jueves, 30 de mayo de 2019

ACTUALIZACIÓN, EL REPUBLICANO LIBERAL II, VIERNES 31-05-2019

GLADYS SOCORRO: LA ÚLTIMA CARTA PACÍFICA

Unknown en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 14 minutos
Todos los caminos conducen a Roma. Llueve, truene o relampaguee se buscará transitar la vía electoral para salir de la crisis por encima de la arremetida bélica, la antipolítica y el juego perverso de la abstención. ¿Cómo y cuándo? Eso está por definirse. Lo cierto es que es el único camino sensato que nos llevaría a la pacificación interna del país una vez que ni chavistas ni opositores han podido desaparecerse entre sí. El Grupo de Contacto liderado por la Unión Europea y las conversaciones en Noruega son la última carta pacífica y diplomática que ambos bandos tienen a mano. Cual... más »

TRINO MÁRQUEZ: HAY QUE APOYAR A NORUEGA

Unknown en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 22 minutos
Gracias al golpe de audacia dado en enero por la oposición representada en la Asamblea Nacional, la dictadura y el drama venezolano pasaron a ser de nuevo tema central de la agenda internacional. No ha sido opacado ni por la crisis política nicaragüense, ni por el descalabro económico del gobierno de Mauricio Macri, que puso, de forma insólita, a la señora Cristina Kirchner a puntear las encuestas para la presidencia de Argentina. Como se sabe, en un giro inesperado, la conocida viuda decidió optar por la vicepresidencia para evitar un todos contra Cristina y aprovechar al máximo ... más »

CARLOS PADILLA: NEGOCIACIÓN CON MUERTE ANUNCIADA

Unknown en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 31 minutos
Se negocia con un delincuente que nos amenaza, se negocia con un vendedor regateando precios; pero no se puede negociar con quien utiliza ese mecanismo de supuesto entendimiento para fines no relacionados con los aspectos o asuntos de la negociación y si para sus propios fines que trata infructuosamente de ocultar. Todo negociador, que pudiéramos llamar “bien intencionado”, lleva al encuentro tabuladas las aspiraciones que quisiera lograr en máximas, intermedias y mínimas pues si solo lleva máximas la negociación fracasará. No se debe ir a una negociación a entregarlo todo. Eso n... más »

LEANDRO RODRÍGUEZ LINÁREZ: LA OPOSICIÓN ROSA

Unknown en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 40 minutos
La Belle Epoque enmarcó la vida europea haciendo alusión a una “bella época” que se circunscribió a la vida de ese continente antes de los horrores de la primera guerra mundial, conflicto bélico que agudizó las añoranzas. Sin lugar a dudas, el mundo comenzó ser distinto luego de la primera guerra mundial, el trabajo se hizo necesario aún para las clases pudientes, las armas se especializaron a raíz de esas crueles batallas, las naciones comenzaron a recelarse unas a otras… la guerra pasó ocupar un lugar preponderante en las políticas de Estado, es decir, mucho más. En Venezuela ex... más »

ENRIQUE CONTRERAS RAMIREZ: NUESTRAS UTOPÍAS

Unknown en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 49 minutos
Hay quienes creen o creemos que la democracia es una utopía, que no es posible mientras se siga dando en nuestras sociedades latinoamericanas y particularmente en Venezuela, la influencia colonialista y dominante del eurocentrismo, quienes impusieron los modelos de sociedad que actualmente imitamos, me refiero a esos dos modelos que nos presenta el socialismo y el capitalismo, pues los intereses de los que lo impulsan niegan en la practica la posibilidad real del ejercicio democrático, en esa línea de la verticalidad y relaciones de poder que se esconde detrás de un llamado Estad... más »

