Por favor diputado,
se le terminó el tiempo que establece el reglamento de interior y de debates
para las intervenciones sobre la materia en discusión… pero presidente, todavía
me quedan 2 minutos… eso no es verdad
porque el tiempo lo llevo yo… es que todavía tengo muchas cosas que decir… está
bien honorable diputado, tiene usted un minuto para que redondee su
intervención…. bla bla bla, bla… honorable diputado se le venció el minuto
concedido para redondear… pero es que todavía tengo muchas cosas que decir… lo
siento pero hay que regirse por el reglamento.- De pronto quien fuera el manda
mas de la AN se queda hablando sin audio… lo siento pero así es el reglamento y
hay que cumplirlo, precisó HRA.
Lo anterior pudiera ser un dialogo entre el
nuevo presidente de la Asamblea Nacional, Henri Ramos Allup y Diosdado Cabello,
expresidente de la Asamblea Nacional. Aunque todo está basado en una crónica
imaginaria de este humil escribidor, no es descartable que en cualquier momento
de los próximos cinco años en las sesiones, pudiera hacerse realidad, por la
forma como se desarrollaron las cosas en la instalación de la nueva Asamblea
Nacional el 5 de enero del presente año. El nuevo presidente, Henri Ramos Allup
aclaró varias veces que era él quien controlaba el tiempo porque el cambio
había llegado. “Yo le quiero decir a mis pares, aquí todo cambió”, precisó
Ramos Allup.
Antes no era así, yo
podía hablar las veces que quisiera y el tiempo que me diera la gana y nadie me
decía nada, podía interrumpir a quien estuviera interviniendo sin importarme el
tema que estuviera planteando. Ahora esto es una dictadura de la derecha
endógena apátrida en combinación con el imperialismo norteamericano para
provocar una intervención militar en nuestro país y llevarse todo nuestro
petróleo que es de todos los venezolanos. Además quieren impedir que sigamos
ayudando a nuestros camaradas del ALBA y de Petrocaribe, tal como lo estableció
nuestro comandante eterno en todos los
foros internacionales.
Quien así pudiera
expresarse, de acuerdo a nuestra imaginación,
es Diosdado Cabello Rondón, quien como presidente convirtió a la
Asamblea Nacional en una casa de vecindad y feudo personal donde solo se hacía
y cumplía su voluntad. A los diputados que pensaban distinto les negaba el
derecho de palabra o les cortaba el audio para que no pudieran ser escuchados
mientras intervenían, los expulsaba de la cámara con juicios amañados como el
caso Richard Mardo, María Mercedes Aranguren y María Corina Machado, a quienes
en todo momento les negaron el derecho a la defensa.
Es el mismo teniente
golpista del ejército que conjuntamente con el comandante intergaláctico y
golpista mayor del 4 de febrero de 1992, quisieron acabar con la democracia
venezolana, asesinar al presidente Constitucional de Venezuela en esa época,
Carlos Andrés Pérez. Es el mismo que con ese golpe y alzamiento militar al
pasarse la Constitución Nacional por el sitio del cuerpo que no recibe luz
solar, produjo mas de 350 muertos que no
han pagado todavía. Y es el mismo que odia a muerte su pasado adeco familiar
porque sus padres fueron dirigentes del partido blanco en el estado Monagas.
Es el mismo que en
los últimos días como presidente de la Asamblea Nacional raspó la olla con la cara
hacia la calle al nombrar apresuradamente Magistrados del TSJ, violando todas
las normas constitucionales con el propósito de blindarse jurídicamente con los
juicios que tiene abiertos cuando fue gobernador de Miranda y los que pudieran
abrírseles cuando fue ministro. Igualmente nombró un mamotreto llamado asamblea comunal con el propósito de
confrontar con la nueva Asamblea Nacional elegida por el pueblo el 6D.
En ese mismo orden,
pero puertas adentro del recinto de la Asamblea Nacional, en los archivos de
administración no sabemos por ahora lo que hizo, pero que sin dudas en un
futuro no muy lejano lo sabremos, y tarde o temprano tendrá que pagar.
Gerónimo Figueroa
Figuera
geron2ff@hotmail.com
@lodicetodo
CNP:569
Monagas – Venezuela
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