domingo, 19 de junio de 2022

ROMÁN IBARRA: COLOMBIA, DESDE VENEZUELA

Pensando en Colombia, y en lo que ha sido el gobierno del Presidente Duque, me viene a la memoria una reflexión del influyente filósofo español, Fernando Savater, que en mi opinión calza a la perfección con lo muy equivocado que ha sido el mandatario saliente en cuanto a sus ejecutorias, y en cuanto al papel que decidió jugar interna e internacionalmente.

Dice Savater: ¨Vengarse del pasado es absurdo, lo que hay que intentar es corregir y mejorar el presente. Esas muestras de intolerancia, esa intención en demostrar que somos seres humanos mejores de lo que ha habido nunca, que nosotros hemos venido a regenerar lo que hicieron los humanos del pasado, son formas de fatuidad que, en el fondo, lo que indican es una mente más bien estrecha¨!

En efecto, el Presidente Duque llegó al poder con unos acuerdos de paz heredados del gobierno del Presidente Santos, que nos guste o no, ya eran un hecho, por cierto celebrados internacionalmente, como mecanismo de negociación.

Más allá de que a algunos les moleste que parte importante de los grupos guerrilleros se hayan acogido a los acuerdos, y gracias a ellos hayan llegado al congreso y a la vida política colombiana como cualquiera, no deja de ser una realidad, por lo que dedicar esfuerzos a dinamitar los acuerdos de paz ya firmados, ha sido un error grave.

Los otrora guerrilleros, reconvertidos en dirigentes sociales gracias a los acuerdos de paz, fueron perseguidos y asesinados en número importante, como un mecanismo equivocado y hostil de acabar con esos acuerdos. Ningún acuerdo ha de ser perfecto, pero siempre será preferible la paz con equilibrios precarios, que continuar una guerra de más de 60 años, que perjudica no solo a Colombia y su gente, sino a todos los vecinos.

Nadie que haya sido guerrillero, y se vea amenazado de muerte, y sea sistemáticamente perseguido, se sienta a esperar la muerte o la cárcel. Simplemente se repliega, y continúa con lo que ha sido su modus vivendi: la guerra!

Sin embargo, no solo es la guerra que ya de por sí es muy grave, sino que todos conocemos los vínculos de la guerrilla con el narcotráfico, del cual forman parte esencial, a veces como mecanismo de protección de rutas, y a veces como socios del negocio mismo, por lo cual, sacarlos del negocio llevándolos a la paz social y política, ya era una ganancia importante.

Colombia sigue siendo de lejos el país más productor y exportador de drogas en el mundo, y no hay indicadores serios que hablen del combate eficaz y exitoso para erradicar ese flagelo en el gobierno saliente, a pesar de la ayuda multimillonaria que siempre han tenido del gobierno de los Estados Unidos y Europa.

Hubiera sido mejor dedicar esfuerzos a profundizar y mejorar los acuerdos de paz, darle gobernabilidad a Colombia en lo político, y enfrentar con todo rigor a uno de los flagelos más deletéreos del mundo actual, como es el tráfico y consumo de drogas, desde la raíz; es decir, desde la producción.

En política internacional deja un mal sabor por haberse dedicado a ser un militante del antimadurismo promotor de crueldades que solo afectan a un pueblo desvalido y olvidado, primero por el pésimo gobierno de Maduro, y luego por las sanciones criminales que postergan cualquier realización y progreso.

Ahora Colombia se debate entre dos candidatos cuyas trayectorias no son precisamente halagüeñas; no obstante es nuestro deber desear éxito a nuestros vecinos, y estimular que quien gane, renueve relaciones diplomáticas y comerciales con Venezuela como han anunciado, para aliviar tensiones y miserias.

Ojalá que los colombianos, en medio de este dilema, escojan lo mejor, y entre todos alcancen un buen destino para un país sufrido que bien merece una buena oportunidad. Que viva Colombia!