JOSE LUIS ZAMBRANO: CON LA VERDAD SALDRÍA EL RÉGIMEN

Unknown en EL REPUBLICANO LIBERAL II - Hace 57 minutos
La libertad de un país encadenado a un sistema oprobioso, no se destraba con sueños apacibles. No es un hallazgo mental ni una conjetura por atragantarme de emociones. Las mafias del poder tienen sus aviones de príncipes, sus alcobas señoriales, sus entuertos medidos y sus ganas inmensas de continuar traficando con la paz de un pueblo. Se requiere más que un paraíso discursivo o una mera premisa para alcanzar la meta hartamente señalada. Los abusos dejaron de camuflarse para volverse evidente en el mundo entero. El mercado de almas perturba a todos, pues el hambre descalabra al vec... más »


GLADYS SOCORRO: LA ÚLTIMA CARTA PACÍFICA

Todos los caminos conducen a Roma. Llueve, truene o relampaguee se buscará transitar la vía electoral para salir de la crisis por encima de la arremetida bélica, la antipolítica y el juego perverso de la abstención. ¿Cómo y cuándo? Eso está por definirse. Lo cierto es que es el único camino sensato que nos llevaría a la pacificación interna del país una vez que ni chavistas ni opositores han podido desaparecerse entre sí.

El Grupo de Contacto liderado por la Unión Europea y las conversaciones en Noruega son la última carta pacífica y diplomática que ambos bandos tienen a mano. Cualquier otra vía ya ha sido cerrada. Llegar a la intervención militar sería el peor de los escenarios para todos los involucrados, comenzando por el venezolano de a pie. Todos sabemos cuando comienza pero no cuándo ni cómo termina, además de la inestabilidad sociopolítica que podría desatarse debido a la alta polaridad que arropa al país.

A nadie le conviene llegar al extremo bélico. Aunque estén listos para todo, Estados Unidos intentará minimizar sus riesgos en el caso Venezuela. Apoyan el encuentro en Noruega para quemar todos los cartuchos en la búsqueda de una salida pacífica a la crisis nacional. "Lo único que hay que negociar con Nicolás Maduro durante la mesa de negociaciones que tendrá lugar en Oslo son las condiciones de su partida", dijeron en un comunicado.

Pero de no llegarse a ningún acuerdo por esa vía, sin duda tomarían medidas más agresivas para sacarlo del poder y preservar así su seguridad nacional y la del continente.

Nicolás Maduro y su grupito saben que eso sería su exterminio, por lo que no les ha quedado más opción que aceptar el salvavidas negociador de los europeos. Sin embargo, harán todo lo posible por dilatar cualquier acuerdo, aunque les sería cuesta arriba con los ojos del mundo puestos en ellos.

En la otra esquina, si bien el presidente Juan Guaidó subió el tono de su discurso esta semana al increpar a Maduro a decidir si quiere salir por las buenas o por las malas de Miraflores, está claro que busca una salida pacífica en Noruega. Con sus palabras del domingo lo dijo todo: "Habrá una mediación, no un diálogo ni una negociación". Si fue tan enfático en la separación de términos es porque debe estar claro en sus significados. Según la Real Academia Española, el término mediación se refiere a "interponerse entre dos o más que riñen o contienden, procurando reconciliarlos..." o "tomar un término medio entre dos extremos".

¿Llegarán a cohabitar las dos posiciones? ¿Será eso posible? ¿A la oposición le tocará ceder en algunas cosas para alcanzar el objetivo supremo del cese de la usurpación? ¿Maduro negociará la silla a cambio de algunas prebendas de salvación? ¿Quiénes serán los sacrificados en el toma y dame? Muchas cosas están por definirse en los próximos días. El tiempo juega en contra de Guaidó debido a la crítica profundización de los problemas de los venezolanos. Mientras tanto, los radicales aprovechan para darle rienda suelta a su verbo incendiario e invocar acciones militares sin reparar en sus consecuencias impredecibles, a la par de los abstencionistas que ya llaman a no votar sin que ni siquiera se haya decidido algo al respecto. Para cuándo y cómo se hará no lo se, pero el trabajo mundial está enfocado en la ruta electoral y para eso hay que estar preparados.

