jueves, 8 de abril de 2021

ACTUALIZACIÓN DE EL REPUBLICANO LIBERAL: DIARIO DE OPINIÓN, http://elrepublicanoliberalii.blogspot.com/ JUEVES 08/04/2021

 





ANGELICA MORA BEALS: "CAMBALACHE", MAS VIGENTE QUE NUNCA...

"Que el mundo fue y será una porquería, ya lo sé, En el quinientos seis, y en el dos mil también..." 

En 1934, el argentino Enrique Santos Discépolo escribió el magistral Tango "Cambalache" y a pesar del tiempo transcurrido, no hay que quitarle una coma a la actual situación de caos que vive el mundo. No aprendemos, y por el contrario, agregamos más carga negativa a la humanidad.
 
Lo terrible del caso es que últimamente una fuerte y arrolladora corriente trata de imponer a la fuerza sus propios criterios, obligando  al resto a aceptarla como elemento de la verdad absoluta. Lo último que se ha impuesto es aceptar el "Transgénero", que es un término que representa a aquellas personas que no se sienten identificadas con el sexo biológico que tuvieron al nacer.
 

Con el paso de los años se han acuñado otros términos relacionados con éste, tales como el diminutivo "trans" o las palabras intergénero, género fluido, entre otras. Este tipo de persona tiene diferentes formas de expresar su situación y obliga al resto a aceptar como algo natural los efectos del cambio.
 
Existen varias interpretaciones del significado de transgénero. Normalmente son personas que se sienten fuera de las normas de género convencionales. Ser transgénero no invoca ninguna orientación sexual, pues los transgénero pueden identificarse también como gay, heterosexual o bisexual. Otro término derivado de los llamados cambios es la pansexualidad, que como
todas las etiquetas LGBTQ, se puede entender de diferentes maneras.
 
Sin embargo, la organización no gubernamental estadounidense de defensa queer, la Gay and Lesbian Alliance Against Defamation (GLAAD por sus siglas en inglés) define ampliamente ser pansexual como "sentirse atraído por todas las identidades de género o atraído por personas sin importar el género". En griego, "pan" se traduce en "todos" y, por lo tanto, el término "pansexual" se puede entender como una identidad sexual que se utiliza para describir la atracción hacia personas de todos los géneros, más allá de los parámetros masculino-femenino.
 
Que conste que no tengo nada en contra de los homosexuales y sus variantes, pero lo que molesta es la imposición de los criterios. Hay aberraciones tales como madres, que luego de dar a luz, dicen que van a esperar que el bebé decida su propio sexo.
 
¡Todo es igual! ¡Nada es mejor!
¡Lo mismo un burro que un gran profesor!
 
Ni que hablar en la política. Hay millones en Estados Unidos que hoy lamentan no haber apoyado lo suficiente al ex presidente Donald Trump en su propósito de mantenerse como mandatario en las elecciones pasadas. Esto de debe a que en USA -e internacionalmente- la izquierda domina y se traga países enteros en su afán de dominio absoluto.
 
España es un triste ejemplo y ni que decir de América Latina, estrangulada por la influencia de Cuba y su nefasto Eje del Mal: Nicolás Maduro en Venezuela, Alberto Fernández en Argentina, aunque la que sigue mandando es Cristina Fernández. Bolivia con Luis Arce, pero quien manda es Evo Morales. En Nicaragua está la fatídica pareja en el mando desde hace décadas de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
 
Mundo al revés
 
Uno de los actuales ejemplos de abuso e imposición del empleo de los medios informativos  es el caso de la entrevista del Príncipe Harry y su esposa Meghan Markle con la famosa "periodista"Oprah Winfrey. Harry y Meghan renunciaron a sus títulos nobiliarios como parte del acuerdo de separación de la familia real, aduciendo que querían vivir en una forma más privada.
 
Sin embargo, el 7 de marzo la pareja concedió una explosiva entrevista con Oprah en la televisión estadounidense, que también se divulgó en el Reino Unido. Acusaciones de racismo e indiferencia de la Corona impactaron al mundo y los temas  siguen candentes a más de un mes de ocurrido el encuentro. Lo que muchos sí están de acuerdo es que el foro de Oprah no era el más apropiado para tener este tipo de discusiones. Por todo esto, el tango "Cambalache" tiene una vigencia extraordinaria en estos días...