Roman Ibarra
romanibarra@gmail.com
@romanibarra
Venezuela

ANTONIO JOSÉ MONAGAS: LA IMPUNIDAD COMIENZA DONDE TERMINA LA LIBERTAD, DESDE VENEZUELA

De la impunidad, mucho se ha dicho. También, mucho se ha escrito. Quizás por ello, mucho se ha especulado con la intención de desalentar la moralidad y la ética. O de desacreditar la justicia transicional. Entre tanto, mucha sangre ha corrido por las calles del planeta. Es por eso que la impunidad adquirió el perfil de un mal universal. Tanto que el ejercicio de la política, aprendió a traficar con la impunidad. De esa forma, la política siempre ha buscado beneficiarse mediante arbitrariedades prescritas mediante el abuso del poder.

La impunidad, casi siempre, consigue en el poder político su mayor y mejor cómplice. Es una complicidad que data desde que el hombre entendió que, buscando solapar sus excesos con la primera excusa que obtuviera, lograba zafarse de las acusaciones que sobre él podían recaer o pendían.

Cuando la impunidad encuentra en la corrupción su mejor aliciente, la situación adquiere visos de gravedad. Así, indistintamente de las transgresiones que pueda causarle a la justicia, por ejemplo en el plano de los derechos humanos, la impunidad se convierte en razón que incentiva a muchos que sigan cometiendo los desaguisados, fechorías o contravenciones que permite la impunidad cometer.

No es extraño no advertir los entramados delictuales que se cometen desde el ejercicio del poder. Particularmente, toda vez que la impunidad es acogida como causa que abulta la complejidad que envuelve la administración pública. Tanto así, que la impunidad consigue en la complicada estructura pública el escondrijo más expedito para desubicar o desviar cualquier amenaza o acusación en su contra.

Frente a tal situación, el poeta trágico griego, Sófocles, había referido que “un Estado donde quedan impunes la insolencia y la libertad de hacer lo que se quiera, termina por hundirse en el abismo”. Y cuidado si eso no está viviéndolo Venezuela con la impunidad que, “a paso de vencedores”, hace que el país avance hacia su decadencia.

Y aun cuando hay propuestas que han indagado sobre algunas estrategias formuladas en la dirección de combatir la impunidad, el problema no es sencillo. No se resuelve, sin antes no tocar razones que comprometan la educación y la cultura de la sociedad. Mucho más, que medidas tomadas coercitivamente por la cúpula del gobierno.

La impunidad ha sido y es el mayor enemigo del desarrollo. En el contexto venezolano, la impunidad, ha afectado las libertades y derechos de tal forma que se convirtió en el arma más letal utilizada para diezmar el significado de “República”. Sobre todo, al momento que ha pretendido emplearse para motivar la institucionalidad que requiere la ideología política sobre la cual descansa su funcionalidad.

De ahí que la subsistencia de este tema, vale como razón de justicia para concienciar la actitud de seres humanos que defienden sus derechos y libertades. De ahí la razón para tocar la necesidad de comprender que la impunidad comienza donde termina la libertad.

Antonio José Monagas
antoniomonagas@gmail.com
@ajmonagas
Venezuela

AQUÍ TITULARES DE HOY DOMINGO 19/06/2022, DESDE VENEZUELA PARA EL MUNDO, PARA LEER PULSAR SOBRE EL TITULAR ESPECIFICO

  HOY - OPINIONES TEMAS INTERNACIONALES Y NACIONALES -  

MIBELIS ACEVEDO DONÍS: ¿DESTROZOS BIENTENCIONADOS?. DESDE VENEZUELA








MIBELIS ACEVEDO DONÍS: ¿DESTROZOS BIENTENCIONADOS?. DESDE VENEZUELA

En el marco de lo que prometía ofrecer algún balance del calamitoso desempeño opositor, un conocido político venezolano en el exilio explicaba en entrevista concedida a un medio español la diferencia entre lo que llamó “error de intención” y “error de implementación”. Según se desprende de aquel estrafalario mea culpa, si algo podía absolverlo de eventuales cargos fue no haber incurrido en los mentados errores de intención. “Cada decisión que he tomado, en el momento en que la he tomado, con la información que tenía disponible y en la circunstancia en la que estaba, he pensado que era la mejor decisión para salir de la dictadura”. Todo lo cual, añadía, “me ha llevado a mí, a nuestro grupo y a nuestra familia a poner nuestra libertad en riesgo”. El problema, ha subrayado, es que la decisión (en la que, por lo visto, nunca llegó a tantear ninguna grieta) “no fue implementada de manera eficaz”.