Gladys Socorro
@gladyssocorro

TRINO MÁRQUEZ: HAY QUE APOYAR A NORUEGA

Gracias al golpe de audacia dado en enero por la oposición representada en la Asamblea Nacional, la dictadura y el drama  venezolano pasaron a ser de nuevo tema central de la agenda internacional. No ha sido opacado ni por la crisis política nicaragüense, ni por el descalabro económico del gobierno de Mauricio Macri, que puso, de forma insólita, a la señora Cristina Kirchner a puntear las encuestas para la presidencia de Argentina. Como se sabe, en un giro inesperado, la conocida viuda decidió optar por la vicepresidencia para evitar un todos contra Cristina y aprovechar al máximo los números que la favorecen.

La crítica situación venezolana constituye un problema regional mayúsculo por la estampida que ha desatado. El último informe de Acnur habla de al menos 3.700.000 venezolanos  que han huido de las garras de Maduro. Esta fuga se ha producido durante lo que va de la segunda década del siglo XXI. 

La diáspora venezolana, unida a la pavorosa pobreza que azota a la inmensa mayoría del país, al colapso de los servicios  públicos,  a la escasez creciente de gasolina, a la multiplicación de las protestas callejeras y a la violación sistemática de los derechos humanos de ciudadanos comunes y corrientes y de dirigentes políticos, han llevado a numerosas naciones a la conclusión según la cual en Venezuela se han creado las condiciones objetivas para que estalle la violencia en gran escala, y que conviene actuar cuanto antes para prevenir que la ira popular se desate o que la oposición se incline por alternativas armadas, como ocurrió en Nicaragua cuando la obstinación del sandinismo bloqueó los caminos democráticos.

Uno de los gobiernos que se ha sensibilizado frente a nuestra calamidad es el de Noruega, con amplia experiencia ejerciendo de facilitador y mediador en conflictos tan complejos como el que tiene lugar en Venezuela. Noruega se suma a los países que propician una salida al descalabro nacional: Estados Unidos, Canadá, Grupo de Lima, Unión Europea y Grupo de Contacto Internacional. Lo hace desde una perspectiva distinta, por ejemplo, a la de Estados Unidos y el Grupo de Lima. No sé si su estilo  contemporizador de aproximarse al problema es más eficaz que el otro, mucho más pugnaz y confrontacional. De lo que sí estoy seguro es de que el esfuerzo de Noruega es complementario y clave. Ese país, por su experiencia y conocimiento en el tratamiento de conflictos agudos, puede dar una enorme contribución, tal como lo hizo en su momento con los árabes y los israelitas o entre el gobierno español y la ETA, para solo mencionar dos casos representativos.

El régimen de Nicolás Maduro tratará de darle largas al asunto. Hará lo posible por ganar tiempo para intentar capear el temporal y permanecer el mayor tiempo posible en Miraflores. Señalar estos presupuestos para descalificar el esfuerzo no resulta muy ingenioso, como tampoco lo es tratar de inventar la rueda. Estamos hablando  de un grupo al que no le importa gobernar sobre los escombros. Eso lo sabe la oposición venezolana y, podemos suponer, lo han entendido los expertos noruegos. El gran reto para los nórdicos, al igual que para el resto de la comunidad internacional que evita el uso de la fuerza, reside en obligar a un régimen quebrado, aislado, y desprestigiado en el plano internacional, e inmensamente impopular en el ámbito doméstico, pero que posee la armas, a que encuentre una solución acordada a las penurias  que sufren los venezolanos. La piedra angular del convenio, ellos lo saben, es el pacto por unas elecciones libres, competitivas, transparentes y supervisadas por la comunidad internacional. Aunque entre las peticiones se encuentra la desactivación de los colectivos violentos, nadie pide que depongan las armas y se pacifiquen, como ocurrió en Colombia con las Farc. Se trata de algo tan naif como recuperar la dignidad del voto y la soberanía popular, aplastadas con la elección de la asamblea constituyente y con los comicios del 20-M de 2018. Así, sencillo. Inobjetable desde la perspectiva democrática.

