FALSAS CREENCIAS
En los dos textos anteriores (I,II) hemos demostrado que el chavismo
carece de elemental sustentación
ideológica y mucho menos, obviamente, de
base teórica, pero,
en ese despelote está su acierto, porque, por una parte, no es
posible ser objeto de evaluación, de valoración alguna, y por la otra, le permite que el rebaño siga
a su salvador, a su mesías, a su caudillo, su ídolo, e incluso, su dios, tal
como he demostrado en otros textos, de
modo que
pueden andar revueltos religiosos y ateos; cristianos e islámicos;
brujos y médicos; demagogos astutos y
charlatanes de la politiquería; chamanes y médiums; santeros y
variados evangélicos, bachaqueros y narcotraficantes, pues lo que une al rebaño es su miseria, su
indefensión, la inmediatez, de allí su necesidad instintiva de protección, donde crece y prospera el
mesianismo, la idolatría, espacio
expedito para la manipulación con el
montaje del discurso que articula la
envidia, que no solo anhela el bienestar ajeno sino la visión de que la riqueza, el bienestar del otro le
fue conculcada y, en consecuencia, legitima la acción para la expropiación como
reconquista, recuperación, vale decir, la violencia, el terror, como medios
para hacer justicia y la esperanza de
su salvación.
Los manipuladores, los actores, beneficiarios de esta apuesta, siempre
tuvieron consciencia de sus actos. El refinamiento es proporcional a la
cultura, a la formación, a las habilidades del redentor, del mesías, de sus
secuaces. Una veces el caudillo, el jefe, el mesías está por encima de sus
“apóstoles” otras, es instrumento, médium de sus “ventrílocuos”. Sean estos ejemplos, Hitler, Stalin, Fidel
estuvieron muy por encima de sus secuaces, en cambio Nerón, allá lejos, Perón,
Chávez, Maduro cargan al oído el “pajarito” que les dice qué hacer. Nerón fue
un imbécil, idiota en manos de Séneca.
Perón, un peón del ajedrez de Evita; Chávez
se creyó el cuento de la inmortalidad que le sembró Fidel y Maduro… Ah y
Mauro, de éste, Lázaro Papaíto Candal podría gritar “y qué hiciste papaíto”,
pues teniendo al frente el arco vacío e indefenso del equipo contrario, el balón
a sus pies, se devolvió hasta
culminar en autogol.
Probamos también que la unión cívico militar es creación de Ceresole y
traición al pensamiento y práctica
política del Libertador. Demostramos que la fuerza armada nada tiene que ver en
su origen con Bolívar y la Independencia. Las FAN son creación de Gómez y se
“corona” con la Guardia Nacional por López Contreras. Ante estos hechos ¿qué hacer?
La vida, la historia, la propia muerte, se han encargado de demostrar
que las victorias del enemigo, el adversario, suelen estar no en su propio poder, sino en las
debilidades de quienes lo enfrentan, combaten. Estas debilidades son unas
evidentes, se relacionan con la fuerza, el poder, el discurso, pero, de manera
mucho menos notoria en grado sumo, a la falta de conocimientos, a la falta de
reconocimiento del otro y obviamente de sí mismo. Los maestros modernos del
“arte de la guerra” Ho Chi Ming y Nguyen
Giap derrotaron y de manera
absolutamente convincente a Estados Unidos con el 70% de información, y el 30% de
fuerza. Tanto más importante cuanto que
en ese 30% de la fuerza, la inteligencia
juega un decisivo papel.
En Venezuela la
lucha contra Chávez partió de una
subestimación de las habilidades de Chávez y una sobreestimación de sí mismos
de los jerarcas adversarios. Chávez era, lo cual es cierto, ignorante, pero no
tonto. La teatralidad de su conducta y la crisis de los partidos políticos e
instituciones fue el trampolín para su desenvolvimiento con astucia: predicar
justicia y moral. Chávez no engañó a
Caldera, a las FAN, a los empresarios,
medios, etc. que le impulsaron, catapultaron, sino que esos se engañaron a sí mismos. El coro
fue casi total porque creyeron que el solista era mero instrumento
del director de la orquesta.
Pero, si esto fue muy grave, lo peor fue la ausencia de pensamiento
crítico. La fuerza, el poder económico y el poder ideológico creyeron que la democracia
estaba arraigada en la sociedad y que era imposible regresar a un modelo
político totalitario, al caudillo, a la
autarquía. No se atrevieron a hurgar en las causas reales que motivaron la
voluntad de las masas por el cambio, porque habrían descubierto en ese proceso
que el éxito de Chávez estaba en el fracaso de los 40 años.
La democracia como el conjunto de relaciones armónicas individuo/sociedad,
militante/partido, Estado/ sociedad fue
mera forma. La legalidad y la legitimidad había sido sustituida por la
“cogollocracia”, y la cogollocracia un conjunto de secuaces que obedecían al
caudillo, al sátrapa. La consciencia política del militante sustituida por las
relaciones clientelares y dádivas del poder. Los dos gigantes, Betancourt y
Caldera, fueron autócratas tal como lo demuestran los cadáveres con los que sembraron los
caminos con la disidencia. Inquisidores fueron.
