Según algunos
sectores de la llamada izquierda Latinoamericana, la visita del presidente
estadounidense Barack Obama a Cuba realizada del 20 al 22 de marzo es como una
especie de abrazo del oso, ya que “el imperio decadente busca reconquistar su
retaguardia territorial” sin embargo lo que prima en este acontecimiento es el
realismo norteamericano, pues Cuba perdió toda notoriedad con la caída de URSS
en 1991 que le regalo por cerca de 30 años más de 200 mil millones de dólares.
Además con la
importancia que le da el gobierno de USA a las negociaciones de La Habana entre
el gobierno Colombiano y las Farc, se podría deducir que es para tener en la
banca norteamericana una gran parte de los gigantescos recursos de la banda
narcoterrorista, que amasó una fortuna de miles de millones de dólares a base
de negocios ilícitos como el narcotráfico, la minería ilegal, el secuestro y la
extorción entre otros, porque no hay que olvidar que en los diálogos del Caguán
el presidente de la bolsa de Nueva York, el señor Richard Grasso viajo al
caserío la Machaca en el municipio de San Vicente de Caguán para reunirse con
los cabecillas guerrilleros en 1999.
Siguiendo el ejemplo
de las dictaduras de China y Vietnam, ante el fracaso del sistema socialista,
la camarilla comunista cubana busca impulsar una economía de mercado con un
régimen político marxista para perpetuarse en el manejo del estado, porque los
dirigentes comunistas son enfermos por la burocracia. Buscando parasitar con
ella eternamente y, es ahí en donde se explica la amistad entre EEUU y Cuba.
Sin que la dictadura haya cedido un milímetro a favor de las libertades
políticas e individuales, ni en los derechos humanos, la libertad de prensa y
la libertad sindical, sino buscando únicamente la inversión norteamericana,
como lo hizo la China hace 38 años.
Las pretensiones del
régimen cubano continúan, y sigue exigiendo una indemnización por el embargo,
que la dictadura llama “bloqueo” y además pide la devolución de Guantánamo.
Subrayando que la satrapía marxista tergiversa los términos para alcanzar sus
objetivos, porque nunca ha habido bloqueo de parte de USA hacia la isla, pues
en el mundo existen más de 200 países y el régimen de los Castro ha podido
tener relaciones comerciales con muchos de ellos, sin que tengan que intervenir
los EEUU.
El régimen despótico
cubano busca la inversión del capital norteamericano como lo hizo la China en
su momento, ya que por el descalabro de la economía venezolana que ha
subsidiado a Cuba en los últimos años, es muy difícil seguir recibiendo esos
regalos ante los bajos precios del petróleo que pueden llevar a la ruina
absoluta a Venezuela. Reiterando que Cuba en el pasado también era subsidiada
por la URSS, ya que fue un santuario del Kremlin en plena guerra fría, siendo
el gobierno de la isla un lacayo del imperio soviético al mandar a miles de
soldados al África en la década de los setenta del siglo pasado, para defender
los intereses de Moscú. Entonces eso de la dignidad, el patriotismo y la
soberanía que proclaman los Castro y sus áulicos es una farsa.
Con la debacle de la
Unión Soviética se pensaba hace 25 años que la dictadura cubana caería. Pero
primo el pragmatismo gringo con el presidente Bill Clinton, porque si se
hubiera desmoronado el régimen caribeño, por lo menos unos 5 millones de
cubanos irían a parar a USA y por eso los norteamericanos no gastaron pólvora
en gallinazo, ayudando a derrocar a Fidel Castro, de ahí que muchos cubanos
piensan que con las relaciones diplomáticas de EEUU y Cuba se controlara de
manera más rigurosa, las migraciones de la isla hacia el país del norte
especialmente por la Florida.
Las relaciones
diplomáticas entre USA y Cuba tienen por ahora un carácter formal, hasta que el
congreso de EEUU no se pronuncie sobre el embargo, además desde hace 4 décadas
ha habido vínculos. Pero la dictadura castrista usa la monserga
antiimperialista para exculpar el fracaso estruendoso del marxismo leninismo
implementado en Cuba, y eso le ha servido a los otros regímenes en
Latinoamérica del socialismo del siglo XXl para ocultar las miserias del
neocomunismo, que utiliza disfraces como el del Bolivarianismo intentando
engrupir a los pueblos. Quedando claro que la dictadura cubana busca heredarle
a las futuras generaciones el régimen comunista; usando el capital de la
inversión extranjera, pero continuando con la expoliación y represión de las
masas.
Muchos historiadores
no se explican, como la dictadura sanguinaria de los Castro lleva más de 57
años envileciendo al pueblo cubano, sin que la población se levante ante
semejante oprobio. Apareciendo respuestas eclécticas que histórica y
antropológicamente dicen que los cubanos tienen el antecedente de someterse
dócilmente al yugo de sus verdugos. Recordando que la isla fue la última nación
que se independizo de España 70 años después de que las otras colonias de
América Latina lo habían hecho, pero además por ser una isla se puede controlar
fácilmente.
Cuando una dictadura
como la cubana, habla de la autodeterminación de los pueblos, se refiere a que
un régimen comunista como el que hay en la isla, puede hacer lo que le dé la
gana con la población y la comunidad internacional debe mantenerse al margen e
impávida, Pues cualquier país que denuncie las atrocidades de la dictadura es
acusado de intervencionismo, como si los seres humanos no fueran anteriores a
los estados; por eso al observar el caso cubano se tiene que concluir que el
marxismo es una calamidad para el planeta. Porque le ha traído a la humanidad
las peores desgracias y sufrimientos en todos los tiempos.
Latinoamérica no es
una prioridad para USA, porque los intereses económicos de las principales
transnacionales gringas se encuentran en otras regiones del mundo, y lo que
busca la Casa Blanca es el apaciguamiento y la distención con sus vecinos. Para
evitar con la diplomacia que países al sur del rio bravo se arrojen
completamente en brazos de otras potencias rivales, lo cual pondría en peligro
la seguridad de USA. Por ello la coexistencia pacífica de Obama con su entorno,
es la formula para las próximas décadas; faltaría saber que pasa en las
elecciones de noviembre en EEUU, porque por ahora al gobierno estadounidense no
le interesa el cambio de régimen en la isla y serán los cubanos amantes de la
democracia y la libertad, a los que de manera autónoma les toca emprender esa
tarea en el futuro, pues está demostrado que el comunismo totalitario no es
invencible.
Ariel Peña
arielpena49@yahoo.com
@arielpenaG
Colombia
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