Siempre deberían ser así pero, luego de tanto tiempo fuera de las aulas, resulta más necesario que nunca planificar e implementar clases sustanciosas, que puedan estimular el aprendizaje. Clases que despierten el interés de las y los estudiantes, y los orienten a la reflexión y a la acción creativa. Clases que les permitan acrecentar sus conocimientos y destrezas de manera significativa, así como refinar críticamente sus valores y actitudes. Sabemos que esto no es fácil. De hecho, enseñar es difícil. Lamentablemente, ni la sociedad ni la dirigencia política lo han entendido todavía así y ha sido tradición considerar a la docencia como una tarea sencilla, y limitarla con bajos sueldos y autoritarismo burocrático. Esto es barato y cómodo para el poder. Pero, claro, no deja que el profesionalismo de las y los educadores se desarrolle como sería imperioso.
A lo largo del siglo XX, Venezuela fue sin embargo avanzando en el mejoramiento de la formación y la carrera docentes, y los primeros años del siglo XXI prometían avances aún mayores. Pero hoy, las criminales “sanciones”, los errores gubernamentales, la corrupción desbocada, así como los caminos no democráticos ensayados por una parte de la oposición, han logrado que nuestra situación económica, política y social haya empeorado a extremos. Necesitamos ir resolviendo. En el área educativa, es urgente buscar soluciones que permitan mejorar los ingresos y otros beneficios del magisterio, así como asegurarle una formación inicial y en servicio de creciente nivel. Estamos lejos de ello.
Pensando en la acción diaria en el aula, es posible a pesar de todo ayudar desde hoy a las y los docentes a fortalecer la calidad de sus clases. Una vía es desarrollar bancos de ideas factibles para el trabajo didáctico, que pueden ubicarse en la ciberpágina del Mppe. Allí se encuentran ya los textos de la Colección Bicentenario, los cuales proponen buenas actividades y ofrecen claras explicaciones. Pero hace falta incorporar más sugerencias, por grados y áreas, para ir ampliando las posibilidades de estudio en aula y hogar. En este sentido, lo que aporta Cada Familia Una Escuela es poco y deficiente. Otra vía a utilizar es la de la radio y televisión públicas, que pueden contribuir con programas educativos, superando lo realizado hasta ahora. Seguiremos.
Aurora Lacueva
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Aurora Lacueva
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Venezuela
Es impresionante como UD ,señala la oposición y las sanciones como responsable del caos educativo y no dice nada de la decadencia chavista
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