Mientras que los estudios más serios de la Unidad Europea y España,
demuestran además de la preocupación científica y académica de universidades y
organizaciones especializadas, que aseguran la resta en años de vidas a los
ciudadanos, sus familias y las comunidades. Nos llama la atención el caso de
Maracaibo por “patético”, con una Alcaldía que ni poco le importa el tema y una
gobernación que no lava ni presta la batea para tales fines, Mientras los
maracaiberos vivimos a riesgos y al garete en materia ecológica.
El CO2 de la carga automotor de la ciudad, el calor e impuro aire
expulsado por los aparatos de aires acondicionados, las aguas residuales
repartidas a razón del descuido y del “peloteo” de las responsabilidades de
Hidrolago y la alcaldía, las partículas aéreas que flotan a consecuencias de
animales muertos, basura en alto estado de putrefacción; unas oficinas
inoperantes en materia de ambiente y un lago víctima de 10.000 litros de
contaminantes vertidos en segundos, hacen que el conjunto de aspectos
mencionados enfermen y mermen en años las vidas de los niños y niñas en nuestra
sociedad.
Lo lamentable de esto, es el “robo de las vidas” de los ciudadanos que
indiferentes a esta realidades, pernotan en nuestras calles sin pensar que el
día a día está destruyendo sus órganos, dando como resultado vidas cortas y
poco saludables. No conforme a este cuadro, la emisión de microorganismos, hoy
por hoy, identificados y observados por el Instituto de Ambiente de la
Universidad del Zulia, se multiplican en cantidad y sub clasificaciones que
dejan al científico en un estado de estupor increíble.
El caso venezolano, sus ciudades y Maracaibo en particular, hoy han
sobrepasado el umbral de lo permitido en sociedades donde sus universidades se
ocupan de detectar y recomendar soluciones al daño ambiental. El caso de las
madres expuestas a tanta y diferentes clases de contaminantes, tienden a parir
hijos de bajo peso, pero no conforme a esto, débiles y propensos a problemas
pulmonares y cardiacos en el futuro de esa generación, además de Hidrocefalias
y otras deformaciones.
Para los entes gubernamentales, sean Arias Cárdenas, Omar Prieto, Evelyn
de Rosales, y demás actores dedicados a ofrecer lo que no han logrado en tantos
años y menos aun los que ya pasaron por estas instancias que partieron con sus
alforjas llenas y nada dejaron en materia de seguridad ambiental a sus vecinos
y compatriotas. El posible apoyo de la ONU, en inversiones en materia del
Cambio Climático, se deja a un lado por las razones más estúpidas y donde se
habla de una soberanía, pisoteada por quienes la pregonan.
Estamos tan divorciados como personas y familias en este drama
ecológico, que ni exigimos a los postulante a la Asamblea Nacional que se
pronuncien en esta materia, tristeza debe darle a nuestras futuras generaciones
que las escogencias resultado de lo mediático y la regaladera, no aseguren un
planeta más verde y sostenible para esos que vienen en el tiempo. Es hora de
entender que ser parlamentario no solo es al momento de pedir el voto, sino la
actitud que los impulsa a ser candidatos.
Jose Ernesto Pons Briñez
joseponschene@hotmail.com
@joseponsb
Zulia - Venezuela
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