¿COMO EN CUBA?
El actual gobierno venezolano
siguiendo lineamientos del régimen cubano para desarticular, neutralizar y
poner en situación de indefensión la a población civil, está utilizando “el
hambre” como arma política obligando a los ciudadanos a hacer colas hasta de
ocho horas diarias para conseguir dos panes que no alcanzan para alimentar una
sola persona.
Ojalá no estemos cerca del momento cuando las madres negocien vender la
virginidad de sus hijas menores de doce y catorce años por cien dólares o
cuando los esposos manden a sus mujeres a “rebuscarse” con los turistas.
Dios permita no estemos cerca de la situación cuando no se considere a
la prostitución como degradación social sino como una manera de subsistir, tal
como viene ocurriendo –lamentablemente-
en Cuba desde hace sesenta años.
Mantener en la pobreza y la miseria a la población es la primera
estrategia de gobiernos autoritarios, esclavistas y comunistas como el
existente en Venezuela… Dictadura no me calo.
Ser rico es malo, dicen los boliburgueses chavistas; pero para ustedes,
-el pueblo hipnotizado con la esperanza vaga de igualdad social- no para
nosotros; quienes vivimos como reyes saqueando
la república en nombre del socialismo.
Que levanten el control de cambio, liberen el dólar para que veas como
por arte de magia habrá pan en todo el país hasta “para tirar para arriba”, por
cuanto los propietarios de molinos importarán todo el trigo necesario; y no
como sucede ahora, cuando los falsos bolivarianos traen con toda la mala
intención solo una mínima cantidad para provocar el hambre y la zozobra.
¡NO ME CALO MÁS UNA COLA DE PAN!
Debe ser la consigna y la actitud de todo venezolano en cualquier parte
del territorio nacional donde se encuentre en una panadería esperando su turno,
con el brazo marcado como animal y con
varias peleas a cuesta; con la tensión baja y
debilidad generalizada por el cansancio físico, el sol, la depresión e
impotencia.
A los “ángeles del purgatorio”,
representados por la primera línea de mando socialista, les interesa y
les conviene tu silencio, tu miedo a ser detenido, enjuiciado, encarcelado,
torturado o eliminado físicamente. Pero
a nosotros, los auténticos protagonistas
del hambre y la desdicha, callar, sería la muerte en vida. Sin presión no hay solución… ¡A la calle,
pacífica y constitucionalmente!
Como residente de Cumaná y
conocedor de mi región, desmiento públicamente las irresponsables
declaraciones del gobernador de Sucre en el programa de televisión “Vladimir a
la 1” el día 17 de enero 2.017, cuando dijo:
“aquí no hay hambre, los claps, pdval, mercal y la red bicentenaria
suplen satisfactoriamente los requerimientos alimenticios de la población”.
¡Que indolencia! Es necesario ser
bastante “bola fría” para no darse cuenta como
los hombres se disputan las bolsas de basura con los perros buscando
comida; a los pescadores artesanales la Guardia Nacional les pone trabas para
el suministro de gasolina y cuando salen a faenar, el miedo a la muerte les
atormenta por la acción vandálica de los piratas del mar, quienes les roban sus
motores, la pesca, las redes y hasta la vida.
Igualmente el Gobernador de Sucre posee el record de haber gastado en la
remodelación de una plaza una suma mayor a todo el costo del Metro de Caracas y
junto al Alcalde de Cumaná debe responder por las obras inconclusas de los 500
años.
La libertad tiene su precio… Para salir del hambre, la dictadura y el
comunismo debemos arriesgarnos y protestar… No nos queda otra…. ¡CANDELA!...
Cristian Silva
cumanacristian@yahoo.es
@silvacristian
Sucre - Venezuela
No hay comentarios:
Publicar un comentario