Que el mundo fue y será una porquería, ya lo sé
En el quinientos seis, y en el dos mil también
Que siempre ha habido chorros, maquiavelos y estafa'os
Contentos y amarga’os, valores y dublé
Pero que el siglo veinte es un despliegue
De maldad insolente, ya no hay quién lo niegue
Vivimos revolca'os en un merengue
Y en un mismo lodo, todos manosea'os
 
[Verso 2]
Hoy resulta que es lo mismo ser derecho que traidor
¡Ignorante, sabio o chorro, generoso o estafador!
¡Todo es igual! ¡Nada es mejor!
¡Lo mismo un burro que un gran profesor!
No hay aplaza’os (¡Que va a haber!), ni escalafón
Los inmorales nos han iguala'o
 
[Coro]
Si uno vive en la impostura
Y otro afana en su ambición
Da lo mismo que sea cura, colchonero, rey de bastos
Caradura o polizón
 
[Verso 3]
Qué falta de respeto, qué atropello a la razón
Cualquiera es un señor, cualquiera es un ladrón
Mezcla'o con Stavisky, va Don Bosco y La Mignon
Carnera y Napoleón, Don Chicho y San Martín
Igual que en la vidriera irrespetuosa
De los cambalaches se ha mezcla'o la vida
Y herida por un sable sin remaches
Ves llorar la Biblia junto a un calefón
 
[Verso 4]
Siglo veinte, cambalache, problemático y febril
El que no llora, no mama; y el que no afana, es un gil
Dale nomá', dale que va
Que allá en el horno nos vamo' a encontrar
No pienses más, sentate a un la'o
Que a nadie importa si naciste honra'o
 
[Coro]
Da lo mismo el que labura
Noche y día como un buey
Que el que vive de las minas, que el que roba, que el que cura
O está fuera de la ley
Vivimos revolca’os en un merengue
Y en un mismo lodo, todos manosea’os
 
Angelica Mora
angelicamorabeals@yahoo.com
lanuevanacion@bellsouth.net
@AlfredoCepero
@copihueblanco
Angelica Mora
Estados Unidos

TRINO MÁRQUEZ: EL COQUI

Luego de ser declarada ‘Zona de Paz’, la Cota 905 se ha convertido en una versión de la Zona de Distención del Caguán, aquella extensa área en Colombia que el gobierno de Andrés Pastrana les entregó a los guerrilleros de las FARC para que la administraran, como símbolo del  espíritu pacifista y conciliador del gobernante neogranadino. Todavía vivía Manuel Marulanda. Esa concesión no sirvió de mucho. Los irregulares comandados por ‘Tiro Fijo’ siguieron en sus andanzas, hasta que Pastrana tuvo que admitir que su benevolente  experimento había fracasado. Entonces, el enfrentamiento entre el Estado y los insurgentes volvió a ser abierto y sin tregua.

            La Cota 905 fue declarada ‘Zona de Paz’ por Nicolás Maduro.  Extraña manera de llamar a un área convertida en refugio de todo tipo de delincuentes y de personajes que se consideran al margen de la ley, portan armas de guerra, impiden el acceso a los cuerpos de seguridad y se creen los señores de unos feudos del siglo XXI. Su figura emblemática, ‘El Coqui’, mantiene acosados a los habitantes de ese sector de Caracas, incluidos los agentes de la Guardia Nacional y la Policía Nacional. Su osadía lo llevó a intentar, hace pocos días, tomar por asalto el Comando General de la GNB y el Comando El Pinar, de la PNB, ambos ubicados en El Paraíso. El objetivo era adueñarse de armas de guerra para incrementar su arsenal. Hasta donde se sabe, tanto la Guardia como la Policía repelieron los ataques.

            Llama la atención que -a pesar de estos actos subversivos tan graves- el régimen de Maduro no les ha declarado la guerra frontal a ‘El Coqui’ y sus secuaces. La actitud de los cuerpos de seguridad ha sido esencialmente defensiva, no ofensiva. ¿Qué ocurre allí, pues el gobierno de Maduro no podría calificarse de pacifista y tolerante, al menos cuando de la oposición se trata?

