LEANDRO RODRÍGUEZ LINÁREZ: ¿ESTÁ CEDIENDO EL CHAVISMO?

Antes de entrar en materia permítannos un comentario. No por el simple hecho que un proceso electoral aparezca reflejado en la Constitución puede o debe ser considerado como constitucional ¡No!, lo que sí lo hace constitucional es celebrarlo conforme aparece descrito u ordenado en la Constitución. Al respecto, desde mucho antes, pero con mayor énfasis desde 2017, en Venezuela los procesos electorales son antónimos de lo que mandata la carta magna, no tienen nada que ver a cómo aparecen descritos, es decir, son profundamente inconstitucionales.

 
Ahora bien, hemos visto cómo recientemente Maduro hace antesala a las decisiones del CNE, es decir, éste órgano obedece a sus lineamientos. Asimismo, el CNE revierte una sentencia del TSJ que inhabilitaba la tarjeta de MUD, en breves palabras, en Venezuela hay un pasticho de desinstitucionalización que hace de la ley e instituciones del Estado comodines para beneficio exclusivo del chavismo, por ende, no hay democracia, no hay constitucionalidad, los venezolanos estamos a merced de una élite gubernamental adueñada de las instituciones, recursos y armas de la nación.
 
¿Está cediendo el chavismo? Desde luego que no, el país está atrapado en otro diálogo estéril que da tiempo al chavismo de replantear sus acciones. Es muy sencillo darse cuenta:
 
1) Solamente habló de “diálogo” luego que se realizaran las elecciones a la Asamblea Nacional, el poder más importante en una democracia. Si hubiese habido real voluntad política, las parlamentarias hubiesen sido el escenario ideal para ello. Una vez se apoderó de ella ilegal e ilegítimamente es que accedió a otro “acuerdo”.
 
2) El “Nuevo CNE” sigue siendo chavista hasta los tuétanos, el solo hecho de aceptar en su directiva dos “fichas” opositoras, pero sin haberlo acordado con quienes representan la oposición reconocida, no pone en riesgo el control absolutista del chavismo sobre este órgano, dicho sea de paso, edificado por chavistas, para chavistas desde hace más de 17 años.
 
3) La anulación de los protectorados es una maniobra del régimen, entregará el control de alcaldías y gobernaciones no sin antes haberlas destruido y sin ninguna capacidad de financiamiento, es decir, quienes asuman estos poderes verán “quemar” sus carreras políticas, en poco tiempo, ante la ausencia de resultados reales, serán tan odiados como los rojos rojitos. El chavismo no da puntada sin dedal.
 
4) También es capaz de levantar inhabilitaciones, pues sabe que puede librarse de esos líderes opositores al entregarles regiones y municipios colapsados, sin posibilidades de reparar.
 
5) La habilitación de la tarjeta MUD tiene más aspectos negativos que positivos. En política los símbolos son extremadamente importantes. Si bien es cierto con esta tarjeta la oposición logró victorias electorales importantes, en la práctica fueron derrotas, pues la reforma constitucional, las alcaldías, gobernaciones y la Asamblea Nacional 2015 no pudieron cosechar los triunfos, no pudieron ser ejercidos, en la mente de los electores ese fracaso está asociado “a la tarjeta de la manito” que hoy crea repulsión.
 
6) Con estas maniobras, el régimen busca darse una “ducha democrática” y que la comunidad internacional muerda el anzuelo para que elimine o flexibilice las sanciones internacionales.
 
Todo en nada perjudica al régimen, le favorece, se le está haciendo un favor, uno muy grande a la vez que, lejos de ceder, se está radicalizando mucho más.
 
Leandro Rodríguez Linárez
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@leandrotango
Venezuela