
EL REPUBLICANO LIBERAL II - DIARIO DE OPINIÓN - NACIONALES – INTERNACIONALES -EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS, TWITTER Y/O PAGINAS WEB QUE SEGUIMOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, - ACOMPAÑAMOS LA GESTIÓN DE LAS FUERZAS OPOSITORAS Y DISIDENTES EN EL PROCESO DE LOGRAR UNA DEMOCRACIA REAL MEDIANTE LA UNIDAD CIUDADANA Y SU ORGANIZACIÓN EN UNA NUEVA MAYORÍA EN LUCHA CON MORAL DE VICTORIA.
jueves, 8 de abril de 2021
ACTUALIZACIÓN DE EL REPUBLICANO LIBERAL: DIARIO DE OPINIÓN, http://elrepublicanoliberalii.blogspot.com/ JUEVES 08/04/2021
ANGELICA MORA BEALS: "CAMBALACHE", MAS VIGENTE QUE NUNCA...
"Que el mundo fue y será una porquería, ya lo sé, En el quinientos seis, y en el dos mil también..."
Con el paso de los años se han acuñado otros términos relacionados con éste, tales como el diminutivo "trans" o las palabras intergénero, género fluido, entre otras. Este tipo de persona tiene diferentes formas de expresar su situación y obliga al resto a aceptar como algo natural los efectos del cambio.
todas las etiquetas LGBTQ, se puede entender de diferentes maneras.
¡Lo mismo un burro que un gran profesor!
Que el mundo fue y será una porquería, ya lo sé
En el quinientos seis, y en el dos mil también
Que siempre ha habido chorros, maquiavelos y estafa'os
Contentos y amarga’os, valores y dublé
Pero que el siglo veinte es un despliegue
De maldad insolente, ya no hay quién lo niegue
Vivimos revolca'os en un merengue
Y en un mismo lodo, todos manosea'os
Hoy resulta que es lo mismo ser derecho que traidor
¡Ignorante, sabio o chorro, generoso o estafador!
¡Todo es igual! ¡Nada es mejor!
¡Lo mismo un burro que un gran profesor!
No hay aplaza’os (¡Que va a haber!), ni escalafón
Los inmorales nos han iguala'o
Si uno vive en la impostura
Y otro afana en su ambición
Da lo mismo que sea cura, colchonero, rey de bastos
Caradura o polizón
Qué falta de respeto, qué atropello a la razón
Cualquiera es un señor, cualquiera es un ladrón
Mezcla'o con Stavisky, va Don Bosco y La Mignon
Carnera y Napoleón, Don Chicho y San Martín
Igual que en la vidriera irrespetuosa
De los cambalaches se ha mezcla'o la vida
Y herida por un sable sin remaches
Ves llorar la Biblia junto a un calefón
Siglo veinte, cambalache, problemático y febril
El que no llora, no mama; y el que no afana, es un gil
Dale nomá', dale que va
Que allá en el horno nos vamo' a encontrar
No pienses más, sentate a un la'o
Que a nadie importa si naciste honra'o
Da lo mismo el que labura
Noche y día como un buey
Que el que vive de las minas, que el que roba, que el que cura
O está fuera de la ley
Vivimos revolca’os en un merengue
Y en un mismo lodo, todos manosea’os
angelicamorabeals@yahoo.com
lanuevanacion@bellsouth.net
TRINO MÁRQUEZ: EL COQUI
La Cota 905 fue declarada ‘Zona de
Paz’ por Nicolás Maduro. Extraña manera
de llamar a un área convertida en refugio de todo tipo de delincuentes y de
personajes que se consideran al margen de la ley, portan armas de guerra,
impiden el acceso a los cuerpos de seguridad y se creen los señores de unos
feudos del siglo XXI. Su figura emblemática, ‘El Coqui’, mantiene acosados a
los habitantes de ese sector de Caracas, incluidos los agentes de la Guardia
Nacional y la Policía Nacional. Su osadía lo llevó a intentar, hace pocos días,
tomar por asalto el Comando General de la GNB y el Comando El Pinar, de la PNB,
ambos ubicados en El Paraíso. El objetivo era adueñarse de armas de guerra para
incrementar su arsenal. Hasta donde se sabe, tanto la Guardia como la Policía
repelieron los ataques.
