El
proyecto educativo venezolano supone la definición de una visión, misión y
valores sustentados en la Constitución Nacional. Hoy la educación venezolana
está ahogada en incertidumbre, en la urgente necesidad de atender a la
población escolar ofreciendo educación de calidad, en la carencia de insumos básicos para la
vida y para la formación integral, en la
violencia y la inseguridad, la deserción escolar, la discriminación política,
la deficiencia de programas y bajo nivel académico, la ideologización, el desmejoramiento de la
calidad de vida del educador, la exclusión, el deterioro y cierre de instituciones
educativas, las fallas en los programas de alimentación escolar.
Abordar la reconstrucción educativa, pasa por
reconsiderar los valores y principios universales que sustentan el proyecto de
la Nación: UNESCO 1999. Informe de la Comisión Internacional sobre la educación
para el siglo XXI. Informe Delors (1999). La educación o la utopía necesaria, las tensiones que han
de superarse, pensar y edificar nuestro futuro común, implantar la educación
durante toda la vida en el seno de la sociedad, reconsiderar y unir las
distintas etapas de la educación, aplicar con éxito las estrategias de la
reforma, extender la cooperación internacional en la aldea planetaria. Los
cuatro pilares de la educación son: Aprender a ser, aprender a conocer,
aprender a hacer y aprender a convivir.
Constitución
de la República Bolivariana de Venezuela: Artículo 3. EL Estado tiene como
fines esenciales la defensa y el desarrollo de la persona y el respeto a su
dignidad. Artículo 103. Toda persona tiene derecho a una educación de calidad,
permanente, en igualdad de condiciones y oportunidades sin más limitaciones que
las derivadas de su aptitud, vocación y aspiraciones. El Estado creará y
sostendrá instituciones y servicios suficientemente dotados para asegurara el
acceso, permanencia y culminación en el sistema educativo.
Ley
Orgánica de Educación: Artículo 14. La educación se fundamenta en la doctrina
de Simón Bolívar, la doctrina de Simón Rodríguez, en el humanismo social y está
abierta a todas las corrientes de pensamiento. Artículo 15. Numeral 4. Fines de
la educación. Fomentar el respeto a la dignidad de la persona y la formación
transversalizada por valores éticos de tolerancia, justicia, solidaridad, paz,
respeto a los derechos humanos y la no discriminación.
Las
estrategias diseñadas para cumplir las metas del milenio en Educación
propuestas por la UNESCO en Dakar en el año 2000 se dirigen a construir
compromisos políticos para aumentar la inversión en educación, eliminar la
pobreza e impulsar estrategias de desarrollo sostenible en el área educativa,
garantizando la participación plena de la sociedad con programas dirigidos a la
paz, la tolerancia y la prevención de la violencia. Se pretende lograr el
acceso pleno y equitativo a la educación de calidad y al aprendizaje de competencias
para la vida.
En
el informe presentado en el mes de marzo del 2015 por el profesor Luis Bravo
Jáuregui, describe el comportamiento del
sistema educativo venezolano sobre escolaridad e inversión educativa 2010-2015, se muestra a continuación rasgos sobre el
comportamiento de la matrícula escolar y algunos datos sobre población incluida
en el sistema educativo:
Desde
el año 2012, desciende la matrícula oficial y asciende la matrícula en
educación privada en todos los niveles educativos. De acuerdo Al Ministro del
MPPPE, el 61% de la inversión social se destinó a las misiones, las cuales
tienen una matrícula mínima en relación al sistema educativo nacional. Se
deduce un claro desbalance en las decisiones sobre la inversión en educación,
por cuanto las misiones cuentan con una mínima proporción porcentual de la educación
venezolana, lo que genera una cadena de deficiencia gerencial en el ámbito de
las políticas educativas, cuya consecuencia final se traduce en exclusión y
baja calidad en el sistema educativo nacional.