En dos platos: sugiere el entrevistado que si la intención es “buena”, la responsabilidad (¿la culpa?), si no se extingue, al menos se atenúa. El gravísimo error en el cálculo de las consecuencias quedaría allí en un segundo, borroso, prescindible plano. Esas resultas, parece decirnos además, merecen aprobación incondicional, pues son hijas de un impulso moral que busca el bien, por encima de todo. Según esto, un fin loable justificaría entonces valerse de cualquier medio, apelar a cualquier acción, no importa su índole ni si aquello califica como locura, majadería o suicidio.

¡Ah! Vaya manera de errar el tiro. Una y otra, y otra vez. Quizás la peor, tratándose de política. “Las buenas intenciones pueden hacer tanto daño como la maldad, si carecen de entendimiento”, advertía Camus. Nos internamos acá en los terrenos de la falacia de la buena intención, tan común en aquellos líderes que han optado por imponer sus utopías a toda costa, fascinados por la presunta superioridad de sus designios. De haberles preguntado, seguramente esos aspirantes a mesías que resultaron funestos para sus pueblos habrían preservado entera su conciencia tras la panoplia de un deseo predominante, intachable, la búsqueda del Santo Grial, una sociedad justa y perfecta. Y habrían exhibido, como algún vez notó Raymond Aron, mesnadas de “indulgentes para con los mayores crímenes, a condición de que se los cometa en nombre de las doctrinas correctas”.

No hay cabida allí para una contrición propia de la interpelación íntima, personalísima, entonces; tampoco para la admisión de esa responsabilidad pública que concierne al error político y su rectificación. De ese coto de ciego auto-convencimiento se ha expulsado la ética de las consecuencias para que reine, sin competidores, la ética de la convicción.

Para tragedia de quienes lo sufren, esto lleva a transitar un bosque impreciso donde el reto sería distinguir de antemano la probidad de la intención o, en última instancia, su presunta inocuidad. Tarea yerma, espinosa si no improbable, pues también remite al orden de lo subjetivo, lo abstracto, la creencia, el deseo, la actitud; todo aquello que configura cierto estado mental idealmente pulsado por la racionalidad. No en balde la filosofía o la psicología han hecho del tema un objeto de su interés. Cómo la intención motoriza un curso de acción y hasta qué punto la calidad de la acción del individuo se casa indefectiblemente o no con la intención; cómo distinguir intenciones prospectivas o "prior intentions" de las inmediatas o "intentions-in-action", estrechamente vinculadas al sentido de agencia; cómo saber cuándo la intención es racional o irracional, o si responde a motivaciones conscientes o inconscientes, son algunos de los problemas que acá se plantean.

En todo caso, separar el valor moral, implícito en la intención, del visible fracaso de una faena y dispensar por esta vía al perplejo decisor, no parece posible en cortijos de la política. Allí la eficacia no germina de la sola corazonada, lo sabemos, sino del cálculo inteligente y racional. De hecho, en la inadecuación entre medios y fines la psicología percibe una forma de irracionalidad que desestima todo compromiso. Asimismo, Consecuencialistas y Utilitaristas recelan del llamado “principio de buena intención” que marida legalidad y moralidad privada; y vuelcan sus miradas hacia la acción y sus efectos. Verdad, bondad o belleza, afirmaba Charles S. Peirce, dependerán del éxito que estas reporten en la práctica.

En las revelaciones que nos ocupan, de paso, no podemos dejar de notar la pirueta entre una suerte de pragmatismo adulterado (presto a blanquear la temeridad del “hombre en la arena”, ese que no está obligado a rendir cuentas a nadie, pues se mide de continuo con el riesgo) y la cínica ruptura entre intención (Yo) y realización (los otros; no nos-otros). Pero quizás lo que más inquieta de estos efugios retóricos es la sensación de que todo lo apuestan a una inagotable candidez del ciudadano. Craso despiste.

