domingo, 6 de febrero de 2022

ESPECIAL DEL DOMINGO 06/02/2022. REFLEXIONES PARA EL NUEVO LIDERAZGO, JUAN DE DIOS RIVAS VELÁSQUEZ



REFLEXIONES PARA EL NUEVO LIDERAZGO




  JUAN DE DIOS RIVAS VELÁSQUEZ  

ANÁLISIS

Es evidente que la Crisis, Caos, Corrupción, Pobreza, Miseria, Malos Servicios Públicos, mentiras demagogias e ingobernabilidad desatadas, está siendo estudiada por Universidades ´reconocidas´ en el mundo Académico de hoy.



HECHOS POLITICOS ANORMALES

Lo primero que debemos admitir es que hacer Política y Gerencia Publica en Venezuela no ha sido normal y menos fácil desde el arribo al Poder del Socialismo/Comunismo del Siglo XXI, eran ´y son´ militares Golpistas y sin conocimiento de Gerencia de Administración Pública, Empresas ´Petróleo, Siderúrgicas, Electricidad, Acueductos, Agricultura, Pesca, Fabricas y Empresas Privadas, Banca, Finanzas, Relaciones Internacionales, Educación, Seguridad Social, etc., etc., etc. Por lo cual era lógico que sus resultados fueran malos. A Chávez y un grupo de arrimados ´Izquierdistas Socialista como José Vicente Rangel y Miquelena´ en busca de dinero fácil… Llevaron a Chávez a Fidel Castro y este Comunista ´ya entrenado en robos, narco tráfico, gerencia de Dictadura y todo tipo de perversiones, procedieron a mal formar y dañar a los vivos voraces de dinero y corrupción. Se impusieron a los novatos de Chávez y sus muchachos. Se robaron el Petróleo nuestro y dinero en Dólares a montón. Lo que dieron fue consejos, entrenamiento perverso y corrompido y un grupo de médicos y policías torturadores, que utilizan para engaños humanos en varios pueblos del mundo.

Para colmo de mal, la mayoría de la Oposición Venezolana ´Tenia Lideres con vicios y perversiones IV República y su agenda era ´Quítate tú para ponerme yo´. Todas las Coordinadoras y Esfuerzos Unitarios nacieron acosadas, dañadas y manipuladas por ´Ambiciosos corruptos de Partidos como AD/COPEI y los nuevos Partidos Políticos como PJ, VP y UNT´ cayeron en empeños equivocados ´unos por mala fe y otros por inexperiencia´ que todo lo dañaban y que no respondían a lógicas unitarias y coherentes de hacer política para derrotar a Dictaduras y Comunistas corrompidos. El resultado es que se corrompen y siguen cometiendo errores y más errores. Los muchachos que mal dirigen la Asamblea Nacional se han dejado contaminar por valores y modalidades corrompidas y han sido víctimas de manipulaciones y compras a ´malos e improvisados líderes opositores´, que están dañados por la corrupción y las ambiciones malignas y alocadas que han aprendido en estos 22 años de perversiones y maldades Socialista/Comunista/Mala Oposición. Hoy un Presidente de AN experto en fraudes y psicología del engaño ¨Jorge Rodríguez¨, el cual usa a su hermana para ´trastocar más´ al obrero de Miraflores y como no sabe de gerencia pública, economía, finanzas, empresas y nada… todo lo daña.

¿QUÉ ES UN GOBIERNO DICTATORIAL?


DICTADORES


Un gobierno es dictatorial cuando el poder es ejercido arbitrariamente por un grupo reducido, ambicioso de dinero y despótico, a cargo de un único individuo (el dictador), o la cabecilla de un partido, o una élite de alguna otra naturaleza (generalmente golpista civil o militar). Suelen coartar los derechos constitucionales, electorales democráticos, individuales y colectivos, por lo que no suele haber participación ciudadana, ni pluralismo político y menos democracia participativa y protagónica. Hacen del FRAUDE ELECTORAL su estrategia básica ´para decir que ganan elecciones´, utilizan la compra de voto, el chanchullo con maquinas y ponen en la rectoría del CNE a una mayoría de personas ´leales a la dictadura´ y montan teatros de acciones y decisiones por TSJ ilegítimo con magistrados con prontuarios y sometidos por el dinero corrupto.

