domingo, 15 de noviembre de 2015

ROBERTO JIRÓN HERNANDEZ, P A R I S …. PARIS…….

Ese nombre nos lleva a pensar en la maravilla de la vida, la CIUDAD LUZ,  la gente de los romances, la esperanza  de los soñadores, la realidad de los esperanzados, unos ven la claridad al final de la vía la mayoría se queda en el camino de las ilusiones, pero todos nos dejan la enseñanza de que es allí donde debemos de ir en busca de la realización de nuestros quereres y probar a ver que nos tiene preparado  el destino.

                No se si este comienzo abarca todo lo hermoso que se pueda decir o esperar de PARIS, pero lo que si estoy toralmente convencido es que cada uno de los seres humanos pensantes, sentimos algo similar por nuestro terruño, donde quiera que este ubicado en este planeta, donde hemos llegado a vivir y procrear el futuro de su mantenimiento.
                Lo que me ha llevado a sentarme  a escribir estas líneas, es el tratar de comprender y posteriormente expresar de lo que ha pasado en la ciudad Capital de Francia, un nuevo acto terrorista de las sectas musulmanas, hoy en función con el nombre de ISIS, en acciones para demostrar al mundo que ellos si saben hacerse presente para señalar el camino que ellos creen es el único permitido para la felicidad de la vida en este planeta.  De ser así sus expresiones, no tienen nada de diferente a las expresadas por otros grupos y en diversas épocas de la humanidad que quieren imponer sus creencias y para ello utilizan las agresiones que se denomina GUERRA, que es el sembradío de destrucción y  muerte de una buen parte de los pobladores de nuestro planeta denominado TIERRA.
                Hoy vemos, como en todas las oportunidades similares, los mensajes de condolencia y ofrecimientos de ayudas para amainar los dolores, furias, rabiatas e incapacidades de poder buscar un medio de centralizar estas acciones, ya que es de mucha ilusión decir de no permitirlas, cuando por ley de la naturaleza, todo ser viviente procede a destruir todo aquello que cree indispensable para obtener su tranquilidad y supervivencia de su etnia, obteniendo regularmente el tener que aceptar las condiciones que resulten de las acciones realizadas y no siempre son en calidad de vencedor.
                Es por ello, que creo, que hasta que el ser humano no se someta a tratar de respetar las vivencias y creencias de los otros, con pensamientos diferentes y costumbres en su vivir, que no son dañinas a los otros, siempre y cuando las realicen en sus medios o espacios regulares, sin pretender ir  a cohabitar en otras regiones y tratar de imponerlas, y mucho menos cuando su salida de sus lugares de orígenes les son inhóspitos o falta de oportunidades para sus realizaciones.
                No voy a ir a otra parte, estoy y me quedo en Caracas, Capital de la República de Venezuela, lugar donde nací y no he salido en el trascurso de mi vivir a tratar de hacerlo en otra localidad, y muy a mi pesar,  veo, observo y siento, muy especialmente en el transcurso de estas dos últimas décadas, de cómo nos esta pasando en forma muy similar, pero con la utilización de otros elementos y efectos, como es la falsedad de información, la persecución a todos los que no  comulgan con sus prácticas y la utilización de los bienes de todos para el usufructo personal o de sus grupos, y sin embargo no lo catalogan de acciones TERRORISTAS, ellos lo califican como Socialismo del Siglo xxi, que traducido al léxico entendible es COMUNISMO, con el aditivo CASTRISMO, que son los que tiene la dirección de todo este proceso.
                Como es lógico, todos nos preguntamos ¿Qué hacer?, lo indicado es hacerle frente y combatirlo con el arma que disponemos que es el VOTO, así que cada quien a tomar su decisión y el valor de actuar sin temores, ese proceder tiene fecha es el día 6 de diciembre del año 2015, para el comienzo de ver como a Caracas la convertimos en la CIUDAD LUZ DE AMÉRICA.
Roberto Jiron Hernandez
rjironh87@gmail.com

Caracas – Venezuela

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