No
me une a La Polar ningún nexo, salvo mi gusto por la Harina Pan, Las cervezas,
la malta, mi reconocimiento a su obra científica y tecnológica, el estímulo y
premiación a la investigación, su
protección al deporte, al arte, el justo trato a sus trabajadores.
He
saboreado muchos de sus productos, no cae mal una chinoto cuando el
calor me abraza y no hay limonada alcanzada de la mata y el papelón anónimo; no
soy amante de Mavesa y de ninguna otra mayonesa; pero, en cambio, tengo una
afección por la avena Quaker, en sus amplios usos y las edades de todos los
tiempo; me dan placer el atún y las sardianas margarita por facilitarme
proteínas y se resuelven mis frustraciones de pescador; el jabón las llaves se
encargaba de la pulcritud de mis ropas y de mis duchas, y muchos más, es muy
larga la lista que, sin esfuerzo alguno, se alcanzaba en los supermercados tanto los de
gran look y glamur, como hablan los sexófilos de oficio clasificando
damas, hasta en las mas exóticas pulperías en todos los lugares recónditos de Venezuela.
Todo había y en ellos fue un verdadero primor
consumir sus pastas, dejarse seducir por una “fría” y repartir a los niños
yuquerí. Detesto los productos light,
los Ice, y esas cosas, porque siempre me fijaron desde niño la concepción de
que nada de natura o de dios hecho era ice o era lihgt. No hay,
pues, para mi gusto fruto alguno que
venga con semejante etiqueta. Y mujer
mucho menos.
Pues
bien, no es de Polar y es de Polar de quien me ocupo hoy. Se trata de los procedimientos contra Lorenzo
Mendoza, líder fundamental de esta empresa, copropietario, o propietario, no lo
se, líder fundamental del país,
trabajador incansable, inmensamente
comprometido con la historia, la salud, la vida de Venezuela.
Esto dicho
según son los hechos y los hechos no sólo son los bienes que produce la
empresa, el ser como es la empresa, sino su palabra. Su palabra que, de ella no
tengo duda, está cargada responsabilidad social, razonamiento académico, denso,
profundo con orientación ética. Buscar
la salud moral de Venezuela es más trascendente que la salud económica, pero, ésta es condición necesaria para alcanzar la primera y la primera para orientar a
ésta. Sin ellas juntas no hay justicia
posible.
La vida del señor, de vedad señor, siendo
un señor quien se respeta a sí mismo, para poder respetar a los
demás. Quien reconoce a los demás para reconocerse
a sí mismo.
La vida de Mendoza me era absolutamente
ajena, pero el chavismo, su presidente, presidente de la RBV, que no de
Venezuela, esa donde yo nací, de Andrés
Bello, cuya obra lo ponen en el Panteón mas universal del mundo, el habla
castellana y la sabiduría; de Bolívar que rechazaba, denostaba la tal unión cívico militar, del Bolívar que
amó a su Universidad, hoy UCV y en ella a todas, y dejó
de su puño y letra normas para preservarla y definirla. A ese Bolívar
que inventó la utopía de La Gran Colombia, a en honor a Colón sabio y
aventurero y no a Guacaipuro, sea oportuno el ejemplo para pensar, solo
eso. Que daba a la corrupción el máximo castigo. Que amó la libertad y se
entregó enteramente a ella, que definió
a nuestra gente no coma
afrodescendientes, ni india ni europea, sino una nueva cultura que se forjaba
de ellas, ninguna mezcla, las mezcolanzas esas son las de Maduro, Chávez, Aristóbulo, regresión al primitivismo
racista, “originario” mediante el cual
se quiere construir la república
bolivariana de venezuela. Soy de la Venezuela de Gallegos, de Nazoa, Miguel
Otero, Andrés Eloy, Antonio Estévez,
Cadenas, Morales B, de mi papa y mi mama, mi padre ni un error
ortográfico en sus escritos y mi mama la virtud en el trabajo, la disciplina y
el canto y miles y miles mas y millones
mas, de esos venezolanos que no conocieron el odio, que asumieron y amaron y
recrearon la lengua de castilla, que asumieron
el cristianismo, la ciencia, las virtudes y deficiencias de los europeos, la música
sublime; soy de la Venezuela de
los negros y de los indios pero de los que hicieron suyas las ideas
fundamentales de la revolución
francesa, la democracia, su arte, su
sabiduría… de esa soy simiente y cosecha soy yo.