            En este momento el Ejército Nacional, comandado por el general Vladimir Padrino López, apoyado por las Fuerzas de Acciones Especiales, las temibles FAES, según señala el gobierno, libran un enconado combate con unos grupos disidentes de los disidentes de las FARC –los liderados por Iván Márquez y Jesús Santrich- porque esos guerrilleros pretenden moverse impunemente por el sur oeste del país. Aspiran a entrar y salir del territorio nacional a su libre albedrío, como si Venezuela fuera territorio de nadie. Como si aquí no estuviera Padrino López, un soldado de la patria dispuesto a defender con su vida la soberanía nacional. La Victoria, en el estado Apure, a miles de kilómetros de Miraflores y de la capital, ha sido escenario de los enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad nacional y los malhechores colombianos. El Ejército se desplazó hasta la frontera colombiana, pero no ha podido someter a ‘El Coqui’ y sus muchachos, que viven en Caracas. Raro, ¿verdad?

            El régimen que comenzó con Hugo Chávez y continuó con Maduro, politizó e ideologizó a las Fuerzas Armadas. Las convirtió en el brazo armado de la autodenominada ‘revolución bolivariana’. Las puso a vociferar consignas antiimperialistas. Las sometió a la tutela de la dictadura cubana. Las hace gritar ‘Chávez vive, la Patria sigue’ y ‘Patria, socialismo o muerte’. Todo este desajuste fue perpetrado en pocos años. Consumada la deformación de las FAN, el régimen las convirtió en un instrumento para hostigar, perseguir y reprimir al pueblo y a la oposición. Las obligó a proclamar  ‘No volverán’, para referirse a la imposibilidad de que la oposición retorne al Gobierno, en una república cuya constitución consagra la alternancia en el poder.

            Con la finalidad de reprimir las protestas populares y acorralar a la oposición democrática y pacífica, las FAN sí resultan muy eficientes, pero no para acabar con un grupo de forajidos  cuya ubicación ha sido meticulosamente mapeada y que siembra terror entre los vecinos de las urbanizaciones aledañas a la Cota 905. ¿Por qué el gobierno les entregó esa área a los delincuentes? ¿Por qué renuncia a ejercer la autoridad, en este caso legítima, a unos pocos kilómetros de Miraflores?  ¿Cómo entender este comportamiento en apariencia tan incongruente?

            Aventuro la siguiente hipótesis: ‘El Coqui’ y sus lugartenientes le sirven al régimen para mantener a la ciudadanía azotada, atemorizada y atrincherada en sus propias viviendas, incapaz de crear  vínculos  que le permita organizarse para luchar por sus propios derechos y reivindicaciones. La megabanda de ‘El Coqui’ es como un colectivo oficialista, pero más agresivo y letal. Más intimidante. “El Coqui’ se comporta actúa como esbirro del régimen, pero sin aparecer en la nómina del Sebin, de las FAES o del Dgcim. Es un patriota cooperante, aunque esa no sea su intención real.

            A un aliado tan útil como ese hay que dejarlo actuar. Esa podría ser otra de las recomendaciones de los cubanos. 

Trino Marquez Cegarra

trino.marquez@gmail.com

@trinomarquezc

Venezuela      

CARLOS BLANCO: LA CUESTIÓN POLÍTICA ESENCIAL. EL COVID-19

1.- No hay cuestión en Venezuela que supere a la pandemia en importancia y premura. El país es un barco a la deriva, en medio de la niebla y la tempestad, que no se sabe dónde está ni adónde se dirige; mientras los piratas han tomado control de la sala de mando y, divertidos, cuando no lanzan por la borda a grupos de pasajeros para el almuerzo de los tiburones, los convocan para que –entre ellos- jueguen la ruleta rusa. La actitud del régimen respecto del covid no es producto de equivocaciones, de yerros involuntarios, sino que ha entendido a la perfección que también su manejo es un efecto de poder. Como sujetos con pensamiento estratégico, seguro no saben cómo manejar la enfermedad; pero sí saben cómo el desastre pueden usarlo a su favor.

2.- Se comete una equivocación al suponer que se puede operar el tratamiento de la enfermedad como un tema humanitario, separado de la política. Hoy no hay asunto más profundamente político que la pandemia porque el poder define en términos gruesos a quiénes impacta y a quiénes no. La enfermedad no es política; la forma en la cual afecta a los ciudadanos sí lo es, porque depende de factores del contexto. Cuando las opciones son hambre segura en el encierro o enfermedad probable a campo descubierto la decisión es terrible porque las dos opciones son malas. Cuando no hay equipos por el despilfarro y el robo; cuando se prefiere pagar a la defensa de Alex Saab antes que traer vacunas; cuando se niega un entendimiento amplio en el marco del mecanismo Covax; en todos estos casos está la política y el poder.