Los gobiernos dictatoriales pueden ser de diverso signo ideológico, pero los más malignos son los comunistas/socialistas y actúan en representación de distintas clases sociales (Corruptos empresarios, testaferros, traficantes y oportunistas) del GPP, al menos en teoría son vivos enchufados para robar. Imponen reglas políticas, económicas y sociales a los ciudadanos de una nación. Silencian, a menudo ¨de la peor manera¨, cualquier voz crítica o disidente que pudiera actuar en su contra. La historia de las Dictaduras está llena de ejemplos y en las Dictaduras Comunistas/Socialista el proceder es peor y corre la sangre para asustar al pueblo y los adversarios.

Hoy en Venezuela todo se trata de un método de gobierno no democrático y Comunista/SOCIALISTA. Su perduración en el poder se da a través de métodos no electorales, no populares, no constitucionales, o sea, de facto y malignos o por la fuerza de las armas en FANB, Colectivos, para Militares, Guerrilla Colombiana y Milicianos árabes que opera libre e introducen dinero ¨$¨ del Narco Trafico y robo en el mundo; con ello compran bodegones y sobornan a Alcaldes, Gobernadores, Protectores, Etc., como es el caso de Nueva Esparta ́Isla de Margarita ́, donde todo ha sido corrompido y dañado. Además, suelen perpetuarse indefinidamente en el tiempo, acaparando los recursos nacionales durante años e incluso décadas. Usan a Testaferros Nacionales y Extranjeros para casi todo lo que se compra en el Gobierno y Lavar todo lo robado. A los dictadores y sus testaferros en otros países los usan para emprender negocios en Venezuela y eludir sanciones por un tiempo.

ORIGEN DEL TÉRMINO DICTADURA

Las palabras dictadura y dictador provienen del latín y específicamente del Imperio Romano.

El mismo nos ha servido como modelo para gran parte de la jurisprudencia con que regimos nuestras sociedades en Occidente.

Se desprende del verbo dictare, que significa literalmente “imponer, dictar”. Comparte etimología con dictaminar, decir y dictamen.

En la antigua Roma se llamaba dictador a los jueces de la República Romana que eran temporalmente investidos con poderes extraordinarios y absolutos.

Esos poderes les servían para dictar leyes que consideran ´cortinas de humo´ apropiadas para mal salvar a la nación ´de ellos´ en períodos de crisis o necesidad. Con leyes y decisiones pervertidas le quitan las empresas, fábricas, dinero, partidos políticos, etc., a los que no están con ellos o no se someten a su voluntad. Es decir que las dictaduras fueron y son institucionalmente como una medida extrema para casos excepcionales de la perversión política. Hoy en Venezuela son de uso común para mentir y engañar a los bobos y tontos del populismo y pueblo desposeído.

Los gobiernos dictatoriales utilizan el mismo razonamiento para legitimarse, para pasar a imponerse sobre otras instituciones y el pueblo, tomar medidas extremas innecesarias y malvadas.

CLASIFICACIÓN DE LOS GOBIERNOS DICTATORIALES

En algunos gobiernos dictatoriales, el dictador proviene de la realeza, los golpistas y en Venezuela vino del oportunista Barineses y hoy del sindicalero del Metro, etc.

Los gobiernos dictatoriales pueden clasificarse en base a su forma de organizar el poder autoritario:

Militares. Se caracterizan por ser regidos por una élite militar que administra el mando del país, decide quién ocupará el poder ejecutivo e interviene constantemente en la política, empleando el aparato represivo del Estado abiertamente contra su pueblo. Chávez y Maduro son corruptores de FANB y los manipulan con riquezas y entrega de concepción de minas, registros, notarias, etc., etc., Les permiten administrar recursos… por los cuales no entregan cuentas.