Las
cifras porcentuales de matrícula respecto a la población reflejan igualmente un
claro descenso en los datos de inclusión. El año 2014 encuentra puntos de
comparación con el año 1987, lo que significa un retroceso dramático que aleja
por completo a Venezuela de las metas del milenio de aumentar la inversión en
educación.
La
educación venezolana enfrenta un crudo y comprobado escenario de exclusión: La
matrícula estudiantil cae en 550.000 estudiantes desde el año 2012. De acuerdo
al informe oficial del MPPPE en el año 2011-2012 era de 6.769.751 y se redujo a
6.220.682 en el 2014. En la matrícula de Maternal hay 39.414 menos de niños
inscritos, en Secundaria la reducción es de 69.639 alumnos y en Educación
Especial 32.109 estudiantes menos. De acuerdo al profesor Jáuregui, la
cobertura de la matrícula con respecto al total de la población en el año 2006
fue de 51,5% y ahora es de 34,8% en el año 2014.
Es
mortal y doloroso que niños y jóvenes venezolanos estén excluidos del sistema educativo. Se les
cercenan sus sueños de emancipación profesional a través del conocimiento y la
formación para el trabajo y su consecuente incorporación al marco productivo de
la Nación. La exclusión escolar desencadena inevitablemente en aumento de
índices de violencia. El sistema educativo ha resistido al tornado destructor
llamado socialismo del siglo XXI, la reconstrucción educativa nacional en
espacios de inclusión y aceptación a la diversidad, es tópico de emergencia
para el rescate del país junto a las decisiones económicas, políticas y
sociales de mayor envergadura.
Con
respecto a analfabetismo, en el año 2001 la población analfabeta era de
1.5960.000 de un total de 24.631.900 habitantes. El censo del 2011 contabiliza
1.418.385 analfabetas de una población de 28.946.101 habitantes.
AÑO POBLACIÓN ANALFABETISMO
2001 24.631.900 1.596.000
2011 28.946.101 1.418.358
(Datos
sustraídos de la Línea de investigación Memoria Educativa Venezolana. Centro de
Investigaciones Educativas (CIES) Escuela de Educación. FHE-UCV)
Los
datos desnudan el engaño de declarar a Venezuela libre de analfabetismo y 10
años después de la fecha del censo, la cifra se mantiene en el mismo rango con
un descenso leve y un aumento poblacional significativo. Se deduce que tampoco
en el ámbito de la alfabetización las políticas gubernamentales han respondido
al compromiso de Dakar.
Las
actuales cifras de inflación estimada para finales del 2015 en un 150% y los
datos de pobreza crítica estimados en un 50%, el gobierno venezolano, desde ya
está en serios problemas para responder ante el mundo sobre las metas del
milenio en Educación definidas en la convención de Dakar. Las cifras en
educación son elocuentes y anuncian por sí mismas las fallas cometidas y se deberá rendir cuentas por la inadecuada aplicación de políticas
educativas.
De
acuerdo a la memoria y cuenta del MPPPE correspondiente al año 2015, se
construyeron 14 instituciones tecnológicas, se habilitaron 152, se adaptaron 5
como escuelas bolivarianas. Cifras que quedan en rezago con la necesidad
urgente. Hoy tenemos 2432 escuelas menos que en el año 2005. En vez de
construir, se están cerrando escuelas. Es necesario construir al menos 2500
escuelas y mantener las 27.000 existentes.
Igualmente,
de acuerdo a la memoria y cuenta 2015, se registra que se ejecutó el proyecto
de alimentación escolar PAE a 4273933 estudiantes, esto deja por fuera del
programa a 400.000 estudiantes que componen la matrícula total aproximada. Se
activó el programa Manos a la Siembra, se eligieron voceros estudiantiles a
nivel nacional, se escogieron 3708 brigadistas de Derechos Humanos y se
fortalecieron políticas educativas en el subsistema de educación básica en el
marco del Plan Socialista 2013-2019, a través de convenios con Cuba.
