sábado, 16 de marzo de 2019

ACTUALIZACIÓN, "EL REPUBLICANO LIBERAL II”, DOMINGO 17-03-2019,

PAULINA GAMUS, LA JAURÍA

EL REPUBLICANO LIBERAL en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 18 minutos
Mis conocimientos sobre historia de la volubilidad humana no alcanzan para saber si existe otro país distinto de Venezuela, en que la popularidad de un líder político de oposición se desplome con tanta rapidez. Hoy fulano está en la gloria, es aclamado como el salvador, el héroe, el supremo, y mañana, por algunas circunstancias: un error o alguna declaración que no le cae bien, la jauría tuitera lo transforma en traidor, vendido, indeseable y colaboracionista, sin obviar alusiones ofensivas a sus supuestas preferencias sexuales. Hace seis años las masas aclamaban a Henrique Capril... más »

RAFAEL DEL NARANCO, ASFIXIADA LA LIBERTAD DE INFORMAR

EL REPUBLICANO LIBERAL en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 32 minutos
Hablar de los medios de comunicación en el país -cercenados sin miramiento-, es explorar una situación que refleja el desmedido poder de un gobierno que ha afrentado uno de los pilares de toda democracia: la libertad de informar. En Venezuela se han venido deteniendo a periodistas, obstruyendo diarios, emisoras de radio, cadenas de televisión y revistas, de forma absorbente, y eso ha llevado a escarnecer la información, columna básica que recoge la Constitución de la República en su Artículo 57: “Toda persona tiene derecho a expresar libremente sus pensamientos, ideas u opiniones d... más »

ALBERTO BENEGAS LYNCH, ATROPELLOS DE UNA CASTA POLÍTICA DE INTOCABLES

EL REPUBLICANO LIBERAL en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 45 minutos
En otras ocasiones me he detenido a subrayar lo que a juicio de muchos intelectuales es el uso desaprensivo de la expresión “clase social” puesto deriva de la idea que hay personas de una clase o naturaleza distinta. Esta noción deriva del marxismo en cuyo contexto se sostiene que el burgués y el proletario son de una clase o naturaleza distinta ya que poseen una estructura lógica diferente. En este sentido son consistentes con su premisa, aunque ésta esté errada ya que ningún marxista explicó en que estriba concretamente la diferencia, en que reside el manejo distinto de los silog... más »

ADOLFO RAMÓN RAMÍREZ TORRES, USO DESPROPORCIONADO DE LA FUERZA

EL REPUBLICANO LIBERAL en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 1 hora
Literalmente estamos siendo gobernados por el uso desproporcionado de la fuerza de las armas, la intolerancia, la obscenidad, la más crasa ignorancia y la mayor impunidad de los actos de corrupción que, por sus montos y daños patrimoniales, son los más grandes en la historia de la humanidad. Somos una sociedad humillada que está obligada a encontrar el camino de la dignidad, libertad y felicidad propias de una civilización del Siglo XXI. Se trata de encontrarnos con los derechos más elementales de la vida, que nos han sido arrebatados por un grupo de asaltantes del poder público p... más »



IBÉYISE PACHECO, MADURO ACTIVA PLAN PARA ATRINCHERARSE,

EL REPUBLICANO LIBERAL en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 1 hora
Los cubanos han insistido a Maduro en la necesidad de replegar al gobierno hacia Guayana ante los escenarios de pérdida de control de poder en Caracas, bien sea por una acción militar externa o interna, o un estallido social Deben encenderse las alarmas. La designación de una comisión presidencial que se apostará en el sur de Venezuela es parte de la activación del Plan Escudo Guayanés, aseguran fuentes de la FANB. Se trata de un plan militar con el que dividirían a la nación, si los usurpadores se ven obligados a salir del poder. En pocas palabras, es el escenario del régimen para... más »

ALBERTO JOSE HURTADO B.¿Y LA MOROSIDAD DE LA BANCA VENEZOLANA?

EL REPUBLICANO LIBERAL en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 1 hora
Las instituciones bancarias tienen un papel fundamental en la economía, son responsables de la intermediación de fondos, es decir, captan recursos que luego facilitan a los agentes económicos con necesidad de financiamiento. De esta manera, fungen como canalizadores del ahorro y la inversión en una actividad cuya rentabilidad está condicionada por el nivel de riesgo que son capaces de asumir. Los bancos enfrentan diferentes tipos de riesgo, entre ellos el riesgo de crédito. La posibilidad de ganar o perder capital como resultado de la actividad crediticia constituye uno de los prin... más »

PAULINA GAMUS, LA JAURÍA


Mis conocimientos sobre historia de la volubilidad humana no alcanzan para saber si existe otro país distinto de Venezuela, en que la popularidad de un líder político de oposición se desplome con tanta rapidez. Hoy fulano está en la gloria, es aclamado como el salvador, el héroe, el supremo, y mañana, por algunas circunstancias: un error o alguna declaración que no le cae bien,  la jauría tuitera lo transforma en traidor, vendido, indeseable y colaboracionista, sin obviar alusiones ofensivas a sus supuestas preferencias sexuales.

