lunes, 12 de julio de 2021

ACTUALIZACIÓN DE EL REPUBLICANO LIBERAL II: DIARIO DE OPINIÓN, http://elrepublicanoliberalii.blogspot.com LUNES 12/07/2021


 




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TITULARES DE HOY
12/07/2021

BEATRIZ DE MAJO: NUEVAS CARAS EN EL GOBIERNO ESPAÑOL. SOBREDOSIS

El gobierno del socialista Pedro Sánchez no ha querido involucrarse de manera activa en una de las más importantes gestas que se libran en Iberoamérica: el fin de la dictadura de imperante en Venezuela. Sin embargo, lo que ocurre en la Madre Patria es susceptible de afectar el sentido de la deriva que lleva nuestro país. No se trata de que la Unión Europea percibe a Latinoamérica con ojos españoles. Aunque ello se repite sin cesar, el asunto es bastante más complejo que esa aseveración simplista

Una buena sacudida de mata ocurrió a nivel gubernamental el pasado fin de semana. El agotamiento de la figura del Presidente del gobierno, la pérdida de las elecciones en la Comunidad madrileña y el abordaje poco eficiente de la pandemia han lesionado seriamente al gobierno del PSOE, en el momento en que debería estarse iniciando la recuperación económica, y como no decirlo, cuando ya se habla de una moción de censura a la cabeza de la Moncloa.

En apariencia, quien salió vencedor en términos políticos internos de la sacudida del gobierno español fue Podemos. El gobierno de Pedro Sánchez estaba haciendo agua por más de un agujero y había que detener el deterioro ante la opinión española. Salió vencedor Podemos porque dio una demostración de fortaleza, aunque ella no va a ser duradera. Los podemitas se le plantaron firme y dijeron que no a Pedro Sanchez ante su posición adelantada de querer reducir el número de Ministerios, y al final fue una seguidora de Pablo Iglesias –Yolanda Diaz- quien se alzó con la primera vicepresidencia, desplazando a un alfil de mucho calibre en el gobierno: Carmen Calvo. La cuota de poder de Unidas Podemos se encuentra ahora en manos de esta funcionaria hábil y fácil de trato que no conseguirá, sin embargo, sacar al burro de la barranca ya que Podemos está bastante peor que el PSOE, demasiado diezmado y desprestigiado. Sí queda claro la intocabilidad del partido y lo mucho que Sánchez depende del soporte de los morados para seguir en el poder: allí siguen estando sentados en el gabinete todos sus cinco ministros sin que la afeitadora de Sánchez haya podido sustituir a ni uno de ellos.

El tema del retorno venezolano a la democracia no estará en primera fila entre los temas prioritarios del gobierno rejuvenecido que acaba de instalarse pero sin duda que, por ejemplo, la partida de José Luis Abalos, el amigo de Delcy y defensor de Plus Ultra hará las cosas alguito más sencillas para el gobierno de Juan Guaidó . Ni hablar del hecho que la anterior separación del “Coletas” de los asuntos gubernamentales desinflará el tema del apoyo español a Maduro, que éste deseaba instaurar a troche y moche. El mundo libre rechaza las actuaciones totalitarias de la Revolución Bolivariana, su connivencia con el terrorismo y el narcotráfico, la corrupción instalada a sus anchas en el gobierno y en el estrato militar. Para los ideólogos y políticos socialistas este engendro venezolano es una rémora que les causa más dolores de cabezas y desapego que otra cosa.

En el terreno de lo que nos interesa a los venezolanos alguien que no quebraba una sola lanza a favor de la institucionalidad en nuestro país, la Cancillera Arancha González Laya, se va del gabinete con una pesada carga de incapacidad a cuestas: quien había sido una buena tecnócrata en órganos internacionales demostró, con el episodio marroquí, lo difícil que es tener entre las manos la política exterior de un país y puso de relieve que se puede improvisar

en muchos terrenos mas no así en el de la diplomacia. España ganará mucho con el advenimiento de un sucesor con vasta experiencia en las lides internacionales por haber manejado estos delicados temas desde la propia Moncloa. No le tocarán temas sencillos a José Manuel Albares porque deberá esforzarse en revertir el daño hecho a Marruecos, un socio de mucha importancia para España, y tratar de recomponer las debilitadas relaciones con los Estados Unidos. En este terreno, Washington se encargará de hacer saber a quién ha sido un buen conocedor de la causa prodemocrática venezolana – el nuevo Ministro de Exteriores - las ventajas para España de involucrarse proactivamente en devolverle las libertades y el respeto de las leyes e instituciones a Venezuela, a más de promover su despegue económico. Se sabe de Albares que es un individuo de la alta estima y de la confianza de la jefatura del gobierno y de los pocos en poder hablarle a Sánchez al oído.

