sábado, 23 de enero de 2016

CESAR GUILLEN CITTERIO, EL PETROLEO VENEZOLANO, DEBILITADO EN EL CONTEXTO MUNDIAL.

La mayoría de las exportaciones del petróleo venezolano van a EEUU. Con la llegada de la revolución cubano-chavista, por razones ideológicas y de complejos, las exportaciones a ese país disminuyeron así como su dependencia del crudo venezolano. De cada 10 barriles de petróleo que importan solo 1 procede de Venezuela. Por el contrario, de cada 3 barriles que exportamos, 2 van a EEUU.

La razón de la exportación casi que exclusiva a EEUU, tiene su explicación en las características de nuestro petróleo, que tiene un alto contenido de azufre y metales. Estos crudos solo pueden ser refinados en muy pocas refinerías en el mundo, Esto hizo que PDVSA, invirtiera en la compra de refinerías en el exterior capaces de procesarlo y hacer rentable la producción de sus derivados (CITGO)
Sin esta estrategia habría que dar muchos descuentos al comprador de nuestro petróleo por las dificultades de su procesamiento. Esta es la razón principal del porqué la mayoría de nuestra exportación va al mercado norteamericano. En lo inmediato la demanda de USA disminuirá y la de Venezuela tendrá que aumentar porque es el mercado más seguro para nuestros crudos pesados.
De las negociaciones petroleras en estos últimos 10 años no hay que hablar, no tienen sustento comercial ni es beneficioso para el país. Con China el petróleo se utiliza para pagar préstamos y el gasto público populista. A Petrocaribe y a Cuba se le entrega crudo a precios perjudiciales para la nación a cambio de favores no bien determinados pero que son exclusivamente políticos.
Esta fue la gran estrategia del agente pro-cubano Rodríguez Araque y del corrupto amanerado de Rafael Ramírez. Mientras los dirigentes revolucionarios civiles y militares, hacían negocios a la sombra de la renta petrolera sin percatarse como era de esperarse de la debacle que se avecinaba y que los barrió.
La caída de la producción petrolera en Venezuela es irreversible en el corto plazo debido a la destrucción  de PDVSA y la falta del personal técnico capacitado. La producción nacional tardará años en recuperar el nivel de producción de los 90. Pasaremos décadas para lograr recuperar el nivel tecnológico y gerencial que se perdió y en el peor momento para el negocio petrolero. Más que la corrupción y una insólita ineptitud, es una verdadera traición a la patria.
Cesar Guillen Citterio
cesarguillencittrerio@gmail.com
"Adhuc Stantes"
“Todavía en Pie”

Caracas- Venezuela

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