Para obligar a Maduro a negociar están en marcha varios procesos. El primero, la colosal tragedia nacional que sigue su propio ritmo y avanza sin que el régimen tenga la menor posibilidad de resolverla. Los problemas y carencias que confrontamos en la actualidad, se agravarán mientras Maduro se encuentre al frente del Ejecutivo. Luego hay que anotar los conflictos y temores dentro del Psuv. Existen sectores en el oficialismo convencidos de que la permanencia a rajatabla de Maduro en el poder, erosionará al partido y a la opción política que ellos representan. Es mejor negociar ahora que pueden obtener ventajas, que hacerlo cuando todo esté perdido. Hasta podría aceptarse que Maduro sea candidato; el dilema más serio reside en si lo hace como Presidente en ejercicio o como candidato fuera de Miraflores. Para los militares las conversaciones en Noruega también deben de tener un significado especial. Allí nadie amenaza al país con invasiones militares, ni violencia de ningún género. Solo se trata de admitir la crisis de gobernabilidad y representatividad del régimen, y buscarle una solución en el marco de la Constitución y la democracia.

Por estas razones y otras más, debemos apoyar a Noruega.

Trino Márquez
@trinomarquez

CARLOS PADILLA: NEGOCIACIÓN CON MUERTE ANUNCIADA

Se negocia con un delincuente que nos amenaza, se negocia con un vendedor regateando precios; pero no se puede negociar con quien utiliza ese mecanismo de supuesto entendimiento para fines no relacionados con los aspectos o asuntos de la negociación y si para sus propios fines que trata infructuosamente de ocultar.  

Todo negociador, que pudiéramos llamar “bien intencionado”, lleva al encuentro tabuladas las aspiraciones que quisiera lograr en máximas, intermedias y mínimas pues si solo lleva máximas la negociación fracasará. No se debe ir a una negociación a entregarlo todo. Eso no tiene sentido. No se debe ir a una negociación para aparecer tan solo como dispuesto falazmente a perder en ella y ganar prebendas posteriores. Eso tampoco tiene sentido ni político ni ético.   

No se puede ir a una negociación cuando ambas partes tienen una posición de todo o nada; tampoco cuando se sabe la carta que tiene la contraparte escondida bajo la manga y mucho menos cuando se reconoce a uno de los receptores como emisor público de mentiras. 

Lenin lo expreso claramente: "Nosotros dialogamos con los enemigos que hemos jurado destruir, solamente cuando carecemos de la fuerza necesaria para abatirlos; por medio del diálogo alcanzamos aquellos objetivos a corto y mediano plazo para ganar tiempo, y cuando efectivamente seamos más fuertes, entonces tomamos sin contemplaciones lo que queremos y sin que nos conmuevan las reclamaciones y las apelaciones de los enemigos venidos a menos."  

Estamos seguros de la buena fe de los que se muestran partidarios de un dialogo con aquellos que no son comunistas, ni socialistas, ni nada; pero que se ponen ese disfraz para ocultar sus incapacidades y corruptelas y utilizan las estrategias y tácticas aprendidas en los cenáculos castristas para mantenerse en el poder a costa de lo que sea. 

En sus recientes intentos de distraer, el madurismo usando al catalizador noruego, impulso un encuentro de mediación con un sector de la oposición venezolana que sobrevive en la Asamblea Nacional. Pero ese intento está integrado por posiciones irreductibles tendientes a garantizar su permanencia en el poder para usufructuarlo depredadoramente.  

 El planteamiento llevado por los demócratas no era otro que el de “cese de la usurpación, gobierno de transición y elecciones libres”. Es decir, todo lo contrario de lo que quiere el régimen.  

Como se podrá apreciar allí no puede haber acuerdo alguno y si ganancia de tiempo para apretarse los gastados tornillos que sostienen a la oligarquía madurista de los 500 sentados sobre las bayonetas en su precario disfrute del poder.  