¿Un acercamiento español a la oposición venezolana que sea más orientada a promover un rumbo político beneficioso redundará en un cambio de posición de la Unión Europea en torno a la solución a nuestra crisis política y humanitaria? No, pero aportará elementos de juicio importantes para el proceso de negociación que se avecina.

Así las cosas, algo se moverá a nuestro favor en los predios políticos españoles. Y es preciso anotar que con quien sí contamos de manera proactiva es con la Presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, llamada ella a jugar un papel muy protagónico en el periodo de tiempo que separa a su país de las elecciones generales a inicios del año 2023.

Estemos claros: todo indica que los días de Sánchez y los de sus socios de coalición están contados aunque en el organigrama se haya producido un cambio de nombres. Hay cansancio en el país más allá del manejo inadecuado de la pandemia. España atraviesa una importante crisis de debilidad económica y el estilo de gobierno actual lo que ha provocado es el agotamiento de las esperanzas de los ciudadanos en que la situación pueda cambiar. Más de la mitad de los españoles no lo quiere y otro tercio desconfía de él. Eso es lo que vienen demostrando las encuestas en una tendencia de apariencia irreversible.

El sello económico que se traduce en un equipo diferente y una nueva estrategia para manejar a España está llegando tarde.

Beatriz De Majo
bdemajo@gmail.com
@BeatrizdeMajo1
Venezuela – España

CARLOS ALBERTO MONTANER: CÓMO ENFRENTARSE AL TOTALITARISMO EN AMERICA LATINA

Franklin Delano Roosevelt en 1915 era una especie de viceministro de la marina americana durante la administración demócrata de Woodrow Wilson. En ese momento, en medio de graves desórdenes, asesinaron al presidente haitiano Jean Vilbrun Gillaume Sam. Poco después comenzó la ocupación de Haití mediante el desembarco de algo menos de 400 marines estadounidenses. Wilson no quería que los europeos intervinieran en los asuntos de su traspatio. FDR aprovechó para poner a prueba sus conocimientos de Derecho. Había estudiado “leyes” en la prestigiosa Universidad de Columbia en NY y redactó una Constitución para los haitianos.

No era cuestión de Constituciones. El país ha tenido 28 y alguna, como la de 1918, precisamente la redactada por FDR, es magnífica. Haití es el “hombre enfermo” de América Latina. (Así le llamaban a Turquía con relación a Europa). El caso haitiano ha servido, sin embargo, para educar a los presidentes estadounidenses en lo que no se puede hacer. FDR en 1934 ya era presidente de EE.UU y decretó la política de “los buenos vecinos”. Algo así como un panamericanismo que renunciaba a imponer sus valores y principios al sur del Río Grande. En ese año FDR decretó la salida de Haití y de Nicaragua y el fin de la Enmienda Platt que convertía a Cuba en una suerte de protectorado norteamericano.

Pero esa política tenía una severa contradicción. USA no podía sustraerse a su condición de “cabeza del mundo libre”, especialmente durante la Guerra Fría, de manera que Lyndon B. Johnson en 1965 utilizó a la OEA para evitar que se estableciera una segunda Cuba en República Dominicana.

Dejemos apuntados el ejemplo exitoso de RD, vecina de Haití, con una historia también muy turbulenta, que ya lleva casi 60 años de democracia y prosperidad creciente. ¿Por qué? ¿Acaso porque en RD se dieron cita varios hombres de Estado, muy diferentes entre ellos, con diferentes ideologías, pero un común amor a la patria, como Joaquín Balaguer, Juan Bosch, Ángel Miolán o José Francisco Peña Gómez? Tal vez, pero hay un elemento vertebrador en la fuerza utilizada desde el exterior. Esa fue una lección aprendida por los dominicanos.

