Por fin las denuncias hechas desde la Comisión de
Contraloría de la Asamblea Nacional acerca de los delitos de corrupción salen a
la luz. Y aunque no ha ocurrido porque estas denuncias fueran escuchadas sino
por la acción de la justicia internacional –la estadounidense en el caso
Alejandro Andrade, que involucra a Gorrín también y la española en el caso de
Claudia Patricia Díaz Guillén (enfermera de Chávez) y Adrián Velazquez (exjefe
de seguridad de Chávez)- el esfuerzo de ese equipo se ve.
El 19 de septiembre la AN presentó el expediente sobre
el desfalco a PDVSA y el caso Gorrín. Meses de trabajo e investigación
condujeron a identificar los ilícitos contra el patrimonio público en estos
casos.
La Comisión de Contraloría, liderada por el diputado
Freddy Guevara, también hizo en 2016 señalamientos sobre Nervis Villalobos y
Rafael Ramírez. Pero como suele ocurrir en este país donde campea la impunidad,
nada pasó. Nada pasó cuando se hizo la denuncia ni cuando Ramírez y Villalobos
fueron citados al Parlamento. Ni fueron, ni hubo consecuencia alguna. Juan
Guaidó denunció, con pruebas que recolectó en Brasil, la maraña de corrupción a
través de Odebrecht. Pero tampoco ocurrió nada.
La AN no esperó una situación comunicacional para
denunciar. Los equipos investigadores cumplieron con su trabajo y su deber
moral. Pero el madurismo se hizo el “loco” y parte de la oposición también. Y
hoy quienes nunca antes hicieron denuncia alguna o se pronunciaron acerca de la
maraña de corrupción que asola al país, se aprovechan que la justicia está
alcanzando a sujetos como Villalobos, Andrade, Gorrín entre tantos otros, para
actuar.
¿Pedir que se investigue a Gorrín? Ya se hizo así como
solicitar su presencia en el Parlamento.
No distraigamos esfuerzos sino unámonos en el combate
contra el flagelo de la corrupción. Esto es lo que ha sobrado en el gobierno:
Plan Bolívar 2000, Central Azucarero, Cadivi, Sitme, Cencoex, Tesorería
Nacional, Pdvsa, Banco de Andorra, Panamá Papers, Odebrecht, Fonden, Fondo
Único Social, Banco Industrial, Bandes, Pdval, Casa, Corpovex, Sicad, Dicom,
Clap, Arco Minero y pare usted de contar. No hay calculadora que permita
estimar el desfalco al país en los últimos 20 años. Una auditoría de todo esto
en el sector publico dejaría al mundo boquiabierto y al gobierno aún más
descubierto.
Tarek William Saab en vez investigar a Andrade (quien
por cierto reconoció haber lavado mil millones de dólares), ya está preso y
cantando en Estados
Unidos, debería iniciar una investigación contra
Gorrín que está aquí en Venezuela y con todos estos organismos.
No debemos poner en duda el trabajo de la Asamblea
Nacional, muy al contrario hay que reconocerlo. Por algo, varios de sus líderes
están exiliados, asilados y presos.
Urge que se entienda que cada vez que atacamos a la
Asamblea Nacional en pleno, nos estamos haciendo un "Harakiri". Los
diputados no escapamos a la mayoría de los problemas que sufren y padecen todos
los venezolanos a diario. Todos, de una forma u otra, hemos sufrido algún
ataque por parte del régimen o de los atropellos contra la única institución
legitima que tenemos en el país.
Desde Unidad Visión Venezuela, nuestro punto no es
criticar por criticar, y mucho menos fuera del marco del respeto, eso nos hace
igual o peor que el madurismo - cabellista, eso atenta contra el principio del
pluralismo político. Es cierto, desde la AN se han cometido errores y
omisiones, eso es irrefutable, (y nosotros responsablemente, lo hemos hecho
saber en su momento, en cada uno de los capítulos) pero sigue siendo nuestra
única instancia democrática en el país y reconocida como tal ante la Comunidad
Internacional.
Omar Avila
dip.omaravila@gmail.com
@OmarAvilaVzla
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