Al mirar hacia atrás, lejos del terror que implica vivir en éstos momentos en Venezuela, sin lugar a dudas nos damos cuenta de lo vulnerables que somos los ciudadanos de a pie, hace tiempo ya éramos felices sin saberlo, en éste momento ya no es así, en medio de todo lo que ocurre, no son muchos los que se salvan de los ataques y atentados perpetrados por los organismos de seguridad controlados y manejados por el régimen actual en nuestra Venezuela, bien sea FAES, SEBIN o el que sea, dicha realidad está a flor de piel mucho más en los sectores humildes.
Sin embargo, ante el grito pegado desde Miraflores incitando al arresto de Juan Guaidó, rápidamente a éste le salen los “tapa boca” y no precisamente para el resguardo de la integridad respecto a la pandemia de Coronavirus que recorre el mundo.
Ante la furia Bolivariana desatada producto del supuesto éxito de la “inteligencia pesquera” al atrapar a los mercenarios que ingresaron a la patria, con seguridad alguien levantó la voz también, pero para calmar las aguas y evitar despertar al gigante dormido que implicaría que, EEUU de verdad lance una operación para descabezar al Chavismo/Madurismo, créanlo no quedaría uno solo de los más buscados, si lo hicieran en serio.
Por otra parte, no hay que olvidar a los “Chavistas de Oposición”, son muchos y aportan la negatividad tanto o más que los propios seguidores de Nicolás y su combo; son agresivos y atacan a todo aquel que no piense como ellos, es decir que no se diferencian en nada con los plegados al “proceso”, es algo muy preocupante pues son los que ansían llegar al poder y transformar el país actual,
sinceramente no sabemos con exactitud si el cambio con esa gente sería bueno o malo.
Hay que destacar, que en las redes sociales sobretodo se han desatado una serie de personas que sin pensarlo dos veces desean con ferocidad que arresten a Guaidó y a otros más, no paran a evaluar lo que se ha logrado hasta ahora, el apoyo que se obtuvo y un largo etcétera, solo observan lo que tienen en la punta
de la nariz y como no es de su agrado, entonces atacan, rompiendo así con la poca unidad que existe.
Los atacantes olvidan que el enemigo es otro, que mientras disfrutan incitando al odio y dando hasta coordenadas para que ubiquen a los opositores reales, el régimen se muere de la risa y sigue avanzando en su política de gobernar sin mucho esfuerzo, lo cual incluye a los atacantes de oficio.
Lo que sí es cierto y está de anteojito, es que los EEUU están dispuestos y preparados a llegar más allá, si la escalada en la crisis venezolana avanza y Juan Guaidó es detenido por las fuerzas leales al régimen de Maduro; quizás lo de Panamá ocurrido el 20 de diciembre de 1989 se quede en pañales.
Recordemos que ese final de 1989, en lo que se llamó la última incursión militar de la Guerra Fría por parte de los Estados Unidos, un número aproximado de 26.000 militares desembarcaron en el país centroamericano, con un solo objetivo: arrestar al General Manuel Antonio Noriega, Comandante de las Fuerzas armadas y gobernante corrupto además de narcotraficante y lo lograron.
Como dicen por allí, nunca es igual llamar al diablo que verlo llegar, tal vez algo de eso ocurra y ante las ordenes de arrestar a Guaidó, venga de inmediato una contraorden paralizando todo, pues ni con un batallón de pescadores al estilo de Arnold Schwarzenegger lograrían frenar lo que sería un ataque relámpago que resolvería todo en poco tiempo.
En tal sentido, no podemos obviar lo ocurrido en días anteriores en la supuesta “Operación Gedeón”, digo supuesta, por que más mal planificada no pudo estar, si en verdad tenía un objetivo cierto, lo que crea muchas dudas, al menos para mí y con fundamento.
Las consecuencias de dicha acción, se están viviendo con el paso de los días, sacado de la ecuación está para éste momento J.J Rendón y otros, todo en medio de una guerra sin cuartel que continúa en la zona de Petare y salpica a muchos, para acabar con la vida de un delincuente al que ya llaman Wileixis, el “Robín Hood” de la zona, quién fue dotado de armas y autoridad por el actual Alcalde (PSUV) del Municipio Sucre José Vicente Rangel Ávalos y lucha por mantener el poder al margen de la ley, sin duda muy complicado el asunto.
Triste pero real lo que ocurre en nuestro país, que como una película en cámara lenta sigue cayendo sin aún tocar fondo, lo que comprende el sistema de salud venezolano, al igual que casi toda la infraestructura gubernamental, estaba ya en problemas debido a la profunda crisis económica que atraviesa el país, Maduro en su momento pidió prestados 5.000 millones de dólares al Fondo Monetario Internacional para hacerle frente al coronavirus, pero su petición fue denegada, así pues que todos los aspectos se encuentran en negativo.
Así pues, Maduro ha venido usando las sanciones como justificación a las limitaciones en el sistema de salud, lo cual es incierto, como mucho de lo que dice a diario.
Con un panorama como el descrito resulta difícil no perder las esperanzas, pero eso es lo que hay que cultivar y atesorar, resistir para ver más temprano que tarde a los delincuentes Chavistas enfrentándose a la justicia y en simultáneo a nuestro país recibiendo inversiones y préstamos blandos para iniciar la reconstrucción merecida, así de simple y sencillo.
Reinaldo J. Aguilera R.
reinaldoaguilera1968@gmail.com
@raguilera68
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