El potencial votante que mira, cuestiona y desconfía, ya no parece tan proclive a dar por buena cualquier explicación. Una ciudadanía indignada empieza a sospechar que debe juzgar al político profesional no por sus nobles impulsos, no por las digresiones de un “alma bella”, sino por los resultados de acciones sobre las vidas concretas de las personas. ¿Anunciará esto el triste pero ineludible fin de la inocencia? Esa inocencia que, según Ricardo Sucre, antes distinguió a Venezuela, “el país decidió perderla y hoy la añora… ya no hay regreso”. Toca hacer “que el mundo real sea mejor”. Entre tantas punzantes pérdidas, en fin, esta quizás sea una que nos interesa apresurar.

Mibelis Acevedo D.
mibelis@hotmail.com
@Mibelis
@ElUniversal
Venezuela

VICENTE BRITO: DIÁLOGO TRIPARTITO EN LA OIT. DESDE VENEZUELA

Hemos observado como la OIT que es un organismo conformado por sindicatos, gobiernos y empleadores del mundo y que forma parte de la Organización de las Naciones Unidas. En su reciente asamblea anual realizada en Ginebra demostró cómo el diálogo se ha convertido en la vía más conveniente para superar las diferencias que puedan existir entre las distintas organizaciones que la integran.

El diálogo tripartito es la expresión más democrática y necesaria donde los actores sociales y gobiernos, lo convierten en un factor de soluciones y respuestas a las múltiples diferencias que puedan existir entre las instituciones que la conforman. Por más insuperables que luzcan las diferencias al final se logran soluciones.

En Venezuela se ha iniciado un proceso de diálogo tripartito bajo la conducción de la OIT, desde el pasado mes de abril cuando se hizo presente una misión de alto nivel para propiciar la participación de los actores sociales (sindicatos y empresarios) con el gobierno. Que debe presentar los resultados obtenidos en el próximo mes de septiembre. Esta iniciativa está creando numerosas expectativas que van desde los que consideran que la misma va a facilitar las soluciones esperadas, ante las quejas presentadas por los actores sociales por la no participación del gobierno en el diálogo tripartito, así cómo por las decisiones tomadas por los organismos del poder público y político que han afectados los derechos constitucionales de dirigentes patronales y sindicales.

Las dudas de que este diálogo no logre soluciones, ni cubra las expectativas creadas, se han manifestado también en estos voceros que opinan que la estrategia oficial es participar, sin facilitar resultados a las solicitudes realizadas por los actores sociales.

Por lo cual es necesario que el sector oficial tome las iniciativas para alcanzar las decisiones y que dé respuestas positivas a los múltiples planteamientos recibidos por parte de los actores sociales.

La OIT se fortalece como institución en la medida que los resultados obtenidos de este diálogo se conviertan en un factor aglutinante; con resultados que cubran las propuestas planteadas, y ojalá que no, este no sea otro salto al vacío que pueda crear suspicacias mayores entre los actores sociales y los que conforman el ejercicio del poder.

Vicente Brito
vicent.brito@gmail.com
@vicentejbrito
Presidente
Red por la defensa al Trabajo, la Propiedad y la Constitución
Venezuela

RAFAEL RODRÍGEZ MUDARRA: DESAGUISADOS IMPERTINENTES. DESDE VENEZUELA

La inmensa mayoría del pueblo venezolano repudia a Maduro: Lo que está a la vista no necesita anteojos. Le sobran razones con fundamento en las privaciones que padecen a diario, que se derivan entre otras, de: Crisis económica, social y política sin solución de continuidad. Interferencia a la libertad de expresión, prisiones de periodista, de dirigentes sindicales y políticos; expropiaciones sin causa de utilidad pública bloqueo y secuestro de los medios de comunicación. No funcionamiento de los innumerables, espaciosos y confortables centros de salud construidos antes de la llegada de Chávez al poder, sin haber estado socializado prestaban servicios gratuitos a cualquier venezolano o extranjero que se hubiese vistos urgidos de estos. Sumamos otros abusos cometidas a diario por un sistema que alardea de bélico, dado tener a su servicio a un grupo militares con privilegios burocráticos. Régimen este: Que dado su abuso de poder la Corte Penal Internacional con pruebas fehacientes, le sumaria lo conducente para enjuiciarlo por flagrante violación del derecho a la vida.