Como demócratas no nos queda más que agradecer a Noruega su intermediación para la búsqueda de soluciones a la tragedia venezolana y solicitarles a sus autoridades que se sumen a los otros sectores que apoyan el retorno de la democracia a Venezuela tales como con el Grupo de Lima y el Grupo de Contacto en la búsqueda de la solución anhelada por el sufrido pueblo venezolano. Si los contactos entre los representantes de la Asamblea Nacional y  el madurismo continúan bajo los auspicios de Noruega esperamos que el talante autoritario del régimen recapacite y acepte una salida honorable a la crisis de gobernabilidad que atosiga al pueblo venezolano.    

No desechamos el dialogo per se. Somos partidarios de un dialogo entre factores opositores que ha fin de cuentas tenemos el mismo objetivo estratégico con algunas diferencias tácticas y mantenemos la posición de la búsqueda de la solución de la crisis que nos castiga mediante una salida deseada como pacífica, constitucional, democrática y electoral.  Todo ello dentro de la ruta indicada por los auténticos caminos democráticos, un contador de votos idóneo, garantías electorales firmes, salvaguarda del secreto del voto, actualización del padrón electoral y certificación internacional.  

Carlos Padilla 
@carpa1301 

LEANDRO RODRÍGUEZ LINÁREZ: LA OPOSICIÓN ROSA

La Belle Epoque enmarcó la vida europea haciendo alusión a una “bella época” que se circunscribió a la vida de ese continente antes de los horrores de la primera guerra mundial, conflicto bélico que agudizó las añoranzas. Sin lugar a dudas, el mundo comenzó ser distinto luego de la primera guerra mundial, el trabajo se hizo necesario aún para las clases pudientes, las armas se especializaron a raíz de esas crueles batallas, las naciones comenzaron a recelarse unas a otras… la guerra pasó ocupar un lugar preponderante en las políticas de Estado, es decir, mucho más. 

En Venezuela existe en el seno de la oposición un preocupante cúmulo de líderes que, al parecer, viven en la “Belle Epoque”, tras 20 años de chavismo parecen no darse cuenta que a lo que nos enfrentamos los venezolanos es al castrismo puro, sistema dictatorial que no se va por votos aunque los promueva, que no se va con diálogos aunque sea su estandarte, que no se va con sanciones pues controla las riquezas de, probablemente, el país más rico del mundo. Sistema dictatorial que no se va con marchas, contra marchas ni con protestas solas, pues usa las armas y las instituciones públicas como escudo de sus intereses. Esa es una oposición rosa absolutamente equívoca, contraria a los objetivos patrios, lamentablemente con mucha tarima pública.  

Todo lo que esta oposición rosa propone ya se ha intentado con anterioridad aquí en Venezuela y en Cuba, con mismos resultados catastróficos para el pueblo. Ahora, sin lugar a dudas, la presión social es indefectiblemente necesaria, pero debe estar acompañada de otras acciones contundentes, como por ejemplo, todo el peso de la diplomacia internacional, donde los socios del chavismo tienen papel preponderante en acción y omisión, China (al parecer) ya dio su brazo a torcer con el chavismo, se percató que sus inversiones no peligrarán, al contrario, estarán mejores resguardadas de la mano de otra dirigencia nacional ajena al chavismo, fanal de corrupción y desidia. 

El chavismo sí ha comprendido cabalmente su condición y momentum, sabe depende exclusivamente de la violencia institucionalizada, tanteó a Guaidó y guardó postura hasta conocer, al menos, sus primeros pasos, luego redobló su tradicional manera de tiranizar a todo un pueblo a través de las necesidades que él mismo creó y, circunstancialmente, las sanciones internacionales agravan, lo que le ha servido de excusa para mantener engañada a su remanente de seguidores.  

El camino es electoral ¡Claro que sí! pero primero hay que reinstitucionalizar la nación, acudir a nuevos procesos electorales hoy incurriría en los mismos errores en que cayeron Avanzada Progresista, Copei y el Mas, abstenciones históricas promovidas por la carencia absoluta de confianza en las instituciones públicas, lo que ha hecho que el voto pierda sus tres principales características; premiar, castigar y generar cambios, en ese afligido escenario gana quien pueda arrastrar más votantes, es decir, el régimen. Quienes nos oponemos a procesos electorales hoy día somos más demócratas que quienes lo promueven a sabiendas de su farsa.  

