miércoles, 8 de febrero de 2017

JOSÉ VICENTE CARRASQUERO A., "¿TO MUD OR NOT TO MUD?"

NECESARIA REINGENIERÍA


Ser o no ser, esa es la cuestión. 
¿Cuál es más digna acción del ánimo, sufrir los tiros penetrantes de la fortuna injusta, u oponer los brazos a este torrente de calamidades, y darlas fin con atrevida resistencia?. 
Hamlet – Shakespeare -Monólogo

Quizás por el torrente petrolero que nos ha impedido acceder al desarrollo durante los últimos 59 años, los venezolanos tenemos una mentalidad de que todo lo construido, andado o aprendido es desechable. Pero si miramos un poco más en la historia encontramos comportamientos similares. Hemos tenido 26 constituciones a lo largo de nuestra corta historia republicana. Ya se está hablando de un nuevo proceso constituyente que nos daría una nueva carta magna. Eso, en mi opinión, no habla nada bien de los venezolanos.

Este ánimo de borrón y cuenta nueva lo han aplicado casi todas las clases políticas que accedieron al poder ya fuese por la vía electoral o través de un movimiento de fuerza. La excusa siempre fue lo mismo, lo anterior no sirvió, aquí llegamos nosotros que sabemos hacer las cosas y dictamos nuestras propias reglas de juego. Esta visión de la política en la cual nada se construye sobre lo elaborado está nuevamente tomando cuerpo para llevarse a la MUD en los cachos.

Hay un grupo de políticos opuestos al gobierno que entienden su ascenso a la cúspide del liderazgo venezolano por medio de la sustitución, destrucción y sepelio de la MUD. No podemos quitarle la razón a quienes critican a la MUD. La pregunta que nos debemos hacer es si debemos construir un nuevo aparato político o hacer una reingeniería del que ya tenemos.

Recuerdo que en 2015, la mayoría de las opiniones que se leían en los medios de comunicación y las redes sobre la MUD eran negativas o en el mejor de los casos, ponían en duda su capacidad para adelantar un proceso electoral en el que el pueblo pudiera quitarle la Asamblea Nacional al chavismo.

Como estudioso de la cultura política del venezolano, estaba seguro de que el pueblo iba a castigar al gobierno arrebatándole el poder parlamentario. Con base en encuestas, resultados electorales pasados y algunos estudios cualitativos predije que la oposición sacaría 113 diputados. Fui duramente criticado. Los argumentos de la crítica muchas veces eran infantiles. Pasaban por aquello de que el pueblo iba a rendirle tributo a Chávez y le ratificaría su poder. Que nos iban a robar las elecciones y una cantidad de argumentaciones varias.

Lo cierto es que la estrategia de la MUD convertida en operaciones electorales por los partidos políticos rindió los frutos que tenían que cosechar en un ambiente en el que el rechazo al gobierno era muy alto y la gente había perdido la fe en las posibilidades del chavismo para resolver los problemas que aquejan al pueblo.

Anta la apabullante victoria de 2015 el gobierno no tardó en reaccionar sacando a relucir su desprecio por los valores de la democracia. Los factores de la MUD que venían apostando a las reglas de juego no vieron venir lo que sería un asalto judicial al parlamento. Uno que se comenzó a gestar cuando una Asamblea Nacional cuyo mandato había sido oficialmente revocado por el soberano siguió adelante, violando la constitución, con el nombramiento de un Tribunal Supremo de Justicia írrito compuesto en su mayoría por operadores políticos del régimen.

En este momento de la lectura es preciso recordar que la MUD es una organización paraguas que recoge los esfuerzos de la oposición venezolana para establecer estrategias políticas acordadas por las fuerzas que la componen. Desde el punto de vista de la operación, la carga recae en los partidos políticos. Y allí encontraremos responsabilidades en no haber previsto el comportamiento dictatorial de un régimen derrotado por el pueblo.

Son los partidos políticos y los líderes los que tienen que adelantar procesos de reflexión. De evaluación de sus actuaciones. De definición del momento que estamos viviendo. De creación y puesta en marcha de nuevas estrategias que tengan como finalidad la conquista del poder.

¿Deben hacerlo a través de la MUD? Conociendo a los políticos venezolanos me atrevo a decir que no hay otra forma posible. La única alternativa sería una plataforma unitaria integrada en un solo partido opositor con una directiva coherente y con un plan de país que se le pueda presentar a los venezolanos. Lamentablemente, la visión de terrenito político de todos nuestros dirigentes hace tal plataforma inviable.

Lo que queda entonces es la MUD. ¿Esta MUD?

Evidentemente no. La MUD necesita una reingeniería que la lleve a un punto intermedio entre lo que es actualmente y el ideal de la plataforma integrada. Para ello, propongo que el cargo de Secretario General de la MUD, que hasta ahora ha sido excelentemente desempeñado por Jesús Torrealba, sea ejercido de manera rotatoria por los secretarios generales de los partidos que la integran. Cada uno ejercería el cargo por seis meses. Un ejercicio político y no meramente técnico.