De partido único. En estos regímenes un único partido político PSUV opera y controla todas las instituciones del Estado, ejerciendo un monopolio sobre la participación política. Impide que otras facciones representativas alcancen posiciones de poder real, no admite sindicatos representativos, ni hay contratación colectiva, aunque a menudo se les permita existir a algunos y se tolere su participación electoral en sus elecciones amañadas.

Personalistas. Se trata de gobiernos enteramente controlados por un único individuo y sus allegados de confianza, que suelen ser amigos, murruñosos y familiares del dictador. Este último puede ser un funcionario militar o un representante político de alto nivel o un testaferro dueño de Banco, Seguro, Medio de Comunicación, etc. Las instituciones del Estado se subordinan abiertamente a su comando, participando del culto a su personalidad. El comunismo tiene varios casos históricos.

Monárquicos. Semejantes a los personalistas, con la diferencia de que el dictador es miembro de una casta real ´politiquera´ y ha ascendido al poder político a partir del trono de otro dictador, acumulando en sí mismo todo el poder político.

Híbridos. Formas de gobierno dictatorial difíciles de clasificar, que combinan aspectos de varias de las anteriores, como personalistas/de partido único o personalistas/militares.

¿CÓMO IDENTIFICAR LOS GOBIERNOS DICTATORIALES?

Las ciencias políticas se dedican al estudio de las dictaduras y los totalitarismos como formas extremas y antidemocráticas de gobierno. Permiten su análisis, comprensión y clasificación en categorías, a partir de indicadores como los de Rusia, China, Corea, Cuba, Venezuela, Nicaragua, etc. El caso Venezuela está dando nuevos perfiles.

Según algunos de estos estudios, se puede emplear un criterio mínimo de distinción entre gobiernos dictatoriales y democráticos: la existencia de elecciones libres y competitivas en que la oposición tenga reales chances de acceder al poder político, señalan la existencia de una democracia. Havemos Líderes convencidos que en Venezuela si se logra orientar, cohesionar y posicionar una UNIDAD NACIONAL ALTERNATIVA con base en unos candidatos del pueblo y comunidades, se puede superar los fraudes y marramucias electorales. Esto para los LÍDERES DE LA OPOSICIÓN CORROMPIDA ̈Alacranes ̈ ES IMPOSIBLE. Tengamos voluntad de ponerle Cabeza, Corazón y Coraje para Salvar a Venezuela con Líderes Sociales y Políticos no contaminados y con malos antecedentes.

Según otros estudios, las elecciones libres no es criterio suficiente para considerar que se trata de un gobierno democrático. Además debe estar presente el respeto a los Derechos Humanos, la libertad de prensa y el Estado de Derecho (igualdad ante la ley).

LA NECESARIA UNIDAD SUPERIOR 



Hoy en Venezuela es lógico que se busque una Unidad Democrática para que asuman un Gobierno del Pueblo y con el pueblo en la Presidencia, Gobernaciones, Alcaldías, etc... Para depurar los vicios, corruptelas, mala moral y ética de desempeño público y liberar al pueblo ´ciudadano y republicano solidario´ que posibilite salir de la pobreza, malos servicios públicos, pésima seguridad social, malos sueldos, violaciones a la contratación colectivas y los salarios, sueldos, jubilaciones y pensiones de hambre e imposibilidad de comprar más de 5 productos de la Canasta Alimentaria. Las injusticias sociales no deben ni pueden existir en un Democracia y un Estado de derechos humanos.

