viernes, 3 de febrero de 2017

JOSUE ARTURO MOLINA SUAREZ, RECONQUISTAR EL DERECHO AL VOTO, EL DERECHO A LA LIBERTAD

EL AGUIJÓN

El régimen en su afán de conquistar la rendición de los ciudadanos sigue aplicando la arbitrariedad. La libertad de expresión ha recibido fuertes dosis de represión por los revolucionarios de pacotilla siglo XXI.

El atropello implantado por el oficialismo en contra de comunicadores sociales, radio, televisión, prensa, dirigentes políticos, también lo han intentado en las redes sociales y pinchando teléfonos contra los ciudadanos en general, privándose de libertad a algunas personas por escribir o expresar su opinión en contra de la gestión gubernamental. 

El alboroto exhibido por los dirigentes del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) ante la pérdida de apoyo popular, refleja en sus decisiones el carácter totalitario del régimen para frenar la protesta social. 

Pretenden con órdenes militaristas y a través de carteles en oficinas públicas cerrar la libertad de expresión de los ciudadanos. No aceptan la crítica y el despertar de las personas. Nadan en aguas oscuras, pantanosas, y ensayan que los ciudadanos sigan en silencio sus caprichos. Practican la fantasía en película real. 

La alternativa democrática requiere adelantar estrategias serias, para avanzar en el cambio de régimen. Personalidades como Claudio Fermín, Eduardo Fernández y Felipe Mujica, entre otros, han venido planteando la necesidad del ACUERDO NACIONAL, con diversos sectores sociales (del oficialismo y oposición), y contar para ello con nuevos interlocutores y unidad de propósito, indicando algunas ideas para canalizarlo y tener éxito en el mismo. 

En repetidas ocasiones han subrayado que la base del cambio real del régimen se encuentra en las elecciones regionales, aupando la descentralización para fortalecer las regiones en la administración y toma de decisiones en la cosa pública, sin abandonar el tema presidencial. Esa debe ser la premisa en la Unidad de Propósito a alcanzar en corto tiempo. 

Las rectoras del Consejo Nacional Electoral (CNE), no van a convocar ese proceso si no hay la presión política y social para lograrlo, y ello es posible a lo interno de Venezuela, lo externo son apoyos importantes, pero no decisorios. 

La convocatoria a la presión política-social no puede seguir siendo producto del capricho en la alternativa democrática. Llego la hora de hablarle claro al país, ganar los espacios regionales, y continuar avanzando en el reclamo social, para lograr el adelanto de las elecciones presidenciales. 

La situación de pobreza, hambre, muerte y desolación, está rebasando la resistencia ciudadana. Hay que dejar a un lado la majadería y lograr reconquistar el derecho al voto, el derecho a la libertad. 

Josue Arturo Molina Suarez
jarturomolina@gmail.com
@jarturoms1                                                                            
Tachira - Venezuela

No hay comentarios:

Publicar un comentario