El New York Times y Nicaragua

Gioconda Belli, la excelente escritora nicaragüense, ha publicado un gran artículo en el NYT. Se titula Daniel Ortega and the Crushing of the Nicaraguan Dream (Daniel Ortega y el aplastamiento del sueño nicaragüense). Primero establece sus credenciales sandinistas. Tenía apenas 20 años cuando se enfrentó a la dinastía de los Somoza. De los diez miembros de su célula clandestina sólo sobreviven dos personas: ella y otro más. Pero jamás confió en Daniel Ortega. Le parecía un tipo mediocre y capaz de traicionar. Lo hizo. Se convirtió en tirano. Sustituyó una dictadura por otra. Tenía, sí, astucia callejera, pero eso no lo hacía inteligente. Lo tornaba peligroso.

Humberto Belli, hermano de Gioconda, también había sido sandinista, pero rompió con ese grupo político tan pronto se hizo profundamente cristiano. Un día antes de que lo detuvieran alguien le avisó y escapó rumbo a Costa Rica. Los esbirros de Ortega revolvieron la casa y amenazaron a su esposa y a su hija de 16 años con violarlas antes de matarlas. Humberto fue un muy eficaz Ministro de Educación durante el gobierno de Violeta Chamorro. La señora, contra todo pronóstico, derrotó por diez puntos a Daniel Ortega en la década de los años noventa del siglo pasado. Hoy doña Violeta padece de Alzheimer. Quizás es mejor que nunca sepa que su hija Cristiana vive bajo arresto domiciliario; que a su hijo Pedro Joaquín –diputado, exembajador, Ministro, siempre periodista-, se lo llevaron preso y descalzo del hogar que compartía con su esposa de siempre, Martha Lucía; mientras su hijo Carlos Chamorro, también periodista, tuvo que exiliarse, otra vez, en Costa Rica. Por cierto, D. Oscar Arias, el expresidente costarricense, llamó al dictador nica por teléfono y Rosario Murillo impidió que se comunicaran.

La estrategia (si esa cosa burda se puede llamar así) de Daniel Ortega y de su “excéntrica” mujer y vicepresidente, Rosario Murillo, hoy odiados por el setenta y cinco por ciento de los nicas, es apresar a todos los posibles candidatos a la presidencia. Cristiana, Arturo Cruz, y así hasta una docena de posibles contendientes están en el punto de mira. Salvo Cristiana, que está detenida en su casa, el resto de los prisioneros siguen desaparecidos. La pareja de dictadores nicas (me atrevo a predecir lo que le hubiera dicho D. Oscar Arias a Ortega)) enconrará que celebrar elecciones en esas circunstancias eliminaría cualquier vestigio de legitimidad que conservaran.

Revivir la Legión del Caribe, pero a una escala continental.

En los años 40 del siglo XX los guatemaltecos eligieron a Juan José Arévalo, los cubanos a Ramón Grau y a Carlos Prío, los ticos a José Figueres, los venezolanos a Rómulo Betancourt y los boricuas a Luis Muñoz Marín. Entre todos ellos se fue forjando la “Legión del Caribe” para luchar a favor de la democracia y contra los espadones. Esa voluntad de lucha se estrelló contra los gobiernos de Estados Unidos que preferían mantener en el poder a sus “son of a bitch” porque estábamos en tiempos de la Guerra Fría.

Hoy la situación es otra. La ola antidemocrática proviene del desamparado comunismo cubano, del populismo de Maduro y del galimatías de Bolivia. Afortunadamente, Biden entiende lo que es trabajar colegiadamente. La OEA y Almagro deberían ser el punto de partida. A la democracia hay que defenderla no sólo con palabras. Como en la Europa de la OTAN, es perfectamente legítimo sacar a cañonazos a Gadafi de Libia o mantener a Kosovo libre de los serbios. Es cuestión de forjar el instrumento. Como sabemos, contrario a la intuición, el órgano determina las funciones.




