AURORA LACUEVA: LOGRAR CLASES CONSISTENTES

Dar clase no es fácil, y menos en medio de una situación económica tan negativa como la que hoy vive el magisterio. A lo cual se suman las serias limitaciones en infraestructura y dotación de los planteles públicos; y el hecho de que apenas estamos regresando a la presencialidad luego de casi dos años de una muy precaria educación a distancia. Sin embargo, los análisis apuntan como probable un crecimiento en la economía para este 2022, el cual esperamos se traduzca en mejores condiciones para el trabajo de las y los docentes del sector oficial: atender a ello debería ser prioritario para el gobierno, dada la trascendencia de la actividad educadora. En ese camino, resulta de la mayor importancia que cada profesora o profesor trate de realizar la mejor labor posible dentro de su aula, considerando las condiciones existentes.

Con los pies en la tierra, diría que una primera y relevante iniciativa es esforzarse por aprovechar el tiempo: cada minuto que el estudiantado pasa en el aula es valioso, no debe perderlo en actividades intrascendentes o, peor aún, sin hacer nada. Importa evitar las interrupciones, los “lapsos muertos” entre una y otra tarea, los inicios que se demoran demasiado y los finales antes de la hora, que dejan a los alumnos con los brazos cruzados y los cuadernos cerrados, esperando. Conviene tener preparado un buen arsenal de actividades, capaces de llenar el tiempo de clase con provecho.

Es posible que, a menudo, las limitaciones imperantes no permitan planificar y desarrollar iniciativas complejas. Pero sí se pueden realizar actividades cortas y sencillas, que no dejan de contribuir a la formación de las niñas, niños y adolescentes. Sobre todo cuando se suman, una tras otra, y cuando se varían. Así, después de algunos problemas matemáticos puede venir una amena lectura y su discusión. Después de hacer un dibujo con tres accidentes geográficos a elección puede escucharse una explicación del docente sobre un episodio de nuestra historia. Para a continuación anotar como tarea una pregunta sobre tal episodio y un pequeño experimento de química a cumplir en casa. En libros de texto y ciberpáginas es posible encontrar propuestas factibles, a fin de que el tiempo de la escuela sea, a pesar de todo, un tiempo bien aprovechado. 

Aurora Lacueva

lacuevat@hotmail.com

Aurora Lacueva

@AuroraLacueva

@Unoticias

Venezuela