Hace seis años las masas aclamaban a Henrique Capriles casi con la misma pasión con que hoy rodean y aúpan a Juan Guaidó. Pero como Capriles decidió no inmolarse ni llevar consigo al matadero chavista a una parte de la población que lo apoyaba,  pasó a ser merecedor de todos los epítetos antes mencionados y especialmente el de cobarde.  Ahora que el mundo entero vio de lo que son capaces los criminales que se mantienen aferrados al poder, con la movilización abierta de los Colectivos, los sucesos de Ureña y el asesinato a mansalva de los Pemones, el 23 de febrero último, podrán cuando menos agradecer a Capriles haberle evitado ese duelo a muchas familias venezolanas.

Otros no han tenido mejor suerte, por ejemplo Julio Borges. Siempre ha sido un eficiente operador político al que se debe en gran parte el rumbo que ha tomado Venezuela desde el 23 de enero de este año 2019. Juan Guaidó no deja de reconocerle esos méritos. Pero la jauría logró instalar en las mentes de muchos opositores un odio que Borges no merece. Todavía hay irracionales que lo acusan de pactar con el gobierno de Maduro en el llamado diálogo de 2018 en República Dominicana cuando fue Borges quien denunció las trapacerías de Jorge Rodríguez y se levantó de la mesa sin acordar nada.

Desde entonces diálogo, negociación o acuerdo, se han convertido en palabras prohibidas. Quien desde el lado opositor las pronuncie o asome siquiera, debe ir preparándose para un linchamiento tuitero que podría llegar hasta físico Y es aquí justamente donde quiero detenerme: he vivido mucho, no aspiro a la gloria terrena, mucho menos a la inmortalidad y cada vez me importan menos las opiniones ajenas.  Por consiguiente pregunto, ¿cómo es que se van a ir el usurpador Maduro y su camarilla?

Veamos algunas opciones

Invasión militar estadounidense

Aunque muchos la piden abiertamente y otros la anhelan soto voce,  ya sabemos que no va a ocurrir. Basta oír y leer las declaraciones de los altos funcionarios del gobierno de Trump que se han manifestado con mayor entrega en el caso venezolano, para convencerse de lo lejano de esa posibilidad.

Golpe Militar

Desde hace veinte años muchos acarician este sueño que no pasa de ser eso.  El de abril de 2004,  cuando la fuerza armada no había llegado al grado de cubanización que padece hoy día, fue si embargo una tragicomedia de equivocaciones.  Mejor bájense de esa nube quienes cuentan con la fuerza armada actual integrada por enchufados, arrodillados y aterrorizados.

Acción del Mosad

El chavismo lleva veinte años acusando al MOSAD israelí de intervenir en Venezuela. Supongamos que esta vez éste decide demostrar su pericia y actuar contra Maduro con un teléfono trampa, como hicieron con el terrorista palestino Yehie Ayash.  ¡Ajá! ¿y qué hacemos con los otros: Cilia, Diosdado, los hermanitos Rodríguez y los Tarek, sin dejar a un lado a Padrino López?  Opción descartada.

Presionar y presionar

¿Que nos queda entonces? Una presión in crescendo, interna y externa y unas sanciones económicas que padeceremos todos. Esta vez si, la verdadera guerra económica que obligue a los usurpadores a sentarse en una mesa con representantes de la oposición y veedores internacionales  y así pactar su salida. Es decir, el cese de la usurpación. De allí dependen el gobierno de transición y las elecciones libres.

A Juan Guaidó le tocará encabezar este proceso como presidente de la Asamblea Nacional. Ya hay algunos ladridos desde  la jauría que buscan horadar el afecto y la confianza en su liderazgo. Si esta tendencia se extiende, la jauría le habrá hecho una vez más la cama al régimen.  Si no tenemos la entereza y la racionalidad para mantenernos firmes ante todas las adversidades que se avecinan y para ratificar el apoyo a Juan Guaidó y  a la Asamblea Nacional, habremos perdido la mejor oportunidad, en los últimos veinte años, de liberarnos de la tiranía.

Paulina Gamus
@paugamus

RAFAEL DEL NARANCO, ASFIXIADA LA LIBERTAD DE INFORMAR


Hablar de los medios de comunicación en el país -cercenados sin miramiento-, es explorar una situación que refleja el desmedido poder de un gobierno que ha afrentado uno de los pilares de toda democracia: la libertad de informar.