Para volver a la Democracia se necesita actuar y lograr una ALIANZA de Partidos Políticos, Líderes Sociales, Sindicales, Empresariales, etc. O lanzar a Líderes Sociales honestos, éticos y responsables. Que sean rectificadores de los errores que se han cometido desde la Coordinadora Democrática, MUD, G4, G7, Mesita, etc. Hoy se requiere UNA UNIDAD NACIONAL que tenga una Reglamento de operar, actuar y comportarse… que respete la libertad de pensar, expresarse, votar y no se caigan en entaparaos, agendas ocultas, intereses mezquinos o de grupos y se sea muy amplio y didáctico con el ver, juzgar y actuar de todos los aliados. Nadie debe y puede jugar posición adelantada, comprar conciencia y conspirar contra la UNIDA NACIONAL PARA SALVAR VENEZUELA Y SU COMUNIDAD.

RECUPERAR

A Venezuela no la SALVAREMOS… solo con elecciones… Habrá que recuperar y reorganizar PDVSA, CVG, ELECTRICIDAD, CANTV, IVSS, FANB, TSJ, ADMINISTRACIÓN PUBLICA NACIONAL, de GOBERNACIONES, ALCALDÍAS y EMPRESAS DEL ESTADO. Poner fin a la corrupción, mafias de Testaferros, Clanes de Enchufados y Familiares. Deben regresar los valores y principios para tener Moral y Ética en el desempeño público, social, privado y humano en Venezuela.

El ciudadano y pueblo deben asumir su COGOBIERNO Y DESARROLLO SOCIAL para liberarse de los malos Servicios Públicos y Pobreza.

¿Cuáles son las causas de un gobierno dictatorial?

Las dictaduras pueden atornillarse y darse en gobiernos con altos niveles de corrupción.

A lo largo de la historia, los gobiernos dictatoriales han surgido en los más variados de los contextos. Cuando existe una situación social o política que se perciben como desordenada, corrupta o anárquica, los grupos afines a los gobiernos dictatoriales justifican la idea de que “hace falta orden democrático y social”. Para seguir en el engaño y robo.

A partir de esa legitimación, algún sector, generalmente el militar, aparece dispuesto a imponer el orden, incluso si eso significa derrocar una democracia legítima. Escenarios ideales para ello son:
Democracias débiles (pocos aliados políticos y económicos).
Gobiernos de altos niveles de corrupción.
Gobiernos de pobre institucionalidad (las instituciones que acompañan el poder político no existen o funcionan de forma deficiente).
Períodos de guerra civil o polarización extrema en la política.

Otra causa posible tiene que ver con la intromisión de potencias extranjeras. Por ejemplo, a lo largo de la Guerra Fría EEUU y la URSS financiaron y promovieron regímenes brutales en los países del Tercer Mundo, con tal de que favorecieran sus intereses. Y hoy pretenden seguir haciéndolo. Solo que RUSIA, CHINA, son peores y muy malvados.

CONSECUENCIAS DE LOS GOBIERNOS DICTATORIALES

Entre sus consecuencias están millones de asesinatos, torturas y desapariciones.

Las consecuencias de la instauración de un gobierno dictatorial son impredecibles. Habitualmente estos gobiernos son responsables de la pérdida masiva de vidas, la persecución, tortura y silenciamiento. Incluso en los casos menos graves se ha observado la reducción de las libertades individuales y colectivas. Se impone el POPULISMO Y EL TRAFICO CORRUPTO EN TODOS LOS ORGANISMOS PUBLICOS.

Además, al carecer de contralorías honestas y de contrapesos, suelen ser regímenes corruptos e injustos. Así, enriquecen al sector en el poder y les permiten que tengan mansiones, inversiones, testaferros y dinero en varios países, en detrimento del resto de la población. Permitiendo que se mueran los adultos Mayores, Niños y Enfermos

A su término, si los gobiernos dictatoriales dejan países en la ruina, corrupción descomunal, populismo, hambre, pobreza y miseria. Eso se debe a que el debate político y social… que se vio totalmente silenciado o mal enfocado hasta hoy, se reoriente y sea más fecundo. Si no se participa, se pierde autoridad moral y política. En su lugar, suelen quedar profundas heridas y rencores. Pero también habrá oportunistas y politiqueros con actitudes, posiciones y discursos de no participar, o votar o actuar. Esto no es recomendable y carece de sentido común para iniciar un proceso de cambio y aporte de ideas que corrijan lo malo y den soluciones lógicas y vitales para SALVAR A VENEZUELA.