Carlos Alberto Montaner

montaner.ca@gmail.com

@CarlosAMontaner

Cuba- Estados Unidos-España

ENRIQUE AVOGADRO: LOS DEMOLEDORES ETERNOS

"Es hora de aullar porque, si nos dejamos llevar por los poderes que nos gobiernan y no hacemos nada por contrarrestarlos, se puede decir que nos merecemos lo que tenemos". José Saramago

Hace un par de semanas, le propuse un ejercicio de imaginación al que califiqué como posible, aunque altamente improbable: qué pasaría en la cúpula del kirchnerismo si el Presidente Clown renunciaba o quedaba inhabilitado para gobernar. Desde el jueves, creo que la probabilidad de que eso ocurra creció exponencialmente. Máximo Kirchner, príncipe heredero de la soñada dinastía y Presidente de la bancada oficialista en Diputados, disparó con munición gruesa contra el Gobierno (teóricamente, el suyo), preguntándole cómo reaccionaría ante el FMI si un simple laboratorio extranjero, productor de vacunas, le doblaba el brazo y le imponía un cambio en la legislación. Alberto Fernández, casi llorando, le respondió desde Tucumán ayer, diciendo que jamás cedería y que, antes de hacerlo, se iría a su casa. Si no estuvieran jugando con los 100.000 muertos que alcanzaremos la semana próxima, tal vez todos deberíamos reírnos.

Una vieja frase debiera explicar historia reciente de la Argentina: "la experiencia es lo que hace que un hombre que ha tropezado dos veces con la misma piedra, lo confiese la tercera vez". Después de haber visto qué hizo el kirchnerismo con la República -y también lo que intentó y no logró- durante sus primeros doce años en el poder nacional, un sector importante de la ciudadanía (48%), enojado con Mauricio Macri, creyó en el nuevo truco electoral de Cristina Fernández y pensó que Alberto Fernández los haría volver mejores. A dieciocho meses de la asunción, está clarísimo que el único perfeccionamiento que este engendro llamado Frente para Todos adquirió en el llano fue cómo demoler más rápidamente la Constitución, la democracia, la economía, la libertad y hasta la propia sociedad.

Recordemos la cárcel en que nos encontramos los cuarenta y cinco millones de argentinos; el discurso de odio que baja desde el Gobierno mientras imputa a la oposición por sus continuos fracasos y la califica de nazi; las arbitrariedades contra las garantías individuales y la propiedad privada; la renovada guerra gaucha que ayer mismo tuvo su máxima expresión de rechazo en San Nicolás; la monumental inflación y el incendio del Banco Central; la hipocresía en la defensa tuerta de los derechos humanos; el aislamiento internacional, la sociedad con los regímenes asesinos de Venezuela, Nicaragua, Cuba, Rusia, China e Irán, y la repugnante cesión de soberanía; los obscenos privilegios de su clase política; la destrucción terminal de la educación; la apropiación de tantas cajas del Estado; el desempleo, la proliferación del narcotráfico y la violencia; la forzada emigración de nuestros jóvenes; la pretensión de domesticar a la Justicia; los permanentes misiles contra la casi extinguida clase media.

Contra la opinión de muchos, aplaudo sin restricciones la celebración de internas dentro de Juntos por el Cambio, ya que ratifican la unidad y permitirán a quienes resulten candidatos contar con una legitimidad de origen de la que carecen quienes son designados a dedo por los grandes popes; en particular, celebro la participación de Ricardo López Murphy en la competencia por la Ciudad Autónoma, que me parece un logro republicano notable. Por el contrario, lamentaré enormemente -si, finalmente, se confirma- que esa competencia fuera con María Eugenia Vidal; mis amigos expertos en la geopolítica provincial me aseguran que allí aportaría seis puntos adicionales a la coalición opositora. Su resistencia impone imaginar a un general negándose a comandar al ejército en una acción decisiva; ¿cuál sería, entonces, el futuro de su carrera militar?

Mientras tanto, hay algunos movimientos que agravan la preocupación general acerca de la posibilidad de un fraude masivo en las próximas elecciones; estarán a cargo de los jueces María Romilda Servini de Cubría y Alejo Ramos Padilla -muy justificadamente sospechados de servir al kirchnerismo- en los dos principales distritos electorales, y de Raúl Bejas (ex apoderado del PJ tucumano) que integra la Cámara Nacional Electoral. La declaración de quiebra del Correo Argentino, si bien apelada y con razón, puede dejar la manipulación de los telegramas del acto comicial en manos de los fieles soldados de Cristina Fernández, y circulan versiones acerca de la adquisición por el Poder Ejecutivo de un sistema informático perverso.