En Venezuela se han venido deteniendo a periodistas, obstruyendo diarios, emisoras de radio, cadenas de televisión y revistas, de forma absorbente, y eso ha llevado a escarnecer la información, columna básica que recoge la Constitución de la República en su Artículo 57: “Toda persona tiene derecho a expresar libremente sus pensamientos, ideas u opiniones de viva voz, por escrito o mediante cualquier otra forma de expresión y de hacer uso para ello de cualquier medio de comunicación y difusión, sin que pueda establecerse censura”.

Más de la mitad de los medios de noticias –prensa, radio y canales de televisión– ya no coexisten con normalidad en el país. Han cerrado demasiados por la presión gubernamental o negándoles, en el caso de los diarios, los insumos para su impresión.

La misión del periodista es narrar la realidad de la sociedad, al ser el equilibrio entre los ciudadanos, el poder gubernamental y el espacio general en que se envuelve.

No se puede olvidar que sin libertad de pensamiento, la humanidad estaría en los albores de la Baja Edad Media. Y si hoy nos encontramos en medio de un progreso de valías sostenibles, es gracias al sacrificio de muchos hombres y mujeres imbuidos de intrepidez, los cuales rompieron con arrojo las ataduras de la opresión ante el deber de informar.

Matar al mensajero es siempre la meta del cazador subrepticio. El reportero va desguarnecido: lleva individualmente bolígrafo, papel, grabador o cámara. Y ahí está, en medio de la trifulca o el suceso cotidiano, en primera fila, jugándose la supervivencia por una misión muy por encima, la mayoría de las veces, de sus propias fuerzas, al tener la irresponsabilidad de un perturbado, la templanza de un cuerdo, la valentía del deber por encima del propio miedo, y esa ingenuidad de creer que vale la pena jugarse la existencia por algo tan prosaico, poco definido y hasta fantasioso, como el derecho a informar sobre la cotidiana objetividad que nos circunda.

Y eso por marchar al encuentro de una avidez febril: ir en pos de la noticia diaria a sabiendas de que ella pudiera ser la primera víctima en esa búsqueda. No es masoquismo, es pasión desbordante: el periodismo sigue siendo la profesión más arrebatadora para todo hombre o mujer con ensueños.

Esta tarea es un compromiso de seres honrados, admirables, poco o mal pagados, malmirados sin compasión por el poder, mientras la única satisfacción es la gratitud de la sociedad a la que sirven.

La libertad de expresión no es una concesión magnánima, sino un derecho. Decir que en la Venezuela actual se respeta esa opción, es una utopía. Aquí, ahora mismo, la represión está latente y parte de las fauces inquisitivas del Estado.

El muy acreditado periodista cordobés, Pablo Sebastián, en momentos en que el gobierno español surgido tras la muerte de Francisco Franco, tuvo insinuaciones ilegales, expresó con claridad:

“Sí, el contrapoder es la función principal de la prensa en una democracia. Pero cuando la democracia falla, o no existe, o sus reglas de juego son tan ambiguas que permiten la existencia de un solo poder sin controles, es por la prensa, por la creación, por el pensamiento, por el debate informativo e intelectual, el lugar por donde se escapa un hilo de libertad capaz de atar los pies de un poderoso gigante, un maldito Gulliver que puede caer al suelo en un país en que el autócrata consideró a todos menores de edad y no preparados ni para la democracia ni para la libertad”.

El trabajo del reportero es, con mucho, uno de los más peligrosos, como lo prueba el elevado número de profesionales que pagan todos los años con su libertad, y aún con su vida, al denunciar arbitrariedades y atropellos del poder constituido u organizaciones guerrilleras o mafiosas. Y es que la libertad de comunicar sigue siendo, en buena parte de los países, una asignatura dolorosa.

En la Declaración de los Derechos Humanos hay cinceladas estas palabras: “La libre comunicación de los pensamientos y de las opiniones es uno de los derechos más valiosos del hombre. Todo ciudadano puede, por lo tanto, hablar, escribir e imprimir libremente”.

No es la primera vez que lo expresamos, y desgraciadamente no será la última en una tierra antaño de gracia, y ahora imbuida de totalitarismos denigrantes:

Los periodistas no seremos el llamado “cuarto poder” ni falta que hace. Sí nos corresponde ser la calma del afligido, el soporte del solitario, la voz de los humillados por las injusticias, y la mano presta cuando el inquisidor de turno mancilla a la sociedad y pisotea sus naturales valores basados en la libertad.

