Los buenos amigos de El Republicano Liberal me
extendieron una cordial invitación a un
Conversatorio titulado “La Despolarización una alternativa”, con la
siguiente pregunta de desarrollo: “¿Los
factores que nos diferenciamos de las minoritarias colas de la distribución normal, del reduccionismo
improcedente, debemos conformar una alternativa
nacional que posibilite una salida pacífica, constitucional,
democrática, electoral y constitucional
de la crisis que nos castiga?”
Lamenté no poder asistir personalmente para intercambiar ideas con ese grupo de ilustres
venezolanos preocupados legítimamente por el
país por las razones personales que informé a la Comisión Organizadora
del evento, encabezada por el amigo Carlos Padilla, y que espero hayan sabido
entenderlas. Sin embargo a pesar de esa
situación, creí importante enviarles por escrito algunas reflexiones que espero
se puedan incluir en ese importante encuentro en atención a estas preguntas.
De hecho serían las mismas palabras que
hubiera pronunciado de haber podido asistir.
Lo primero que hay que preguntarse antes de entrarle
al planteamiento es si existe en la
actualidad una “polarización” en Venezuela. Recuérdese que lo que pasa
aquí es una película que cada día se
mueve más rápido y que lo ocurrió ayer ya no es válido hoy. De hecho la situación política en el país cambia
todos los días, y en algunos casos en horas.
Venezuela se hallaba absolutamente polarizada durante
los primeros años de Hugo Chávez, quien
administraba en ese entonces una renta petrolera que contaba en mucho con más
del centenar de dólares por barril de
crudo. Pero esa renta no le llego a la gente como se acostumbraba en la Venezuela saudita del
primer período de Carlos Andrés Pérez. Se uso
para financiar a Cuba y al resto de los países de la órbita castrista
del Foro de Sao Paulo, comprarle armas a
los rusos, establecer una hegemonía comunicacional y la destrucción del aparato productivo venezolano. Sirvió para
comprar adhesiones de los siempre olvidados a los programas populistas del
chavismo y por supuesto enriquecer a toda la burocracia del régimen de una manera grosera y nunca antes
vista en los periodos de mayor corrupción en
el país.
Por supuesto no se financió el mantenimiento de la
gallina de los huevos de oro, PDVSA,
industria que fue desmantelada pieza por pieza para ahora ser entregada
a los iraníes en bandeja de plata,
rindiendo también honores a la corrupción del régimen, con su principal destructor, el rojo-rojito Rafael Ramírez,
asombrosamente libre todavía y financiando con
los dólares robados a PDVSA desde los Estados Unidos, una nueva ala del
chavismo para su intento de retorno
después de Maduro. Pero esa es otra historia. Al finalizar toda esa fiesta y a la baja de los precios del
petróleo y la recesión mundial, se acabó el ingreso de divisas para el régimen pero también la ya
mermada calidad de vida de los venezolanos.
Hubo polarización en Venezuela hasta allí. Cuando los venezolanos
empezamos a sufrir el
desastre de dos décadas de destrucción, ya el régimen
se había encargado de financiar todo lo
necesario para su sostenimiento en el poder. De hecho lo poco que entra ahora
al país es para eso, no para darles bienestar
a los ciudadanos.
Entonces, aquellos quienes una vez creyeron en el
proyecto político de este adefesio que
alguna vez se llamó “revolución bolivariana” se vieron que ya no podían
comer debido a una hiperinflación
descontrolada y descomunal, que ni aun con unas bolsas de comida, que tampoco eran regaladas -salvo que te
arrastraras ante ellos- era imposible sobrevivir en Venezuela. Y entonces vino el éxodo masivo…
Primero se fueron quienes medianamente estaban en
capacidad de sostenerse con un oficio
técnico o profesión universitaria, y luego vino el deslave de todos los
demás. Más de 5 millones de personas, en
especial de las clases más necesitadas, saliendo a pie de Venezuela por la frontera colombiana, sin rumbo hacia
cualquier sitio donde pudieran sostenerse económicamente.
¿Se podría decir que en Venezuela estamos en este
momento polarizados después de toda esa
tragedia? Mi respuesta es un contundente NO. De acuerdo a la reciente encuesta
de Meganalisis, realizada del 15 al 26
de Febrero 2021-mes pasado- el 77,4% de los
venezolanos “cree que el socialismo produce miseria, ignorancia y
retraso para los países” (ver
Meganalisis Informe Público (Parte I), resultados divulgables (información parcial), en
https://factoresdepoder.com/wp-content/uploads/Encuesta-Meganalisis
Febrero-2021-Infome-publico-Parte-I-Del-15-al-26-de-Febrero-2021.pdf).
La mayoría de los venezolanos estamos rechazando de
una manera contundente este experimento
“socialista” de esta corporación criminal que en mala hora llegó a
Venezuela con Hugo Chávez Frías y que
aun sigue delinquiendo en Venezuela robándose ante nuestras narices lo poco que nos queda de
nuestros recursos naturales en el Estado Bolívar en el Arco Minero. 6,4
millones de venezolanos en una clara mayoría de 97% expresamos en una Consulta Popular vinculante del 7 al
12 de Diciembre que exigimos que Maduro y
su banda de delincuentes dejen de usurpar el poder en Venezuela para poder
realizar elecciones libres, justas y
verificables.