3.- El régimen ejerce su fuerza no solo en el manejo autoritario del confinamiento sino en la ausencia de relación con la comunidad científica organizada, al dejar a la intemperie a los profesionales de la salud, al esconder las cifras, y hasta llegar al abuso por parte de funcionarios que se toman un video para demostrar su trabajo… en la entrega de una mascarilla por persona a los profesionales de la salud. Mientras tanto, intenta eliminar la opción de que factores políticos, económicos o sociales, no gubernamentales, ayuden a aliviar la situación. Esto les quita poder.

4.- La semana pasada sugerí en este mismo espacio una tregua humanitaria. La idea es que aun en la guerra que libra Maduro en contra del país podía caber un espacio para manejar la pandemia, entre el régimen y las fuerzas que se le oponen. Dije entonces: “Estuve y estoy de acuerdo porque la tregua es un momento de las guerras. El régimen libra una guerra contra el país y manipular con la vacuna, con la cuarentena, con fantásticas curas, mientras centenas de miles se enferman y no se sabe cuántas mueren, es un crimen brutal. Si se puede llegar a esa tregua para curar los enfermos, enterrar los muertos y preservar los vivos, hay que hacerlo”. Desde luego, no creo que haya sido una propuesta que concitara interés alguno en los actores relevantes; pero la creí oportuna y útil.

5.- De no darse algo como lo propuesto, lo que va a quedar inexorablemente, para hoy, para mañana o para pasado mañana, es la fuerza humanitaria, desplegada sobre la base de la Responsabilidad para Proteger (R2P) y el Título VII de la Carta de Naciones Unidas que reza: “Artículo 39. El Consejo de Seguridad determinará la existencia de toda amenaza a la paz, quebrantamiento de la paz o acto de agresión y hará recomendaciones o decidirá qué medidas serán tomadas de conformidad con los Artículos 41 y 42 para mantener o restablecer la paz y la seguridad internacionales”.

6.- “Artículo 41. El Consejo de Seguridad podrá decidir qué medidas que no impliquen el uso de la fuerza armada han de emplearse para hacer efectivas sus decisiones, y podrá instar a los Miembros de las Naciones Unidas a que apliquen dichas medidas, que podrán comprender la interrupción total o parcial de las relaciones económicas y de las comunicaciones ferroviarias, marítimas, aéreas, postales, telegráficas, radioeléctricas, y otros medios de comunicación, así como la ruptura de relaciones diplomáticas”.

7.- “Artículo 42. Si el Consejo de Seguridad estimare que las medidas de que trata el Artículo 41 pueden ser inadecuadas o han demostrado serlo, podrá ejercer, por medio de fuerzas aéreas, navales o terrestres, la acción que sea necesaria para mantener o restablecer la paz y la seguridad internacionales. Tal acción podrá comprender demostraciones, bloqueos y otras operaciones ejecutadas por fuerzas aéreas, navales o terrestres de Miembros de las Naciones Unidas”.

8.- Se conoce que Rusia y China pueden paralizar cualquier decisión en el Consejo de Seguridad de la ONU, pero una campaña mundial con la exigencia de cesar la doble devastación que sufre Venezuela –la del régimen y la de la pandemia– señalan un curso político que podría alterar las relaciones domésticas de poder.

0.- Casi todos los países del mundo han vivido o viven una situación de catástrofe por la malignidad del covid-19. Muy pocos países viven una doble catástrofe como es el caso de Venezuela: Maduro y la pandemia. Es el momento de centrar todos los esfuerzos en luchar contra esta enfermedad brutal. No se trata de “usar” la pandemia para arrinconar al régimen, sino de arrinconar la pandemia y hacer que una tregua se imponga o la fuerza internacional lo haga.

 

Carlos Blanco

carlos.blanco@comcast.net

@carlosblancog

Venezuela – Estados Unidos

 

 