Rafael del Naranco
rnaranco@hotmail.com
@Rnaranco

ALBERTO BENEGAS LYNCH, ATROPELLOS DE UNA CASTA POLÍTICA DE INTOCABLES


En otras ocasiones me he detenido a subrayar lo que a juicio de muchos intelectuales es el uso desaprensivo de la expresión “clase social” puesto deriva de la idea que hay personas de una clase o naturaleza distinta. Esta noción deriva del marxismo en cuyo contexto se sostiene que el burgués y el proletario son de una clase o naturaleza distinta ya que poseen una estructura lógica diferente. En este sentido son consistentes con su premisa, aunque ésta esté errada ya que ningún marxista explicó en que estriba concretamente la diferencia, en que reside el manejo distinto de los silogismos y, por otra parte, que le ocurre al hijo de un proletario y una burguesa o que le sucede específicamente a la estructura lógica del proletario que se gana la lotería y así sucesivamente.

Como también hemos apuntado en su oportunidad, los sicarios nazis luego de galimatías varios en sus absurdas clasificaciones de lo que denominan arios y semitas llegaron a la conclusión que el tema era mental adoptando la concepción marxista al comprobar que solo diferenciaban a las víctimas de los victimarios rapando y tatuando a los primeros pues no había posibilidad alguna de clasificar en base a rasgos físicos.

Como queda dicho, si bien los marxistas son consistentes con sus premisas erradas, los que recurren inocentemente a la expresión “clase social” son del todo incoherentes con sus premisas porque no quieren decir que las personas de distinta clase sean de naturaleza distinta, lo que quieren decir es que obtienen ingresos distintos. En ese caso es mejor decir eso mismo: ingresos medios, ingresos altos e ingresos bajos. Por otro lado, el concluir que los de ingresos altos en general pueden acceder a una educación formal de mejor calidad que los de ingresos bajos es una grosera perogrullada pero en una sociedad abierta en donde la movilidad social es máxima no significa que la gente muta su naturaleza o cambia de clase de persona al elevar o reducir sus ingresos.

Más aún, aludir a la clase baja constituye una torpeza repugnante, referirse a la clase alta es de una frivolidad digna de la mayor tilinguería y hacerlo respecto a la clase media es llamativamente anodino.

Una vez aclarado lo anterior, vamos a lo que Milovan Djilas bautizó como “la nueva clase” en un best-seller que lleva ese título y que se tradujo a once idiomas. Un ex cómplice y partícipe directo del totalitarismo que conoció desde adentro todas las artimañas del poder como fueron los también resonantes casos de Eudocio Ravines y Whittaker Chambers sobre los que he escrito en otras ocasiones. Los tres consideraron en una primera instancia que los desbarranques se debían a malas gestiones del sistema, tardaron en percatarse que el asunto no radica en las personas que administran un sistema autoritario sino en el sistema mismo: en el manejo arbitrario de las vidas ajenas, en el abuso del poder político, en la soberbia de los mandamases, en otros términos, en la falta de libertad y el consiguiente atropello a los derechos de las personas y la aniquilación de las autonomías individuales.

Se trata en este caso efectivamente de una casta por el momento de intocables, una clase que agrupa a personas que apuntan a la extender el poder a todos los vericuetos de lo que hasta el momento era vida privada y a mantener y ampliar los privilegios de ese conglomerado de políticos irresponsables. Es una agrupación de sujetos que tienen como denominador común un deseo irrefrenable de dominación y una marcada inclinación a la acumulación de privilegios y dádivas de procederes turbios. Una clase por cierto aborrecible cuyo eje central apunta al daño sistemático e institucionalizado a seres inocentes. Una mezcla diabólica entre lo estipulado por Orwell y Huxley respectivamente.

La elaboración de Djilas es extrapolable no solo a todos los regímenes dictatoriales sino a estructuras políticas a veces consideradas democráticas pero que en verdad son cleptocracias en las que los sueños de vida, las libertades y las propiedades están en manos de desvaríos monumentales de los gobernantes de turno.

En este contexto la nueva clase paradójicamente se instala argumentando que deben eliminarse las clase mientras filtran el abuso de poder envuelto en un dogmatismo y una intolerancia inaceptables para todo lo que se le opone, lo cual indefectiblemente gangrena al cuerpo social. Esta casta de políticos y funcionarios no son todos los burócratas ni todos los políticos, son los que tienen una sed ilimitada de chupar la sangre del prójimo. Son los arrogantes que consideran que son los iluminados del momento y que deben contar con un cheque en blanco para imponer sus veleidades sobre las vidas y haciendas ajenas. En esta instancia del proceso de evolución cultural hay y ha habido políticos –los menos– que estrictamente limitan sus funciones a la preservación de derechos que son anteriores y superiores a la existencia de todo gobierno.