Pues
bien, como dije y reitero, no conocía a ese señor, pero ese señor me ha
permitido una prueba más del carácter terrorista del régimen, nazismo
primitivo, que tiene en el odio, la necrofilia, la
destrucción, las “tres fuentes fundamentales” de su socialismo. Para hacer el hombre nuevo, dijeron y
proclaman, hay que destruir al hombre “viejo”. (LENIN creía que el socialismo se construía con la
utopía del socialismo francés, la doctrina económica inglesa y la filosofía
alemana!) En este esfuerzo
“pedagógico” terrorista, han sido eficaces. Como sus pares del Estado
islámico, que ha destruido obras de
inmenso valor estético, cultural histórico, testimonio de la creación humana,
aquí se monta un modelo para profundizar el analfabetismo. Se cierran los
medios de comunicación para evitar que la libertad respire y la verdad se
escuche. No se odia a M. Granier, se teme
a la palabra crítica. No se odia
a María Corina, se rechaza su belleza y su inteligencia y su valor para
enfrentar la infamia. Se veja
a la juez Alfiuni porque al hacerlo se confisca la equidad de la justicia y se es esclavo del
mandato del amo. No se encarcela
Leopoldo sino en él se cree encarcelar la razón y enterrar la verdad. El modelo
educativo de alfabetización, adelantado por los cubanos, hecho a su imagen y
semejanza, y agradecido por Maduro a cada rato, por los ilustrados
Aristóbulo, Diosdado…está montado para afianzar la ignorancia y
construir sobre ella la imbecilidad. Por
cierto que el propio Maduro es buen ejemplo del modelo de educación cubana,
como lo evidencia que no ha aprendido a
conjugar los verbos ni le enseñaron que el sexo nada tiene que ver con el
género gramatical. Chávez es dios,
maduro su hijo, el hijo de Dios,
Chávez es la verdad, el camino y
la vida, aberración grotesca del ser Dios Padre y Dios
Cristo. Maduro es el apóstol mayor y
sobre sus hombros se destruirá lo que aun nos queda y dejan a Diosdado las
cualidades del espíritu santo.
No
se odia a la gente que se ha expropiado sus bienes de sádica manera, sean los
legítimos dueños de Agroisleña, centrales azucareros, fincas de ganaderos,
etc. sino que se cree con ello
exterminar la propiedad y la cualidad libertaria del trabajo y se les
humilla, veja, empobrece para minar su dignidad y la de todos. La propiedad es
desde Abrahán el más alto testimonio y evidencia de que la propiedad es esencial al
hombre. Sin ella no hay posibilidad de
progreso y muy menos de amor. Destruir la propiedad es la destrucción de la
dignidad para producir pordioseros. Y detrás de las misiones y otras cosas de
esas hay el propósito de construir
limosneros... Tal perversidad tiene “conciencia” de que el ser pordiosero, el miserable, vive
bien rumiando la esperanza que se alimenta con lo que sobra de la corrupción,
digo mas, detrás de esa “buena acción”
está la multiplicación de mendigos y la multiplicación de la corrupción
y el poder de quienes administran,
reparten, controlan la limosna.
La
estatización es la más grande negación del más importante principio ético de
Marx, la desaparición del Estado y la creación de un modelo social
donde la capacidad está por encima de
cualquier otra consideración. Donde la
capacidad, la consciencia crítica, es el
más elevado sustento y sostén de la libertad. A cada quien según sus capacidades
a cada cual según sus necesidades. Este
régimen estatiza todo para hacer del Estado su propiedad privada, tal como reza la canción de Lila Morillo.
Y, bajo estrictas coordenadas históricas, filosóficas, Marx afirmó
que las religiones son el opio del pueblo, en estas condiciones nuestras
la santería, la brujería, son el
instrumento religioso del régimen para drogar
al pueblo.
El
régimen ha usado ya billones de dólares para destruir al país. Este es el milagro de Chávez. El mayor logro
de El Supremo, el eterno, el dios perpetuo. Algo más de 13 mil millones de dólares se invirtieron para reconstruir a la
Europa después de la Segunda Guerra Mundial.
Nunca supe cuantos miles de millones requirió el nazismo, el fascismo, el franquismo para destruirla.
No lo se…pero creo que Hitler, Mussolini, Hirohito, Franco, Pinochet, Videla, Castelo Branco y demás bichos de esos, gastaron mucho menos de
cuanto han desbarato estos, esos, en nombre del socialismo y la imposición de la estupidez “teórica” del comandante
eterno, “el plan de la patria”. Lo
único bueno es su sinceridad
inconsciente, a plan se construye su tal patria.
Juro, porque es de fácil inferencia empírica,
sin saber cuanto, que La Polar ha invertido cifras quizá infinitesimales al lado
de cuanto despilfarra el gobierno pero la ganancia de la empresa es muy menor que el beneficio que le produce a
Venezuela. Hoy este régimen ha
hecho que la tal RBV, antiimperialista,
chavista, socialista, padezca la más
alta inflación del planeta, que esté
entre los más inseguros y con mayor cantidad asesinados del mundo cada año. Una
deuda externa e interna monstruosa. Que ni hay comida, ni medicinas, pero donde
hay exagerada abundancia de ilegalidad, de ilegitimidad, de perversión, de
corrupción,… ausencia de decencia
elemental en la palabra oficial. La Polar es su más absoluta negación. Es más
que una empresa, que lo es, una institución
que es identidad esencial de Venezuela. A este inmenso pedazo de la
Venezuela que aún nos queda quiere exterminar Maduro para consolidar su RBV y
para que su hazaña funesta (Por Funes) sea completa acusa de traición a la
Patria a Mendoza y a Hausmann. Este profesor de
Harvard aquel líder de la Polar. El sueño de Maduro, que Harvard sea
extensión de la Bolivariana y la Polar sea lo propio de Mercal.
Y dejo un dato más, fácil de verificar,
contrastar, diagnosticar. Maduro odia a
Mendoza por miedo. Miedo a la capacidad,
miedo a la asunción de riesgos por la libertad, miedo por la comparación que lo
desnuda cuando revisa lo que hace la Polar y lo que hace él y su padre hizo.
Miedo a soñar con una patria de verdad y la capacidad para emprender su
búsqueda sobre resultados medibles alcanzarla sin corrupción, sin perversión,
con libertad y paz.
Americo
Dario Gollo Chávez
americod@gmail.com
@americogollo
Zulia
- Venezuela
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