Se espera que esa nueva MUD tenga una rápida capacidad de reacción a las estrategias del régimen. Debe ser capaz de adelantar las jugadas del chavismo y poner en acción tácticas que le cierren posibilidades de triunfo al gobierno.

Esta nueva MUD debe denunciar ante el mundo, de manera formal, que en Venezuela padecemos una dictadura que no respeta resquicio constitucional alguno. De esta forma, las estrategias de la MUD podrán y tendrán que ser consistentes con esa declaración.

El diálogo sigue siendo una posibilidad. Pero los partidos políticos tienen que jugar fuerte. Deben proponer a los facilitadores. Los actuales son del gobierno. El pueblo necesita sus propios negociadores. Hay cantidad de ex presidentes latinoamericanos que pueden desarrollar ese papel. Para ello es necesario arrancarle al gobierno un compromiso formal con el diálogo. No esa actitud de perdonavidas que suele exhibir Maduro cuando habla de esto.

El documento sobre el cual discutir no puede estar redactado por organizaciones que como el catalán Institute for Integrated Transitions, autor del adefesio que circuló ampliamente, no conocen en profundidad el caso venezolano.

Es difícil tener que dialogar con individuos que ponen sus intereses personales por encima de la constitución. Individuos que son buscados por la justicia internacional o que en mejor de los casos no tienen cómo explicar los niveles de vida que disfrutan ellos y sus familiares.

Los partidos políticos y sus líderes y no la MUD son los que tienen las responsabilidad de sacar la cara por los venezolanos. Ya está bueno de esconderse detrás de un escaparate vacío que no es más que la representación virtual de una unidad forzada por las exigencias del pueblo venezolano.

Ojalá que el llamado que hagan los líderes de los partidos pequeños y más pequeños sea el de rescatar el proceso unitario más allá del nombre. De convertirlo en una plataforma de acciones en las cuales los terrenitos políticos no tengan prioridad por encima de las expectativas del soberano. Esperamos que el intento de destrucción de la MUD no sea un artilugio para pretender la imposible conducción de la oposición en solitario. Todo lo que se haga fuera del concepto de la unidad exigida por el pueblo está condenado al fracaso.

El reto no es para la MUD. Es para esos líderes políticos que adquirieron el compromiso de luchar por la democracia y el país. El mandato es unidad, ustedes verán como la implantan más allá de lo meramente comunicacional.


Jose Vicente Carrasquero A.
botellazo@gmail.com
@botellazo
Caracas - Venezuela

OSWALDO ÁLVAREZ PAZ, "VENEZUELA"

DESDE EL PUENTE

Estos días han sido buenos para refrescar la memoria histórica contemporánea. Las nuevas generaciones de compatriotas conocen poco sobre lo sucedido en las dos fechas. Me refiero a las causas que concretaron los sucesos y por supuesto, a las consecuencias de los mismos.

El 23 de enero de 1958 puso punto final a una dictadura ya enjuiciada por historiadores y políticos. A una etapa dura, terrible, muy común en aquellos tiempos latinoamericanos. Fue el inicio de cuarenta años de convivencia civilizada, con altas y bajas como sucedía con el gobierno derrocado, pero con respeto a los principios fundamentales de la vida en libertad y democracia. Es decir, en nuestra opinión, fuimos de lo malo a lo bueno.

Sin embargo, la falta de visión de buena parte del liderazgo democrático, el deterioro progresivo de los partidos fundamentales y el olvido de que a la política se viene a servir y no a servirse por tratarse de la “forma más excelsa de apostolado”, según la doctrina vaticana, profundizó la brecha lentamente abierta entre el país político y el país nacional o país real, como decía Octavio Paz corrigiendo al Gaitán colombiano. Quizás en aquel 4 de febrero de 1992 no existían condiciones suficientes para prever las consecuencias de
aquella jornada.

El país se dividió. Carlos Andrés Pérez se convirtió, para algunos, en símbolo de lo que debería cambiarse, sin entender ni respetar la trayectoria de un hombre de probada vocación democrática quien, con sus inocultables fallas, hacía esfuerzos para corregir el rumbo que llevaba la Venezuela de entonces. Terminó siendo víctima de muchas cosas al mismo tiempo. También esta nación sufrida ha tenido que soportar las consecuencias de aquella destitución  insólita. CAP merecía un final mejor, más acorde con su vida y aportes al poco o mucho desarrollo alcanzado.

Gracias a ese abismo insalvable se coló Hugo Chávez. Todos sabemos lo que ha pasado en estos veinticinco años del 4F-92 hasta ahora y, especialmente, en las casi dos décadas de gobierno bajo el esquema trazado por el llamado socialismo del siglo XXI. 

El país está infinitamente peor que entonces. Ahora hay más ineficiencia, corrupción sin límites, tentáculos del narcotráfico y del terrorismo a
todos los niveles, inseguridad y crimen organizado, deterioro de todo lo que interesa en primer grado al ciudadano común.

Creo en la vieja frase de William Shakespeare según la cual “todo el pasado es prólogo”. Tenemos que mirar hacia adelante y poner punto final a la desgracia actual en el menor tiempo posible. Será tarea de quienes creemos en principios y valores permanentes por los cuales vale la pena jugarse la vida. 