En consecuencia no se puede pensar en una
“despolarización” porque el fenómeno dejo de
existir. Lo que resta es la unión organizada de los factores que no se
ven representados por nadie, ni por el
régimen ni por su oposición que ahora están buscando desesperadamente convencernos
de unas elecciones para elegir unos gobernadores que no servirán para absolutamente nada de lo que necesitan los
venezolanos, que es salir con URGENCIA de
los criminales que gobiernan al país. De acuerdo con esa encuesta de
Meganalisis, el 71,4% de los venezolanos
cree “que los partidos políticos de oposición y el PSUV” son iguales. ¿Y porque
creen ustedes que pasa eso? Porque lo que está a la vista no necesita anteojos
y una clara mayoría apuesta por algo
diferente del régimen y su oposición.
De la misma manera un 52,6% de los venezolanos cree
que el cambio político se producirá por “la aparición de un evento de fuerza”,
aunque no se especifica si sería desde adentro o de afuera del país. El 5,2% cree que será por
Diálogos y Acuerdos, y un 15,7 por
elecciones. En otras palabras, el 73,5 está apostando por un cambio
político aunque hay
criterios diferentes de cómo se producirá. En todo
caso lo que SI existe es una UNIDAD para
salir del régimen en la mayoría de los venezolanos a la brevedad posible
para poder reconstruir a Venezuela. Ya
dejamos de estar polarizados para estar unidos para sacar a estos delincuentes. Lo que falta es
formalizar esa unión y organizarnos para eso.
A la pregunta “¿Los factores que nos diferenciamos de
las minoritarias colas de la
distribución normal, del reduccionismo improcedente, debemos conformar
una alternativa nacional que posibilite
una salida pacífica, constitucional, democrática, electoral y constitucional de la crisis que nos castiga?
Mi respuesta es un rotundo SI. Y ya lo
comenzamos a hacer.
Fue a través de la organización de ANCO a nivel
nacional y sus principales representantes,
la Dra. Blanca Rosa Mármol de León y el Ing. Enrique Colmenares Finol,
integrando el Comité Organizador de la
Consulta Popular designado por la Asamblea Nacional, quienes lograron hacer la sinergia requerida con la
sociedad civil para alcanzar el resultado de 6,4 millones de participaciones donde se exigió
el cese de la usurpación de Nicolás Maduro
Moros, el rechazo las elecciones irritas del régimen del 6 de Diciembre
de 2020 y ordenar las gestiones
necesarias para buscar las ayuda humanitaria internacional y detener los crímenes de lesa humanidad del régimen.
El esfuerzo de la Consulta Popular requirió de
organizar a la sociedad civil en una sola
entidad para enfrentar ese reto, y convencer a voluntarios y ciudadanos
de que sí era posible lograr un cambio
en paz y constitucionalmente, logrando un sorprendente respaldo en la mayoría de los Estados de Venezuela, lo que
tradujo ese resultado contundente reseñado en
todo el mundo.
Ahora bien como segunda fase de la Consulta Popular se
requiere concretar el cumplimiento que
deriva de ese mandato constitucional. Se necesitan de apoyos de todo tipo: económicos, logísticos e
institucionales dentro y fuera de Venezuela para movilizar a la sociedad civil y continuar con este
esfuerzo de devolver a nuestro país al concierto de las naciones civilizadas del mundo. En este
sentido ANCO está promoviendo en toda
Venezuela lo que hemos denominado el Pacto para el Restablecimiento
Constitucional (ver Pacto para el Restablecimiento Constitucional, en
https://ancoficial.blogspot.com/2021/02/comunicado-anco-acta-que-contiene-el.html)
que establece las bases para una
organización mayor de la sociedad civil, más allá del logrado con la Consulta Popular. Se han sostenido
encuentros con importantes fuerzas en el país
que se están haciendo presentes en ese Pacto y que fortalecerán la
presencia determinante de la sociedad
civil a la hora de los próximos cambios políticos en Venezuela. Una vez concretado el desplazamiento del régimen con
la ayuda necesaria para hacer cumplir el
mandato de la Consulta Popular de Diciembre de 2020, estaremos en una
mejor posición para establecer las bases
para retomar la convocatoria del proceso Constituyente de carácter originario con el Gobierno de Transición que
se establezca, siendo la sociedad civil
coprotagonista de ese esfuerzo.
Hago desde aquí un llamado a todos los venezolanos
dentro y fuera del país a integrarse
activamente a la ejecución de ese Pacto para el Restablecimiento
Constitucional desde el cual estamos
seguros que motorizaremos la fuerza que solo tiene el Depositario de la
Soberanía para expulsar al régimen de Maduro. Les invito
formalmente a acompañarnos en este
esfuerzo y ayudarnos a concretar ese objetivo para todos los venezolanos.
Muchísimas gracias…
luismanuel.aguana@gmail.com
@laguana
Venezuela
No hay comentarios:
Publicar un comentario