Observándose la utilización del término “Plan Socialista”, desvinculado del
espíritu democrático de la Constitución Nacional. Lo antes expuesto obliga a
plantear la urgencia de revocar el acuerdo del Plan de la Patria como principio
justificador y ejecutor de todas las políticas educativas.
Al
abordar limitaciones, el gobierno reconoce la debilidad en la participación
social y la apatía, en la formación docente, en la adquisición de recursos de
aprendizaje y en la masificación tecnológica y obvia por completo temas como
violencia, inseguridad, deserción escolar producto de la necesidad de atender a
las necesidades básicas para la vida en forma prioritaria, inclusión escolar, sierre de instituciones
educativas por falta de servicios, entre otros tópicos primordiales.
El
Estado venezolano debe garantizar el derecho a la educación, es urgente proteger
y mantener el sistema que pende de un hilo para que ningún niño y/o joven
venezolano quede fuera del sistema escolar. Asumir el reto de la reconstrucción
educativa nacional y posicionar a la educación venezolana como primer
instrumento de inversión sostenible para el Estado a mediano y largo plazo,
dentro de un marco democrático de participación, exige solicitar la declaración
de la emergencia educativa para agilizar procesos, saltar la burocracia y
acceder de inmediato a las acciones necesarias. Es deber ineludible de la Asamblea legislar y restituir el derecho a la educación para
todos los venezolanos.
Ante
lo expuesto, es inminente la necesidad de declarar la Emergencia Educativa en
forma diligente e inmediata. Para ello se hace necesario que la Comisión de
Educación recupere su condición de Comisión Permanente dentro de la Asamblea
Nacional, cuyos primeros pasos se dirigirán a solicitar la Revocatoria de la
Resolución que establece el Plan Socialista de la Patria como brazo ejecutor de
las políticas educativas, re enmarcando así responsablemente el espíritu
democrático de la gestión educativa del Estado, ya que la causa principal de la
crisis educativa es la concepción no democrática y excluyente asumida por el Gobierno
nacional.
Habiendo
cumplido con estas primeras decisiones logradas a través del consenso, la línea
de acción de la comisión se dirigirá a concretar en seis áreas:
Marco
Jurídico:
Revisión
de la LOE y LU, LOCTI, Crear Ley de Comunidades educativas
Crear
ley de escuelas, Revisión de Reglamento del Ejercicio de la Profesión Docente.
Descentralización de la educación y empoderamiento de la gestión municipal.
Marco
Educativo:
Contenidos
y programas. Revisión curricular. Ideologización, TICS en Educación. Dotación
de recursos para el aprendizaje.
Revisión e impulso de la educación técnica. Formación docente en todas las
carreras de estudio.
Marco
social: Salud, bienestar estudiantil, programas de alimentación y dotación
escolar, misiones educativas. Programas de paz y Defensa de Derechos Humanos.
Plan de protección y divulgación del hecho educativo.
Marco
Laboral: beneficios, protección al ejercicio docente y al ejercicio del Gerente
Educativo.
Infraestructura:
Mega plan nacional de construcción y
mantenimiento de escuelas, universidades e institutos técnicos.
Marco
Administrativo: Asignación presupuestaria, impulso a programas de becas y de
apoyo a la investigación. Revisiones estadísticas en alfabetización, matrícula
permanencia, prosecución y deserción.
La
escuela es el segundo modelo de referencia sobre convivencia social, por lo
que es urgente e impostergable evitar el
colapso del sistema. La declaración pertinente no es Manos a la Siembra, es
Manos a la Obra y mirada y acción firme
para la reconstrucción nacional. Que se declare la emergencia educativa.
María
Antonieta Angarita Sergent
antonieta05@gmail.com
@antoangarita
AIPOP.
Asociación Integral de Políticas Públicas
Miranda
– Venezuela
Lic
María Antonieta Angarita Sergent
Usted habla de ideologización.
ResponderEliminar¿Hay alguna educación que no sea ideologizante?