No obstante lo dicho el Fiscal General de la República que incriminó a un dueño de televisora por haber permitido que un acalde fuere entrevistado por periodista del su canal, tomando como motivo de su regaño un injurioso señalamiento el capitán Cabello. Después, procediendo como agente del régimen, contrariando lo que le impone el interés general tuvo el “tupé” de afirmar: “Que la Corte Panal Internacional no tiene nada que investigar sobre crimines de lesa humanidad, por cuanto ella hace justicia”. Pero incumpliendo su oficio le sobra complacencia para impedir que en Miraflores se siga actuando contra los venezolanos que reclaman respeto a sus derechos civiles, políticos y sociales.

El repudio al cual se ha hecho acreedor NM, traspasa las fronteras patria. Centenares de gobiernos e instituciones extranjeros no le reconocen legitimidad, se la dan a JUAN GUAIDÓ como presidente provisional de

Venezuela, quien tiene el encargo aún no cumplido de ponerle cese a la Usurpación.

JUAN GUAIDÓ cumple su mandato. No se le conoce revocación alguna de su Cargo. Sin temer a las agresiones que en su persona realizaron colectivos y militante del PSUV en los estados Zulia y Cojedes, dos jurisdicciones con gobiernos opositores, reitera con firmeza verbal el no permitir que se legalice el régimen de Maduro, a la vez insiste en la celebración de una elecciones libres para sustituirlo, lo que hace suponer que no ha opinado sobre las elecciones acordadas para el 2024.

El Gobierno provisorio mediante el cual la AN se sustituyó el mandato de Maduro por usurpador, no pierde vigencia. El asiento presidencial del Gobierno Provisorio se encuentra anclado en Caracas, capital de la República de Venezuela. GUAIDÓ goza de soberanía exterior, tiene representación diplomática. Qué dirigentes, antes conspicuos opositores; hoy con inescrupulosos impulsos demanden el cese del Gobierno Provisorio, nos lleva a no entenderlos.

Consciente como estamos de las posiciones incongruentes en las cuales han incurridos muchos de los que se han convertido en conductores de la inconsulta y leal comunidad opositora; y por cuanto las condiciones objetivas se encuentran dadas para el cambio deseado, es forzoso indagar -Si es viable la posibilidad de estructurar un movimiento unitario capaz de conducir al pueblo que protesta por sus propios medios, convirtiéndolo en abanderado de la acción revolucionaria- en el entendido de que la política pertenece a las masas; y que estas han aprendido a liberarse de dirigentes inconsecuentes: CLARO QUE SÍ. Satisface un clamor que por varios años se anida en el corazón de un pueblo “harto de dictadura” carente de conducción idónea.

La actual dirección opositora no reúne condiciones de confiabilidad. Está desasistida de la gran mayoría, que quiere que Maduro se vaya. Si ayer el pueblo descontento fue fervor hacía estos dirigentes y los tenía como guía de la salvación nacional en el presente se observa lo contrario: todo, por

cuanto los que han actuado sin la consulta responsable, con ineficiencia, se distanciaron de un proceder que tuvo acogida durante años. Actuando como si los fracasos se encuentran exentos de su culpa, se lo achacan a otros: es decir a los que ellos se han dado en excluir. El opositor harto de inconsecuencias ha sido receptor de los desaguisados impertinentes que con frecuencia se le hacen. Señalaremos dos exentos de rendición de cuentas, que no ha tenido consentimiento unitario:

El primero conlleva a declarar que estos conspicuos dirigentes, con pérdida de la razón activan la exclusión con claro propósito de selección de grupos. Se escudan en la MUD. Reunidos en Colombia disponen participar en el dialogo de México. Acuerdan con Jorge Rodríguez la firma de un memorando confeccionado a la medida del régimen. Le reconocen cualidad presidencial a Maduro. El memorando se convirtió en ley de la República. Regresan a Caracas, Ramos Allup se sustituye a Guaidó, habla en nombre de la MUD. Anuncia participación en las elecciones regionales conforman el archipiélago opositor. Maduro obtiene la mayoría de los cargos votados. El otro y segundo desaguisado se da en Panamá, a la llamada Plataforma Unitaria la reducen a 10.La convierten en comodín para explanar sus ambiciones. Ramos Allup habla, otra vez se sustituye a Guaido: anuncia elecciones primarias para escoger candidato presidencial, con elaboración de un reglamento, nombran un Secretario Ejecutivo. Se escudan en la MUD para dirigir el proceso