Quienes no compartan este criterio, por favor, no molesten, háganse a un lado, pero no continúen en nombre de la democracia, haciéndole el juego al régimen.

Oswaldo Alvarez Paz
oalvarezpaz@gmail.com
@osalpaz
Desde El Puente
Caracas - Venezuela

RAÚL SANZ MACHADO, "PUNTO FIJO: ¿PACTO, ACUERDO O RÉGIMEN?"

SEGUNDO PROYECTO DEMOCRÁTICO

El 23 de enero de 1958, se abrió la primera página en blanco, del segundo proyecto democrático contemporáneo en Venezuela, precedido, 10 años antes, por el derrocamiento el 24 de noviembre de 1948, del régimen presidido por el ilustre escritor y académico de la lengua, Rómulo Gallegos, proceso gestado en los comicios electorales mediante el voto universal, libre, directo y secreto, como expresión suprema de la voluntad popular, contenida en la nueva Ley Fundamental de la República, que había sido sancionada el 5 de julio del  año anterior. Tan solo habían transcurrido 9 meses desde la toma de posesión del Presidente Gallegos, el 15 de febrero de 1948, para que el primer régimen democrático venezolano del siglo XX, sucumbiera ante un grupo confabulado, de los mandos medios de las Fuerzas Armadas, quienes integraron una Junta Militar de Gobierno, presidida por el Teniente Coronel Carlos Delgado Chalbaud y por los TC. Marcos Pérez Jiménez y Luis F. Llovera Páez.

Desde la Academia Militar donde se hallaba preso y próximo a ser exiliado, el 5 de diciembre, Rómulo Gallegos redactó un “Manifiesto a la Nación”, en el cual declaraba: “Abandono el país bajo la presión de las Fuerzas Armadas… No he renunciado a la Presidencia de la República a la que me llevó el voto del pueblo…”

Ya en los tiempos precedentes  a la caída de la dictadura pérez-jimenista, se habían registrado síntomas de evidente descontento en diversos sectores cívico-militares del país, ante la grave situación política imperante. Fue la histórica Carta Pastoral del Arzobispo de Caracas, Monseñor Rafael I. Arias Blanco, fundador de Cháritas Venezuela, proclamada el 1° de mayo de 1957, que fortaleció el ánimo y la moral de la resistencia nacional y la creciente oposición popular contra el régimen, acelerando el proceso que puso fin a la dictadura de Pérez Jiménez, el 23 de enero de 1958, por lo cual se le reconoció como “Obispo de la Resistencia”.

Una de las primeras inquietudes, fue la necesidad de consolidar el nuevo ensayo democrático mediante la conjunción de esfuerzos y voluntades de los sectores políticos y sociales del país, el más influyente de los cuales fue el llamado “Acuerdo de Nueva York”, concebido por los 3 líderes de mayor peso político: Rómulo Betancourt, Rafael Caldera y Jóvito Villalba, quienes se hallaban exiliados. A sus regresos en Caracas, el acuerdo debió acelerarse, ante las amenazas de nuevas asonadas, entre ellas la invasión por el Táchira, del General Jesús M. Castro León, en abril de 1960, al igual que su abuelo Cipriano Castro,  en mayo de 1899. 

El acuerdo firmado por Betancourt, (AD),  Caldera (Copei) y Villalba (URD) el 3l de octubre de 1958, en la residencia “Punto Fijo” del Dr. Caldera, cobró inmediata resonancia popular, como “Pacto de Punto Fijo”, para afianzar el sistema democrático, mediante condiciones de obligatoria observancia entre las partes. En tal virtud, los tres partidos se comprometieron a instaurar un gobierno de unidad nacional y un programa mínimo de gobierno. El PPF prevaleció hasta noviembre de 1960, cuando URD se retiró de la coalición por desacuerdo con el gobierno adeco de Rómulo Betancourt, ante su política exterior con Cuba que ocasionó su expulsión de la OEA y la renuncia del canciller Ignacio Luis Arcaya, conocido después como “el canciller de la dignidad”.

El desempeño político de AD y Copei, prosiguió posteriormente, conservando el objetivo de origen del PPF pero dentro de sus respectivas autonomías políticas y el libre ejercicio de sus derechos, más allá del concepto de “régimen” que se la ha atribuido comúnmente y que ha prevalecido  hasta nuestros días aunque, no hubo alternancia negociada en el acceso al poder. AD lo ejerció durante los dos 2 primeros períodos consecutivos 1959-1969. En el tercer período 1969-1974, Rafael Caldera, accedió a la presidencia por una escuálida diferencia de 0.89% sobre su opositor Gonzalo Barrios, de AD, debido a la tercera división de la izquierda, del partido blanco, cuando el Dr. Luis Beltrán Prieto Figueroa y un nutrido grupo de sus seguidores, optó por separarse de AD y fundar en diciembre de 1967, -en medio del proceso electoral- el partido socialista, revolucionario y nacionalista, conocido después como “Movimiento Electoral del Pueblo”. Obviamente AD perdió así las elecciones del tercer periodo. Mientras AD fue gobierno, Copei fue su aguerrido adversario y mientras Copei lo ejerció,  AD lo adversó tenazmente.

