Cuando
decimos que solo DIOS es ETERNO entramos en un dilema de temporalidad de pensamiento pues los
Dioses de antaño se disolvieron en las arenas del tiempo en la medida que el
hombre como evolución pensante ha venido sustituyendo los Arquetipos Divinos
por otros.
En
la política esta realidad es más finita que en el mundo espiritual, la
temporalidad del hombre político nunca ha superado los 100 años y esto en el
caso de líderes (negativos o positivos) de proyección mundial.
En
nuestro limitado mundo venezolano los líderes son muy efímeros, pocos han
dejado una huella y no por eso son eternos, ni siquiera Bolívar, manoseado
diariamente desde que así fue llamada nuestra moneda mantiene su eternidad, su pensamiento es
manoseado como el símbolo monetario, usado simplemente como valor de
intercambio de militancias y lealtades.
En
nuestro País la eternidad política podemos temporalizarla con el “mientras
tanto” pues este induce a pensar que habrá una acción simultanea entre dos acciones
una que ha ocurrido y otra que ocurrirá, por ejemplo este puente se ha caído
“mientras tanto” pondremos un puente de guerra provisional.
Hoy
cuando el País se juega su supervivencia democrática entre un comandante eterno
y un cambio de gobierno “mientras tanto”,
los ciudadanos debemos prepararnos para sacar desde lo profundo de
nuestras experiencias de vida, desde nuestra formación, desde nuestra
creatividad, desde el conocimiento de las nuevas ciencias, manifestar en este siglo XXI un nuevo arquetipo que sustituya la antigua
forma de gobernar y darnos la oportunidad de continuar evolucionando hacia
nuevas formas de pactos sociales, nuevas formas de estructuras sociales, en fin
caminemos hacia un Modelo Ciudadano que involucra no solo el desarrollo
tecnológico sino los nuevos pensamientos de evolución como sociedad.
Maximiliano
Donat
maximilianodonat@gmail.com
@maxidonat
Ong
DECIDO
Miranda - Venezuela
No hay comentarios:
Publicar un comentario