miércoles, 17 de febrero de 2016

LUÍS ALFREDO RAPOZO, LA LEY DE AMNISTÍA, ES UNA NECESIDAD

Un dia el Presidente Chávez montando en uno de esos extravagantes templetes en plena Avenida Bolívar le dijo al país y a miles de sus seguidores que mandaría hasta el 2050 o algo parecido; dijo que había  llegado para quedarse, en medio de un arrebato oratorio de locura y sed dictatorial.

En esos tiempos, el militar devenido en Presidente, no perdía oportunidad mediática para decirle y repetirle a los venezolanos que los demócratas no  volverían, que primero vendrían a  gobernar Tarzán, Capulina, Mandrake y no se quién más, pero que ellos se quedarían mandando por siempre como sucede en los cuentos sin fin ¿Recuerdan?

Yo diría que en esos episodios comenzó a gestarse la desviación de los valores democráticos. Los “rojiverdes”, esos  militares mezclados con comunistas frustrados de toda la vida, se fueron metiendo en todas las rendijas de la institucionalidad democrática desvirtuando todo y mandando a la sociedad civil como si estuviéramos  metidos en un cuartel. Yo diría que en esos tiempos, cuando la gente comenzó a uniformarse de rojo; cuando la gente andaba por la calle vestida con prendas militares y se creían combatientes cubanos de Playa Girón comenzó a extraviarse la democracia, gracias al poder indiscutible que tenía Chávez como amo de pueblo; dueño de todos los poderes del Estado que se fueron convirtiendo en instrumentos despreciables para satisfacer la voluntad de un tirano.

Les cuento, que por la plaza Bolívar se pasaba de broma, porque hasta los círculos bolivarianos se apoderaron de los espacios y cualquier cristiano, partido o movimiento que osara hacer un acto allí, sabía que sería agredido y expulsado a palos y piedras como si se viviera con energúmenos en la era cavernaria.

La cosa se complicaba cada día más y el desastre económico fue tomando vida con el mal manejo del BCV , con decisiones personalistas de la economía, fomentando el odio de clases, las expropiaciones, el abuso el irrespeto a la propiedad privada de los demás, fomentando las invasiones de edificios, terrenos, casas, empresas un verdadero
 desmadre.

Hoy pienso, que la revolución bolivariana ha sido lo peor que le ha podido suceder a Venezuela, pues caímos en manos de ladrones que has espalillado nuestros recursos financieros usando la conchupancia, el pillaje, el agavillamiento y el “no me importa lo que digas.” ¿Horroroso el cuadro, verdad?

Naturalmente, este cuento increíble pasa por cerrar medios de televisión, radioemisoras y hacerle la vida imposible a diarios, pensadores, opinadotes, políticos, partidos y a todo cristiano que se oponga al dominio de una dictadura de nuevo tipo que ha desgraciado el futuro de las generaciones que no tienen culpa de nada.

La Ley de Amnistía es una necesidad histórica que busca vaciar las cárceles de la revolución; que busca darle una esperanza a mas de 2 millones de exilados políticos, económicos y culturales, cuando el gobierno parece desmoronarse sobre su propio desastre y fracaso

Luis Alfredo Rapozo
luisalfredorapozo@gmail.com
@luisrapozo
Anzoategui - Venezuela

No hay comentarios:

Publicar un comentario