A partir de 1999, emerge  el gobierno “socialista, revolucionario, anti-imperialista”  bajo el liderazgo del TC. Hugo Chávez Frías que es un auténtico régimen de gobierno, fundamentado en un rígido sistema de normas de obligatorio cumplimiento para sus miembros integrantes y por el cual se ha intentado regir al país durante los últimos 18 años, no obstante su evidente declive. El Pacto de Punto Fijo, o “puntofijismo” que, con sus errores y aciertos, logró el objetivo primario de consolidar la democracia en Venezuela, pasó a cobrar un significado peyorativo para descalificarlo, en un vano intento, de los gobiernos regidos por Hugo Chávez y Nicolás  Maduro. La democracia venezolana durante 40 años, tuvo su cuna en el Pacto de Punto Fijo,. Es historia. 

Raul Sanz Machado
rsanzmachado@gmail.com
@rsanzmachado
Miranda - Venezuela 

EDUARDO FERNÁNDEZ, "ESPAÑA"

TAMBIÉN LOS ESPAÑOLES PUDIERON HACERLO

Después de tres años de guerra civil, de un millón de muertos y de 40 años de dictadura, los españoles dialogaron.

En 1936 los españoles no quisieron dialogar. Sobrevino una guerra civil que duró tres años. Algunos dicen que en esa guerra hubo un millón de muertos. Españoles contra españoles. Al terminar la guerra vino una dictadura encabezada por Francisco Franco que duró cuarenta años.

Después de tres años de guerra civil, de un millón de muertos y de cuarenta años de dictadura; los españoles dialogaron. Fueron capaces de hacer una transición admirable de la dictadura a la democracia.

Los países siempre dialogan, antes o después de los muertos. Lo inteligente sería dialogar antes de la guerra civil y no después.

José María Gironella, un notable escritor español, del siglo pasado escribió una serie de novelas sobre los episodios de la guerra civil española. Una de ellas se llamaba: “Los Cipreses creen en Dios, otra “Un millón de muertos” y otra; “Ha estallado la paz”.

En noviembre de 1976 muere Franco. Muchos pronosticaban que a la muerte del caudillo vendría una nueva guerra civil. Felizmente no ocurrió así. Los españoles que no habían dialogado en 1936 decidieron que la transición hacia la democracia debía ser dialogada y negociada, con inteligencia y con patriotismo.

Así lo hicieron. Protagonistas principales fueron, el rey Juan Carlos de Borbón, designado por el propio dictador para sucederlo y Adolfo Suárez que había sido ministro “Secretario General del Movimiento” como se llamaba al partido que respaldaba a la dictadura.

Esos dos personajes, salidos de las entrañas del régimen franquista, condujeron un diálogo en el cual participaron figuras importantes de la oposición como Santiago Carrillo, Secretario General del Partido Comunista y Felipe González, Secretario General del Partido Socialista Obrero español.

En abril de 1977 ocurre lo impensable: con la venia del rey, Adolfo Suarez y su gobierno, que ya había legalizado al PSOE legalizan ahora al partido comunista a cambio de que este reconozca a la monarquía constitucional y participe en el proceso electoral democrático.

En octubre de 1977 el gobierno y la oposición negocian los Pactos de la Moncloa para reactivar la economía española y acuerdan, entre otras cosas, limitar los aumentos salariales, recortar el gasto público y subir los impuestos a cambio de nuevas prestaciones sociales.

En diciembre de 1978 se aprueba la nueva Constitución Democrática y España se incorpora a la comunidad europea. Gobiernos sucesivos de Felipe González y de José María Aznar consolidan la democracia española. Un intento de golpe militar es derrotado. Sus cabecillas son condenados a treinta años de prisión y hoy España es una nación moderna y democrática.

También los españoles pudieron hacerlo.

Seguiremos conversando.

Eduardo Fernandez
efernandez@ifedec.com
@EFernandezVE
Miranda - Venezuela

JUAN JOSE MONSANT ARISTIMUÑO, “LAS ORDENES DE TRUMP”

PROFUNDIZA MEDIDAS DE OBAMA

No es posible evadir el tema de las Órdenes Ejecutivas (similares a los Decretos Leyes de nuestras legislaciones), firmadas por el presidente Trump sobre el tema migratorio, particularmente la que concierne a países catalogados como fuente del terrorismo islámico.

Lista de siete países situados en el Cercano y Medio Oriente: Siria, Irak, Irán, Libia, Somalia, Yemen y Sudán que, directamente, como Estados, gobiernos, están implicados en hechos contrarios al Derecho Internacional.

A Somalia, Yemen y Sudán difícilmente no se les pueda catalogar como Estados Forajidos; los otros sostienen una situación interna de virtual anarquía donde pululan soldados y líderes del Califato Islámico haciendo de las suyas, como tantas veces nos ha tocado observar; actos que se catalogan como crímenes contra la humanidad en razón de la religión, sexo, preferencia sexual o nacionalidad. Sin olvidar la destrucción de monumentos históricos que bordean los dos o tres mil años de antigüedad, que fueron patrimonio de la humanidad, y no de cual o tal etnia o religión. Irán es otra consideración, pero, igual, proclamado como Estado confesional, viola los Derechos Humanos de su propio pueblo, amenaza con desaparecer del mapa a la nación israelí, no oculta su ambición por poseer armas de destrucción masiva, ni su apoyo a los grupos fundamentalistas palestinos.

