Una supuesta “Operación Gedeón” en Venezuela, que querían realizar unos aventureros, de pronto para echarle mano a la bestia de Nicolás Maduro y cobrar la recompensa que ofrece el gobierno norteamericano, le ha servido a la camarilla comunista de ese país para meter alaridos en contra de EE.UU y Colombia, porque dizque quieren invadir militarmente a ese territorio.
Y el régimen venezolano exhibe como un triunfo lo ocurrido el domingo 3 de mayo, en donde un numero insignificante de aventureros que merodeaban por algunos sitios de esa nación, fueron “neutralizados”, lo cual es algo demasiado ridículo, pero lo utiliza el régimen para darse más importancia de la que tiene y, ocultar el estado de miseria en que se encuentra esa nación, producto del latrocinio que ha cometido la pandilla chavista, convirtiendo a la inmensa mayoría de ciudadanos en pordioseros.
Luego hay que decir con toda claridad que una invasión a Venezuela es lo mismo que gastar pólvora en gallinazo, pues ninguna nación estaría dispuesta a semejante enhuesada, mucho menos USA, cuyo gobierno debe estar preparando la cuenta de cobro que le va a pasar al partido comunista chino, por ser responsable de la propagación mundial del Covid-19, que se ha constituido en una calamidad sanitaria para toda la humanidad.
Intervenir militarmente en Venezuela, por parte de los gringos es perderá de tiempo y recursos, y ni modos de que la mamerteria latinoamericana diga que es por las reservas de petróleo, porque con esta recesión mundial ese producto perderá todo valor, como ya lo estamos viendo; lo que pasa es que el parásito comunista de Nicolás Maduro que fue alumno del sátrapa cubano Fidel Castro se vive inventando invasiones y atentados, igual a como lo hacia el tirano isleño, de la ahí la fabula marxista de estos días, con el puñado de cazarrecompensas que el régimen hace aparecer como una invasión, lo cual es el colmo de la bufonería chavista.
Con el virus chino que azota al planeta, ningún gobierno puede estar planeando intervenciones militares en otros países, pero el cipayo de Maduro porque el gobierno colombiano no le ha parado bolas con el montaje que pretendió hacer con la excongresista Aida Merlano, ni con las dos maquinas chinas que quería regalar para las pruebas del Covid-19, buscando el reconocimiento del Estado colombiano, entonces se inventa lo de la invasión que según Maduro fue desarticulado por el “escudo bolivariano”, sin embargo no hay que olvidar la perversidad comunista propia del títere de La Habana que oprime al pueblo de Venezuela, por lo que no es descartable que le busque un conflicto a Colombia, como cortina de humo para esconder el fracaso total y absoluto de su revolución y su socialismo.
Por el Covid-19 no se puede ocultar la crisis humanitaria venezolana de los refugiados, que se acercan a los 6 millones en los países vecinos, aunque Maduro y su banda de forma fantasiosa y cínica dicen que han retornado a su país, siendo eso una falacia ya que son unos pocos los que han regresado; esa argucia es similar al número de contagios y fallecidos que revela oficialmente la bandola chavista por el virus chino, pues han sido perseguidos y encarcelados los médicos y los periodistas que denuncian la grave crisis hospitalaria que hay en la hermana república de Venezuela.
El régimen castrochavista de Caracas, utiliza de patraña la supuesta invasión, buscando llamar la atención de la comunidad internacional y así justificar la miseria de las masas, cuando se sabe que la preocupación del “imperio” por Venezuela se centra en el narcotráfico, con el Cartel de los Soles del cual Diosdado Cabello y Nicolás Maduro son sus principales capos, por los que se ofrecen millonarias recompensas.
Maduro no se va a librar del asedio de los aventureros cazarrecompensas, así haga todas las pataletas que quiera, ya que el gobierno de USA le tiene a través de la DEA (agencia antidrogas de Estados Unidos) el aviso de “se busca” con un precio por su cabeza de 15 millones de dólares, por los delitos de narcoterrorismo, corrupción y lavado de dinero, lo que incita a toda clase de mercenarios a buscar ganarse esa recompensa.
No solo por Maduro el gobierno de Donald Trump ofrece recompensa, sino que también están incluidos otros 13 asociados de la camarilla comunista, acusados por el Departamento de Justicia de Estados Unidos, por los mismos cargos criminales; así que la dictadura venezolana tendrá que cuidarse de muchas personas que en el mundo pretenden ganarse ese millonario premio; por lo que la tal invasión militar a Venezuela es otra fabula marxista, ya que el “imperio” de ninguna manera va a gastar pólvora en gallinazo, porque lo que le interesa es la captura de los mafiosos narco-marxistas que envilecen a Venezuela.
Ariel Peña
arielpena49@yahoo.com
@arielpenaG
Desde Colombia
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