El pasado jueves 4 de febrero, el presidente
Nicolás Maduro celebró con un circo pero sin pan frente al palacio de
Miraflores, los 24 años del golpe de estado encabezado por el comandante
galáctico con el que quisieron derrocar
al presidente constitucional, Carlos Andrés Pérez y acabar con la democracia
venezolana. En ese golpe de estado que tanto celebra el régimen, hubo mas de 300 muertos entre el bando que
defendió a la democracia y el que lo quería derrocar, incluyendo los de la Casa
Militar que fueron ejecutados a sangre fría por los golpistas.
En esa oportunidad
los soldados fueron sacados de los cuarteles engañados y sus comandantes les
dijeron que iban a combatir contra un enemigo de la patria. Las cabezas de la
conspiración fueron Hugo Chávez, Francisco Arias Cárdenas, Jesús Urdaneta
Hernández y Joel Acosta Chirino, quienes con sus soldados tenían la misión de
tomar por la fuerza el poder. Arias Cárdena tomo la plaza zuliana y Urdaneta
Hernández la de Maracay. Hugo Chávez tenía la misión de tomar Caracas y
capturar vivo o muerto al presidente Constitucional, Carlos Andrés Pérez en la
casona o en Miraflores, pero fracasó. El presidente logro salir de Miraflores
en carro viejo y se dirigió a Venevisión desde donde le habló al país y a los
soldados que no estaban “alzados”.
En esa oportunidad, Hugo Chávez le ordenó
al capitán Henry Rangel Silva, hoy general retirado pero enchufado en el
gobierno, que tomara La Casona Presidencial mientras que él se dirigiría al Palacio
de Miraflores a cumplir su misión. El capitán Rangel Silva atacó sin
misericordia La Casona donde estaba la familia del presidente Pérez, incluyendo
muchos niños, pero Doña Blanquita de Pérez con fortaleza y valentía organizó la
resistencia con los soldados leales hasta que el cabecilla de los golpistas,
sin disparar una bala se rindió en el museo de armas de La Planicie donde se
había refugiado y donde hoy supuestamente reposan sus restos mortales.
Sin duda que la
aparición en horas de la madrugada por televisión del presidente Carlos Andrés
Pérez demostrando que no lo habían capturado y mucho menos asesinado, hizo que
las pocas guarniciones comprometidas con
el golpe se frenaran y por eso es que el comandante Raúl Isaías Baduel,
quien formó parte de los que hicieron el juramento en el Samán de Gueres, no
apareció involucrado en el golpe de estado del 4F de 1992 y es el mismo que
negoció con el general Vásquez Velazco, quien era el jefe del Ejército, para el
regreso de Chávez al poder con motivo de los sucesos del 11 abril de 2002 y la
renuncia del comandante galáctico a la presidencia de la república, según lo
dijo en cadena nacional el general trisoleado, Lucas Rincón Romero.
Los comunistas
golpistas, con la “celebración” de los 24 años del 4F quieren convertir ese día
en fecha patria. Pero ahora, como en años anteriores, no vino el dictador Raúl
Castro, ni otros chulos como Rafael Correa de Ecuador, Daniel Ortega de
Nicaragua ni Evo Morales de Bolivia. En esta oportunidad no hay petrodólares
para repartir a los “jala mecates”, porque después del saqueo a las finanzas
públicas lo que hay es un país arruinado y un presidente que anda por el mundo
con la mano estirada esperando que le tiren algo, así como muchas colas de
venezolanos en los abastos para ver que compran.
Ahora bien, es importante que los jóvenes que
hoy tienen entre 17 años que no habían nacido y los de 33 que tenían 10 años de
edad en 1992, conozcan lo que fue ese golpe sangriento donde hubo mas 300
muertos y con el cual se quiso acabar
con la democracia venezolana y asesinar a un presidente constitucional electo.
Es necesario que los demócratas emprendamos una campaña para dar a conocer lo
que paso el 4 de febrero de 1992 y no permitir que circos como el montado el 4F
del 2016 cambien la historia.
Los golpistas de ayer y que hoy están
disfrazados de demócratas, según documentos de la historia, tenían reservado el
estadio universitario de Caracas para concentrar a todas las personas que ellos
consideraran sus enemigos, donde al parecer serían fusilados, tal como lo hizo
Augusto Pinochet el 11 de septiembre de 1973 en Chile y Fidel Castro el primero
de enero de 1959 en Cuba.
Así que está
prohibido olvidar.
Adriana Aguilera
Rojas,
geron2ff@yahoo.com
@aaguilerarojas
Concejal
Metropolitano de Caracas
Caracas – Venezuela
Enviado a nuestros
correos por
Gerónimo Figueroa
Figuera
geron2ff@hotmail.com
@lodicetodo
CNP:569
Monagas – Venezuela
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