viernes, 17 de mayo de 2019

JESÚS GONZÁLEZ BRICEÑO, ¿HABRÁ INTEREVENCIÓN MILITAR ESTADUNIDENSE?

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Ante la grave y prolongada crisis político-institucional, económica, humanitaria,  la violación de los derechos  humanos y vínculos con el narcotráfico internacional, la administración  de Trump y  el Grupo de Lima, han  impuesto severas  sanciones financieras , comerciales  y diplomáticas  al  mandatario Nicolás Maduro para  obligarlo a abandonar su cargo y convocar  nuevas  elecciones presidenciales  y restaurar el sistema democrático, reconociendo al Diputado Juan Guaidó, en calidad de Jefe de  Estado  y  del Ejecutivo Nacional encargado,  proclamado el 23 de enero pasado por la legítima Asamblea Nacional,  como lo dicta el artículo 232   de la constitución  vigente por  vació   absoluto de la  primera magistratura.

El controversial  impasse entre el narco régimen  madurista y   las fuerzas  disidentes  lideradas   por Guaidó  y la coalición de  gobiernos amigos para lograr una  transición  política  pacífica  con, todavía  no han dado  resultados definitivos, a pesar de la protesta del 30 de abril pasado cuando  Guaidó logró el apoyo parcial de  fuerzas  militares  y de seguridad  gubernamentales y de la protesta   cívica que tuvieron  a punto de  lograr la salida de Maduro, desatando  una nueva escalada de represión contra los diputados legítimos de la Asamblea Nacional. 

Pero   es evidente que  Venezuela se  ha convertido en un enclave estratégico en que  intervienen  China, con su  poderoso  apoyo político y financiero recíproco,  y del presidente ruso Vladimir Putín, que,  además de numerosos intereses y   pactos   tecnológicos,  agrícolas y  financieros,  ha venido reforzando su  presencia  militar con el gobierno de Chávez  y, ahora   con Maduro, mediante el conocido “  Acuerdo Técnico-Militar”,    para el suministro de  equipamiento militar estratégico  y  adiestramiento de  las fuerzas armadas venezolanas  y de  militares rusos, que  se  podría  calificar, en estas días  de  incertidumbre  y  contradicción interna  y externa, como un poder disuasivo ante cualquiera acción  estadunidense de intervención en Venezuela.

Es cierto que ambas   potencias   están permanente dialogando sobre la solución más conveniente  para  nuestro país,  pero el resultado de estos contactos     entre ambos presidentes  y sus respectivos  cancilleres muestran   el rechazo ruso  a cualquiera solución violenta que como ha dicho su presidente,   significarían  “ graves consecuencias “.

Por otra parte, el discurso diario del alto funcionariado   norteamericano, aunque señala   que hay varias opciones sobre la mesa, incluyendo la intervención, denota la inexistencia de    una posición firme ni categórica   respecto a la opción militar   en Venezuela y, para el 14 de mayo próximo, habrá otra reunión entre ambos cancilleres para tratar “la cuestión venezolana” Veremos cuáles son los resultados de estas conversaciones ruso-estadunidenses que se están llevando a cabo. 

Hay demasiados intereses mundiales   que  involucran a Rusia  y Estados Unidos, como Siria, Crimea. Georgia, Ucránia … además de la presunta intervención o “trama rusa “en las elecciones presidenciales norteamericanas de 2016 en que el fiscal especial R. Mueller, encargado de realizar la investigación respectiva, ha señalado en su Informe que hubo interferencia rusa en este evento para desfavorecer la imagen de la candidatura demócrata de la Sra.  Clinton, inculpando a ciudadanos y tres compañías rusas, aunque, y sin exonerar a Tremp y su   equipo electoral, no lo inculpa, no obstante, de que el mencionado Informe. tiene muchas tacaduras, ( léase censura )  y no se da  por concluidas  las  investigaciones al respecto -  
  
Por otra parte, el exdirector de inteligencia estadunidense, FBI, James Comey, aseguró también que   hubo interferencia rusa en las presidenciales   y textualmente que “Rusia busca de socavar la democracia estadunidense los 365 días del año”, alegando que D. Tremp era un mentiroso      en la audiencia de El Capitolio (CNN, 8 junio, 2017)

Se da igualmente por descontado que Julián Assange, refugiado en la embajada ecuatoriana londinense, al que le fue levantada recientemente su condición de asilado por estar espiando desde allí, así como se le ha mencionado como participante de la trama rusa en las elecciones estadunidense. Y no es descartado que Edward  Snowden, un analista  del FBl exiliado  en Rusia  por   publicar   documentos  confidenciales,    esté involucrado   en este affaire  de  hacheo,  espionaje  y conspiración  contra EE.UU..

La excandidata Hilary Clinton, así se expresó del presidente Tremp, calificándolo de “títere de Putin”; y muy recientemente, el 13/ 05/2019, el BUSINESS INSIDER de España acaba de publicar una noticia sorprendente de que el presidente Trump está desviando fondos de los programas de mísiles   balísticos y aviones de vigilancia, por un monto de 1300 millones de dólares, para construir el Muro Fronterizo  

Desde el pasado 15 de mayo, Tremp emitió una orden ejecutiva declarando una emergencia nacional por amenazas contra le tecnología y los servicios de información estadunidenses (espionaje) contra la gigante china Hawái y sus filiales estadunidenses cuando se está llevando a cabo una guerra comercial entre ambos países. Y   ha mantenido las sanciones impuestas a Rusia en el 2014 por la anexión de Crimea y   la invasión de la provincia ucranianas de Demás, y, en las reuniones entre los cancilleres de ambos países, actualmente en realización en Moscú, se está tratando, como objetivo de fondo, mejorar sus relaciones recíprocas y, el caso de la cuestión venezolana, se considera un tema relevante, pero hasta ahora se desconocen   detalles o resultados al respecto.      

Por todas estas  referencias  y  otras   plenamente comprobadas, se considera  al presidente Trump como   un  prisionero de Putín y que cualquiera acción armada  o  interferencia violenta contra el régimen de Maduro,   podría  poner al desnudo   las intimidades de la  trama rusa ( chantajes )  por cooperación,   intervención,  o cualquiera forma en que    pudiere  involucrarlo  junto  a  su equipo      electoral,  lo que sería  un traspiés  muy duro para seguir ejerciendo la presidencia  ni    optar a ser candidato presidencial en  el 2020, lo que también le  impediría ayudar  militarmente a Venezuela , y  por ello está  buscando imponer   cada vez más  fuertes y severas    sanciones , al igual que a Cuba   y  Nicaragua, como alternativa a la  intervención o cooperación de misiones  militares  en caso de ser autorizada   por la legítima Asamblea Nacional venezolana  de conformidad al artículo 187-11 Por ello  la administración Trump  y sus aliados democráticos  se están ´ esmerando in extremis  para encontrar  una solución negociada  y pacífica con Rusia para evitar  una confrontación directa con consecuencias  imprevisibles..  

¿Habrá  o no intervención militar en Venezuela para bien  o para mal ?

Jesus González Briceño
@jesusgonzalezb4

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