sábado, 21 de noviembre de 2015

ANGÉLICA MORA, FRENTE A LA TERCERA GUERRA MUNDIAL, DESDE NUEVA YORK,

La Tercera Guerra Mundial está ahí, al frente nuestro, aunque muchos todavía quieran negar esa realidad. Sin embargo, esta nueva conflagración es aún peor, porque se presenta en una forma diferente a los anteriores conflictos mundiales.

Se debe a que el enemigo está disperso, camuflado en células invisibles y presente en todas partes. Por eso mismo, no hay un país, ciudad o territorio, por distante que esté, que pueda decir que está a salvo.
En la Segunda Guerra Mundial existió el Holocausto y la mayoría de las naciones no supieron de su existencia hasta el final del conflicto. Hoy, debido al auge en las comunicaciones, los gobiernos y pueblos del mundo se han enterado de la existencia del Estado Islámico que secuestra y ejecuta, en la forma más cruel posible a sus víctimas, hombres, mujeres, niños y ancianos.
Un hecho resaltante es que muchos de sus integrantes son europeos que se unieron al grupo. El reclutamiento es despiadado, pero tambien hay voluntarios, tan fanáticos como los Jefes que dirigen las sangrientas acciones.
Pero estos terroristas no se limitan a los territorios ya conquistados, sino que quieren adueñarse del mundo entero, a sangre y fuego, como lo han demostrado últimamente con los atentados contra el avión ruso, con los trágicos sucesos de París, el ataque en Mali, (ex colonia francesa) y con las amenazas de seguir atacando a los aliados, especialmente en el Reino Unido, Italia y los Estados Unidos.
Estos terroristas han dicho, y lo demuestran con hechos, que quieren adueñarse del mundo. Para controlarlos los gobiernos en peligro deben emplear la unión, por encima de ambiciones políticas; y para tratar de acabarlos se debe ser tan implacable como lo son estas bandas, que asesinan sin piedad a los "infieles".
Los yihadistas y en especial el Estado Islámico, quieren someter, aniquilar y adueñarse del Occidente  para establecer su supremacía en un Califato Mundial, donde todas las libertades quedarían anuladas.
El peligro está presente y los terroristas tienen incluso armas químicas, elemento que no ha sido destacado lo suficiente por los ,que ocultan muchos factores de esta nueva guerra, posiblemente con la idea de no causar alarma y pánico en la población. Pero esta cautela no se puede mantener por más tiempo frente a la amenaza real de cada día.
No ha habido un autor, en el tema de Ciencia Ficción que hubiera pensado siquiera que podría nacer y establecerse un grupo tan radical y despiado como lo son los integrates del Estado Islámico, cuya ambición es adueñarse del entero planeta.
Incluso en la historieta de Superman, el cientifico Jor-El, padre del ficticio superhéroe -quien puso en una cápsula espacial a su hijo cuando estaba a punto de estallar el planeta Krypton y lo envió a salvo a la Tierra- no pensó que con los años iban a surgir energúmenos citando el Corán, asesinando cruelmente a sus semejantes.
Desde el debut de Superman han transcurrido siete décadas, durante las cuales el personaje ha sido recreado y renovado en múltiples ocasiones. Hoy muchos quisieran tener la protección del Hombre de Acero frente a los miembros del Estado Islámico y otros fanáticos, que amenazan la actual civilización. 
Debemos tomar como ejemplo las estrellas extinguidas de nuestra galacia, como Marte por ejemplo donde, posiblemente, surgió una raza hace millones de años que acabó con los rivales y de paso exterminó todo vestigio de vida en el planeta.
Con lo que está pasando se puede creer esto, tomar en cuenta las profecías de Nostradamus y encomendarse al  Dios de los Cristianos pidiendo que nos salve de la barbarie en que actualmente estamos todos enfrentados.

Angelica Mora
angelicamorabeals@yahoo.com
@copihueblanco

Nueva York - Estado Unidos

No hay comentarios:

Publicar un comentario