Los gobiernos dictatoriales en América Latina han sido frecuentes a lo largo de sus dos siglos de vida poscolonial. Durante el siglo XIX surgieron de la mano de brutales caudillos rurales. Muchas veces se trataba de antiguos héroes de las Guerras de Independencia, quienes imponían a sus jóvenes naciones un modelo político y económico determinado en la corrupción y los salvajes intereses familiares de hegemonías coloniales.

Luego, durante el siglo XX, las dictaduras en la región aparecieron en su mayor medida financiadas por EEUU. Principalmente durante la Guerra Fría, la potencia norteamericana inició una política que apuntaba a interferir con la política de otros países, en especial en América. Así, con la excusa de combatir el comunismo en la región, se financiaron entre las décadas del 50 y la del 70 numerosas dictaduras militares de derecha. El resultado fue la pérdida de millones de vidas en el continente, pero también la práctica de la tortura y la desaparición forzada que es costumbre en los comunistas.

EJEMPLOS EN LA HISTORIA

Algunos gobiernos dictatoriales, como el de Hitler, se iniciaron a través de mecanismos democráticos que sin embargo fueron eliminados poco después de la llegada al poder, instaurando la dictadura. Otros, como Stroessner ´1954/1989´, Pérez Jiménez y Fidel Castro con 50 años de Dictadura, se perpetuaron en el poder a través de elecciones fraudulentas o continuismo pervertido, en un marco que no garantizaba la libertad de elección y política. Hoy en Venezuela no hay Democracia Participativa y Protagónica… todo es un engaño, fraude, corrupción, mal vivir y enfermedades.



Es importante que los Líderes de UNA UNIDAD NACIONAL ALTERNATIVA no caigamos en errores de apreciación o consideración es estos momentos cruciales para Salvar a Venezuela. Nada de desesperarnos si nos legalizan o no lo hacen, de creer que esto se arregla en los próximos 3, 4,5 años. Lo importante es que participemos unidos, apoyemos a lideres emergentes ¨con la tarjeta que sea¨ y demos ejemplo a los ciudadanos y pueblo de Venezuela, ayudemos, asesoremos y fomentemos emprendimientos sociales que den renta y servicios al pueblo. No juguemos adelantado y menos nos enfrasquemos en defender criterios ¨respetables´, pero que con paciencia y continuidad pueden asumirse sin ningún riesgo o peligro. Toda idea y proyecto social será rentable para el pueblo y nosotros nos dará mayor posicionamiento, credibilidad y respeto para los años por venir. Unidos valemos más.



Las Victorias llegan con la unidad, emprendimientos e iniciativas sociales de los que estemos en UNA UNIDAD NACIONAL ALTERNATIVA, para que podamos SALVAR A VENEZUELA.

Juan de Dios Rivas Velásquez
rvjuandedios@gmail.com
@rvjuandedios
Presidente Nacional
Solidaridad Independiente ‘UNIDAD SI’
Partido Humanista Cristiano
Caracas – Venezuela
Por la Unidad Superior Nacional para Salvar a Venezuela.
Varias fuentes

ACTUALIZACIÓN DE EL REPUBLICANO LIBERAL II: DIARIO DE OPINIÓN, http://elrepublicanoliberalii.blogspot.com HOY DOMINGO 06/02/2022

 


AQUÍ TITULARES DE HOY DOMINGO 06/02/2022, DIARIO DE OPINIÓN, EL REPUBLICANO LIBERAL II, PARA LEER PULSA SOBRE EL TITULAR ESCOGIDO

    

                                       HOY -  OPINIONES NACIONALES  -                                                                                              * 06/02/2022 *

