Vemos
con alegría cómo va surgiendo una dirigencia joven que con cautela y sin
mesianismos busca recorrer caminos hacia la recuperación de la
institucionalidad..
Todos
sobrellevamos las consecuencias de una pésima gestión gubernamental: el
sufrimiento inimaginable de tanta gente. Escuchamos los discursos indiferentes
a estos padecimientos para buscar causas externas. Reconocer los errores y
equivocaciones requiere mucha sencillez y humildad.
A
la vez, algunos vislumbran luces en medio de tanta oscuridad. Ven estos
momentos como de mucho aprendizaje. Hay cambios de actitudes que generan
acciones personales de mejoramiento pero no de resignación, que tendrán
repercusiones sociales. Ejemplos: valoramos más la comida, aprendemos a contar
el poco dinero que tenemos, reconocemos el valor del agua, la ausencia de
electricidad nos exige ser más cuidadosos con los aparatos eléctricos en casa.
Ante la situación de ausencia de transporte, pensamos dos veces una salida,
aprovechamos para apoyar a un vecino o un familiar que también tiene que salir.
Aprender
de esta situación, buscar aquellos aspectos que podemos valorar y mejorar. Es
un camino sensato dar una visión positiva y esperanzada de todo esfuerzo de
paz, desarrollo y armonía.
Vemos
con alegría cómo va surgiendo una dirigencia joven que con cautela y sin
mesianismos busca recorrer caminos hacia la recuperación de la
institucionalidad. Se trata de revertir el desmantelamiento de país que se ha
llevado a cabo en estos años. Ellos no creen en el “Día D” que cobró miles de
vidas antes de llegar a Berlín.
“Jugar
en posición adelantada” exigiendo lo imposible a quienes trabajan y dan la cara
por el país, por sus comunidades, es una insensatez. Es hora de aprender, para
entonces de modo articulado, todos forjar. Esa actitud abierta es cristiana:
emplear las mejores energías de la persona para sembrar el bien, semilla que
siempre germina y puede llegar a ser el árbol que un día cobije a todos en una
Venezuela posible, sin que sea lógicamente perfecta.
Fernando
Castro Aguayo
@monscastro
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