En cambio, la nueva clase está formada por ideólogos en el sentido más difundido del término, a saber, los que pretenden imponer sistemas cerrados, terminados e inexpugnables, es decir, a contracorriente del espíritu liberal por naturaleza abierto a procesos evolutivos que toman el conocimiento con la característica de la provisionalidad abierta a posibles refutaciones en el contexto del respeto recíproco a proyectos de vida distintos a los que caprichosamente se esmeran por encajar los megalómanos

Todo comienza con los primeros pasos. En nuestro caso, se trata de avances del aparato estatal en faenas que los principios republicanos no permiten pero que un poco de estatismo posibilita ganar elecciones. La célebre demagogia. En el caso de progreso material hay quienes sienten envidia por los que obtienen ingresos más suculentos que los suyos y pretenden el manotazo. Como no queda bien robar a mano armada, les piden a los gobernantes que hagan la tarea por ellos a través de muy distintos procedimientos fiscales vociferando que la riqueza es el resultado de la suma cero en lugar de atender la realidad en cuanto a que es un proceso dinámico y cambiante en una sociedad abierta según la capacidad de cada cual para atender las necesidades de los demás.

Pero al instalar una venda sobre los ojos para que no pueda espiarse la realidad, se consolidan en el poder los políticos inescrupulosos y quedan atrás los que no se atreven a adoptar medidas groseramente intervencionistas y estatistas. De este modo entonces se convierte el asunto en una carrera por promesas cada cual más “progresista”, este aditamento absurdo que en verdad alude a su antónimo puesto que permite enganchar a los incautos para arrastrarlos con la furia del fanático al retroceso moral y crematístico.

Más abajo veremos algunas sugerencias para revertir esta tendencia que promete acabar con la democracia tal como fue concebida para vivir en libertad en oposición al autoritarismo, pero ahora mencionamos algunas de las recetas iniciales que causan el problema de marras.

Veamos muy telegráficamente siete pilares sobre los que se basa la nueva clase de donde derivan otras medidas autoritarias que en escalada tarde o temprano terminan en una fatídica tendencia a amordazar la prensa independiente y a enclaustrar mentes a través de sistemas educativos vigilados y reglamentados por estructuras políticas a contracorriente de sistemas abiertos en competencia.

En primer lugar, la manía del igualitarismo de resultados que en contraposición a la igualdad ante la ley la pretenden prostituir sustituyendo de contrabando el ante por el mediante la ley y así en mayor o menor medida se aplica la guillotina horizontal que inexorablemente difiere de lo estipulado por la gente con sus compras y abstenciones de comprar en los supermercados y afines. Esta mal asignación de los siempre escasos recursos necesariamente se traduce en derroche, lo cual, a su vez, hace que bajen los salarios e ingresos en términos reales.

En segundo término, la idea desformada del derecho confundiéndola con pseudoderechos. Derecho es la facultad de usar y disponer de lo adquirido legítimamente pero de ningún modo el echar mano por la fuerza al fruto del trabajo ajeno. En un medio oral acaba de declarar un conocido político argentino que “frente a cada necesidad nace un derecho”, en realidad una barrabasada superlativa que pone al descubierto el desconocimiento más palmario no solo del “dar a cada uno lo suyo” según la definición clásica de la Justicia sino que bajo tierra apunta a arrancar recursos de los bolsillos de otros recurriendo a la violencia.

Tercero, la nueva clase usa un lenguaje hipócrita al alardear de una defensa de los pobres cuando los expolia a través de medidas antieconómicas, al tiempo que suele acumular riquezas malhabidas y siempre engrosa sus propias filas con privilegios de muy diverso calibre.

Cuarto, se basa como apoyo logístico en legislaciones sindicales que operan con recursos descontados coactivamente de los trabajadores y con representaciones compulsivas.

Quinto, la nueva clase descansa en alianzas con empresarios prebendarios que como un intercambio de favores les entregan mercados cautivos en el contexto de una economía cerrada a la competencia nacional e internacional.

Sexto, estatizan actividades comerciales al efecto de incrementar su poder aunque arrojen déficits crónicos y los servicios disminuyan de calidad a ojos vista.

Y séptimo, recurren a subterfugios monetarios y bancarios alegando un tragicómico fine tuning para que la nueva clase pueda hacerse indebidamente del fruto del trabajo de los gobernados a quienes esquilman sin piedad aparentando luchas contra la inflación.

Si nos damos cuenta de estas exacciones por las que aumenta el gasto público, los impuestos y la deuda estatal, es menester producir cambios para deshacernos de la nueva clase. No tiene sentido limitarse a la queja y pretender cambios aceptando un sistema que incentiva y entroniza la nueva clase.

Antes me he referido a posibles modificaciones al efecto de introducir vallas a la extralimitación del poder, pero es del caso repasarlos brevemente, no necesariamente para que se adopten tal cual sino como una invitación a usar las neuronas para pensar en otros procedimientos que dejen sin efecto los atropellos de la nueva clase o casta consubstanciada con un Leviatán desbocado.

