lunes, 15 de febrero de 2016

JOSE JOAQUIN URDANETA CASTRO, ATRAPADOS CON SALIDA

Cuando la injusticia se convierte en ley, la rebelión se convierte en deber. Thomas Jefferson
La nación venezolana en general sufre una gran tragedia humanitaria por  los estertores agónicos de un régimen que pasa sus últimos días inventando disparates para mantenerse en el poder.       El mundo sigue con estupor, pero con silencio cómplice  los acontecimientos cotidianos nacionales.  

Vivimos momentos apocalípticos en cuanto a seguridad, salud, desbocada inflación, alimentación, carestía, hiperescasez, derechos civiles, institucionalidad democrática, ética política, estamos atrapados en el Tsunami chavista. Son tiempos de volición, diría Betancourt. La salida de Maduro y su pandilla es inminente. La decisión es simple e inmensa como nuestras llanuras perfiladas en el horizonte venezolano, “O ellos, o nosotros”, cuando expreso nosotros me refiero al país, a nuestra sociedad.

En mi escrito anterior lo dije con claridad,” para sepultar la quinta república debe nacer la sexta”, son tiempos de constituyente expresé. La razón  nos la da los últimos acontecimientos donde el TSJ comete “ultra petita” por segunda vez en menos de un mes al tomar decisiones más allá de la voluntad popular y al ejercer funciones que no le corresponde dentro de sus atribuciones constitucionales. El dominio del poder ejecutivo sobre el poder judicial es claro, público, notorio y evidente. Según la carta democrática, “cuando se demuestre el control de un poder sobre los demás poderes del estado, sus actos son nulos de nulidad absoluta”

El juego lo mantendrán trancado para mantenerse hasta dónde les sea posible en el poder, la guerra económica es una excusa de un gobierno positivista empírico, medularmente  inepto, cómplice de la corrupción e incapaz de dirigir a la nación. Por lo tanto tenemos dos opciones, o los desalojamos por las vías establecidas constitucionalmente o empezamos a construir cuevas en el Ávila para sobrevivir a los tiempos de barbarie que vendrán.

La inmediatez, el maniqueísmo, el narcisismo y las pretensiones futuras de algunos políticos no pueden estar por encima de los intereses de la nación. Lo primero que se debe hacer es reformular la ley del C.N.E y cambiar sus autoridades, de esta manera se iniciaría con pasos firmes la agenda para renovar el Estado Venezolano. Debemos dejar a un lado las nuevas leyes populistas y dirigir el esfuerzo hacia la economía y la renovación integral de las autoridades mujiquitas del estado venezolano.

Escuchemos a nuestro pueblo, vivamos sus angustias, miremos con ojos de amor su sufrimiento, promovamos la caridad característica de los venezolanos para que la solidaridad nos permita sobrellevar  un poco menos dolorosa la inmensa tragedia que vivimos los venezolanos sin excepción de ningún tipo. Pero sobre todo debemos rescatar la república y sus instituciones.         El tiempo del chavismo se agotó, no podemos permitir que el 0,01% de la población representada en los jefes del chavismo acaben con el futuro de nuestras familias. Su permanencia en el poder sólo busca protección para sus vidas y sus bienes, ya es tiempo de que la justicia los alcance.

Estamos atrapados en una tragedia nacional,  la constitución prevé por múltiples vías la salida del régimen, no podemos esperar que el chavismo continúe con su guillotina para cortarnos la cabeza de los que disentimos de su corriente ideológica y obligarnos a arrodillarnos, si lo permitimos entonces será el silencio, la esclavitud  y un eterno estado de excepción quien impere en Venezuela.

Jose Joaquin Urdaneta Castro
josejoaquinurdanetacastro@yahoo.es
@josejurdaneta
Zulia - Venezuela

No hay comentarios:

Publicar un comentario