URD quien desde el inicio de la reelección de Maduro se pronunció por la línea de Autonomía de Acción y de Oposición a Fondo al régimen de facto, ordenada por su Comisión de Estructuración Nacional, ha respaldado a Guaidó como presidente provisional tomando en cuenta la existencia del Estado de facto. Pero consecuente con su doctrina unitaria, historia de civismo comprobado se declara opuesta a que un grupo convertido en dirección autoritario, por demás sin sustento de apoyo popular, pretenda estimar a los que somos opuestos al régimen, como un rebaño propiedad de sus caprichos. El método discriminatorio que se ha empleado a partir de la reelección de Maduro, no es más que un decimonónico camino, expedito para el retorno del gendarme.

URD, dada las contradicciones afrontadas, hace un llamado a los sectores de la oposición no sola a los que han empantanado los avances que se habían logrados; también a los que hoy, cuales son muchos han resuelto oponerse al continuismo de la dictadura. A la vez afirma que corresponde otro sendero para caminar con pisada firme, cual no es otro que el de reconstruir la dirección democrática del proceso. No se trata de elecciones primarias, pues estas sugieren la nominación de un dirigente para un proceso viciado, sino de un tipo de consulta libre del bandidaje electoral del régimen, con supervisión y reglas acordadas entre los participantes con compromisos claros, que permitan constituir un actor nacional e internacional: Qué sean los ciudadanos que al participar decidan. Guaidó tiene que pronunciarse.

Rafael Rodríguez Mudarra
1rodriguezmudarra@gmail.com
@Ramudarra
Presidente de Unión Republicana Democrática
Venezuela

OSCAR ARNAL: MADURO UN PARIA OCCIDENTAL.DESDE VENEZUELA

Excluido de la Cumbre de las Américas, Maduro inventó su gira euroasiática. Es un gobierno aislado en el continente. Solo tres países no pudieron estar en el encuentro continental en Los Ángeles: Cuba, Nicaragua y Venezuela. Países que no cumplen con los mínimos estándares democráticos. 

Ya Maduro en la pasada Cumbre del 2018, había sido también vetado por el grupo de Lima cuando se celebró en Perú. En la Cumbre de Quebec quedó claro que la reunión continental era para los países respetuosos de la democracia y los derechos humanos.

La errónea política internacional del régimen, rompiendo el Pacto Andino, siendo expulsada del Mercosur y vinculándose a muerte con las autocracias de Rusia, China, Irán, Cuba y Nicaragua ha traído nefastas consecuencias.

Tenemos un gobierno maula, que no paga sus compromisos internacionales, sus bonos soberanos, ni tampoco los de Pdvsa…que ha traído la caída económica más abrupta que el país conozca en su historia. Que se hable de un rebote después de una caída del PIB de alrededor del 80%, no significa que el 94,5% que llegó a la pobreza esté saliendo de allí. 

Sin que se regularice la situación con la banca internacional y los organismos económicos internacionales, sin reestructuración de la deuda será imposible observar una verdadera recuperación más allá de una burbuja.

En materia política se impone que se reanuden las negociaciones, para que se creen las condiciones electorales de cara al 2024. Según el artículo 67 de la Constitución en el gobierno y en la oposición se deberán elegir los candidatos en consultas con sus partidarios. 

En el Oficialismo hay muchas figuras que también tienen derecho y quieren aspirar. Hay que impulsar que se cumpla para los dos bandos la Carta Magna y fundamental. Mientras tanto, hay que dar la lucha en todos los terrenos y en todos los espacios. Hay que recuperar el fervor popular. Este gobierno anti democrático que arruinó al venezolano, ha demostrado que es muy difícil hacerlo peor. 

En todos los sondeos de opinión hay un gran deseo de cambio. El 80% rechaza de manera clara a Maduro. 

