miércoles, 24 de febrero de 2021

AURORA LACUEVA, VUELTA A LAS AULAS

Es razonable iniciar clases en modalidad semi-presencial a partir de marzo, como se anuncia. Luego de un año, el país debe ir retomando mayor dinamismo, tanto en educación como en las demás áreas. En paralelo, resulta clave comenzar la vacunación masiva de la población. La dirigencia de gobierno y oposiciones no puede minimizar este compromiso, junto al más amplio de ir resolviendo la crisis económica. Ya basta. Hay miles de millones de dólares retenidos en bancos del exterior por la disputa de “los dos gobiernos”. Ese dinero ha de liberarse para vacunas, medicinas, alimentos y equipos médicos y de la industria petrolera. Los acuerdos no se deben demorar.
 
El regreso a las aulas tendría que ser alegre, pero está marcado por el impacto de la crisis sobre el magisterio, especialmente el magisterio público. Es muy fuerte trabajar con una remuneración tan baja como la que ellas y ellos reciben hoy. Se dio un nuevo bono para las y los docentes, pero su monto no llega a ocho dólares y no sabemos cuál será su frecuencia. Todo el liderazgo, toda la población, debe unirse reclamando el cese de las ilegales sanciones externas. No puede ser que por supuestamente “ayudarnos” nos hundan. Esto vale también para gobierno y oposición G4: por “nuestro bien” nos destruyen. En el caso de la educación, el daño lo pagaremos durante décadas.
 
Suponemos que el regreso a las aulas será gradual: cada alumno empezará yendo uno o dos días por semana, por lapsos no mayores de, quizás, tres horas. Y compartirá con solo otros quince compañeros en su salón. El Ministerio del área debe ofrecer orientaciones para la dinámica de estas clases. Por ejemplo, no son convenientes los trabajos en pequeño grupo, solo los individuales y los generales, con una persona exponiendo a los demás. Y nunca han sido beneficiosos los ejercicios rutinarios y las labores basadas en copia o simple memorización, pero en estas circunstancias mucho menos. Necesitamos trabajos interesantes y amenos. Y que, en su tiempo limitado, dejen bastante al alumnado. Por ejemplo: juegos matemáticos (“¿Cuántos triángulos ves en este dibujo?”), lectura y comentario de bellos cuentos o poesías, intercambios de vivencias vinculadas al tema del día (“Los ríos que conocemos”), presentación de “experimentos” hechos en casa, etcétera.
 
Aurora Lacueva
lacuevat@hotmail.com
@AuroraLacueva
@Unoticias
Venezuela

No hay comentarios:

Publicar un comentario