Para estos propósitos antes hemos propuesto meditar acerca de posibles cambios de carácter sustancial en los tres poderes para reafirmar la democracia al estilo de los Giovanni Sartori de nuestra época alejándola de los peligros de los Hugo Chávez de nuestro tiempo.

En esta línea argumental, sugerimos que los integrantes del Poder Legislativo sean ad honorem como algunos de los cargos en las repúblicas de Venecia y Florencia de antaño, dejando de lado legislaciones incompatibles con el Estado de Derecho que abren las puertas a conflictos de intereses inaceptables e incompatibles con el sentido jurídico de la Ley.

Proponemos también aplicar al Ejecutivo la recomendación de Montesquieu que se encuentra “en la índole de la democracia” en el sentido de proceder a elecciones por sorteo al efecto se subrayar lo dicho por Karl Popper en cuanto a la imperiosa necesidad de trabajar en el fortalecimiento de las instituciones y no sobre los hombres para que “el gobierno haga en menor daño posible”, a lo cual puede agregarse la idea del Triunvirato tal como fue argumentado originalmente en la Asamblea Constituyente estadounidense según relata en sus memorias James Madison.

Por último, introducir y generalizar el sistema de arbitrajes privados en el Poder Judicial sin ninguna limitación, incluso sin la necesidad que quienes actúen sean abogados, en el contexto de una carrera judicial rigurosa y estricta bien alejada del positivismo legal que ha hecho estragos al derecho.

La inercia y las telarañas mentales no permiten salir del pantano del statu quo y del espíritu conservador en el peor sentido de la expresión. No puede resolverse un problema insistiendo en adoptar las causas que lo provocan. La nueva clase se está riendo a carcajadas homéricas de todos nosotros. Observan con deleite obsceno los preparativos de los procesos electorales y el acto comicial mismo con las fauces abiertas de par en par para engullirse el próximo botín.

Si las propuestas que recogemos para liberarnos de la nueva clase no satisfacen por algún motivo, piénsese en otras salidas pero no podemos quedar con los brazos cruzados frente a este espectáculo dantesco y al mismo tiempo bochornoso por el que quedan francos los tenebrosos pasillos hacia nuevos socialismos, al tiempo que se derrumba la democracia y el constitucionalismo que desde la Carta Magna de 1215 fueron ideados para limitar el poder y no para introducir una canilla libre de dislates que perjudican a todos pero muy especialmente a los más necesitados.

Se encienden las alarmas cuando representantes de la nueva clase declaran que quieren resolver los problemas de la gente, en lugar de dejarla en paz. Hay que combatir los residuos atávicos de la tribu, de ese modo los intocables de hoy no lo serán en el futuro.

Alberto Benegas Lynch (h)
@abenegaslynch_h

ADOLFO RAMÓN RAMÍREZ TORRES, USO DESPROPORCIONADO DE LA FUERZA

Literalmente estamos siendo gobernados por el uso desproporcionado de la fuerza de las armas, la intolerancia, la obscenidad, la más crasa ignorancia y la mayor impunidad de los actos de corrupción que, por sus montos y daños patrimoniales, son los más grandes en la historia de la humanidad. 

Somos una sociedad humillada que está obligada a encontrar el camino de la dignidad, libertad y felicidad propias de una civilización del Siglo XXI. Se trata de encontrarnos con los derechos más elementales de la vida, que nos han sido arrebatados por un grupo de asaltantes del poder público para quienes no existe la obligación de respeto a los derechos humanos ni a ninguna regla de convivencia que pueda frenar sus impetus de resentimientos y desmedidos deseos de enriquecimiento.

No se trata de luchar contra una dictadura militar convencional; en contrario, se trata de luchar contra quienes han trepado a la riqueza fácil y mal habida usando los argumentos de la solidaridad y el bien colectivo; se disfrazaron de socialistas, cuando lo cierto es que sólo buscaban sustituir el disfrute de privilegios sin el necesario conocimiento para la conservacion y renovación de la riqueza. 

Todo lo que tocan lo agotan, lo destruyen, lo aniquilan como la plaga daña al cultivo; no conocen la conservación, el mantenimiento y la planificación. Esa y la corrupción son las causas del desabastecimiento y de los pésimos servicios públicos, incluyendo el reciente apagón, que pretenden atrubuirselo a un hackeo de "del imperio". 

En sus ambiciones desmedidas fracturaron la unidad familiar, y más de tres millones de venezolanos han tenido que emigrar frente a la barbarie, y a muchos de los que se quedaron los están obligando a tomar agua del Guaire, con todas las consecuencias de insalubridad que ello implica. Nos prometieron un río con playa y nos dieron y bebedero contaminado. 