Se necesita una oposición con los pies en la tierra, no romántica ni soñadora ¡Realista! Que comprenda que así como lo supiera Bolívar, Miranda y demás próceres, esta es una guerra que no podemos librar solos los venezolanos, ameritamos mediación internacional, de lo contrario estamos condenados ser la segunda Cuba de la historia.

Leandro Rodríguez Linárez 
 @leandrotango      

ENRIQUE CONTRERAS RAMIREZ: NUESTRAS UTOPÍAS

Hay quienes creen o creemos que la democracia es una utopía, que no es posible mientras se siga dando en nuestras sociedades latinoamericanas y particularmente en Venezuela, la influencia colonialista y dominante del eurocentrismo, quienes impusieron los modelos de sociedad que actualmente imitamos, me refiero a esos dos modelos  que nos presenta el socialismo y el capitalismo, pues los intereses de los que lo impulsan niegan en la practica la posibilidad real del ejercicio democrático, en esa línea de la verticalidad y relaciones de poder  que se esconde detrás de un llamado Estado, donde el mismo no se encuentra al servicio de la gente, sino es la gente en una relación de servidumbre la que tiene que estar al servicio de ese Estado, en una sociedad que cada vez exige mayores libertades y mejores modos de vida, para la realización plena de nuestras  condiciones humanas. 

Tal situación, para muchos es irremediable y de allí proviene la resignación –esta realidad hay que aceptarla- porque no hay una salida, ni se ve en el horizonte de la patria, perdiendo la esperanza y su propia fe en el porvenir y es aquí donde está el problema, porque tal tipo de conducta asume la derrota, además de ser una derrota inducida, sembrada, motivada para que se tome en ese teatro del que no hay nada que hacer. Al respecto el profesor Victor Bravo al referirse a la situación planteada nos indica: “Sólo el hombre desprovisto de los escudos de la fe, como diría Kierkegaard, sean estos no sólo religiosos sino también políticos, sociales, culturales, podrá rozar el sentimiento de la angustia y del absurdo de más allá de los limites y preguntar sobre el sentido de la existencia.” (BRAVO, Victor (1998).Editorial Universidad de los Andes. Mérida). 

Si el logos en términos filosóficos, es asumir una actitud racional ante el mundo, ante la vida. La adoración, el fanatismo, la pleitesía,  la subordinación y la servidumbre a los que ejercen el poder, no puede ser parte de la naturaleza  humana, al contrario, la naturaleza humana es la que  hace que la humanidad  sea inteligente y en seres inteligentes no puede tener cabida  semejantes escenarios. Es por ello que cuando hablamos de libertad, para los que ejercen el poder bien sea en el socialismo o el capitalismo, es como si estuviésemos invocando –para ellos-  los poderes demoniacos, además les parece monstruoso y siniestro pues esa libertad que por naturaleza pertenece a la humanidad, es lo que coloca en crisis el orden establecido, porque esa libertad implica libertad de acción, de pensamiento, sin imposiciones ni impedimentos. Es cuando hay capacidad de razonar pensar y concientizar como se debe actuar ​ y obrar según la propia voluntad de la persona en comunión con los otros, en igualdad de condiciones, es un proceso ontocreador en busca de ese bienestar colectivo que el Libertador sintetizo como “la mayor suma de felicidad posible, la mayor suma de bienestar social y la mayor suma de estabilidad política”. Una utopía propia de la inteligencia humana, cuando se es sujeto histórico capaz de transformar los modelos socio-económicos  que oprimen  a la humanidad y que por analogía deducimos, que ese era el centro de su “delirio” que le inspiro el volcán del Chimborazo en tierras de Ecuador. “…El tiempo, no ha podido detener la marcha de la libertad (…) Al fin, la tremenda voz de Colombia me grita: resucito, me siento, abro con mis propias manos mis pesados parpados: vuelvo a ser hombre, y escribo mi delirio.” Es la pasión que inundo el alma de nuestro Bolívar y con su ejemplo exalto y se sigue exaltando la lucha por la libertad, libertad hoy negada como en el ayer, por quienes dicen ser defensores de la misma, desde los pináculos del poder. 