MIBELIS ACEVEDO DONÍS: FRANKENSTEIN, OTRA VEZ


TRINO MÁRQUEZ: EL PÉSIMO EJEMPLO DE PERÚ, LECCIONES


GIOCONDA CUNTO DE SAN BLAS: EL EXAMEN PERIÓDICO UNIVERSAL EN SU TERCER CICLO

LUIS FUENMAYOR TORO: OPERACIÓN MANO DE HIERRO







MIBELIS ACEVEDO DONÍS: FRANKENSTEIN, OTRA VEZ

“Con una ansiedad rayana en la agonía, coloqué a mi alrededor los instrumentos que me permitirían infundir un hálito de vida a la cosa inerte que yacía a mis pies. Era ya la una de la madrugada (…) cuando, a la mortecina luz de la llama, vi cómo la criatura abría sus ojos amarillentos y apagados. Respiró profundamente y un movimiento convulsivo sacudió su cuerpo. (…) ¿Cómo expresar mi sensación ante esa catástrofe, o describir el engendro que con tanto esfuerzo e infinito trabajo había creado? (...) había trabajado con el único propósito de infundir vida en un cuerpo inerte (…) pero ahora que lo había conseguido, la hermosura del sueño se desvanecía…”.

Las aflicciones del doctor Víctor Frankenstein, empeñado en hacer funcionar lo que no entrañaba ninguna posibilidad de alumbramiento o restauración, van desgranándose en la novela gótica de Mary Shelley. “Frankenstein, o el moderno Prometeo” (1810), obra pionera del género de la Ciencia Ficción, cuenta cómo el genio temerario del científico termina recibiendo el castigo que le asesta su propia creación. Suerte de hijo deforme, pavoroso; una “momia reanimada” digna de la alucinación de Dante, arrancada a juro de la oscuridad y ensamblada pieza por pieza, como si la sola integración de partes de otros cuerpos bastase para atrapar el sentido pleno del todo: allí las resultas de creer que era posible infundir virtud en lo que sólo anticipaba vacíos.

Más allá de las connotaciones religiosas y morales de la obra -la caprichosa creación y destrucción de vida, la transgresión de límites y el desafío a Dios; o el cuestionamiento del romanticismo en el marco de la pujante revolución industrial, ese temor de que el avance tecnológico arropase la dignidad del ser humano- podríamos arriesgarnos a extraer de allí otras reflexiones. Pensar, por ejemplo, en las porfías de quienes se saltan procesos y aplican estrambóticas fórmulas, de antemano sentenciadas a propagar calamidades. Puestos a diseccionar nuestro contexto político, y vistos los remozados pujos por hacer surgir de la nada a un líder capaz de conducir-aglutinar-reencauzar, representar expectativas de la mayoría, quizás no resulta tan extravagante evocar el aturdimiento del imprudente hacedor de monstruos. Como si el fallo cobrado hasta ahora no hubiese bastado, la idea de que es fácil parir y posicionar un líder sin considerar el proceso dinámico de construcción social del mismo, vuelve por sus fueros.

Al considerar la dificultad implícita en el ejercicio del liderazgo (que exige capacidad para distinguir y fijar objetivos compartidos por el colectivo; para crear estructuras que permitan alcanzar dichos fines, así como mantener y fortalecer esas estructuras), alentar los partos prematuros de dichas figuras no luce muy lógico. Amén de las condiciones personales de quien está llamado a dirigir, importa reparar en el contexto, la cualidad de los tiempos en los que este surge y se legitima.

Paradigmas como los del Rey Filósofo, de Platón; el del Príncipe de Maquiavelo, el del “gran hombre”, el Héroe de Carlyle o el Superhombre de Nietzsche, ya nos aproximan a cierta condición de excepcionalidad de estos personajes. Tales idealizaciones hacen sospechar que, junto a la bella voluntad, el líder requiere de un talento que lo distingue del común y lo faculta para conducir y proponer caminos, para transmitir eficazmente una visión inspiradora, valores y símbolos que son abrazados por quienes se identifican con ellos. Un enfoque subjetivista, sin duda, más vinculado a la opinión de que el líder nace, no se hace. Y es que ser dueño de esa “virtù” o del inusual carisma que según Weber es fuente del apego instintivo a la autoridad, es gracia de la cual no todos parecen gozar.