Por ello, es indispensable que todos nos preparemos para enfrentar ese permanente y dañino problema. Los ciudadanos de a pie, fiscalizando responsablemente en todas las mesas del país, con nuestros celulares alerta, para evitar votos falsos y alteraciones en planillas y telegramas, y recurriendo a las fuerzas de seguridad cada vez que los patoteros de siempre pretendan imponer sus malsanos criterios y sus trampas habituales. Y las autoridades partidarias, requiriendo la presencia de veedores internacionales independientes, incluyendo expertos informáticos, para verificar y garantizar la pureza y legalidad de los resultados. Porque sin 2021 no habrá 2023 y, en medio de la pandemia y del terror inducido, hay otro peligro aún mayor: la abstención. Si no vamos a votar, si nos quedamos en casa por miedo al contagio mientras ellos llevan y pagan a los más pobres para hacerlo, cuando se dispersen el día y la batalla deforme, la victoria será de los otros y habrán ganado los bárbaros (¡gracias, don Jorge Luis Borges, por conjeturar!), a quienes habremos entregado nuestro país para que lo demuelan definitivamente.

Una vez más, el destino está en nuestras manos y debemos sacrificarnos para obtener la clara victoria de la República y de la democracia. Este año, lo único que importa, lo que determinará si ganamos o perdimos el futuro, se medirá de un único modo: si el Gobierno obtiene -o no- los diputados adicionales que necesita para contar con quórum propio o los senadores que le permitan alcanzar los dos tercios en el H° Aguantadero.


Enrique Guillermo Avogadro
ega1@avogadro.com.ar
@egavogadro
Argentina

OMAR ÁVILA: OCUPÉMONOS DE LA GENTE

La vida se nos está yendo entre la pandemia, la crisis y la violencia. La mayoría tratando de sobrevivir a ese día a día agobiante y desgastante desde todo punto de vista. Por si fuera poco, se ha perdido la empatía y los valores; mientras que el resentimiento y la envidia ganan terreno. Así se evidencia en las redes sociales: El que publica algo positivo o negativo, igual le saltan encima desatando la ira de los “dueños” de su teclado, más no de la realidad y proceso de cada usuario.

Esos casos se evidencian más que todo en los temas o tendencias políticas, donde la gente debe tener claro que existen varios escenarios y posiciones, donde seguramente la mayoría, puedan ofrecer alternativas viables, el punto está en priorizar y tratar de unificar criterios si realmente se busca el bien común.

En Unidad Visión Venezuela decidimos ponernos una gríngola y hacer caso omiso a todos aquellos “políticos” y a los que a través de las redes sociales atacan sin fundamento o argumento alguno a los que no tenemos una visión diferente etiquetándonos de traidor, colaboracionista, vendido y un largo etcétera.

Por tal razón, a lo largo de la agudización de la crisis, ante los múltiples problemas existentes en Venezuela, hemos venido haciendo propuestas en todos y cada uno de los ámbitos que nos perjudican como país, no solo quedarnos en la denuncia, sino de asumir nuestro papel como políticos, como ciudadanos y parte de ese pueblo que sufre producto de las malas políticas, de encontrarse en el medio del “fuego” entre dos bandos que no le interesa la gente. En ese sentido, hemos venido desarrollando un programa social propio; el cual denominamos #VisiónSolidaria donde hemos ayudado a miles de personas, especialmente los más vulnerables, bien sea con medicinas, alimentos, comidas preparadas o asesorías en cualquier ámbito.

Para sacar al país adelante debemos empezar por ayudar al prójimo, motivarlos y trabajar con ellos en la formación ciudadana; las dificultades que enfrentamos debe ser el foco de toda acción política. La divergencia que se produce al enredarse en temas subalternos deja al venezolano en situación de no representación, de no tener quien alce la voz por sus problemas.

Por tal razón emplazamos a la dirigencia a que dejen de pensar en pequeñas cosas, en su bienestar económico, a dejar de seguir presentándose como los puros y castos, porque memoria corta no tenemos. Sin embargo, todos somos necesarios para poder recuperar a nuestra Venezuela, y eso solo es posible en unidad, nuestro pueblo lo sabe, y como tal nos exige unirnos por el bien superior.

Basta de pensar en individualidades, el bienestar común, debe prevalecer sobre el bienestar individual, sólo así se podrán lograr y alcanzar los objetivos de la reconstrucción de un país próspero para el presente inmediato y futuras generaciones.