Llama la atención que -a pesar de
estos actos subversivos tan graves- el régimen de Maduro no les ha declarado la
guerra frontal a ‘El Coqui’ y sus secuaces. La actitud de los cuerpos de
seguridad ha sido esencialmente defensiva, no ofensiva. ¿Qué ocurre allí, pues
el gobierno de Maduro no podría calificarse de pacifista y tolerante, al menos
cuando de la oposición se trata?
En este momento el Ejército
Nacional, comandado por el general Vladimir Padrino López, apoyado por las
Fuerzas de Acciones Especiales, las temibles FAES, según señala el gobierno,
libran un enconado combate con unos grupos disidentes de los disidentes de las
FARC –los liderados por Iván Márquez y Jesús Santrich- porque esos guerrilleros
pretenden moverse impunemente por el sur oeste del país. Aspiran a entrar y
salir del territorio nacional a su libre albedrío, como si Venezuela fuera
territorio de nadie. Como si aquí no estuviera Padrino López, un soldado de la
patria dispuesto a defender con su vida la soberanía nacional. La Victoria, en
el estado Apure, a miles de kilómetros de Miraflores y de la capital, ha sido
escenario de los enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad nacional y los malhechores
colombianos. El Ejército se desplazó hasta la frontera colombiana, pero no ha
podido someter a ‘El Coqui’ y sus muchachos, que viven en Caracas. Raro,
¿verdad?
El régimen que comenzó con Hugo
Chávez y continuó con Maduro, politizó e ideologizó a las Fuerzas Armadas. Las
convirtió en el brazo armado de la autodenominada ‘revolución bolivariana’. Las
puso a vociferar consignas antiimperialistas. Las sometió a la tutela de la
dictadura cubana. Las hace gritar ‘Chávez vive, la Patria sigue’ y ‘Patria,
socialismo o muerte’. Todo este desajuste fue perpetrado en pocos años.
Consumada la deformación de las FAN, el régimen las convirtió en un instrumento
para hostigar, perseguir y reprimir al pueblo y a la oposición. Las obligó a
proclamar ‘No volverán’, para referirse
a la imposibilidad de que la oposición retorne al Gobierno, en una república
cuya constitución consagra la alternancia en el poder.
Con la finalidad de reprimir las
protestas populares y acorralar a la oposición democrática y pacífica, las FAN
sí resultan muy eficientes, pero no para acabar con un grupo de forajidos cuya ubicación ha sido meticulosamente
mapeada y que siembra terror entre los vecinos de las urbanizaciones aledañas a
la Cota 905. ¿Por qué el gobierno les entregó esa área a los delincuentes? ¿Por
qué renuncia a ejercer la autoridad, en este caso legítima, a unos pocos
kilómetros de Miraflores? ¿Cómo entender
este comportamiento en apariencia tan incongruente?
Aventuro la siguiente hipótesis: ‘El
Coqui’ y sus lugartenientes le sirven al régimen para mantener a la ciudadanía
azotada, atemorizada y atrincherada en sus propias viviendas, incapaz de
crear vínculos que le permita organizarse para luchar por
sus propios derechos y reivindicaciones. La megabanda de ‘El Coqui’ es como un
colectivo oficialista, pero más agresivo y letal. Más intimidante. “El Coqui’
se comporta actúa como esbirro del régimen, pero sin aparecer en la nómina del
Sebin, de las FAES o del Dgcim. Es un patriota cooperante, aunque esa no sea su
intención real.
A un aliado tan útil como ese hay
que dejarlo actuar. Esa podría ser otra de las recomendaciones de los cubanos.
Trino
Marquez Cegarra
trino.marquez@gmail.com
@trinomarquezc
Venezuela
CARLOS BLANCO: LA CUESTIÓN POLÍTICA ESENCIAL. EL COVID-19
2.- Se comete una equivocación
al suponer que se puede operar el tratamiento de la enfermedad como un tema
humanitario, separado de la política. Hoy no hay asunto más profundamente
político que la pandemia porque el poder define en términos gruesos a quiénes
impacta y a quiénes no. La enfermedad no es política; la forma en la cual
afecta a los ciudadanos sí lo es, porque depende de factores del contexto.
Cuando las opciones son hambre segura en el encierro o enfermedad probable a
campo descubierto la decisión es terrible porque las dos opciones son malas.