Hablan de soberanía pero la aventura cubana está enquistada en las actividades de inteligencia y contrainteligencia de la República. Hablan de la integridad territorial y simultáneamente, sustentan la tesis que el diferendo del Esequibo es hijo de posiciones imperialistas. "El sol nace en el Esequibo", pero nuestro petróleo alimenta a quienes sostienen que ese territorio es de Guyana. 

En 20 años han sido incapaces de estimular la producción y nunca lo harán porque les da escozor todo aquello que implica trabajo; se apoderan de centros de producción para consumir sus inventarios y luego se inicia el desmantelamiento de la infraestructura para sacarle provecho hasta a la última lámina de zinc. 

Ante esa sombría realidad la sociedad venezolana está legitimada para la aplicación del artículo 350 constitucional, declarándose en desobediencia civil y solicitar solidaridad y ayuda a la comunidad internacional en los términos preestablecidos para la defensa de los Derechos Humanos

Adolfo Ramírez Torres
@Fiforamirez

IBÉYISE PACHECO, MADURO ACTIVA PLAN PARA ATRINCHERARSE,


Los cubanos han insistido a Maduro en la necesidad de replegar al gobierno hacia Guayana ante los escenarios de pérdida de control de poder en Caracas, bien sea por una acción militar externa o interna, o un estallido social

Deben encenderse las alarmas. La designación de una comisión presidencial que se apostará en el sur de Venezuela es parte de la activación del Plan Escudo Guayanés, aseguran fuentes de la FANB. Se trata de un plan militar con el que dividirían a la nación, si los usurpadores se ven obligados a salir del poder. En pocas palabras, es el escenario del régimen para atrincherarse.

El plan fue elaborado por Hugo Chávez en el 2012 junto a los cubanos. En su momento, algunos líderes opositores tuvieron información de este proyecto. Ahora Maduro, en la comisión presidencial que anunció para obtener “asesoría” ante el apagón, agregó a Rusia, China, e Irán. La comisión la preside Delcy Rodríguez. Lo que Maduro llama “comisión” es el equipo ejecutor del Plan Escudo Guayanés.

Los cubanos han insistido a Maduro en la necesidad de replegar al gobierno hacia Guayana ante los escenarios de pérdida de control de poder en Caracas, bien sea por una acción militar externa o interna, o un estallido social con el colapso de los servicios. Estudios previos habían determinado que esa zona es un territorio apropiado para resistir, con acceso a agua, sistema eléctrico, comunicaciones y que en caso de bloqueo por el Mar Caribe, ofrece salida hacia el Atlántico a través del río Orinoco. Además allí está la mayor fortaleza de defensa antiaérea. La zona dispone de varias pistas de aterrizaje donde tienen guardados misiles, equipos de soporte para cargar combustible, arrancadores de los aviones, etc. La coordinación militar correspondería a la Redi Guayana junto a las unidades aéreas. El control de la población indígena es uno de los puntos a destacar en esta operación. La masacre en Santa Elena de Uairén podría ser un adelanto de sus intenciones.

El Plan Escudo Guayanés no solo es de resistencia. También considera la posibilidad de “bajarle el suiche” a toda Venezuela, como de hecho sucedió con el apagón. Y en este punto se activan las sospechas con lo ocurrido en el país porque este plan estaba en proceso de ensayo durante la paralización del servicio eléctrico. Y como las casualidades no existen, acababa de arribar a nuestro territorio –el 6 de marzo según reporteros de la zona– el general cubano Ramiro Valdés, siniestro personaje a quien Chávez había encargado del sistema eléctrico.

Por eso algunos están convencidos de que los eventos que desencadenaron esta crisis eléctrica fueron provocados en la etapa de ensayo, aunque esto no lo confirman las fuentes militares. Incendios previos y deterioro en los equipos habían sido causa de apagones en ocasiones anteriores. Sin embargo, también pudo haber sido accidental por falta de destreza en la manipulación de variables en torno al sistema eléctrico. En cualquier caso, la incapacidad para explicar la razón del caos y las complicaciones de un país a oscuras sin servicio de agua, han llevado a que lo acontecido sea evaluado como parte de las debilidades del plan de operaciones. Con todo esto la duda persiste: ¿ha sido el apagón parte inicial del Plan Escudo Guayanés?

Sobre la comisión nombrada por Maduro, el ministro de la Defensa Vladimir Padrino López anunció que Delcy había mudado su puesto de comando para el estado Bolívar. Al respecto, la periodista Pableysa Ostos detalló que Delcy está hospedada en el piso 1 (completo) del hotel Eurobuilding de Ciudad Guayana donde se registró bajo un nombre falso, llegó fuertemente custodiada por cubanos, con funcionarios de la DGCIM y expertos en tecnología. En el lugar han sido vistos el gobernador de Bolívar, Justo Noguera, y el Ministro para la Energía Eléctrica, Luis Motta Domínguez. Las fuentes reiteran que el cubano Ramiro Valdés continúa en territorio venezolano.