HUMBERTO MARCANO RODRÍGUEZ: GENERAL EN JEFE JOSÉ FRANCISCO BERMÚDEZ DE CASTRO Y RIVERA DE CÁCERES

Héroe de la Independencia venezolana y uno  de los más   grandes paladines  orientales de la  gesta emancipadora. Nacido en San José  de Aerocuar, pueblo de la provincia de Cumaná, el 23  de  enero de 1782, falleciendo; el 15 de diciembre de 1831,  hijo  de  Don Antonio Bermúdez  de Castro y Casanova y Doña Josefa Antonia Figuera de Castro y Sotillo, ambos oriundos  de Cumaná pero  de fuerte ascendencia española y de una  gran posición social y económica,  por lo tanto José Francisco va  a recibir por  su holgada posición familiar e  económica   una  muy  buena  educación. José Francisco Bermúdez  era una persona alta  y de mucha  elegancia con un porte de  gran  arrogancia, pero  a la vez  se caracterizaba por  su trato afable y campechano  para  con todo el mundo, lo que le  atraía infinidades  amistades en todos  los estratos  sociales, por  lo cual    era  conocido amistosamente  como “Juan Pueblo”; sin embargo demostraba cuando era necesario una gran impetuosidad que lo hacía  aparecer violento, actitud  que lo llevaba  a emprender acciones  temerarias y fue  precisamente ese  estado lo que lo hizo  emprender  actos  heroicos increíbles, más  allá  de la comprensión normal  en la lucha independentista.
 
Anterior  a los  sucesos  del 19 de abril de 1810, José Francisco  junto a un grupos  de personas de diferentes clases  sociales  donde destacaba Don Vicente de Sucre padre  de Antonio José  de Sucre, se reunían clandestinamente  en actos  conspirativos contra las  autoridades españolas, por eso cuando  sucede  lo del 19  de  abril en Caracas, ellos  estaban ya firmemente organizados y allí vamos  a encontrar  a José Francisco Bermúdez, formando parte  muy activa en los  actos  de la destitución de las  autoridades españolas  de la Provincia de Cumaná, y a la vez siendo  miembro   de La Junta Patriótica de Gobierno de esa  Provincia, poniendo en ello toda su prestancia y su ascendencia  entre la población, para comienzo  del año 1811, lo vamos  a ver  encuadrado en el ejercito patriota oriental  con el grado de Sub-teniente en el batallón   comandado por Don Vicente de Sucre, del cual era  su  ayudante.  Marchan hacia Barcelona y en las  inmediaciones  de Puerto Pírutu derrotan  al ejército español  que trato de  cerrarle  el paso, ocupando de inmediato esta ciudad, pero ante  las informaciones traídas  por  los correos de la  situación adversa  a  los republicanos en Caracas, contramarchan hacia Cumaná  para  preparar la defensa  de esa población, al conocerse  la capitulación y rendición de Miranda, Bermúdez y un  grupo de patriotas deciden  escaparse  de Cumaná  a bordo  del bergantín “Botón de oro”,  llegando a las  costas de Guiria y posteriormente pasan  Trinidad, donde  van a reunirse un grupo de exiliados  venezolanos, pero José Francisco Bermúdez, no tiene  descanso  organizando al grupo de venezolanos con la intención de  seguir  desde  el exterior  haciendo resistencia  al gobierno español, de Trinidad pasan a la Isla de Chcaracare, donde  la hermana  de Mariño doña Concepción, mujer de un gran temple y demostrado patriotismo   posee  una gran hacienda y desde allí  planean en definitiva la invasión de Venezuela, juramentándose  Santiago Mariño  como Jefe  de la expedición, con apenas diez fusiles y cien cargas para los mismos, amén de las pistolas, sables  y machetes,  en este grupo tan pesimamente armados, pero rebosantes  de valor y patriotismo; destacan: José  Francisco Bermúdez, Manuel Carlos Piar, Antonio José de Sucre  y Bernardo Bermúdez  entre otros, mal armados pero rebosantes de valor,   se lanzan en esta invasión hacia Venezuela por las  costas de Guiria, expedición  que la historia ha de  conocer  como La Gloriosa Campaña de Oriente.
 
Después  de  consolidarse la invasión en los primeros  encuentros con los realistas,  Santiago Mariño, le hace  entrega a José Francisco Bermúdez de  setenta y cinco hombre  para  que  avance  hacia Cumaná, en las  cercanías  de Irapa, impetuosamente  ataca  al Coronel español Cerveriz quien a pesar de  comandar un numeroso  grupo  de realistas es  derrotado estrepitosamente por Bermúdez, quien en su marcha hacia Cumaná  va derrotando a todos los grupos realistas  que tratan  de cerrarle  el paso, mientras  tanto  su hermano Bernardo al frente de otro  grupo  donde destaca Manuel Carlos Piar como  su  segundo logran llegar a Maturín y derrotan a la guarnición española  de esa  ciudad, ocupando los patriotas la ciudad oriental.
 