Los destinatarios de estas primeras Órdenes Ejecutivas del presidente Donald Trump, fueron incluidos previamente por la administración Obama en una lista de países terroristas, y sobre ella se basó la decisión migratoria que ha desencadenado tanta revuelta. Y la Europa, la mediatizada y rendida Europa en manos de los Podemos de turno, igualmente ha sufrido los embates del terrorismo islámico en su propio territorio. Mas, ya es tarde para ellos, ya perdieron la batalla por la civilización, entregados al “buenísmo”, las corbatas de seda, los LGBT, y avergonzados del origen de su cultura judeocristiana.

De modo que Estados Unidos, uno de los países más atacado por el terrorismo islámico, y por el interno, también hay que decirlo, tiene el derecho, el deber de salvaguardar su territorio y su gente. Allí no hay discusión alguna, de lo contrario se convertiría muy pronto en una Italia, España o Francia negociando su pasado y sus valores con esa nueva izquierda asexuada que recorre el continente europeo, una vez que perdió la batalla del modelo económico ofertado por el marxismo. O, peor, en una Venezuela diluida, amorfa, destruida, sin pasado ni futuro, sometida a la voluntad de los primeros bribones que se presentaron y amancebaron con todos los movimientos terroristas y antioccidentales existentes.

Dicho esto, hay que precisar el alcance de la Orden Ejecutiva. En primer lugar, no es permanente la suspensión de emisión de nuevas visas ni la prohibición de entrada al país; la medida es por el lapso de 90 días, en tanto se reestructura la información y se adopten nuevas políticas generales y particulares sobre el terrorismo, impostergables para garantizar la seguridad del país.

No obstante, una Orden Ejecutiva de tal magnitud que involucra a seres humanos concretos, no ha debido ser firmada sin antes haber pasado por abogados, expertos de Inmigración y del propio Departamento de Estado, que hubiere podido evitar las injusticias causadas y el desorden creado por la desinformación e improvisación. Negativas de aceptar visas expedidas con anterioridad, Green Cards suspendidas, parejas separadas, abuelos llegados conforme a la ley, académicos, refugiados aceptados como tales por sus propios funcionarios gubernamentales se encontraron de repente sorprendidos, detenidos o deportados en y desde la propia sala del aeropuerto.

No es el caso de violar derechos individuales por la premura o incapacidad de consejeros prejuiciados o ignorantes del tema. Algo parecido, pero menos grave, con lo acontecido con los médicos cubanos atrapados en un limbo jurídico, luego de haber huido de la tiranía cubana.

No hay duda que la acción emprendida por Trump se encuentra dentro del ámbito de ejecuciones presidenciales, en cumplimiento de una promesa electoral que el soberano votó por ella: mantener a salvo América y, de paso, poner las cosas en su sitio.

Juan Jose Monsant Aristimuño
jjmonsant@gmail.com
@jjmonsant
Internacionalista
Miranda – Venezuela

DARÍO ACEVEDO CARMONA “COLOMBIA EN CAÍDA LIBRE”

EVENTOS DE POMPA Y BOATO

La historia de los hermanos Patrocinio y Odín Sánchez no puede ser más cruel. El primero de ellos fue secuestrado por la guerrilla ELN en condiciones infrahumanas por un largo periodo, su familia pagó una parte de la extorsión, enfermo, cadavérico y en vista de que no aceptaban liberarlo, su hermano Odín se canjeó por puro sentido de hermandad. Al cabo de 10 meses, este último, enfermo y agobiado, fue objeto de un canje de doble vía. El Estado liberó a dos guerrilleros a cambio de la liberación de Odín.

El Estado fue incapaz de exigirle al ELN lo que a las FARC: abandonar la práctica del secuestro. De otra parte, la familia de Odín entregó una millonaria suma de dinero al ELN para que lo liberaran. El Gobierno Santos aceptó esa humillación para sentarse a negociar la paz con ese grupo.

De encima, la comandancia elena en tono arrogante reconoció tener más secuestrados en su poder, entre ellos un soldado, y en el colmo de la sevicia, cara amenazante, dicen tener “derecho” a seguir secuestrando.

En este estropicio contra la más elemental justicia y los derechos humanos, tan pregonados y defendidos por tantos falsos defensores, por hipócritas, por infiltrados de la extrema izquierda en organizaciones humanitarias y por despistados escribientes que guardan sus plumas frente al atropello, llegan al país, de cuenta del erario público, tres, cinco? premios nobel de paz a aplaudir a quien ha despojado nuestro Estado de toda dignidad y a avalar un proceso consagrado por un golpe de estado en la más impúdica impunidad posible en la historia reciente del mundo.

