estaba pasando y por causa de lo insoportable del mundo terrible que les había tocado terminar viviendo.

Después de esta patética narración que es un bocadillo en comparación a los genocidios producto de la violencia de protagonistas gubernamentales megalómanos y narcisistas y la complicidad de los perros de la guerra y toda la parafernalia de los teatros bélicos, no importando latitudes, ni etnias, ni ninguna clase de inspiración filantrópica, sino la adoración al poder, la gloria, la fama y la riqueza; debo enfocar la situación que confronta un sector de la población que es potencialmente vulnerable a ser la materia prima de esa élite de poder. Que bien puede avecinarse y, que potencialmente comprende la especie que va a rellenar la burbuja que va hacia la conquista del espacio exterior o más bien ¡que va a mudarse para el espacio exterior! A costa de la miseria que se ha desarrollado en la tierra. En este menester ya no hay ideologías, ni sectores antagónicos, lo que hay es el manejo de los recursos científicos y tecnológicos obtenidos por las riquezas de sus protagonistas. En este punto ya no valen los tiranos de pacotilla, ni los ricos de cuna de las naciones que no van a la vanguardia de la burbuja antes mencionada. Menos la plebe, ni el pueblo común y corriente de sus naciones que han sido el número más elevado de cómplices del desastre ecológico que ha sucedido.

Con la siguiente anécdota quiero iniciar la explicación de mi temor del riesgo inminente que potencialmente puede o está, tras el tapete. En mis tiempos de trabajo internacional conocí a un geólogo escoces, Mike Davies, quien era el gerente de operaciones de Mudlogging (análisis de muestras del lodo de perforación) en la Isla Trinidad y Tobago. Él decía que valoraba el desarrollo de las ciudades en la medida del tendido eléctrico, si era superficial con muchos postes y cables tendidos en la superficie esa ciudad estaba atrasada, igualmente con el suministro de agua si era deficiente estaba atrasada. Respecto a la recolección de desperdicios sólidos, decía que debían ser discriminados en: biológicos, contaminantes, plásticos y de papel, por supuesto debía haber variantes; igualmente se refería al manejo de aguas de desechos (cloacales) si eran deficientes era un atraso urbano y, por ende, una ciudad atrasada. Su punto de vista era la proporción político - económica que se manejaban en unas ciudades respecto a otras. Yo por mi parte quedé sorprendido porque nunca había prestado atención a ese asunto y le di una mediana importancia.

Luego de empezar a tomar cursos en diferentes ciudades americanas y europeas me di cuenta de lo que él decía, fui a Escocia y en una ciudad no muy grande, Dundee, pude observar que existían muy escasos tendidos de cables en la superficie y en los sectores donde había eran suburbanos, empresas y factorías por todas partes, zonas industriales, o sea una suerte de adelanto civilizado enorme, un orden y disciplina casi impecable. En un mes no vi un accidente de tránsito, ni noticias de asaltos en los periódicos. Un día el chofer que nos hacía transporte no fue a buscarnos en su lugar fue otro, al preguntarle por el otro chofer nos dijo: “ayer rompió el retrovisor lateral y hoy fue a repararlo” Y así una serie de ejemplos que impresionan a la gente que no está acostumbrada a esos sencillos, pero tan importantes detalles.

Así observé también en Pau, Francia, sumado a lo maravilloso del transporte colectivo y un sin números de ejemplos que serían interminables como la utilización de la energía solar en localidades completas, etc. Como cosa curiosa Brasil tiene una red de transporte urbano totalmente organizada.

El asunto es que esos pequeños detalles solo son una muestra de orden, del manejo de la cosa pública, de una política sana, donde además de los recursos que se puedan emplear en mantener apropiada y efectivamente todas esas responsabilidades que le competen supervisar y/o gerenciar a las autoridades de una nación, el pueblo en ese cúmulo estructural llamado nación también pone su grano de arena para que las cosas funcionen bien. Empero eso no es de a gratis, hay dos factores entre otros que construyen esa voluntad de orden y civilización: 1) el manejo de los recursos educativos y 2) el desarrollo de una consciencia colectiva. Entre los dos, forman el carácter del ciudadano como tal y no como habitante nomás de una nación. Aunado a esto, se debe entender que hay una voluntad superior y es el manejo de la política como supremo bien. O sea, existe ineludiblemente la obligación de las autoridades, llámense: jefes, gobernadores, presidentes y toda la gama de gente que se involucra en la política de las naciones, de otorgar, velar con celo, el progreso de sus pueblos, la salud, la educación. Colocar a sus naciones a la vanguardia mundial del progreso de la civilización. Eso, no está sucediendo en Latinoamérica

Permítanme especular, La cuestión no es de cultura, la cuestión es antropológica, la cuestión es de la preñez de una adolescente con dolores de parto sin dilatación apropiada, luego al no haber el recurso médico, ni para cesárea o la comadrona experta para hacerla parir y, aunado a esto la voluntad perversa y egoísta de control de las condiciones, la paciente muere. Así está sucediendo con los países que mal llaman del tercer mundo. Lo peor del caso es que habiendo recursos y suficiente espacio y acceso para hacer desarrollar a sus pueblos, quienes lo pueden no lo hacen. Países de África, Asia, oriente medio, y América latina, están condenados a ser -por esta situación- parte del Soylent Green del futuro trágico del mundo. La voluntad perversa y egoísta de control de las condiciones económicas y políticas en función del peculio propio de las elites de poder tercermundistas van a ser la causa de esta ignominia dantesca. Es un riesgo inminente.

Ojo el canibalismo en mi apreciación es solo una metáfora, el mecanismo de devastación y genocidio podría ser de diferentes y sofisticadas formas de concebirlos, los medios insospechados. Empero en la imaginación hay muchos factores que ya evidencian un intento de eliminar parte de la población, y esa parte es la más vulnerable someramente mencionadas en este capítulo ¿Cuáles serían las armas?, ¿Nano armas?, ¿Armas convencionales?,?¿Bombas atómicas?, ¿Bombas químicas? y ¿porque no Virus?

Joise Morillo
Kaojoise@gmail.com
@kao_joi_lin
Venezuela - EEUU

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