Omar Ávila
oavila1973@gmail.com
@omaravila2010
Diputado a la AN
Venezuela

NOEL ÁLVAREZ: LA FÁBULA DE LAS ABEJAS

En el siglo XVIII, el médico y economista holandés, Bernard Mandeville, escribió La fábula de las abejas, obra que lleva por subtítulo: ‘‘Cómo los vicios privados contribuyen a la prosperidad pública”. En tono irónico, Mandeville criticó cómo multitud de personas vivían de las miserias del prójimo. Justificó la existencia del fraude y la corrupción en favor de la prosperidad pública. En esta obra, se observa que el político egocéntrico doma a los seguidores más salvajes, a los idólatras y sectarios, para obtener el mayor beneficio posible y mandar sobre ellos con facilidad.

Para ilustrar su idea, Mandeville se sirvió de una colmena, sociedad inglesa de su tiempo, que vivía con lujo y desahogo y en la que las abejas se afanaban por satisfacer sus propios deseos y vanidades. En la colmena mientras algunos con grandes haberes y exiguos quebraderos de cabeza se metían en negocios de pingües ganancias, otros vivían condenados a la guadaña y la azada, agotando su fuerza y sus músculos para poder comer, no sé por qué esta historia me resulta familiar. La colmena estaba, así mismo, llena de bribones que aprovechaban en su propio beneficio el trabajo ajeno, si bien estos solo se distinguían en sus artes de los respetables y laboriosos por el nombre, pues no había lugar o profesión en la que no se diera el fraude.

Con todo y eso, aunque cada parte estuviera llena de vicios, el conjunto era un paraíso. El vicio y la corrupción eran la grasa que mantenía lubricada la maquinaria de aquella colmena. “La envidia y la vanidad eran los ministros de la industria; la estupidez y el capricho movían la rueda del comercio”, decía Mandeville. Aunque en aquellos tiempos no existía la venta de productos de belleza por catálogo, la cual, según asegura alguna fémina, genera enormes fortunas, si se registraban los vicios en la administración pública, los cuales brindaban infinidad de comodidades. De este modo el vicio nutría el ingenio, y lo estimulaba en aras de la prosperidad, dando lugar a los desahogos de la vida.

La colmena estaba llena de hipócritas que, aunque conscientes de sus propios engaños, clamaban a Júpiter contra los ajenos y a gritos pedían honradez. Y un día, el dios exasperado, llenó con ella sus corazones. Entonces se desplomó el precio de los alimentos, no hubo más trigo para el pan, los bares se quedaron vacíos, la honradez convirtió en inútil la labor de los abogados, y hasta los que fabricaban candados y rejas se quedaron sin oficio. Los médicos no tuvieron mas enfermedades que curar porque no se encontraban medicinas entre las virtuosas abejas. En definitiva, no hubo negocio para tantos. Y así poco a poco las abejas se fueron yendo de la colmena. Desaparecieron la industria y las manufacturas, pues no había quien pagara por los lujos y refinamientos de los dueños del poder. Al final toda la colmena tuvo que emigrar al hueco de un tronco.

El poema concluye “dejad de dar la murga: solo los locos se esfuerzan por construir una colmena grande y honrada; pues pretender disfrutar de las comodidades del mundo, conseguir fama en la guerra y vivir con desahogo, sin grandes vicios, es solo utopía que habita en el cerebro del hombre”. Y sentencia: “Cualquier edad dorada tiene lo mismo en común con la honradez que con las bellotas”.

Hasta las abejas dan lecciones de tolerancia a los políticos sectarios. Conservan a la reina, son republicanas, respetan la libertad y producen rica miel para endulzar el paladar de toda la sociedad sin distinción de clases y trabajan con tranquilidad entre las flores. Los socialistas del siglo XXI deberían volver a la rosa y alejarse de tan peligroso fanatismo. Miren, miren la abeja. “Rara vez hace un panal cerca de las cloacas; prefiere las ánforas, los agujeros de las riscas, los huecos de las encinas para formar su república”, dice un periodista español.

Sin embargo, en contra de lo que planteaba Mandeville, en estos últimos 300 años se han puesto de manifiesto las consecuencias negativas de los comportamientos fraudulentos o poco éticos dentro de la economía. Algunos estudiosos señalan que desde el fraude de la South Sea Company en 1720, que consistió en inflar artificialmente el precio de sus acciones y que condujo al crack de aquel año, pasando por la estafa piramidal ideada por Carlo Ponzi en 1920 que, entre otros factores, llevó a la debacle de 1929, y a la Gran Depresión. Así hasta llegar a los escándalos de las hipotecas “subprime” con la caída de Lehman Brothers en 2008, que alumbró el inicio de una gran crisis que aun hoy la padece el mundo.