Pero estudios recientes del fenómeno advierten allí una ecuación mucho más compleja; menos “heroica”, más holística e integradora. El líder aparece entonces como un sujeto creador de sentido, no el simple portador de una visión. Burns, quien lo asocia a una expresión de disensión y determinación, en 1978 distingue, por ejemplo, el liderazgo transaccional y el transformacional, vinculando este último a contextos de alta incertidumbre. En ese sentido, hay aliños, soplos adicionales de vida para esta creatura que no pueden menospreciarse. Estilos, comportamientos, formación, tipos de seguidores, estructura de las tareas, capacidad para habilitar la cooperación y la agencia, reaccionar ante la contingencia y asumir riesgos, o para fluir con la circunstancia de modo de no desaparecer, aplastado por la fricción… factores que, en el marco de una realidad desafiante, que impele a la transformación, condicionan el surgimiento, influjo y efectividad del liderazgo político.

Siguiendo a Bourdieu: Hábitus, Campo y Capital político operan juntos para socializar, legitimar e institucionalizar el liderazgo. No parece buena idea, por tanto, pretender prefabricarlo, contraviniendo con ello una natural progresión u omitiendo las variables relacionales e interactivas que allí concurren. Embullados como estamos por los “milagros” del marketing político, hasta podría pensarse que seleccionar el envoltorio, coser sus partes en un bulto mal armado y luego animarlo, dotarlo de palabras y sublimes contenidos, es algo admisible. Pero la experiencia dice lo contrario. Una lectura responsable de las señas del entorno así como de las debilidades endógenas, quizás oriente sobre mecanismos que podrían contribuir a visibilizar figuras aptas para encarnar ideas, programas, esa visión compartida y posible de futuro. Sustancia, en fin. Entretanto, calma y cordura.

Una lectura responsable de las señas del entorno así como de las debilidades endógenas, quizás oriente sobre mecanismos que podrían contribuir a visibilizar figuras aptas para encarnar ideas...

“Con una ansiedad rayana en la agonía, coloqué a mi alrededor los instrumentos que me permitirían infundir un hálito de vida a la cosa inerte que yacía a mis pies. Era ya la una de la madrugada (…) cuando, a la mortecina luz de la llama, vi cómo la criatura abría sus ojos amarillentos y apagados. Respiró profundamente y un movimiento convulsivo sacudió su cuerpo. (…) ¿Cómo expresar mi sensación ante esa catástrofe, o describir el engendro que con tanto esfuerzo e infinito trabajo había creado? (...) había trabajado con el único propósito de infundir vida en un cuerpo inerte (…) pero ahora que lo había conseguido, la hermosura del sueño se desvanecía…”.

Las aflicciones del doctor Víctor Frankenstein, empeñado en hacer funcionar lo que no entrañaba ninguna posibilidad de alumbramiento o restauración, van desgranándose en la novela gótica de Mary Shelley. “Frankenstein, o el moderno Prometeo” (1810), obra pionera del género de la Ciencia Ficción, cuenta cómo el genio temerario del científico termina recibiendo el castigo que le asesta su propia creación. Suerte de hijo deforme, pavoroso; una “momia reanimada” digna de la alucinación de Dante, arrancada a juro de la oscuridad y ensamblada pieza por pieza, como si la sola integración de partes de otros cuerpos bastase para atrapar el sentido pleno del todo: allí las resultas de creer que era posible infundir virtud en lo que sólo anticipaba vacíos.