 MATAR LAS UTOPÍAS 

Hoy más que nunca, el mensaje utópico del Libertador, es la de la esperanza, la posibilidad real de realización de nuestros pueblos, pueblos que siguen y seguimos indagando sobre el horizonte originario de la patria latinoamericana, sigue investigando y tratando de construir en la lucha caminos por la libertad y más cuando hoy día tanto el capitalismo como el llamado socialismo, nos quieren aplicar el pensamiento único de sus concernientes ideologías, ideologías que se esconden detrás de las utopías de los pueblos, para seguir engañando y manipulando a los de abajo. 

En una oportunidad Francis Fukuyama (1992), le señalo al mundo que la única utopía posible, se encontraba en la llamada “democracia  liberal” y sostenía que esa “democracia liberal” era el punto final de la evolución ideológica de la humanidad, semejante villanía y obscenidad, confundió a más de uno de los llamados “intelectuales” de academia, cuando lo que se quería era la de consolidar el corpus doctrinario –sobre todo en materia económica del paradigma globalizador- que ve el planeta como simple mercancía y a las muchedumbres como un gran obstáculo para el desarrollo del gran capital y de esta propuesta eliminar los sueños de los pueblos a ser libres, matar sus utopiás, con la complicidad de los gobiernos que en la actualidad tenemos en América Latina y cuyo ejemplo más claro lo tiene  Venezuela, que a nombre de un socialismo le entrega toda su riqueza a los grandes conglomerados del imperio del capital, tal y como lo está haciendo con el Arco Minero –incluso-  sin medir las consecuencias ambientales catalogados por muchos científicos ambientalistas de pronósticos irreversibles. 

Si pretendemos hacer un vuelo pindárico, hemos conocido que a lo largo de los tiempos históricos, la humanidad siempre ha sido quimérico, soñador y ha impulsado sus luchas para tener un mundo donde desaparezca la pobreza y la miseria tanto intelectual como material, la desgracia de la injusticia social, la represión del que domina en esas relaciones de poderes perversas que ha conducido a la humanidad al hambre y la violencia. La propia historia nos describe y sobre todo en la edad media, de cuentos y leyendas nacidas del seno del propio pueblo, aspirando a vivir en un modelo social y económico perfecto, fábulas y mitos que germinaban del imaginario popular donde evocaban un lugar, un espacio, un sitio carente de angustia, sufrimiento y desde luego, poder disfrutar de los placeres que se hallaban por doquier. 

De todo esto, podemos concluir en la necesidad de buscar un “Tercer Camino” o “Terceros Caminos” que sea inventiva de un colectivo llamado América Latina, ya que dentro de los actuales modelos (capitalismo o socialismo) nuestros pueblos están condenados al sufrimiento y  la muerte. Es la utopía del TERCER CAMINO. Inventamos o Erramos, como nos dijo el maestro del Libertador, nuestro Simón Rodríguez. 

Hoy más que nunca, la palabra utopía – sembrada en nosotros por Bolívar y Simón Rodríguez- sigue representando la esperanza de realización de nuestros pueblos, pueblos que siguen y seguimos buscando el horizonte originario de la patria latinoamericana. “Inventamos o Erramos”.  

Enrique Contreras Ramirez 
@enriqcontrerasr 

JOSE LUIS ZAMBRANO: CON LA VERDAD SALDRÍA EL RÉGIMEN

La libertad de un país encadenado a un sistema oprobioso, no se destraba con sueños apacibles. No es un hallazgo mental ni una conjetura por atragantarme de emociones. Las mafias del poder tienen sus aviones de príncipes, sus alcobas señoriales, sus entuertos medidos y sus ganas inmensas de continuar traficando con la paz de un pueblo.

Se requiere más que un paraíso discursivo o una mera premisa para alcanzar la meta hartamente señalada. Los abusos dejaron de camuflarse para volverse evidente en el mundo entero. El mercado de almas perturba a todos, pues el hambre descalabra al vecino y no está en un continente lejano como el africano.

