El ácido desoxirribonucleico, es un ácido nucleico que contiene las instrucciones genéticas usadas en el desarrollo y funcionamiento de todos los organismos vivos y algunos virus (los virus ADN). Es el ente responsable de la transmisión hereditaria.
Para Oparin y Haldane la vida comenzó con la síntesis de compuestos químicos básicos en combinaciones entre aminoácidos y ácidos nucleicos con aleaciones de elementos inorgánicos que se mezclaron debido a las condiciones de la tierra en los primeros 2,000 millones de años.
Esto anterior es una teoría que postula un aspecto de la estructura biológica de todo individuo, en el aspecto Geológico, al considerar, además de la estructura interna de cada individuo debemos mediante la arqueología, mineralogía y diversas disciplinas como auxiliares de esta, podemos especular acerca de la textura fisonómica.
O sea, la especie humana es una única raza en su constitución prístina. Sea, biológicamente está construido de una sola estructura. La diferencia sólo estriba en la textura fisionómica -sin lugar a dudas. Derivada de la impronta ecológica y la inherente transformación que la necesidad de adaptarse al medio hábitat le ha motivado u obligado evolucionar.
En la física se considera a la constitución cromática que produce lo blanco como luz y, a la desaparición total de la luz, que produce lo negro, negación de la luz. Pues bien, esta acepción no compete a la textura fisonómica del individuo humano ya que tal variante en el cromatismo de la piel del ser humano es, precisamente, casi que lo contrario respecto a la exposición a la luz solar constituidos en RUV y el efecto deontológico que en ella se produce. Tal variedad se observa en el grado de efecto que los UV producen en la pigmentación de la piel como consecuencia de la longevidad de la exposición masiva de las colectividades humanas a través de las eras geológicas y adaptación Darwiniana ante el impacto que producen los cambios orogénicos, topográficos y climáticos en la superficie o corteza terrestre.
Es por ello que toda discriminación que ha privado en la concepción de diferencias etnológicas con carácter asimétrico o de superioridad etnológica, es absurda, producto de conductas antagónicas al verdadero conocimiento de la especie y la evolución de la misma respecto a condiciones y características devenidas de factores que no han tenido nada que ver con la verdadera naturaleza humana ni con su trascendencia biológica ni paleontológica, pero si medianamente arqueológicas y fuertemente antropológicas.
En este sentido debemos citar la teoría cromo somática de COLD SPRING HARBOR LABORATORY de Stanford y Arizona quienes tienen en su haber postular un origen post Gondwaniense -desintegración de la Pangea- de la evolución del ser humano Ubicada en África; con el hallazgo de 93 polimorfismos genéticos humanos (Y) hallados en el cromosoma se ha determinado a nivel global un "un Adán bioquímico" que hace unos 200.000 años poblaban el sudeste africano que, sorprendentemente concuerdan de fechas existentes con los (X) de una "Eva bioquímica" señalada en 1987 por del Dr. Stoneking en sus investigaciones biogenéticas. Los hombres "A" permanecieron en África, mientras que algunos africanos "T" dejaron el continente y se extendieron por el globo. Posteriormente, en Asia tuvo lugar otra mutación en el cromosoma Y de los hombres T e, incluso, se ha podido deducir que algunos portadores de esta nueva mutación regresaron a África. Para estos científicos hoy día, todos los hombres de fuera de África e, incluso, la mayor parte de los africanos son del tipo T.
En tal sentido podemos concluir que, hace un millón de años, tuvo lugar la hominización y se desarrollaron diversos linajes cromosómicos Y, en los habitantes de los diversos continentes. Luego de una mediana extinción, hace 200.000 años, quedaron sustituidos por el procedente de África. En el proceso tuvo lugar la adquisición de genes no-africanos, dando origen a la variedad humana actual. La Biología Molecular dota a los paleoantropólogos de unas nuevas y potentes herramientas diferentes de las del simple estudio de restos fósiles.
En esta medida podemos observar que las variantes de linajes, principalmente en el color de la piel han sido características propias de la exposición a la intemperie que han sufrido los colectivos humanos según su entorno geográfico. En ellas las variantes no han evolucionado respecto a una superioridad entre linajes sino a una condición antropológica caracterizada por la idiosincrasia o conductas colectivas devenida de improntas culturales e instinto de conservación y seguridad de naciones ante otras de diferentes y desconocidas actitudes. Incluyendo contradicciones entre clases y etnias. Por ende, no al racismo por absurdo y paradójico.
Ignorar esto conlleva a un posible elevado nivel de discriminación y el desconocimiento total de que solo hay una inteligencia, la humana, igual para toda la especie, por ello la diferencia estriba en cultivarla o no, no es una tabula rasa cartesiana, sino una inmanente condición de la especie. Una condición que determina que cada individuo es dueño de su existencia y conocerla con propiedad es el acicate del éxito de una verdadera existencia en la medida de aprovechar con acierto las oportunidades, la cual, en comunión con las demás cristaliza como paz entre la gente. Por ende, en toda nación y entre las naciones.
Joise MORILLO
@kao_joi_lin
Venezuela-USA
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