Noel Álvarez
Noelalvarez10@gmail.com
@alvareznv
Coordinador Nacional del Movimiento Político GENTE
Venezuela

ROMAN IBARRA: CRIA CUERVOS Y …

Había previsto escribir acerca de las últimas declaraciones del ex diputado Juan Guaidó, de sus infelices reiteraciones, según las cuales, la elecciones de gobernadores y alcaldes no son la solución a la crisis venezolana, proponiendo como alternativa la continuación del mantra del fracaso, ahora como ¨Acuerdo de Salvación Nacional¨, es decir, la abstención otra vez. Qué fastidio con ese señor!

En lugar de esa tontería, hay otros acontecimientos muy lamentables que copan la preocupación y angustia de todos los venezolanos, como es la reaparición de la violencia extrema en sectores populares del país, y la incapacidad o negativa del gobierno a enfrentarlos.

Para nadie es un secreto, y está registrado en la historia reciente, que Chávez en su inmensa irresponsabilidad convirtió a los malandros en ¨buenandros¨ para masajearles el ego, ponerlos de su lado, y utilizarlos como mecanismo de control social en las barriadas populares para evitar la expresión de su malestar en contra de la ¨revolución¨.

Les creó las ¨zonas de paz¨, esto es la cesión de territorios en los cuales estos pranes reinarían a sus anchas en materia delictual, siempre y cuando estuvieran al servicio del gobierno.

Para ello, no solo les dieron financiamiento, sino que no les exigieron un desarme real. Entregaron cuatro chopos, y revólveres fuera de uso para el show mediático,

y se reservaron el poder de fuego real. Hoy operan como ya es sabido, con las armas más sofisticadas, y sobre todo con un interminable suministro de municiones, cuya adquisición solo es posible por la vía del Estado. Cómo acceden a ellas entonces?

Llegada la época de las vacas flacas por la caída de los precios, y la producción petrolera, además de la corrupción desenfrenada, dejaron de financiar a sus socios del hampa, y estos decidieron autofinanciarse por la vía del secuestro; la extorsión; trata de blancas; tráfico de drogas, y por supuesto el sicariato. Eso los ha convertido en los virreyes de sus respectivas zonas de influencia, y el gobierno lo sabe, pero aliados al fin, se hicieron los locos.

De manera que ese monstruo es creación exclusiva del gobierno de Chávez-Maduro, y no como dijo la inútil Ministra del Interior, que ¨la derecha es la responsable de la violencia¨. Debería quedarse callada, en vez de balbucear babiecadas.

Darle poder a estos hampones es responsabilidad exclusiva de este gobierno de 22 años, pero las desigualdades sociales acumuladas en los barrios populares vienen de más atrás. Los gobiernos de la democracia civil tienen también una importante cuota de responsabilidad en la creación de esos cinturones de miseria alrededor de las grandes ciudades, y su aprovechamiento con sentido utilitario y populista.

No obstante, aunque ya sabemos quiénes son los responsables del poder de las bandas hamponiles, está en juego la existencia del Estado, y su viabilidad. En términos constitucionales, la violencia es competencia exclusiva del Estado, y todos somos parte. De ahí que no tengo dudas acerca de qué lado debemos estar los ciudadanos.

Todos debemos cerrar filas para ayudar al gobierno y sus instituciones para controlar, y si es posible acabar con estas bandas empleando la inteligencia; la contrainteligencia policial; la negociación, y hasta la fuerza para aplastarlos, evitando la violación de DDHH, pero nadie tiene derecho a destruir la tranquilidad ciudadana y la vulneración del Estado.

Urge un acuerdo nacional para enfrentar a estos delincuentes, y garantizar la tranquilidad de la ciudadanía. Debe cesar la alianza de sectores del gobierno con el mundo hamponil, y ponernos todos al servicio de la tranquilidad, la paz, el derecho, el progreso, y la democracia.

Acompañemos al gobierno a lograr este objetivo de la paz contra la delincuencia desbordada, y depongamos intereses subalternos. El país es de todos

Roman Ibarra
romanibarra@gmail.com
@romanibarra

Venezuela