Vamos entonces a hablarle un lenguaje al país para que nos entienda. La unidad opositora es 
fundamental. Reclamar día y noche se restablezca el imperio de la ley y la Constitución.

Hay que imponer un gobierno como el que señala el artículo 6 de la Carta Magna: democratico, alternativo, electivo, pluralista, descentralizado y de mandatos revocables…

En este momento se libra una lucha mundial entre los valores occidentales de la democracia y la libertad, y los autocráticos de aquellos países que sobre todo en lejanas tierras poco tienen que ver con nosotros. De todos y de cada uno depende…

Oscar Arnal
@OscarArnal
Venezuela

EDGAR BENARROCH: LA CORRUPCIÓN EN NUESTRO PAÍS, QUE HORROR.DESDE VENEZUELA-MÉXICO

La firma VORTEX, especializada en crimen organizado, conjuntamente con Transparencia Venezuela, acaba de presentar el resultado de una exhaustiva investigación realizada en nuestro país. 

En ella se habla de más de 10.000 personas o empresas que operan desde hace años, todo nació con Chávez, y conforman una “súper red” que se mueve en todo el país, especialmente en los centros de poder políticos y económicos. 

El señor Eduardo Salcedo, filósofo y politólogo, director de VORTEX, aseguró que la escala de la corrupción en nuestro país no tiene precedentes. Dijo en un simposio que la magnitud de la corrupción en Venezuela dejó como “un juego de niños” a la que era considerada como el mayor caso de prácticas financieras ilegales del mundo, el de “Lava Jato” en Brasil, con Lula da Silva. 

Como tendemos a las comparaciones, la gigantesca, estrafalaria y estrambótica corrupción ocurrida y que ocurre en nuestro país, deja como raterías de poca monta lo sucedido en otros lares por muy elevadas que sean. 

Salcedo afirma que en el caso de Lava Jato estuvieron interactuando 1.400 personas y compañías, en Venezuela pasan de 10.000, es decir, el envío y recepción de recursos, informaciones, dinero o favores. Dijo además que el caso Lava Jato alcanzó algo más de los mil millones de dólares dentro y fuera de Brasil y que en Venezuela sólo uno de los cientos de casos procesados hasta ahora supera esa cifra con buena distancia. 

Lo ocurrido ha sido muy lamentable, pero lo más preocupante es que esta criminal e inmoral corrupción continúa galopante y las cifras no paran de crecer cada día. El lavado de dinero es sin precedentes en la historia de la humanidad. 

Entiendo que más adelante los investigadores nos aportaran elementos más o menos exactos de lo ocurrido y de lo que ocurre, pero sabemos de estudios totalmente serios y creíbles informan que lo colocado en el exterior en bienes inmuebles y efectivo en entidades financieras, paraísos fiscales, suma más de 400 mil millones de dólares que es una cantidad monumentalmente extravagante que se pierde de nuestra estimación normal, que serviría para reactivar y volver a reactivar nuestra economía que está en terapia intensiva. 

Me han informado que desde hace algún tiempo una comisión de excelentes profesionales estudia como repatriar los capitales ilegítimos producto del asalto a la nación y enjuiciar a los perpetradores de estos criminales hechos, claro está, será con el nuevo gobierno que Dios mediante tendremos pronto.

Este régimen está muy bien informado de esta espantosa y horrorosa situación y sabe de sus actores, pero no hace absolutamente nada por investigar el asalto al país y menos hacer justicia, como tampoco ponerle coto a la corrupción y a la apropiación indebida. Será que en ese sindicato de hampones están sus amigos y allegados, o será que ellos forman parte del tinglado. Estoy seguro que más adelante nos asombraremos cuando conozcamos la verdad de toda esta trama de corrupción, están muchos que sabemos pero hay otros que no.

El que desfalca a la nación, apropiándose indebida e ilegalmente de sus riquezas y bienes, le quita el pan de la boca a nuestros niños que en una cifra escandalosa y altamente preocupante mueren prematuramente por desnutrición.

El cambio que debemos darle al país es de arriba a abajo, desde lo político y económico hasta lo moral y ético para que nuestros recursos sean administrados con pulcritud e higiene.

Venezuela - México