Desde agosto del año 2020 el sonado caso del súbdito colombiano Alex Sabn, ocupa importante espacio en las páginas de diarios nacionales e internacionales, así como de los distintos medios de comunicación televisivos , radiales y agencias de noticias. Su espontánea notoriedad está signada por varios hechos, cual guión de una fantástica película de acción, emoción u suspenso, tres características que ocupa hoy día su caso, el cual mantiene en vilo al régimen de Nicolás Maduro.
Hace
algunas semanas el gobierno de Cabo Verde dictó una sentencia que permitía la
extradición de Saab a los Estados Unidos, tras acusársele de ser “testaferro de
Maduro”, noticias que ha movido los cimientos del régimen madurista, que no
solo le otorgó vía express la nacionalidad venezolana, sino también lo designo
Embajador, supuestamente para manejar la política alimentaria del gobierno
venezolano. Una ridícula excusa para procurar la libertad de Saab con oficios
de un tren de abogados contratados por el régimen venezolano, que hasta el
momento no ha logrado tal propósito, no así los litigantes que han recibido
hasta los actuales momentos, una exorbitante cantidad de dinero en dólares,
para evitar a toda costa su extradición a los Estados Unidos.
¿Quién
es Alex Saab?
Alex
Naim Saab Morán, tiene 48 años de edad y comenzó su vertiginosa carrera en su
natal Barranquilla, ciudad de la costa atlántica en la que comenzó vendiendo
llaveros de promoción empresarial y posteriormente uniformes de trabajo. En el
transcurso del tiempo, logró convertirse en un poderoso empresario con
conexiones en su país y Venezuela, así como en otros países de Europa..
Aún
cuando siempre se mantuvo bajo perfil, en el año 2011, el empresario de
ascendencia libanesa y con nacionalidad venezolana, dio el gran salto que lo
convirtió en un regio y poderosos magnate, cuyas arcas personales enriqueció
como proveedor de materiales para la Misión Vivienda en Venezuela, valiéndose
de la gran diferencia cambiaria entre el dólar paralelo y el dólar
preferencial, evidentemente en perjuicio del estado venezolano.
El 28
de noviembre del año 2011 se firmó el convenio colombo-venezolano y la empresa
Fondo Global de Construcción de Colombia, organización que fue registrada en
Bogotá con un capital de 1707 millones de pesos colombianos, el 24 de noviembre
de 2011 (4 días antes de la firma del convenio en Caracas) su representante
legal Alex Saab, firmó un contrato de 685 millones de dólares, para la
instalación de una fábrica de kits para la construcción de viviendas
prefabricadas de polietileno expandido, y mallas electro soldadas, en
Venezuela. En el acto estuvieron presentes los presidentes Juan Manuel Santos y
Hugo Chávez, al igual que el entonces canciller Nicolás Maduro. El abogado de
Saab, Abelardo De La Espriella, le aseguró en ese entonces a LaW Radio de
Colombia, que la sede del Fondo Global de Construcción en Ecuador no tenía
ningún nexo con el empresario colombiano, mientras la misma organización estaba
siendo investigada por el gobierno ecuatoriano por presunto lavado de activos a
través de exportaciones falsas hacia Venezuela.
Según
las investigaciones en Estados Unidos, Alex Saab no solo es el principal socio
de Nicolás Maduro en una serie de multimillonarios tramados de corrupción, sino
que también es el principal arquitecto de los distintos esquemas financieros y
comercialización de productos contrabandeados que han permitido al régimen
venezolano resistir las sanciones de Washington. Pero Saab adicionalmente
brindaba otro valioso servicio al régimen venezolano, dijo Manuel Cristopher
Figuera, quien fuera el jefe de inteligencia de Maduro, hasta que rompió filas
con el chavismo en abril del 2019.
De
acuerdo con Figuera, a través de los contactos de Saab en Colombia, Maduro
habría infiltrado la inteligencia colombiana. “Me dijo espontáneamente que
tenía muchos contactos con empresarios, banqueros, militares y personas de la
inteligencia de Colombia; le pregunté si eran confiables, me respondió que
‘totalmente’”, dice Figuera en una declaración citada por el periódico El
Tiempo de la capital colombiana.
El
empresario colombiano que ha hecho buena parte de su fortuna mediante contratos
del programa de alimentos subsidiados del Gobierno de Nicolás Maduro, las
denominadas cajas CLAP, no solo tiene conexiones en América Latina, sino
también en el viejo continente.
Los
negocios de Alex Nain Saab Morán demuestran que los programas de caridad y
subsidios puestos en marcha por Hugo Chávez –quien financió a Pablo Iglesias,
Juan Carlos Monedero y otros líderes españoles de Podemos– y continuados por
Nicolás Maduro, no son sino un gigantesco mecanismo de corrupción con la que
han venido saqueando al país.
Cabe
recordar que al momento de su captura en Cabo Verde, Saab se dirigía a Irán
para negociar el envío de combustible hacía Venezuela; sin embargo, su avión
hizo una parada técnica en la isla africana, donde fue detenido y permanece aún
en dicha país.
Tras
su detención, Venezuela indicó que Saab es un ciudadano venezolano y un
“agente” del Gobierno, que se hallaba “en tránsito” en Cabo Verde para regresar
al país, y sus defensores argumentaron que el empresario “tenía derecho a la
inviolabilidad personal como enviado especial de Venezuela en tránsito por Cabo
Verde”.
El
capítulo final está por verse, pero lo cierto es que el suspenso se mantiene
aún, por cuanto no se sabe a ciencia cierta cuando será extraditado a Estados
Unidos, en tanto que Maduro y todo su séquito gubernamental permanece en ascuas
y hacen lo imposible por evitar su deportación. Las razones sobran y nuestros lectores
pueden sacar sus propias conclusiones: El súbdito colombiano se las SAAB-ía
todas…
careduagui@gmail.com
@_toquedediana
Miembro fundador del Colegio Nacional de Periodistas (CNP-122)
Venezuela
No hay comentarios:
Publicar un comentario