No queda la menor duda, a Juan Manuel Santos le encantan los eventos de pompa y boato, es muy hábil para organizarlos y para hacerlos en el momento adecuado a sus intereses. No pierde detalle aunque le toque tirar la casa por la ventana, eso sí, quede claro, no es su casa, sus festines se pagan con los impuestos de los colombianos.

Como quiera que la favorabilidad no le favorece y que no obstante sus esfuerzos por pasar a la Historia Grande de Colombia como artífice de la paz sigue de capa caída en las encuestas, busca ganar aplausos y apoyos con personalidades del exterior que poco conocen los dramas del país ni los costos políticos, constitucionales y morales de su política de capitulación ni sobre nuestras disputas y conflictos.

Santos es luz de la calle y oscuridad de la casa, es un gran mago, todo un ilusionista, pues ha logrado atraer la mirada complaciente y el respaldo de instituciones, gobiernos y figuras extranjeras, vendiendo la idea de que Colombia sufría los estertores de una prolongada y cruel guerra de más de medio siglo, que las guerrillas colombianas no eran terroristas sino luchadoras por la justicia y habían tomado las armas inspiradas en ideales altruistas, que su poder era tan enorme que bien valía perdonarles todos sus abominables crímenes, en especial los de lesa humanidad, que no merecen la cárcel, que el secuestro es comprensible, etc.

¿Estarían al tanto de que la voluntad popular que rechazó el pacto con las FARC en el plebiscito del 2 de octubre, la Constitución, la separación de poderes y la institucionalidad, fueron lanzadas al abismo de la ignominia?

El mal ejemplo del Acuerdo espúreo entre un Estado legítimo y un grupo terrorista, ha empezado a rendir sus frutos podridos. La negociación con el ELN se inicia a la sombra de un chantaje en que el Estado se humilla ante exigencias de una guerrilla que ni se sonroja justificando el secuestro y prometiendo que lo seguirá haciendo.

¿Se leerán los señores nobel de la paz esta dolorosa historia de la familia Sánchez, tan solo esta, aunque son miles las historias horrorosas que podríamos contarles? ¿Qué pensarán de la justificación del secuestro por parte de los jefes guerrilleros? ¿Seguirán pensando que la causa revolucionaria justifica todo tipo de crímenes? ¿Soportarían eso en sus países? ¿Estarían dispuestos a destruir la institucionalidad de sus países en aras de hacer la paz cerrando los ojos antes los crímenes atroces?

Llegamos a pensar que en materia de ignominia este Gobierno había tocado fondo, pero, al observar el nuevo proceso de paz en Quito no podemos sino concluir que Colombia sigue en caída libre, lo que quiere decir que veremos hechos peores y más indignantes de los que hasta ahora hemos presenciado.


Ruben Dario Acevedo Carmona
rdaceved@unal.edu.co
@darioacevedoc
Colombia

ALBERTO MEDINA MÉNDEZ, "TRUMP ES SINÓNIMO DE PERPLEJIDAD"

POLÍTICAMENTE INCORRECTO

La llegada al poder de Donald Trump como Presidente de los Estados Unidos ha generado todo tipo de reacciones en su país y también en el mundo entero. Hoy, frente al hecho consumado, reina un absoluto desconcierto.

Nadie entiende demasiado lo que sucedió en los últimos meses. La mayoría creía que este empresario aventurero lanzado a la política no triunfaría y todos sus dislates se detendrían en algún lugar del recorrido electoral.

Casi todos suponían que no superaría las primarias republicanas pero pudo ganarlas sin grandes contratiempos. Los más temerosos sostenían que sería recién en la elección general donde culminaría su patético delirio, pero eso tampoco es lo que ocurrió y también allí obtuvo una victoria.

Durante la campaña cometió todo tipo de incorrecciones. Dijo lo indebido, en el tono inadecuado, en los lugares inapropiados y lejos de retroceder, frente a cada despropósito, redobló las apuestas con cierta cuota de ambigüedad, desdiciéndose a si mismo descaradamente, sin pudor.

Su discurso es burdamente contradictorio pero sorprendentemente efectista. Sus inconsistencias son inocultablemente evidentes, pero esto no parece preocuparle ni a él, ni a sus votantes, que también se dan cuenta, pero escogen selectivamente esa parte de sus planteos con las que mayores afinidades tienen, descartando el resto como si no existiera.

En esa ensalada ideológica que ostenta este personaje mesiánico y que tropieza con sus propias fragilidades argumentales, intenta mostrarse seguro, autosuficiente, transmitiendo la sensación de control total.

Algunos le creen, pero muy pocos están convencidos de que ese sea su perfil auténtico y genuino. Sospechan que todo esto se trata en realidad de la caricatura de un gran simulador que sobreactúa casi todo.

Su inexperiencia política podría ser una debilidad gigante y entender ciertos códigos propios de la actividad le llevará mucho tiempo. No menos cierto es que las grandes reformas de la historia casi siempre nacieron desde afuera del sistema y no de la mano de los eternos continuadores seriales.

Habrá que confiar en que la tradición americana y su envidiable modelo de república en el que los frenos y contrapesos funcionan adecuadamente hagan su parte a tiempo y construyan esa red de contención que evite los desmanes, minimice los excesos y permita amortiguar el impacto de cualquier desquicio que se intente implementar improvisadamente.