Más allá de las connotaciones religiosas y morales de la obra -la caprichosa creación y destrucción de vida, la transgresión de límites y el desafío a Dios; o el cuestionamiento del romanticismo en el marco de la pujante revolución industrial, ese temor de que el avance tecnológico arropase la dignidad del ser humano- podríamos arriesgarnos a extraer de allí otras reflexiones. Pensar, por ejemplo, en las porfías de quienes se saltan procesos y aplican estrambóticas fórmulas, de antemano sentenciadas a propagar calamidades. Puestos a diseccionar nuestro contexto político, y vistos los remozados pujos por hacer surgir de la nada a un líder capaz de conducir-aglutinar-reencauzar, representar expectativas de la mayoría, quizás no resulta tan extravagante evocar el aturdimiento del imprudente hacedor de monstruos. Como si el fallo cobrado hasta ahora no hubiese bastado, la idea de que es fácil parir y posicionar un líder sin considerar el proceso dinámico de construcción social del mismo, vuelve por sus fueros.

Al considerar la dificultad implícita en el ejercicio del liderazgo (que exige capacidad para distinguir y fijar objetivos compartidos por el colectivo; para crear estructuras que permitan alcanzar dichos fines, así como mantener y fortalecer esas estructuras), alentar los partos prematuros de dichas figuras no luce muy lógico. Amén de las condiciones personales de quien está llamado a dirigir, importa reparar en el contexto, la cualidad de los tiempos en los que este surge y se legitima.

Paradigmas como los del Rey Filósofo, de Platón; el del Príncipe de Maquiavelo, el del “gran hombre”, el Héroe de Carlyle o el Superhombre de Nietzsche, ya nos aproximan a cierta condición de excepcionalidad de estos personajes. Tales idealizaciones hacen sospechar que, junto a la bella voluntad, el líder requiere de un talento que lo distingue del común y lo faculta para conducir y proponer caminos, para transmitir eficazmente una visión inspiradora, valores y símbolos que son abrazados por quienes se identifican con ellos. Un enfoque subjetivista, sin duda, más vinculado a la opinión de que el líder nace, no se hace. Y es que ser dueño de esa “virtù” o del inusual carisma que según Weber es fuente del apego instintivo a la autoridad, es gracia de la cual no todos parecen gozar.

Pero estudios recientes del fenómeno advierten allí una ecuación mucho más compleja; menos “heroica”, más holística e integradora. El líder aparece entonces como un sujeto creador de sentido, no el simple portador de una visión. Burns, quien lo asocia a una expresión de disensión y determinación, en 1978 distingue, por ejemplo, el liderazgo transaccional y el transformacional, vinculando este último a contextos de alta incertidumbre. En ese sentido, hay aliños, soplos adicionales de vida para esta creatura que no pueden menospreciarse. Estilos, comportamientos, formación, tipos de seguidores, estructura de las tareas, capacidad para habilitar la cooperación y la agencia, reaccionar ante la contingencia y asumir riesgos, o para fluir con la circunstancia de modo de no desaparecer, aplastado por la fricción… factores que, en el marco de una realidad desafiante, que impele a la transformación, condicionan el surgimiento, influjo y efectividad del liderazgo político.

Siguiendo a Bourdieu: Hábitus, Campo y Capital político operan juntos para socializar, legitimar e institucionalizar el liderazgo. No parece buena idea, por tanto, pretender prefabricarlo, contraviniendo con ello una natural progresión u omitiendo las variables relacionales e interactivas que allí concurren. Embullados como estamos por los “milagros” del marketing político, hasta podría pensarse que seleccionar el envoltorio, coser sus partes en un bulto mal armado y luego animarlo, dotarlo de palabras y sublimes contenidos, es algo admisible. Pero la experiencia dice lo contrario. Una lectura responsable de las señas del entorno así como de las debilidades endógenas, quizás oriente sobre mecanismos que podrían contribuir a visibilizar figuras aptas para encarnar ideas, programas, esa visión compartida y posible de futuro. Sustancia, en fin. Entretanto, calma y cordura.

Mibelis Acevedo D.
mibelis@hotmail.com
@Mibelis
@ElUniversal
Venezuela