Cuando analizamos los
ingresos REALES de las familias Venezolanas, es preocupante observar la caída
de su PODER ADQUISITIVO, existe una estrecha relación entre salarios y los
niveles de INFLACIÓN; donde se observa como ésta ha afectado el nivel de
consumo de los venezolanos. Se evidencia en los niveles de POBREZA CRÍTICA Y
EXTREMA los cuales se han duplicado en los últimos 14 meses.
Nuestros análisis nos
permiten indicar como estarían conformados los distintos sectores que integran la estructura socio-económica de
la nación, en ese sentido, el sector E de la población es del 50%; en el sector
D 25%; en el sector C 18%; el sector B un 5% y el sector A de 2%. Ha esos fines
hemos estimado los niveles de ingresos que las familias reciben mensualmente,
que oscilan para los del sector E entre Bs. 20 mil y Bs.50 mil; sector D entre
Bs 50 mil a Bs. 75 mil; sector C entre Bs 75 mil a Bs 100 mil; sector B entre
Bs 100 mil a Bs 150 mil; sector A desde Bs. 150
mil en adelante. Lamentablemente estos niveles de ingresos en términos
REALES nos indican un desmejoramiento preocupante de la capacidad de consumo de
los venezolanos. Unido a los altos niveles de escasez, que estimamos en un 70%,
nos dan un cuadro social de desmejora creciente en calidad de vida y
posibilidades de cubrir sus más urgentes necesidades.
Cuando indicamos que
los niveles de POBREZA de las familias Venezolanas han aumentado
preocupantemente, lo sustentamos en el crecimiento del costo de la CANASTA
ALIMENTARIA, estimada conservadoramente alrededor de los Bs. 80.000, que es el
ingreso familiar mensual necesario para cubrir las necesidades de consumo de
alimentos de un mes de acuerdo a los precios de venta de los productos
adquiridos (hemos considerado que un 25% de ese consumo son de los alimentos
subsidiados por el gobierno).
Consideramos en
niveles de POBREZA a todas las familias con ingresos por debajo del costo de la
canasta alimentaria, que es de Bs. 80 mil. En niveles de pobreza CRÍTICA las
familias con ingresos por debajo de los Bs. 60 mil mensuales y en pobreza
EXTREMA a las familias con ingresos mensuales por debajo de Bs. 30 mil.
Estos análisis
NUMÉRICOS nos permiten indicar que el 80% de las familias Venezolanas se
encuentran con limitaciones para adquirir el total de la canasta alimentaria, y
por ello son consideradas como POBRES, al estar sus ingresos familiares totales
por debajo de los Bs. 80 mil al mes.
Muy preocupante que
las dos TERCERAS PARTES de las familias tienen ingresos mensuales por debajo de
los Bs. 60 mil mensuales y por ello son consideradas en POBREZA CRÍTICA con
bajos niveles de consumo de alimentos y limitaciones para cubrir otras
necesidades elementales. Estimamos que apenas alcanzan a cubrir un 60% del
total de la canasta alimentaria. La mayoría de estas familias han desmejorado
en los últimos 14 meses su capacidad de consumo entre 25% y 35%, esto demuestra
una compleja situación que los empobrece y angustia al ver como día a día son
afectados por perdidas creciente de su poder ADQUISITIVO y posibilidades de
mejorar sus carencias.
En pobreza EXTREMA
ubicamos a un 35% del total de la familia Venezolana y son los que tienen
ingresos mensuales familiares menores a los Bs 30 mil, su capacidad de consumo
es menor a la mitad de la canasta alimentaria y dependen en buena parte de
obtener los alimentos subsidiados en las redes públicas de distribución y
venta. Tienen múltiples limitaciones de consumo así como de otras necesidades,
este sector lo conforman principalmente desempleados y los que ejercen
actividades informales. Son los más golpeados por la crisis ECONÓMICA que nos
afecta.
Nuestros análisis
demuestran que en todos los sectores que integran la familia Venezolana hemos
tenido una desmejora continua y prolongada en nuestra capacidad de consumo y
sometidos a todo tipo de CARENCIAS.
En los últimos 4 años
hemos visto agravarse y complicarse nuestra forma de vida con caídas constantes
y crecientes en calidad y forma de vida, que nos colocan dentro de los últimos
países del mundo en niveles SOCIO-ECONÓMICOS y DESARROLLO HUMANO.
Como ejemplo podemos
ver el consumo de carne y leche del 2015 con un
promedio para los sectores E y D de la población entre 7 y 8 kilos de
carne y entre 35 y 40 litros de leche; ese es el consumo per cápita anual. Esto
indica que el 80% de la población está consumiendo menos de la mitad del
consumo promedio del Continente Americano.
Vicente Brito
vicent.brito@gmail.com
@vicentejbrito
Presidente
Red por la defensa al
Trabajo, la Propiedad y la Constitución
No hay comentarios:
Publicar un comentario