NOTA: Se  autoriza  a cualquier persona  natural o jurídica  hacer  el mejor  uso de  este  escrito, solo se le agradece no borrar  el nombre  del autor. La  segunda parte se publicará en próxima entrega

Humberto Marcano Rodriguez
hjmrodriguez@gmail.com
@Hmarcanor
Venezuela       

JESÚS ELORZA: VACUNA CUBANA, POLITICA Y DEPORTE

Risueño y satisfecho se mostraba el camarada Nicolás, al escuchar la propuesta de su equipo de propaganda, para dar a conocer el Convenio Cuba-Venezuela para la aplicación de un Programa de Vacunación contra el Covid-19. Nada que ver con las vacunas imperialistas que pretenden imponernos los organismos internacionales de salud, le decía a sus colaboradores mas cercanos.
 
- El camarada cubano, encargado de la explicación, comenzó diciendo que nuevamente el cerco del imperio contra la revolución cubana ha fracasado. El mundo entero, va a conocer y a beneficiarse de nuestras vacunas y muy pronto veremos la derrota total y final del virus que hoy nos afecta.
 
Para dar a conocer nuestro producto y generar la mayor confianza posible en la población, hemos diseñado nuestra propuesta de divulgación basados en el espíritu caribeño y musical de los venezolanos…
 
¿Como así?, preguntó extrañado Nicolás.
 
- Óyeme tu camarada, el plan se basa, en el envío de Trovadores a cada uno de los Consejos Comunales existentes en el país, para que con sus ritmos y una canción especialmente diseñada  den a conocer las virtudes de los fármacos cubanos…
 
¿¿¿¿???? No entendemos un coño, dijeron los presentes.
 
- En ese instante, hizo acto de presencia un Trio musical que al mejor estilo de Matamoros comenzó a tocar y cantar un pegajoso arreglo:
 
….Mamá yo quiero saber de donde son las vacunas
 
     que recomienda Maduro y Yo quiero ponerme una.
 
….¿De donde serán? ay mamá
 
      ¿Serán de la Habana?
 
      ¿Serán de Caracas? tierra soberana.
 
Sin dejarlos terminar, Nicolás gritó APROBADO, que vaina tan buena, y ordenó su inmediata ejecución.
 
- Pero, las cosas no resultaron como se esperaba. Las personas en los barrios, que escucharon a los trovadores, respondían también con un coro: 
 
 
……Son de la LOMA y cantan en el llano, ya verás, tu verás
 
        Mamá ellos son de la loma / Mamá ellos cantan en el llano. 
 
 
El coro de respuesta llamó la atención de los comisarios políticos que estaban en la presentación y preguntaron el por que del énfasis en la palabra “LOMA”.
 
- Cosa más grande caballero, dijeron los presentes, esas vacunas que nos quieren meter por los ojos, vienen de los Laboratorios Organizados de mentitas Acumuladas (LOMA) y de los fármacos que allí se producen ya tenemos varias malas experiencias.
 
En sus productos “famosos”, pero que no han servido pa un coño, están La Melagenina Plus, que nos la vendieron como una formula para acabar con el vitiligo y resulta  que las personas que la usaron están blancos como un albino.
 
Otras personas, reclamaron que varios de sus familiares usaron el PPG  que el Centro Nacional de Investigaciones científicas cubano (CNIC) lo presentó en 1989 como un suplemento energético para el control del colesterol, y resulto ser que murieron con altos índices de colesterol.
 
Una persona, que tenia amputada una de sus piernas, reclamó que tomaba pastillas de HEBERPROT-P. Fármaco cubano para el tratamiento de la úlcera del pie diabético y miren como terminé.
 
Ahora, nos vienen con el cuento de los fármacos Soberana O2, Abdala o el Interferón Alfa 2B, como las formulas “revolucionarias” para acabar con el imperialista Covid-19. Ese disco esta rayao, todos sabemos que la dictadura cubana busca como sobrevivir y pretende seguir intercambiando espejitos o fármacos cuya efectividad no ha sido demostrada, por dólares, oro, petróleo, diamantes o gasoil.
 
Así que, mercantilistas farsantes que juegan con la salud del pueblo, váyanse con su música pa otro lado.
 
Cilia, la primera combatiente, escuchando ese cerro de críticas le dijo a su marido, vamos a ponernos la vacuna cubana para calmar los reclamos.
 
