Uno estaba esperando con gran expectativa los resultados de las elecciones legislativas de Venezuela el domingo 6D. Estaba cantado el desenlace. Triunfó rotundamente la NO PARTICIPACIÓN en la farsa electoral. El desgobierno se alzo con la asamblea con solo el 15.8% de participación.
Una farsa política que pretendió parecerse a unas elecciones legislativas en un intento de instalar una Asamblea Nacional cómplice y títere, en deuda solo con el desgobierno. Una verdadera morisqueta de opera bufa. Que inmediatamente fue rechazada por la comunidad internacional.
El 6 de diciembre pasará a la historia de Venezuela como un día sombrío de derrota. Las elecciones parlamentarias celebradas por desgobierno, son una vergüenza para Venezuela, atropellada a lo largo de décadas por caudillos, dictadores y políticos corruptos.
Tanto el desgobierno como la oposición alacrana salieron como perdedores el domingo, día de las elecciones. También perdió toda América Latina y la comunidad internacional, pero la pérdida más dolorosa es la de los 30 millones de venezolanos que sufren a diario la crisis sin fin, y de los que huyeron del caos y viven esparcidos por el mundo. La bicoca de 5 millones de compatriotas.
El desgobierno llegó a amenazar a los venezolanos con una "cuarentena de hambre" si no votaban. A pesar de todo eso, la participación electoral fue solo del 19%. La mayor humillación para los tiranos es cuando la gente ya no les tiene miedo. Y esto ocurrió. No valieron amenazas, ni amedrentamientos. Simplemente no salimos a validar este circo perverso.
Cuando la bufa Asamblea Nacional se reúna por primera vez el 5 de enero, el desgobierno tendrá a su disposición un Parlamento servidor. Pero ha perdido la pequeña pizca de credibilidad que aún tenía entre los ideológicos de línea dura de izquierda. ¿Cómo planean defender un régimen que usurpa a otros partidos para obligarlos a participar en elecciones amañadas?
Un día después de la charada parlamentaria, el país continuó su adormecido declive. La gente se dirigía a los supermercados para pagar millones de bolívares por comestibles, con una moneda absolutamente devaluada; haciendo colas que se extendían por kilómetros para poner gasolina en sus autos en un país rico en petróleo. Se preocupan por sus hijos demacrados y por los hospitales que constantemente tienen cortes de luz y sin agua. Por no decir que además no tiene insumos para atender a los pacientes. Población rural que crecientemente cocina con leña por falta de gas.
La oposición también perdió el domingo. No por los resultados que ya presumíamos con meses de antelación. Perdió porque durante los cinco años que controló la Asamblea Nacional, demostró ser incapaz de estar a la altura de la confianza que la gente depositó en ella en 2015. La oposición perdió porque no pudo traducir en políticas las esperanzas de casi 14 millones de votantes venezolanos. La oposición perdió porque fue torpe y arrogante después de su victoria de 2015.
Después de cinco años, deja un historial deplorable: no hay leyes para proteger a los miembros más débiles de la sociedad, no hay decretos que valga la pena recordar, ningún proyecto político que pueda servir de legado. Juan Guaidó, jefe de la oposición y proclamado presidente interino, también perdió porque al finalizar su segundo mandato como presidente de la Asamblea Nacional, no cumplió su mayor promesa: reemplazar al desgobierno.
Los medios de comunicación estatales y privados afectos al desgobierno no mencionan la NO PARTICIPACION en las “elecciones” y proclaman una “victoria”; La mayor parte de la comunidad internacional rechaza las elecciones legislativas. 1º round.
Como contraparte. Sectores de la sociedad civil propuso una Consulta Popular en el marco del #70Constitucional como un derecho ciudadano. Propuesta que retomo para si el actual parlamento con Guaidó a la cabeza.
El proceso inició en la medianoche del pasado lunes, cuando el CNE ni siquiera había emitido el primer boletín de resultados de las legislativas convocadas por el desgobierno y culmino ayer sábado de modo presencia.
Con la modalidad de manifestación de voluntad por Internet y ratificación presencial en puntos de encuentro para esos fines. En las primeras de cambio según el Colegio de Ingenieros de Venezuela fue masiva su recurrencia en las redes, llevándolo a punto de colapso por la abrumadora participación de los accionantes. Que fue de largo mucho más de lo esperado.
Ayer sábado, el gloriosa jornada las personas que no pudieron expresar su opinión OnLine lograron acudir a los puntos y hacerlo manualmente. Hoy domingo 13D puedo dar fe que lo esperado se cumplió. Fue apoteósico. Una demostración histórica de civismo y compromiso por la libertad y la democracia de nuestro país. Puntos de encuentros abarrotados de ciudadanos habidos de manifestar su voluntad. Lo que faltó el 6D abundo ayer, energía, participación y pueblo. Por supuesto, El desgobierno saboteo, con sus colectivos armados, algunos puntos de concentración y al hacerlo demostró al mundo que en Venezuela el auxilio Internacional es una necesidad. 2º round.
Tras algunos cambios, quedaron definidas tres preguntas orientadas, primero, a rechazar el evento del 6 de diciembre, segundo, a solicitar elecciones presidenciales y parlamentarias libres; y tercero, a pedir todo el respaldo de la comunidad internacional. La mesa quedo servida. El apoyo a la propuesta fue categóricamente respaldada. Cómputos preliminares, no oficiales, muestran que más 8 millones de voluntades la han aprobado.
Ahora solo falta la acción política para su ejecución. ¡El ciudadano alzo su voz en contra del desgobierno en ejercicio de su legítimo derecho! Marcando el rumbo para defender el futuro y abrir camino para la transición que el país tanto necesita. ¡Es la hora de la resistencia! Un acto de rebeldía y esperanza radical que definitivamente esta en marcha. 3º round.
Y recuerda… Ciudadano en Acción. ¡Juntos es mejor!
Raul Amiel
raulamiel@gmail.com
@raulamiel
Venezuela
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