Hace dos años escribí
un artículo titulado "Capriles, el nuevo Hamlet"
(http://goo.gl/ue1OPE), en el que criticaba su indecisión y su falta de coraje
para defender el triunfo en las elecciones presidenciales de 2013. Pero me
quedé corto.
A Capriles ahora le
dio por criticar La Salida y a sus promotores, Leopoldo López, Antonio Ledezma
y María Corina Machado. Julio César Rivas hizo bien en responderle "Que no
tengas coraje no te da derecho a banalizar La Salida"
(http://goo.gl/efS7Rc); pero hay que decir más.
De no haber sido por
La Salida, el gran triunfo del 6-D habría sido imposible. Las protestas masivas
de 2014, la represión gubernamental, el sacrificio de los presos políticos, y
la labor incansable de Lilian, Mitzy y María Corina, abrieron los ojos de la
comunidad internacional y de los propios venezolanos. Los efectos de La Salida,
en conjunto con el descontento por el descalabro económico, impulsaron a los
electores a votar masivamente contra el gobierno.
Otro aspecto que
Henrique Capriles se niega a reconocer es el rol de las Fuerzas Armadas en el
triunfo del 6-D. Ese día se produjo una rebelión militar contra el fraude que
tenia preparado el trío Maduro-Cabello-Rodríguez.
En otras palabras: el
éxito de las parlamentarias no fue, como dice Capriles, solamente un triunfo
electoral; sino el resultado de las protestas estudiantiles, La Salida, la
crisis humanitaria, el pronunciamiento militar, la presión internacional, y,
por supuesto, la labor de la MUD. Querer apropiarse del 6-D y negar la
contribución de los demás factores es una actitud miserable.
Es extraño que
Capriles no esté celebrando la victoria, ni luchando por la liberación de los
presos politicos, sino destilando bilis contra La Salida. Uno no puede dejar de
sospechar que se trata de pura envidia. Envidia porque quienes promovieron La
Salida gozan de fama de valientes, mientras que a él se le critica públicamente
por su falta de coraje. Envidia porque Leopoldo se ha convertido en uno de los
personajes más reconocidos del mundo. Envidia porque Capriles jamás será
presidente (lo fue, pero no quiso defender su triunfo), mientras que Leopoldo
se acerca cada vez más a Miraflores.
Felicito a Primero
Justicia. Tiene un gran
futuro y una gran responsabilidad. Debe concentrarse en proporcionar liderazgo
y en resolver los graves problemas del país. No hay tiempo para pequeñeces ni
para mezquindades.
Capriles, deja el guayabo y ponte a trabajar. Y si quieres
ganarte un puesto en la historia, comienza por liberar a los presos políticos.
Luis
Jose Semprum
l.semprum@gmail.com
@LuisSemprumH
Miranda
- Venezuela
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