- Estas loca, me pongo la Rusa o la China y eso porque el bloqueo no me permite conseguir la Pfizer que es más segura. Deja que otros hagan el papel de conejillo de indias, seguro mató a confianza,
 
-Esta bien mi amor, nos ponemos esa que tu dices pero anunciamos que son las cubanas.
 
!Ño! …te la comiste con eso mi amor.
 
Jesús Elorza Garrido
jesuselorza@hotmail.com
@jesuselorza
Venezuela

CLAUDIO NAZOA: FUI UN ESPÍA BOLIVIANO

Preámbulo

Años atrás, Laureano Márquez y yo fuimos invitados a La Paz, Bolivia, para realizar unas presentaciones. Ese país es muy importante para mi familia y para mí, pues cuando Marcos Pérez Jiménez expulsó de Venezuela a Aquiles Nazoa, mi padre, lo envió para allá. Allí vivimos un tiempo. Pérez Jiménez mandaba a los adecos y a los izquierdosos a Bolivia, tal como también lo hizo con Raúl Leoni.
 
I
El cuento
El cuento que les traigo hoy, por absurdo que parezca, es absolutamente cierto. Para ir a Bolivia había que sacar visa. Para arreglar esos menesteres, Laureano y yo nos dirigimos a la embajada que se encuentra en Caracas. Estando allí y mientras hacíamos los trámites, escuchamos: “¡Pssst… Pssst…!”, (sonido tradicional que se utiliza para llamar a alguien desde lejos).
 
Dada la insistencia, volteé y vi a un militar. Laureano y yo nos miramos entre sorprendidos y extrañados de que ese llamado fuera con nosotros. Laureano, vivo como es, me susurró:
 
—La vaina es contigo.
 
—¿Conmigo? –pregunté extrañado.
 
Y de gafo le hice señas al militar para asegurarme de que era a mí a quien llamaba. Con la cabeza, él asintió.
 
En realidad él llamaba al azar a uno de los dos y me sentí aludido.
 
Me acerco al oficial y él, muy amable como son los bolivianos, me dijo (leer con acento boliviano):
 
—Yo soy el coronel Fulano de Tal, ¿ustedes van a viajar a Bolivia?
 
—Sí –me adelanté a responder–, somos actores. Nos presentaremos en La Paz.
 
—¡Ah, qué bien! ¿Podrían ustedes hacerme un favor?
 
—¡Pero claro, coronel! Usted dirá –dije extrañado.
 
—Es que tengo que enviar unos papeles secretos al alto mando de la Aviación Militar Boliviana, y quería saber si ustedes podrían llevarlos.
 
Sin salir de mi asombro ante tan insólita petición, le respondí de lo más normal:
 
—Pero claro. No faltaba más.
 
No podía dejar de pensar que era una joda de un programa de cámara escondida en complicidad con Laureano. ¡Pero no! Era verdad.
 
—Entonces… ¿ustedes se van la otra semana? –dijo el coronel–Díganme una dirección y yo les hago llegar un sobre con unos papeles secretos.
 
—Ah… ajá… ¿pero…? ¿Qué hago con eso? ¿En dónde lo entrego? –respondí.
 
—No se preocupe, el Cuartel de Aviación Boliviano está en El Alto, muy cerca del aeropuerto de La Paz. Ustedes tienen que pasar obligatoriamente por ahí. Allí deben buscar al general Mengano, quien estará esperando esos papeles.
 
La verdad, por mi profesión de humorista y a esas alturas de mi vida, la cosa loca de llevar papeles secretos me hizo sentir como una especie de James Bond boliviano y la aventura comenzó a gustarme. Seguí conversando con el coronel y le dije:
 
—Mire, coronel, yo no tengo problema en llevar eso, lo que pasa es que según el boleto, con suerte, estaremos aterrizando en La Paz a eso de las 11:00 de la noche.
 
—¡No importa! –contestó el coronel entusiasmado– El general Mengano los estará esperando. Los papeles son muy importantes para el comando de la aviación boliviana.
 
Ni modo, pensé, ya me había comprometido a cumplir encargo tan extraño. Cuando le conté a Laureano lo ocurrido, el muy muérgano, en lugar de ser solidario ante compromiso de tal magnitud, comenzó a reírse.
 
—Claudio, tú si te metes en vainas raras.
 
—¿Me meto?, no. ¡Me metieron! –contesté.
 
