RECUERDOS DE ROMA
Maduro amaneció bailando, baila salsa con la Primera Comandante, dicen
que celebra que ganó la guerra económica, la prueba: acabó con el dinero
efectivo, ahora no hay pa’ nadie.
Todo lo trasmite por televisión es el nuevo DJ salsero de la televisión
venezolana… Mientras eso sucede, tu recuerdas a la tía que se murió de cáncer
hace unos días y a la mama de la comadre que está muriendo de mengua en el
hospital, tuvo suerte consiguió una cama, pero en el Universitario quieren que
se vaya a su casa, no pueden hacer nada por ella, no consiguen medicina para la
diabetes, el medico les advirtió que, de seguir así, tendrán que cortarle una
pierna.
Ayer te cruzaste con la familia del vecinito, el angelito se fue al
cielo, le dijiste a la Mama, no había cumplido los tres años, sufría de
leucemia… no es justo, no hubo medicinas para ninguno de los tres casos.
Hoy estas pensativo, tendrás que salir a hacer colas, pero no sabes
cual, si por jabón, pollo medicinas o en el banco para conseguir efectivo.
Maduro sigue bailando, inicia el 2017 bolivariano, me parece que lo de
bolivariano no durará mucho…siento como un palpito… será cortito.
Él es un irresponsable, culpable de actuar con ligereza e indiferencia,
ante los graves problemas que sufren los venezolanos. Lo único que le importa
es el control del estado, aunque sea de manera ilegítima.
Obsesionado con el modelo fracasado castrista, busca perpetuarse en el
poder y no piensa corregir el rumbo equivocado, aunque se agrave la crisis alimentaria
y de medicamentos. Un proceso que inicio Chávez y perfecciona su sucesor, como
resultado se destruyó el aparato productivo nacional, se persiguió, asfixio y
acabó con la empresa privada, se perdieron miles de empleos, se impulsó la
inflación y arruinó a PDVSA.
Esa es su única guerra, la verdadera, la que oculta con su cinismo, su
objetivo acabar con la libertad del pueblo venezolano, para dominarnos a todos
y seguir aprovechando los recursos patrios para beneficio de su banda de
ladrones… mujer… hijos… primos … y sobrinos.
Mientras el pueblo sufre, Maduro se divierte y lo muestra por
televisión, se siente “sobrao”, para eso ha dejado que su “guarda espaldas”,
Vladimir Padrino López le cuide el negocio, bastante aprovecha el también.
Mientras tanto la desesperanza se apodera de los venezolanos, no se ve
la luz al final del túnel, ni tampoco con quien salir adelante. Nadie parece
estar a la altura del compromiso.
Probablemente porque seguimos esperando por alguien, olvidando que somos
nosotros mismos quienes debemos darle un parao, al indolente ese, que prefiere
vernos morir de hambre, que aceptar corregir el desastre que ha creado,
mientras tanto a divertirse “echando un pie” con la comandante.
Maduro me recuerda al Emperador de Roma Nerón, solo que aquel tocaba el
arpa, mientras veía a Roma consumirse por el fuego, el ordinario de aquí, baila
una cumbia para celebrar los 250.000 muertos que lleva el régimen que
representa.
El desaliento que existe es producto de la impunidad reinante, la del
hampa común asesinando, secuestrando, robando. La de los militares
contrabandeando y violando la Constitución, La del “bonchon”, permitiendo que
los cubanos decidan nuestro futuro, aceptando mafias y otorgando cuotas de
poder a extremistas islámicos.
Es producto también de la perdida de sintonía entre los dirigentes de
oposición y el venezolano común, existe también gracias a la pasividad de los
políticos y de tanta gente de talento… es consecuencia de que percibimos, que
sigue existiendo la politiquería, que no avanzamos a causa de los grupos y de
los intereses particulares.
No debemos nunca olvidar que Maduro ha incumplido su deber, en otras
palabras, que ha traicionado a los venezolanos. Todos los ciudadanos deben
saber, que sea donde sea que decida refugiarse al final de esta tragedia,
siempre podremos exigir justicia.
Tenía obligaciones, que su incumplimiento le generan responsabilidad
penal, civil y administrativa. A la cabeza del régimen se encuentra un incapaz,
que por acción y por omisión ha faltado a sus deberes legales y morales, ha
sido negligente, malintencionado y ha desatendido las funciones de su cargo.
Nicolás afirma estar feliz? según dicen sus allegados no cabe de gozo.
Cual Nerón tropical se debate entre la eliminación sistemática de los
venezolanos, demostraciones propias de un circo y su “brincadera” musical.
Se piensa que Nerón era en el fondo un desequilibrado, que no es el caso
del ilegitimo que obedece al proyecto castrista. En todo caso ambos son
monstruos sanguinarios, traicioneros, falsos y malos políticos.
La leyenda dice que el mismo le prendió voluntariamente fuego a Roma, un
incendio que destruyó casi la totalidad de la ciudad. Para algunos él deseaba
construir un nuevo proyecto en la capital y encontró el método expeditivo.
Lo que intenta el socialismo del siglo XXI, para instalar el marxismo en
Venezuela
La gente harta buscaba el culpable, el Maduro de Roma se inventó
rápidamente una historia, una guerra económica, un enemigo endógeno. Se inventó
una oposición… lo que él consideraba una pequeña secta religiosa, los
cristianos, el mejor chivo expiatorio a sus bajos instintos.
Rápidamente obtuvo sus presos políticos, alrededor de 200 cristianos
fueron apresados y ejecutados, con esos mártires hizo su espectáculo de circo,
los convirtió en antorchas vivientes, para iluminar su propio “bonche”.
Le duró poco la felicidad al déspota, las fuerzas vivas de la época
comenzaron a complotar y los ejércitos se sublevaron en Galia y en España. El
Senado lo declaró enemigo público y Nerón se escapa antes de que lo maten.
El de aquí lo único que quiere es aferrarse al poder, cueste lo que cueste,
muera quien muera. Para ello tiene que terminar con la libertad de prensa,
aniquilar la oposición, someter al pueblo con el hambre, controlar todos los
poderes y seguir junto a su familia aprovechándose de los recursos patrios.
Tan destructivo como un incendio total, mientras arrasa al país baila
con la comandante, Cilia tiene más suerte… por ahora. Nerón repudio a su esposa
Octavia llevándola al suicidio, para casarse con su amante Poppée, antes había
mandado asesinar a su madre Agrippina, aquel no bailaba salsa, ejecutó su plan
de manera más elegante… después feliz como Maduro, se sentó a admirar el
incendio… y escuchando música.
Nelson Castellano-Hernandez
nelsoncastellano@hotmail.com
@VFutura
Venezuela-Futura,
Francia
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