Cuando no hay equipos por el despilfarro y el robo; cuando se prefiere pagar a
la defensa de Alex Saab antes que traer vacunas; cuando se niega un
entendimiento amplio en el marco del mecanismo Covax; en todos estos casos está
la política y el poder.
3.- El régimen ejerce
su fuerza no solo en el manejo autoritario del confinamiento sino en la
ausencia de relación con la comunidad científica organizada, al dejar a la
intemperie a los profesionales de la salud, al esconder las cifras, y hasta
llegar al abuso por parte de funcionarios que se toman un video para demostrar
su trabajo… en la entrega de una mascarilla por persona a los profesionales de
la salud. Mientras tanto, intenta eliminar la opción de que factores políticos,
económicos o sociales, no gubernamentales, ayuden a aliviar la situación. Esto
les quita poder.
4.- La semana pasada
sugerí en este mismo espacio una tregua humanitaria. La idea es que aun en la
guerra que libra Maduro en contra del país podía caber un espacio para manejar
la pandemia, entre el régimen y las fuerzas que se le oponen. Dije entonces:
“Estuve y estoy de acuerdo porque la tregua es un momento de las guerras. El
régimen libra una guerra contra el país y manipular con la vacuna, con la
cuarentena, con fantásticas curas, mientras centenas de miles se enferman y no
se sabe cuántas mueren, es un crimen brutal. Si se puede llegar a esa tregua
para curar los enfermos, enterrar los muertos y preservar los vivos, hay que
hacerlo”. Desde luego, no creo que haya sido una propuesta que concitara
interés alguno en los actores relevantes; pero la creí oportuna y útil.
5.- De no darse algo
como lo propuesto, lo que va a quedar inexorablemente, para hoy, para mañana o
para pasado mañana, es la fuerza humanitaria, desplegada sobre la base de la
Responsabilidad para Proteger (R2P) y el Título VII de la Carta de Naciones
Unidas que reza: “Artículo 39. El Consejo de Seguridad determinará la
existencia de toda amenaza a la paz, quebrantamiento de la paz o acto de
agresión y hará recomendaciones o decidirá qué medidas serán tomadas de
conformidad con los Artículos 41 y 42 para mantener o restablecer la paz y la
seguridad internacionales”.
6.- “Artículo 41. El
Consejo de Seguridad podrá decidir qué medidas que no impliquen el uso de la
fuerza armada han de emplearse para hacer efectivas sus decisiones, y podrá
instar a los Miembros de las Naciones Unidas a que apliquen dichas medidas, que
podrán comprender la interrupción total o parcial de las relaciones económicas
y de las comunicaciones ferroviarias, marítimas, aéreas, postales,
telegráficas, radioeléctricas, y otros medios de comunicación, así como la
ruptura de relaciones diplomáticas”.
7.- “Artículo 42. Si el
Consejo de Seguridad estimare que las medidas de que trata el Artículo 41
pueden ser inadecuadas o han demostrado serlo, podrá ejercer, por medio de
fuerzas aéreas, navales o terrestres, la acción que sea necesaria para mantener
o restablecer la paz y la seguridad internacionales. Tal acción podrá
comprender demostraciones, bloqueos y otras operaciones ejecutadas por fuerzas
aéreas, navales o terrestres de Miembros de las Naciones Unidas”.
8.- Se conoce que Rusia
y China pueden paralizar cualquier decisión en el Consejo de Seguridad de la
ONU, pero una campaña mundial con la exigencia de cesar la doble devastación
que sufre Venezuela –la del régimen y la de la pandemia– señalan un curso
político que podría alterar las relaciones domésticas de poder.
0.- Casi todos los países del mundo han vivido o viven
una situación de catástrofe por la malignidad del covid-19. Muy pocos países
viven una doble catástrofe como es el caso de Venezuela: Maduro y la pandemia.
Es el momento de centrar todos los esfuerzos en luchar contra esta enfermedad
brutal. No se trata de “usar” la pandemia para arrinconar al régimen, sino de
arrinconar la pandemia y hacer que una tregua se imponga o la fuerza
internacional lo haga.
Carlos Blanco
carlos.blanco@comcast.net
@carlosblancog
Venezuela – Estados
Unidos
HUMBERTO MARCANO RODRÍGUEZ: GENERAL EN JEFE JOSÉ FRANCISCO BERMÚDEZ DE CASTRO Y RIVERA DE CÁCERES
hjmrodriguez@gmail.com
@Hmarcanor
Venezuela