Dos días después, en mi casa, suena el teléfono. Era el coronel en persona para decirme que estaba en la puerta con el sobre de los papeles secretos. El sobre sellado, tipo manila, era abultado. Afuera se podía leer: Embajada de Bolivia. Caracas. Confidencial.
 
—Muy agradecido, Sr. Nazoa. Cuídelos y por favor, no lo abra.
 
Con aquel documento secreto en mis manos, me sentí como un traidor a la patria. Corriendo, subí a mi casa. Raudo y veloz, lo primero que hice, despegando el sello con mucho cuidado, fue abrir el sobre y leerlo.
 
El documento en cuestión era un informe del coronel (muy bien escrito, por cierto), en donde hablaba sobre la situación político militar que en ese momento vivía Venezuela. Estábamos en la época de los militares de la plaza Altamira.
 
Lo siguiente que hice fue buscar a Laureano y enseñarle el informe.
 
Lo leyó detenidamente y comentó:
 
—¡Por cosas como estas es que en Latinoamérica estamos tan jodidos! ¿Tú crees que los gringos pondrían a dos cómicos a llevar al Pentágono un documento secreto?
 
II
El viaje
En Bolivia tengo una familia adoptiva que durante el exilio nos ayudó cuando más lo necesitábamos, la familia Ballón: Claudia, Camila y Mauricio; lo único que ellos me pidieron que les llevara era un refresco llamado Frescolita. Por supuesto, los complací. Compré veinte latas y las metí en la maleta. Allí coloqué también el sobre con los documentos secretos del coronel Fulano de Tal.
 
El avión aterrizó en Santa Cruz y después de varias horas prosiguió el viaje hasta La Paz. Como estaba previsto, llegamos a las 11:00 de la noche con un frío y una altura de 4.000 metros que te asfixia. Nos quedamos esperando que salieran las maletas. Varias personas se quejaban porque había equipaje que venía mojado con refresco. ¡Las Frescolitas estallaron!, me dije. Efectivamente, mi maleta salió chorreando. Para disimular, me hice el indignado y grité:
 
—¡Qué irresponsabilidad traer refrescos en una maleta!
 
De pronto, Laureano, alarmado, cayó en cuenta:
 
—¡Los papeles secretos!
 
A nuestros anfitriones les contamos la locura que teníamos como misión, no sin antes abrir la maleta y verificar que dos de las latas de refresco efectivamente habían estallado y aquello era un desastre. El informe secreto chorreaba Frescolita. Qué pena entregarlo así, pero ni modo.
 
III
La entrega
12:00 de la noche. Frente al Cuartel de la Aviación Boliviana en El Alto, La Paz, Laureano y los anfitriones, quienes aún no podían creerlo, estaban muertos de la risa.
 
Con el sobre chorreando refresco en la mano, a lo lejos, vi a un soldadito que hacía guardia.
 
—¡Alto! ¿Quién vive?
 
Yo, como un soberano bolsa, contesté a todo pulmón:
 
—¡Traigo unos papeles secretos desde Venezuela!
 
Me sentí ridículo haciendo aquello tan loco. Encendieron las luces y apuntándome, el soldado dijo que le explicara qué era eso de los papeles secretos. Mientras, a lo lejos, no dejaba de escuchar las carcajadas de Laureano.
 
Asustado, le pedí al soldado que buscara al general Mengano.
 
—¡Mi general está dormido! No lo puedo despertar –replicó.
 
Al final y luego de muchas explicaciones, por fin me dejaron pasar no sin antes comprobar mi identidad. El general llegó y le expliqué que un irresponsable transportaba refrescos en las maletas y por eso los papeles se habían mojado.
 
IV
Susto y recompensa
Años después, en otra ocasión, fui a la embajada americana en Venezuela y, mientras hacía una cola larguísima, escuché a un marine haciendo: “¡Pssst… Pssst…!”.
 
—¡No! Otra vez, no –me dije.
 
El marine se acercó y me preguntó:
 
—¿Es usted Claudio Nazoa?
 
—Sí –contesté aterrado.
 
—Venga por acá.
 
Y me pasaron a una taquilla en donde no había cola. Me pidieron mi pasaporte y sin preguntarme nada, ni mandar papeles secretos al Pentágono, me entregaron la visa.
 
Privilegio que tenemos cuando reconocen a un espía de la CIA.
 
Claudio Nazoa
 
@claudionazoaoficial
@claudionazoa
@ElNacionalWeb