¿Qué significa la activación del Plan Escudo Guayanés? “Están tomando las previsiones de perder Caracas y poder ejercer el poder desde allí”, asegura una fuente de inteligencia. El traslado de Delcy a la zona es parte del la etapa de ejecución. Previamente Maduro y el alto mando militar habían estado también en el lugar.

“La vicepresidenta está haciendo la coordinación para atrincherarse, bajo dos probables escenarios. El primero, que Maduro negocia y se entrega, o no negocia y cae, y entonces el resto que no tiene espacio para negociar, se queda allí resistiendo, en cuyo caso Delcy sería la presidenta. De hecho, hace rato ambos se mantienen separados, físicamente. El segundo escenario, Maduro se atrinchera. Éste pareciera como el más probable, si se cree en la palabra del dictador que ha insistido en morir con las botas puestas y estar dispuesto a inmolarse.

Lo descrito es parte de los planes de un dictador y su equipo de delincuentes. Falta lo fundamental: las acciones del mundo que defiende la democracia.

Ibéyise PachecoCuenta  
@ibepacheco ‏

ALBERTO JOSE HURTADO B.¿Y LA MOROSIDAD DE LA BANCA VENEZOLANA?


Las instituciones bancarias tienen un papel fundamental en la economía, son responsables de la intermediación de fondos, es decir, captan recursos que luego facilitan a los agentes económicos con necesidad de financiamiento. De esta manera, fungen como canalizadores del ahorro y la inversión en una actividad cuya rentabilidad está condicionada por el nivel de riesgo que son capaces de asumir.

Los bancos enfrentan diferentes tipos de riesgo, entre ellos el riesgo de crédito. La posibilidad de ganar o perder capital como resultado de la actividad crediticia constituye uno de los principales riesgos a los que se enfrentan las instituciones bancarias en la actualidad, y su gestión representa todo un reto para este tipo de organizaciones. Esto debido a que todas las crisis bancarias han tenido como principal característica la presencia de problemas de solvencia. Por ejemplo, en Venezuela la crisis bancaria de mayor impacto fue la de 1994 y provocó grandes desequilibrios en la economía como consecuencia de la elevada insolvencia del sistema. Por lo tanto, resulta relevante para todos los agentes económicos conocer el nivel de morosidad y las variables que lo determinan para tener una idea de la salud del sistema bancario.

La literatura económica reconoce un conjunto de características de la actividad bancaria que influyen en el nivel de morosidad del sistema, entre ellas se suele mencionar el nivel de liquidez, la rentabilidad, la política crediticia, la eficiencia en el manejo del riesgo, entre otras (Ahumada y Budnevich, 2001; Salas y Saurina, 2003). Además de estos elementos, también se reconocen factores macroeconómicos que explican el comportamiento y la tendencia de la morosidad de la banca, entre los cuales se destacan: a) la evolución de la actividad productiva, principalmente porque cuando la economía entra en una fase recesiva, las empresas y los hogares sufren la reducción de sus ingresos; y b) la tasa de desempleo, debido a que sucesivos aumentos en esta tasa ocasiona que las familias reduzcan sus posibilidades de obtener los ingresos necesarios para cubrir sus necesidades, reduciéndose su capacidad para cumplir con las obligaciones crediticias previamente asumidas, incluso si se está recibiendo políticas gubernamentales de subsidios y transferencias.

Para Venezuela, la evidencia empírica demuestra que (Atuve y Hurtado, 2018): 1) existe una relación de largo plazo entre la morosidad de los bancos y las variables liquidez monetaria, inflación, tasa de interés activa, tipo de cambio, rentabilidad de la banca, cartera de créditos y liquidez del sistema bancario; 2) mayores niveles de liquidez, rentabilidad y más altos saldos en la cartera de crédito, disminuyen la morosidad de la banca venezolana; y 3) más inflación, mayores tasas de interés pasiva y altos niveles de liquidez del sistema bancario, generan mayor morosidad. Estos resultados se explican en gran medida por el impacto que tienen los controles vigentes en el sector y en la economía. De igual forma, revelan que el componente sistémico de las variables microeconómicas y macroeconómicas seleccionadas es de enorme importancia para el sistema bancario venezolano.

El reto ahora es reconocer el papel que tienen los bancos en la economía, dado que son actores claves para incentivar el crecimiento y desarrollo. En este sentido, es necesario crear espacios para que el gobierno y los entes privados monitoreen y actúen de acuerdo al comportamiento que vaya teniendo el sistema bancario, principalmente por el desafío que representa la evolución de la cartera de créditos y los resultados que de esta se desprendan.

Alberto Jose Hurtado B
@ajhurtadob