El futuro está lleno de incertidumbre y nadie sabe lo que ocurrirá. Es posible que todo esto sea solo parte del show que continúa montando este nuevo protagonista de la escena política. O tal vez sea algo mucho más peligroso que se concretará muy pronto convirtiéndose en la nueva realidad global.

La responsabilidad de lo que viene no depende solo de Trump, sino también de los reflejos de los poderes constitucionales de esa gran nación y de una madura actitud ciudadana que podría resumirse en aquella cita de Thomas Jefferson que recuerda que “el precio de la libertad, es su eterna vigilancia”.

El sistema político americano enfrenta un enorme desafío. Debe evitar la inercia de seguir lamentándose por lo ocurrido y asumir la autocrítica imprescindible, haciéndose cargo de la larga secuencia de innumerables errores que son los verdaderos padres de este nuevo engendro político.

Es primordial que se encaren reformas estructurales en los principales partidos políticos. Nada nuevo sucederá si esa tarea no se aborda con inteligencia y con profundidad. El riesgo de que este impredecible espécimen de la política contemporánea mantenga el rumbo está latente.

La política mundial está mutando desde hace algún tiempo. Se asisten a cambios que parecían aislados e imperceptibles, pero que se están replicando con potencia. Ya dejaron de ser fenómenos locales y se vienen multiplicando, con matices pero con inusitada fuerza, en todo el planeta.


Indudablemente el mundo está girando y es vital tomar nota de lo que está sucediendo para eludir la trampa de subestimar las consecuencias de esas transformaciones que dejaron de ser esporádicas y ya son parte del paisaje.

El transcurrir de los meses mostrará la verdadera personalidad de este nuevo líder global. También quedará en evidencia cuál es su “modus operandi”. Por ahora solo pueden hacerse conjeturas, pero pronto se dispondrá de información más concreta para evaluar esta nueva dinámica.

Mientras algunos hoy creen que se trata de una nueva forma de hacer política cumpliendo con todo lo prometido, otros perciben solo meros recursos tácticos y algunos ardides negociadores que apelan a las amenazas para correr el eje central y obtener avances hacia sus propios objetivos.

Más allá de los estilos, las formas y los exabruptos, lo que preocupa es el contenido que subyace en las consignas. La idea de que un país cerrando sus puertas puede progresar es falsa. Abundan demasiadas evidencias que demuestran exactamente lo contrario y Estados Unidos lo sabe por su propia experiencia y puede contarlo con lujo de detalles.

El nuevo discurso destiñe. Un nacionalismo exacerbado, acompañado de un renovado proteccionismo económico no solo no traerá prosperidad sino que postergará a sus ciudadanos obligándolos a pagar cada vez más por lo mismo y lo que los hará perder lugares en esta irreversible carrera global.

Incentivar odios, buscar enemigos apelando a la confrontación sistemática es una fórmula que solo destruye a quien la genera. El mundo, a lo largo de su propia historia, es testigo de múltiples experimentos que lo confirman.

Es difícil saber qué es lo que sucederá. Asoma un gran signo de interrogación, pero es indudable que las señales que se vislumbran preocupan y mucho. Por ahora Trump es sinónimo de perplejidad.

Alberto Medina Méndez
amedinamendez@arnet.com.ar
albertomedinamendez@gmail.com
@amedinamendez
Argentina

ANGÉLICA MORA, "JUSTOS POR PECADORES"

APUNTES DE UNA PERIODISTA DESDE NUEVA YORK

Una fábula de Esopo, "El labrador y la cigüeña", narra la historia de un campesino que no perdonó a una de esas aves, que había caído en una trampa tendida a otros pájaros que le comïan sus semillas. Le dijo, "Te capturé junto con ellos y te corresponde el mismo destino."

Es lo que está pasando con el Decreto de Inmigración del Presidente Donald Trump que afecta a justos por pecadores.

La orden legal ha sido diseñada para proteger a los ciudadanos de Estados Unidos, dice la Casa Blanca pero el veto afecta a millones de inmigrantes y refugiados que pretendían llegar a la nación del Norte.

Se intenta detener el terrorismo, infiltrado entre los que llegan y se busca analizar los nombres de presuntos elementos que tratan de entrar a la nación para causar el caos, como ha ocurrido en varios paises europeos, golpeados por violentos actos terroristas.

Ya Estados Unidos cuenta con numerosas "células dormidas" que podrían irrumpir en cualquier momento.

El decreto de Trump suspende por 120 días el ingreso de refugiados (para los refugiados provenientes de Siria el plazo es indefinido) y por 90 días para ciudadanos de Irak, Irán, Libia, Somalia, Sudán, Siria y Yemen.

La batalla para imponer el decreto ha generado debates que mantienen dividido al país y al resto del mundo. Millones han dado a conocer sus objeciones a la nueva política de Washington sobre restricciones de viajes para  personas de siete naciones de mayoría musulmana.

  También ha producido la salida de su puesto a la fiscal general interina Sally Yates nombrada por Obama, quien había ordenado a sus subordinados en el Departamento de Justicia no defender el veto, porque no estaba segura de que dicha medida fuera "legal".