Este breve paseo impone una reflexión que, por una parte, evite a todo
riesgo repetir la vieja historia que nos
condujo a esto y ello pasa por adelantar en el discurso y en la práctica por
quienes quieren y queremos salir de este infierno, una dimensión crítica a la
acción política. En tal sentido, casi
como en una apostolado desmitificar el tal bolivarianismo, la alianza
cívico/militar para zafar al pueblo llano, a las masas, y a la propia
intelectualidad antichavista de la manipulación que ha adelantado el régimen
como su mascarón de proa. Del mismo modo salir de ese discurso absolutamente idiota, de usar expresiones vacías.
Se dice, por ejemplo, tenemos que
“cambiar el modelo”, bastaría afirmar el valor y sentido histórico y práctico
de la constitución vigente para, en su aplicación, garantizar
la vida en democracia y de la
democracia. No la restitución de la que engendró a Chávez sino la puesta en
práctica de la política con fundamentación científica y orientación ética. Como
ejercicio de la democracia, abierta, plural, consciente.
Tarea prioritaria e ineludible es demostrar que el gobierno, el régimen
es el que está en desobediencia a la
constitución, dicho mejor, que su acción política, económica, etc. es
inconstitucional. Texto en manos demostrar que el TSJ está integrado por Mujiquitas, por sicarios del régimen, por comisarios del
PSUV. Lo mismo con el CNE,
Fiscalía…Probarlo es sencillo. Bastaría
establecer su conexión con el PSUV, sus deficiencias académicas, su ausencia
ética, etc. Seguir guardando silencio o sencillamente respondiendo con epítetos
más o menos chavistas a los camaradas “magistrados” es cohonestar a esos del TSJ, CNE…. Todo
venezolano y el resto del mundo tienen que conocer que este TSJ es el
instrumento para la legalización de la arbitrariedad, de la ilegalidad, de la
ilegitimidad, para la reafirmación de la dictadura. Y cuando digo todo venezolano incluyo como
primera obligación a los chavistas del pueblo llano, ellos lo necesitan más que el resto y ellos lo requerirán con mayor necesidad
para ser actores del mañana cercano.
Tienen que conocerlo los miliares, los soldados, para que ocupen con
dignidad su espacio.
Esta necesidad de la educación política, tiene que ampliar su
universo. Llegar a cada rincón de Venezuela y evaluar con
rigor pero sin rabia, con la razón y la comprensión en mano, la actuación de cada gobernador, alcalde, concejal,
legislador, jueces, universidades,… a todos, incluyendo a los alcaldes,
funcionarios, etc. que adversan al régimen.
Ello es necesario porque así como la guerra económica, el imperialismo,
los escuálidos, la CIA, Obama, etc. son responsables del fracaso del régimen,
no menos cierto es que alcaldes, legisladores, etc. de la oposición esconden su
mediocridad, sus fracasos, achacándolos al gobierno que no les asigna el presupuesto,
y demás…
La corrupción tiene nombres y apellidos, así como el narcotráfico, etc.,
y sin la espera de la ayuda, necesaria
desde luego, del “imperio” llevarla a cada habitante de estos suelos.
Giordani denunció el “extravío” de 25.000.000.000 de dólares y donde
andan sus Ali Babá? En PDVSA, como en
Mercal, etc… la corrupción, se repite,
tiene su mundo impune y, cierto que se ha denunciado éste o casos paralelos, pero,
la denuncia debe hacerse ante el
pueblo. Todo régimen dictatorial, sea nazi,
fascista, comunista, chavista, chino… tiene un único juez: la consciencia del
pueblo.
Hay, desde luego, problemas muy severos entre nosotros. Chúo lo ha dicho
bien, en la MUD, hay más agallas que cerebro. A él, a mí y a usted, nos toca seguir con la palabra en
un esfuerzo ético para, cando menos, devolverle al cerebro la razón, a fin de
que las manos no se atosiguen y envenenen el estómago y muera de congestión el
pueblo. Pero, también, es necesario
descubrir el discurso celestino, como el
de Ocho Antich y el negrito bueno,
Claudio Fermín, el patriarca E.
Fernández y sus gremios, que parten del
supuesto de que la oposición tiene responsabilidades en la crisis y que el
diálogo implica ceder… solo que se les olvida que se cede lo que se posee. Y la
oposición no tiene ninguna responsabilidad, salvo la omisión o la acriticidad ante la acción ilegal, ilegitima del régimen o en
acciones irracionales, viscerales, por tener los ojos vendados. No comparte la dirección del infierno, solo
sus castigos, como suele ocurrir, justos por pecadores, lo que no quiere decir
que se llegó por virtuosos al infierno.
Americo Dario Gollo Chávez
americod@gmail.com
@americogollo
Zulia - Venezuela
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