Por eso desmerito sobremanera la afirmación de un colega, quien a través de un tuit descomunal, aseguraba más con una erudición de baja monta que con una convicción verdadera, que “la comunidad internacional impondrá a Venezuela unas elecciones vigiladas, pero con la participación del chavismo. Hay que unirse para ganarlas”.

  Es tan mala, vulnerable y rudimentaria esa hipótesis desafiante, que echaría al trasto la visión de transición defendida por Guaidó casi con sangre. Es apoyar a la usurpación y a sus sufragios de fantasía. Sobre todo, no veo al veterano periodista con oráculos entrañables y precisos, ni tan poco oigo ecos dispersos en el mundo que concilien en ese postulado.

Lo que sí empuño como un paso hacia adelante es la aprobación de un proyecto de ley para enfrentar nuestra enervante crisis, cuyo propósito real es restaurar la democracia en el país. Tal propuesta -considerada como la legislación más severa y amplia hasta la fecha en torno a nuestra realidad-, fue admitida por el comité de Relaciones Exteriores del Senado de Estados Unidos.

El mencionado estamento tiene por nombre: Ley de Ayuda de Emergencia, Asistencia para la Democracia y Desarrollo de Venezuela (VERDAD). El proyecto, apuntalado por senadores demócratas y republicanos, muestra un camino providencial de que no existe en el congreso norteamericano, rebatiñas entre partidos ni vacilaciones perdidas, sobre la necesidad de devolverle la capacidad democrática a la nación con mayores reservas petroleras del planeta.

Marco Rubio fue uno de los precursores de esta idea genial. “Es un esfuerzo significativo por parte de EEUU” -dijo sin dispersar su foco sobre la restauración del estado de derecho y el orden democrático-, “acompañado de nuestros aliados regionales y de la comunidad internacional”.

El senador demócrata Bob Méndez, otro de los artífices de esta cruzada, no tuvo empachos para referirla como un paso trascendental para apoyar a los venezolanos, en el oscuro y difícil capítulo de lucha por recuperar al país del régimen de Nicolás Maduro y restaurar un proceso democrático.

El loable y oportuno proyecto VERDAD establece, no solo 400 millones de dólares en ayuda humanitaria, revocar visas a diestra y siniestra, sancionar el endeudamiento indebido de Maduro y el comercio de oro, sino reconoce los esfuerzos del presidente Guaidó para acelerar la planificación, con instituciones financieras internacionales, en la reconstrucción de Venezuela posterior a la salida del tirano.

Ningún país mojaría tanto sus barbas y mucho menos uno tan poderoso como el yanqui, si no tuviese planes reales y rigurosos para desquebrajar las barreras de la dictadura venezolana.

El cese de la usurpación es una meta irremplazable. Nada ni nadie nos puede imponer a la usanza de los últimos comicios, un proceso electoral viciado y con el mismo esquema turbulento. Hoy se cuenta con más cartas para ganar la partida. El sendero está lleno de obstáculos inadecuados, con zancadillas terribles y con el estruendo de risotadas de unos forajidos sin una pizca de humanidad, que no quieren desenroscarse del poder. Pero la lucha tiene una perspectiva medida y clara.

Mientras Maduro aprueba recursos para la activación del proyecto de creación de una línea de producción de la ametralladora Caribe, calibre 9.19 mm, y un país entero padece de una hambruna incomparable por tener todos los estándares de producción alimenticia paralizados, existe otro proyecto en marcha en el senado norteamericano para cambiarle la cara a la calamidad.

Hace seis años escribí en redes sociales una frase a las volandas, que hoy tiene más vigencia: “al superar con fe, la tormenta más aciaga y llena de truenos, siempre florece un arcoíris en forma de sonrisa, como premio de Dios”. Nunca mi cursilería sin remedio ha sido más oportuna.

José Luis Zambrano Padauy
zambranopadauy@hotmail.com
@Joseluis5571