El caos ha alcanzado las esferas diplomáticas y se ha registrado una petición pública de millones de firmas en el Reino Unido para cancelar la visita oficial de Trump a Londres. La primera ministra, Theresa May, extendió durante su reciente viaje a Estados Unidos, una invitación de la reina al presidente para una visita de Estado que se celebraría a finales de este mismo año. 

La confusión es aún mayor entre las grandes aerolíneas que cubren las rutas transatlánticas. La IATA, la asociación que representa a 265 compañías de todo el mundo, denunció que la acción ejecutiva firmada por el Presidente Donald Trump está creando confusión y caos entre los viajeros y las propias compañías aéreas.

Los venezolanos que huyen de la represión generada por el gobierno de Nicolás Maduro han sido afectados.

También los cubanos que fueron sorprendidos a medio camino desde la Isla hacia los Estados Unidos. Miles han quedado en el limbo, varados donde los alcanzó la orden migratoria de Trump y hoy están a la espera de lo que se decida sobre su suerte. La mayoría está esperanzada en que la nueva administración les permita a este último grupo arribar al destino que buscaban. Muchos vendieron todas sus posesiones en Cuba para intentar el viaje y hoy varados en México y Panamá son víctimas de abogados inescrupulosos que les prometen, sin garantías, abrirles camino a cambio de miles de dólares  


El decreto migratorio de Donald Trump fue hecho con buenos propósitos para la defensa de Estados Unidos frente al terrorismo, pero eso no quiere decir que no haya afectado fuertemente a millones de inocentes.

Angelica Mora
angelicamorabeals@yahoo.com
@copihueblanco
Nueva York - Estado Unidos

PANCHO AGUILARTE TORRES, "UN SISMO POLÍTICO", CASO ESTADOS UNIDOS

EN CONCRETO

Desde la crisis de los misiles, la situación política interna de los estados unidos de Norteamérica había transcurrido sin sobresaltos, normal, con cada institución desempeñando su papel sin nada que pudiera crear una crisis en el "stablishmen" del modelo que todos gritan capitalista 100 x ciento pero que en realidad tiene sus particulares maneras de resolver en la práctica las necesidades básicas de sus quinientos millones de habitantes y propiciar el crecimiento económico y personal tanto para propios como para los extraños, lo que mundialmente se conoce como el sueño americano.

Ni siquiera la defenestración de Richard Nixon logró moverle el piso al actuar político interno de las dos grandes organizaciones partidistas que vienen alternándose el poder desde hace mas de dos siglos, reconociendo en los primeros años y por bastante tiempo la supremacía republicana. Tan es asi que muy difícilmente podía percibirse una diferencia sustancial entre uno y otro.

Pero ahora las cosas comienzan a percibirse distintas, tanto fuera como dentro de ese gran país, que yo he denominado:" El experimento más exitoso de los templarios”. Desde la llegada de Donald Trump el sistema comienza a resentirse y aparecen nítidamente diferencias entre demócratas y republicanos, y entre originarios, residentes.

Actualmente los tácitos acuerdos de ambas cámaras en el Congreso para dinamizar consensuadamente los nombramientos y designaciones del presidente para sus ratificaciones en el Senado han hecho tambalear la normalidad institucional costumbrista. Trump y los republicanos están aprovechando su mayoría para evitar discusiones, oposiciones o cualquier retardo en la aprobación de los nombres y de los cargos. No hay negociación parece ser el lema del recien estrenado presidente, con lo cual confirma y recuerda que ha llegado un genuino representante de la anti política al cargo más importante de la nación más poderosa del planeta.

De sus posiciones y decisiones dependerá la tranquilidad interna de más de doscientos años y la tranquilidad exterior que comienza a preocupar al resto de la geografía mundial. La política de confrontación directa, que nunca había sido la práctica del modelo norteamericano ahora toma otro matiz. Nadie escapa a la visión particular del presidente Trump de colocar a los Estados Unidos De Norteamérica en el sitial que le corresponde o mejor dicho de darle apariencia a lo que es una verdad innegable. He aquí el detalle del nuevo rol de la política internacional e interna que intentará imponer el 45 presidente de USA y que por supuesto traerá y está trayendo reacciones afuera y desde dentro.

Manifestaciones, protestas, separaciones o anuncios de rechazos de estados que conforman las 50 provincias que definen y debe su nombre Estados Unidos de Norteamérica. Personalidades, gremios de artistas, empresas tecnológicas, Medios importantes y periodistas están tratando de evitar la ruptura de un sistema de gobierno que ha logrado tener éxito y ser el ejemplo para todo el mundo de cómo debe funcionar la democracia y las instituciones.

Una hora dificil para el país de Jefferson,Franklin y Washington, de Lincoln y Roosvelt. No nos queda mas que apelar a esa afirmación que encierra el pacto de los padres fundadores con el Gran Arquitecto del Universo. Dios bendiga a América.


Juan R. Aguilarte T.
panchoaguilarte@hotmail.com
@P_aguilarte
Anzoategui - Venezuela